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FINANZAS
COMUNITARIAS
Metodología para la formación
de grupos de ahorro y préstamo comunitario
en el medio rural
Presentación. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5
Agradecimientos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Siglas y acrónimos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 11
I. Los grupos de ahorro y préstamo comunitario (gapc) en el ámbito local
y conceptual. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
1.1 Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
1.2 Desarrollo conceptual y los principios de los gapc. . . . . . . . . . . . . . . 18
II. Funcionalidad de un grupo de ahorro y préstamo comunitario (gapc). 23
2.1 Introducción. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
2.2 La economía familiar. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 24
2.3 Reflexiones sobre el trabajo organizado de las mujeres. . . . . . . . . . 32
2.4 Funcionalidad del ahorro en grupo. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 34
III. Diseño y manejo de un grupo de ahorro y préstamo comunitario. . . . . 37
3.1 Condiciones que se deben tener presentes al iniciar un grupo de
ahorro. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 38
3.2 Los procedimientos para formar un grupo de ahorro. . . . . . . . . . . 39
3.3 La formación del comité de ahorro. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 48
3.4 El día de colecta del ahorro. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 51
3.5 El reglamento de un gapc. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 51
3.6 El manejo del ahorro. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 57
3.7 Formas de prestar y contabilizar los préstamos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61
3.8 El corte de caja. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 70
3.9 El camino del ahorro. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 70
IV. Factores de éxito y limitaciones del modelo de gapc. . . . . . . . . . . . . . 86
4.1 Factores internos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 86
4.2 Factores externos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 93
4.3 Factores desfavorables (limitantes) para el desarrollo de los gapc. . 96
4.4 Limitaciones del modelo de los gapc. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 97
[3]
4 í ndice
[7]
Siglas y acrónimos
[9]
Introducción
1
Por servicios financieros convencionales nos referimos al crédito, cuentas de ahorro, tarjetas de crédito y
otros servicios fiduciarios que ofrecen los bancos y otras entidades no bancarias como uniones de crédito, cajas
populares, cooperativas de ahorro y crédito. Generalmente ubicados en ciudades grandes.
I. Los grupos de ahorro
y préstamo comunitario (gapc)
en el ámbito local y conceptual
1.1 Introducción
Dadas las características de las dinámicas operativas y organizativas de los gapc
se hace una contextualización desde las perspectivas teóricas del desarrollo rural
alternativo, desde lo local y endógeno, en donde se destaca lo comunitario y parti-
cipativo a partir de las necesidades de los propios actores sociales, retomando los
elementos analíticos del capital social, las estrategias de reproducción campesina
y planteándose los principios teóricos desde la visión académica de los autores.
En los principios teóricos de las cajas de ahorro y crédito de Raiffeisen desta-
ca el enfoque local, lo que es notorio en su aplicación práctica. Por ejemplo, en el
Rabobank de Holanda se hace énfasis en que una cooperativa de ahorro debe estar
en un área de operación restringida. Los miembros de los bancos locales trabajan
en un área geográfica definida, la ventaja es tener un manejo de las operaciones
claro y transparente, y mantener relaciones con la comunidad (Bol, 1990). Gentil,
et ál. (1997), resalta el carácter local de las cooperativas de ahorro y crédito exito-
sas en el mundo, considerando que la dimensión de la agrupación debe mantenerse
lo más reducida posible; es decir, sólo involucrar a un número restringido de aso-
ciados y conservar la más pequeña dimensión geográfica y étnica. La unidad, así
definida comprenderá elementos humanos domiciliarios todos de los mismos
lugares, originarios de un mismo sector del grupo, ejerciendo todos las mismas acti-
vidades y conociéndose perfectamente.
Desde el ámbito socio-espacial los grupos comunitarios tienen una proximidad
total, de tal forma que al ubicarse los gapc dentro y alrededor de las comunidades
donde están sus miembros o microempresarios, éstos, como dice Almeyda (s.f.),
obtendrán el servicio (préstamo) no sólo más fácil y rápido, sino que además no
tendrán gastos de traslado para gestionar un préstamo ni perderán tiempo. La diná-
mica de reunirse para ahorrar y prestarse les permite conocerse más con el paso de
los años y fortalecer al mismo tiempo el tejido social.
[13]
14 I . L os g r u pos de a horro y p r é stamo c om u nitario en el á mbito local . . .
Algunos países de Latinoamérica reportan que a medida que crecen las Coope-
rativas de Ahorro y Crédito su tendencia es ir más allá de los sectores más pobres y
se han dado cuenta de que la variedad de la membresía puede ayudar a diversificar
su riesgo. Pero también la multiplicidad de riesgos dentro de un gapc se produce al
diversificar su cartera de préstamos, es decir, la inversión no se centra en una sola
rama de la actividad económica, sino que se diversifica de acuerdo a las activida-
des socioeconómicas de la familia como una estrategia de reproducción familiar
(Méndez y Ramírez, 2007). A la diversificación de actividades se le conoce como
pluriactividad (Mardens, 1995; Grass, 2004) y es una de las características que defi-
nen al campesino (Domínguez, 1993). Esta pluriactividad no es algo nuevo, sino
que se ha acentuado en los últimos años y en actividades diferentes al campo de-
bido a los cambios del entorno macroeconómico que han afectado las actividades
sustancialmente agrícolas (Van der Ploeg, 1992).
Se dice que las Cajas Populares de Crédito tipo Asociación Civil, en México,
han operado sobre la base de formas locales o comunitarias de financiamiento en
pequeña escala, no burocratizados y con gran sensibilidad social (Rojas, 1997); son
instrumentos locales alternativos que ofrecen la posibilidad de crear fondos que
son controlados y administrados por los propios socios, permitiéndoles responder
a su lógica y a sus necesidades de financiamiento diversas, como la producción, el
consumo básico, para la salud, etcétera (Sánchez Albarrán, 1997 y Couturier, 1998).
Estas situaciones se manifiestan en diversas experiencias del país, donde efectiva-
mente estas entidades financieras de ahorro son controladas y administradas por
sus propios socios; no como sucede, sobre todo en el medio urbano, en las grandes
organizaciones regionales como son las figuras reconocidas jurídicamente (socie-
dades cooperativas, sociedades financieras populares y otras microfinancieras
privadas), que formalmente son propiedad de los socios beneficiarios, pero que en
la práctica son diferentes ya que la administración la realiza un grupo de profesionales
y no los mismos socios, y muchas de las veces solamente el núcleo de directivos y
técnicos son los que toman las decisiones, perdiéndose el principio cooperativo,
democrático y de autogestión.
Si bien es cierto que un solo grupo comunitario no podría atender a toda una
localidad rural, no hay que olvidar que en cada comunidad hay diversas redes y
vínculos sociales (Bourdieu, 1985; Coleman, 1990; Putman, 1993) y que cada una
de ellas puede convertirse en un grupo comunitario, o atender necesidades de uno o
más miembros de la familia y de otras personas dentro de la comunidad que no per-
tenezcan al grupo. De esta manera es posible tener una mayor cobertura en cuanto
al número de personas con préstamos autofinanciados a través de la movilización
de sus propios ahorros.
Por todo lo anterior el carácter local es uno de los factores a considerar para incre-
mentar el acceso de los pobres a los servicios financieros, de tal forma que los programas
deben ajustarse al contexto de un área particular y de su población (ifpri, 2003).
I . L os g r u pos de a horro y p r é stamo c om u nitario en el á mbito local . . . 15
Para entender la dinámica social presente en algunos de los mecanismos de
acceso a los servicios financieros de los pobres, se ha empezado a utilizar el capital
social, en el cual destacan como elementos: las redes y vínculos sociales, las nor-
mas y la institucionalidad (según los pioneros de esta corriente citados en el primer
párrafo de esta página; Durston, 2002, Conde, 2005; Dufhues, 2011). A continua-
ción se analizan algunas relaciones de los elementos del capital social desde la
dimensión local o comunitaria.
Dentro de la propuesta teórica analítica en “el gobierno de los comunes” de Os-
trom (1990), se demuestra empíricamente el potencial que tienen los grupos locales
para diseñar ellos mismos sus mecanismos de autorregulación y control. Resaltan-
do el manejo, control y uso de sus recursos naturales, tales como el agua, la pesca,
forestal y agostaderos entre otros, en términos de usufructo común y sustentado
con el capital social; en ese sentido el elemento central es la creación de una insti-
tucionalidad local integrada por normas de control internas de elección colectiva.
Este tipo de gestión y de autogobierno también está presente en los sistemas de fi-
nanciamiento comunitario, con la diferencia de que los recursos que se manejan
son otros, al ser monetarios, representan un valor de uso e intercambio a la vez,
y son generados de manera individual y aportados colectivamente a través del ahorro
voluntario y del pago de intereses, los beneficios se dan mediante la obtención de
préstamos y el reparto de utilidades, lo que aporta una ganancia tanto individual
como colectiva.
El principio comunitario o local puede aportar economías de escala tecnológi-
cas, organizativas y financieras (Ishikahua 1975: 484-485), basadas en la propiedad,
los cultivos comunales y el apoyo mutuo. El carácter mutuo y comunitario hace
complejo su entendimiento por la heterogeneidad imperante en los ámbitos locales, sin
embargo, lo participativo y las formas de cooperación son elementos básicos dentro
de la perspectiva de un desarrollo no convencional a partir de lo endógeno y local
que se explica en las siguientes líneas.
El enfoque de lo local en el desarrollo rural es reconocido como un modelo no
convencional para superar las limitantes de la vertiente del desarrollo económico
global. Este modelo dominante ha sido objeto de severas críticas por su ineficien-
cia en «generar desarrollo» y los proyectos implementados han demostrado ser
insostenibles por la falta de involucramiento institucional y de los actores sociales.
En reacción contra las deficiencias percibidas y las injusticias del modelo de «arri-
ba hacia abajo», surgió el modelo de «abajo hacia arriba» (Ekins 1992, citado por
Mata 2002; Moyano s.f.), denominados descendente y ascendente respectivamen-
te. El modelo de desarrollo rural desde «abajo hacia arriba» o ascendente busca
organizar el desarrollo desde abajo y aumentar la capacidad de la gente y de sus co-
munidades para mejorar sus condiciones de vida. En síntesis, busca empoderarlos
por ellos mismos a través de la participación en su propio desarrollo (Sepúlveda et
ál., 2003). Actualmente esta estrategia es cada vez más aceptada por la comunidad
16 I . L os g r u pos de a horro y p r é stamo c om u nitario en el á mbito local . . .
del desarrollo; debido, en parte, a que los proyectos de desarrollo «desde arriba»
no se adecuan a las instituciones locales y tienden a ser mucho menos exitosos y
menos sustentables que aquellos en los que las comunidades locales juegan un
papel central. Por ejemplo, el caso de los sistemas de riego Ostrom (1990) señala
que los proyectos resultan ser más costosos si son desarrollados de «arriba hacia
abajo», mientras que los pequeños sistemas de riego que se diseñan por los pro-
pios usuarios son más eficientes y por lo tanto más sustentables a través del tiempo.
El desarrollo endógeno local como una propuesta integral, según Rodríguez et
ál. (2005), depende de factores de carácter interno que impone la matriz del desa-
rrollo endógeno en las comunidades campesinas, donde resaltan la lucha por los
espacios territoriales, la identidad y la preservación de la cultura, el fortalecimiento
de las comunidades y las economías de base; y la participación de la sociedad civil.
No existe un modelo único de desarrollo local, sino distintas propuestas de progra-
mas y proyectos —Enríquez (2001) citado por Rodríguez et ál. (2005)— que, como
producto de diferentes procesos, pueden ser el resultado de alianzas estratégicas
entre organizaciones locales y agentes de cambio externo (Llambí y Duarte 2006).
El potencial de los actores locales se sustenta en los principios y los valo-
res presentes en las comunidades rurales. Los estudios del campesinado señalan
que si no existiera movilidad social y relaciones extra-grupales, este sector no
hubiese resistido lo embates de políticas de desarrollo económico y ya habrían
desaparecido. Bartra (2003) refiere que la cohesión es receptividad y adaptación.
Una comunidad fuerte no es dura, rígida, cerrada y resistente al cambio, sino
flexible, dinámica, oportunista y mudable; muchas de esas mudanzas van en el
sentido de aglutinar al colectivo, fortaleciendo y reinventando su identidad. Des-
de la propuesta de la vía campesina, Warman (1988) menciona que las sociedades
campesinas ofrecen modelos de cooperación, de solidaridad, de redistribución de
recursos y de alternativas; de otra manera no podríamos explicar la persistencia y
crecimiento de esos grupos en condiciones de marginación histórica, respecto de
los servicios sociales que en otras condiciones ofrece el Estado. Dentro de estos
modelos de organización comunitaria, los gapc, por sus mecanismos de opera-
ción y dinámica funcional, pueden adaptarse mejor a este contexto campesino que
aquellas estructuras organizativas promovidas verticalmente dentro de la políti-
ca gubernamental, como son las organizaciones formales institucionalizadas en
la legislación agraria o de desarrollo social: las Sociedades de Producción Rural
(spr), las Sociedades de Solidaridad Social (s de s.s) y las Asociaciones Rurales
de Interés Colectivo (aric), entre otras.
Los Grupos de Ahorro y Préstamo Comunitario como un esquema participati-
vo y autónomo son autogestivos en cierta manera, y pueden explicarse como un
proceso emergido de un tipo de institución de financiamiento no regularizada le-
galmente en un contexto comunitario y endógeno a su vez. El desarrollo de abajo
hacia arriba, ha sido una corriente alternativa emergida de las bases sociales para
I . L os g r u pos de a horro y p r é stamo c om u nitario en el á mbito local . . . 17
resolver sus problemas; dicha corriente también es inducida del exterior por algunas
de las ong, y retomada en la retórica de algunas políticas de desarrollo actual.
Pero en realidad son pocas las entidades de desarrollo que han tenido una actitud
de autoayuda y sólo de acompañamiento de este proceso, debido a que parte de los
recursos con que operan son externos y de una u otra forma se operan con esquemas
que no siempre coinciden con las que tienen los grupos locales. El enfoque teórico
antropológico ha resaltado la importancia de las organizaciones comunitarias que
se han gestado desde hace muchos años, Ostrom (1990) dice: “en algunas regio-
nes, los campesinos han estado organizados por largos períodos de tiempo y son
bastante eficaces”.
Los estudios del campesinado han contribuido a la comprensión del funciona-
miento interno de la unidad de producción familiar campesina como célula de las
relaciones y vínculos no sólo al interior de las unidades, sino entre ellas, destacando
las características culturales que permiten a estas unidades sobrevivir y reprodu-
cirse, asimismo, dentro de éstas, resaltan los mecanismos de ayuda recíproca y las
redes sociales generadas por la convivencia comunitaria, lo que ayuda a explicar
de cierta manera las formas de funcionamiento de los mecanismos de organización
social campesina en las comunidades rurales. Acerca de la importancia que requiere
la perspectiva campesina en el microfinanciamiento rural, Gaytán y González Ro-
sales (1997) comentan:
la construcción de alternativas de financiamiento rural requiere de la comprensión
de la lógica y racionalidad de la economía campesina, de las relaciones productivas
y sociales, de la cultura, de mecanismos de participación que generen credibilidad,
confianza y corresponsabilidad, y de la existencia de actores sociales con una pers-
pectiva de desarrollo regional para el cambio social.
En ese mismo orden de ideas Couturier (1998) concluye:
es indispensable pensar en instituciones financieras que respeten la cultura, la iden-
tidad, las ideas, el sentimiento y las necesidades de los campesinos pobres antes que
imponerles «beneficios» que realmente no les sirvan o no les interesen y reconocer
su capacidad y sus grandes cualidades, así como apoyarlos en sus deficiencias, para
realmente poder lograr un desarrollo alternativo.
Conde (2005) menciona que las Instituciones de Microfinanciamiento (imf) han
resuelto los problemas de los pobres para acceder al financiamiento, como son la
carencia de garantías, la información imperfecta, precisamente con base en el ca-
pital social existente en las comunidades mediante el mecanismo de los grupos o
núcleos solidarios al proveer el crédito sobre la base del «colateral social»; es de-
cir, la reputación del solicitante o las redes sociales a las que pertenece sustituyen
al colateral físico o financiero tradicional. Ostrom (1992) en su estudio de diseño
de instituciones para sistemas de riego autogestionarios utiliza el concepto de
capital social centrado en la forma de reglas y normas de comportamiento que con-
18 I . L os g r u pos de a horro y p r é stamo c om u nitario en el á mbito local . . .
2
Las metodologías más conocidas son: bancos comunales y grupos solidarios, que aunque se basan en las
redes sociales en esencia persiguen una finalidad financiera y pocas veces analizan o reflexionan sobre las reper-
cusiones internas del grupo con respecto a hacerlos copartícipes en el pago de los créditos, ahorro obligatorio, y
financiamiento para actividades rentables, entre otras cosas.
I . L os g r u pos de a horro y p r é stamo c om u nitario en el á mbito local . . . 21
Con la finalidad de dejar clara esta idea de marginación y exclusión, se puede hacer
uso de las siguientes ideas.
Supongamos que existe una línea horizontal que se puede llamar de subsisten-
cia y que separa a la gente que vive en el medio rural en aquellos que pueden
satisfacer sus necesidades, pero que no pueden tener un negocio para obtener una
ganancia; aquellos que, además de satisfacer sus necesidades, sí pueden tener
una ganancia, es decir, les queda algo después de haber satisfecho sus necesidades
básicas; y los que están por debajo de la línea de subsistencia porque ni siquiera sa-
tisfacen sus necesidades básicas. Las familias o personas que se alejan más y más
hacia abajo de la línea de subsistencia estarán en condiciones cada vez más crí-
ticas para poder sobrevivir.
Cuando se habla de campesinos pobres, se hace referencia a los campesinos
que están por debajo de la línea de sobrevivencia y que por lo tanto no satisfacen
sus necesidades básicas. Este aspecto no es importante solamente para ubicar a las
personas de las que se está hablando, sino porque su economía es muy diferente a
la de las personas que se ubican por arriba de la línea de sobrevivencia. Por ejem-
plo, en estos últimos es posible usar conceptos como el de rentabilidad, ganancia,
competencia, mercado, administración, capital, mercancía, inversión, crédito, mi-
crocrédito, finanzas, microfinanzas y capitalización.
Es importante señalar que en términos de objetivos económicos, el objetivo
principal de los productores que están por arriba de la línea de sobrevivencia es la
rentabilidad de sus actividades, es decir, la ganancia; y como ésta la pueden rea-
lizar en el mercado, se dice que producen para el mercado o sea tienen una lógica
empresarial. En contraste, los productores que están por debajo de la línea de so-
brevivencia tienen como objetivo principal la sobrevivencia; es decir, consumen
gran parte de lo que producen y cuando venden en el mercado es con el objetivo
de obtener un ingreso para poder comprar otras cosas que no producen, pero que
necesitan para sobrevivir, como ropa, medicina, educación, etcétera; es decir, aun-
que llevan productos al mercado no producen para el mercado: su objetivo sigue
siendo la sobrevivencia.
Todas estas ideas son importantes y es necesario considerarlas cuando se pro-
mueven actividades de ahorro y préstamo comunitario en este tipo de familias
campesinas. En este sentido, es importante especificar algunos principios que orien-
tan esta propuesta.
El primer principio de los grupos de ahorro y préstamo comunitario es que cons-
tituyen un mecanismo de cooperación entre los participantes de la comunidad para
ayudarse a sobrevivir. La cooperación es la aportación de sus ahorros para que pue-
dan usarse en tal sentido. De tal manera que una persona que no aporta sus ahorros
simplemente no está cooperando como los que sí lo aportan; el primer caso deberá
ser objeto de reflexión para que todos cooperen en forma equitativa. Las personas
de las que se está hablando aquí (los campesinos e indígenas pobres), son gente que
22 I . L os g r u pos de a horro y p r é stamo c om u nitario en el á mbito local . . .
tiene problemas para sobrevivir y, como se dijo antes, esta situación en la que se en-
cuentran ha sido provocada por la dinámica del sistema económico que predomina
en el país. La única alternativa que se les ha dejado es la de apoyarse ellos mismos
unos a otros para solventar los problemas que les impiden sobrevivir.
El segundo principio es la confianza que puede considerarse como la fe que una
persona tiene en otra en relación a la conducta que la primera espera de la segunda.
Cuando esa conducta esperada no ocurre como se esperaba, la relación de confian-
za se rompe y surge la desconfianza. El incumplimiento de este principio provoca
efectos negativos en el funcionamiento del grupo. Por ejemplo, puede provocar des-
interés o incumplimiento de las funciones esperadas.
El tercer principio es la honradez, está relacionado con el uso adecuado de
los recursos, los cuales pueden ser monetarios, materiales o humanos. En el caso
de los recursos monetarios es indispensable que la honradez sea clara y visible para
todos los miembros de la caja; de lo contrario, la inexistencia de honradez puede
provocar la desaparición de un grupo de ahorro.
Si se entienden bien los principios aquí señalados, en la práctica deben permitir
deducir aquellas actividades e indicadores que permitan concluir que el logro de
los objetivos se está cumpliendo. Por ejemplo, es muy difícil concebir que se está
logrando el objetivo principal de los gapc si los socios no ahorran o no hay un uso
honrado de los recursos, lo cual repercutiría en la confianza entre sus miembros.
En el siguiente capítulo se explicará y describirá ampliamente la finalidad y fun-
cionalidad de un Grupo de Ahorro y Préstamo Comunitario, así como el diseño y
manejo de sus recursos monetarios.
II. Funcionalidad de un Grupo de
Ahorro y Préstamo Comunitario (gapc)
2.1 Introducción
Un Grupo de Ahorro y Préstamo Comunitario (gapc) es una organización de
autoayuda cuyos objetivos principales son el ahorro monetario en colectivo y el
otorgamiento de préstamos de manera individual. El grupo establece la cantidad
que se ahorra procurando que el monto de dinero sea accesible para todas las personas
participantes. Con este ahorro, las personas pertenecientes al grupo pueden obtener
préstamos para resolver diversas actividades: productivas, de servicio, consumo y
hasta atender gastos de emergencia de la familia con una tasa de interés acorde a
las condiciones de cada grupo (definidas y escritas previamente en un reglamento
interno), que por lo general es más bajo que el de los prestamistas locales, pero
más alto que el bancario; con la diferencia de que el dinero es oportuno y flexible,
además de que los intereses son para los socios y no se van para los dueños de los
bancos o de las cajas. En un grupo de ahorro el único aval es la participación
personal a través del ahorro y su asistencia a las reuniones para la toma de decisiones
en las diversas actividades como socio o socia del grupo.
La operación de un gapc tiene un ciclo bien determinado durante el cual se aho-
rra la cantidad fijada, al mismo tiempo que las personas se capacitan y aprenden los
procedimientos para organizar al grupo y contabilizar los movimientos del ahorro
y del capital prestado. Una vez concluido el primer ciclo de ahorro, el dinero se
entregará a cada persona ahorradora junto con los intereses que rindió su ahorro.
Después del ciclo inicial que es como un período de prueba y de aprendizaje para
las y los participantes, el grupo puede decidir si continúa con otro ciclo de ahorro,
amplia el grupo o abre nuevos grupos en la comunidad. La idea es motivar la orga-
nización, tanto de mujeres como de hombres, a través de procesos de formación
de grupos de ahorro.
Un grupo de ahorro y préstamo permite trabajar localmente con una comunidad
para que las personas refuercen y desarrollen los hábitos de trabajar unidas y, me-
diante la cooperación, a ayudarse mutuamente. En este sentido, un grupo de ahorro
[23]
24 I I . F u ncionalidad de u n G r u po de A horro y P r é stamo C om u nitario
3
El acceso al mercado financiero, está regulado por la oferta y la demanda de los servicios financieros
como el crédito, el ahorro, los seguros, etcétera, lo cual fija el valor de estos servicios y las formas de acce-
so por parte de los demandantes. En este proceso las familias rurales pobres son excluidas del mercado finan-
ciero rural.
I I . F u ncionalidad de u n G r u po de A horro y P r é stamo C om u nitario 25
Formas de ahorrar; La familia, la riqueza y la pobreza, Algunas formas de cambiar la
situación de las familias pobres, El ahorro como una forma de guardar, conservar y
aumentar la riqueza de los hogares y Las ventajas del ahorro en grupo.
•Las tandas populares, formas de autoayuda rotativa, que son una práctica
de ahorro muy común.
•Los guardaditos monetarios en casa, práctica que cada día se observa con
menor frecuencia, pero que todavía es llevada a cabo por personas que
tienen el hábito de ahorrar su dinero de esta manera y disponer de él cuan-
do lo necesiten.
•La compra de tierras para el cultivo o predios para vivienda, entre otras.
La aportación de las mujeres al ahorro en la familia, en la comunidad y en la
sociedad es muy importante como se ha venido comentando, por lo que debemos
señalar explícitamente su contribución al ahorro familiar:
a) Con el trabajo doméstico que no es pagado por nadie, con esto la mujer le
ahorra a la familia; y
b) Con el trabajo voluntario que la mujer realiza en sus comunidades en
las faenas, tales como son la construcción y reparación de escuelas, clí-
nicas, caminos, preparando alimentos para los hombres en estas faenas y
otras actividades.
Podemos observar que son millones las mujeres que hacen estos trabajos y mu-
chos otros más y que nadie valora ni reconoce, aunque es un hecho que el trabajo
de las mujeres le ahorra mucho dinero a las familias y a la sociedad. En cada comu
nidad y familia hay diversas formas de ahorro y tanto las mujeres como los hombres
desempeñan un papel importante.
las mujeres siempre buscan que los beneficios de sus proyectos también sean reci-
bidos por su familia.
Figura 2.1
Reunión de reflexión sobre el ahorro
entre familias campesinas en un grupo pequeño
Figura 3.1
Grupos de hombres y de mujeres rurales
estudiando la factibilidad de integrarse a un gapc
la práctica de ahorrar. Aquí se pretende, dar a conocer los pasos para iniciar la for-
mación del grupo de ahorro, así como, analizar los obstáculos y problemas que se
presenten durante la formación y algunos factores que ayuden en la creación de un
grupo de ahorro.
los dos estados en que operó dicho proyecto. Para la formación de los grupos «li-
bres» o nuevos se implementaron las acciones descritas en las primeras líneas del
párrafo anterior, siendo determinante en estos casos la promoción que realizaron
las mismas personas que iniciaron o conocieron la experiencia en algún grupo de
ahorro y préstamo.
Figura 3.2
Reunión para la formalización de un gapc
Esto coincide con la señora Tomasa del grupo «Mujeres Unidas al Progreso» de
la comunidad de San Andrés Hueyacatitla, Puebla quien dice:
aunque sea poco lo que ahorraba, pero a veces como mujer necesita uno para el jabón
o pal’molino [...] el ahorro es bueno pero no siempre hay dinero [don Ángel del gru-
po de «Productores de la Preciosita» Santa Rita Tlahuapan Puebla].
Gráfica 3.1
gapc «Unión y Progreso», San Nicolás Quialana, Zimatlán, Oaxaca
(comportamiento del ahorro 1998-2001)
Gráfica 3.2
gapc San Pedro Mártir, Ocotlán, Oaxaca
(comportamiento del ahorro 1998-2001)
Gráfica 3.3
gapc «Grupo Unido para el Mañana»,
La Preciosita, Santa Rita, Tlahuapan, Puebla
(comportamiento del ahorro 1999-2001)
Gráfica 3.4
gapc «La Tejabana», La Tejabana, Zimatlán, Oaxaca
(comportamiento del ahorro 1999-2001)
Gráfica 3.5
gapc «San Isidro II», San Andrés Zautla Etla, Oaxaca
(comportamiento del ahorro 1999-2001)
En este gapc, la inestabilidad del ahorro se produjo a finales del año 2000 por
el incremento del número de socios; en el 2001 el incremento al monto de ahorro
individual tuvo efecto en el comportamiento inestable de la curva del ahorro, de
aquí puede inferirse que las cantidades de ahorro aportadas durante los dos primeros
años fueron las óptimas (véase gráfica 3.5).
I I I . D ise ñ o y manejo de u n gr u po de ahorro y pr é stamo com u nitario 47
Grafica 3.6
gapc «Tzilqueyotl», Santa Cruz Ajajalpan,
Tecali de Herrera, Puebla
(comportamiento del ahorro 1999-2001)
En este grupo de mujeres, la finalidad de sus ahorros era mantener los gastos
de compra de alimentos de un proyecto en colectivo para la producción de ovinos de
engorda; la cuota de ahorro fue constante, pero al dejar de funcionar el proyecto
productivo, el ahorro también dejó de realizarse (véase gráfica 3.6). Ello eviden-
cia la incompatibilidad del ahorro con fines de inversión en una empresa social.
Gráfica 3.7
gapc «Unión de Mujeres Campesinas de las Dalias»,
Guadalupito Las Dalias, Santa Rita Tlahuapan, Puebla
(comportamiento del ahorro 1999-2001)
Gráfica 3.8
gapc Santa María Ixtiyucan, Nopalucan, Puebla
(comportamiento del ahorro 1998-2000)
Estos dos últimos grupos (véase gráficas 3.7 y 3.8) representan las condiciones
de las familias campesinas de una comunidad rural (independientemente de la com-
posición genérica del grupo, uno es de mujeres y el otro de hombres) donde el flujo
de ingresos es variable durante el transcurso del año y la inestabilidad es semejante
los tres años en que se registró el comportamiento del ahorro.
Se observa que algunos grupos pudieron permanecer constantes con el ahorro,
pero no en todos los años, ni durante un año. Ello fue debido a la inestabilidad del
flujo de ingresos de las familias, que se acentúa más en localidades ubicadas y con-
sideradas como de menor índice de desarrollo según los estudios del indesol. La
variación de los ahorros es diferente en cada comunidad debido a las distintas di-
námicas de las familias dentro de las comunidades de las dos regiones.
rentemente con personas que quieran servir al grupo y que tengan ganas de cumplir
y, si es posible, que sepan leer y hacer cuentas. Si no saben hacer cuentas pueden
apoyarse en sus hijos y esposos para aprender; esta recomendación se hace por la
operatividad observada en los grupos del pdria.
Aunque existe un comité integrado por tres personas, en la práctica sólo el 23.6% de
los casos funciona dicho comité, en la mayoría de los casos (73%) solamente una o
dos personas son las que llevan el control de las operaciones, parecería que hay una
concentración del control, pero en la realidad no es así ya que el responsable es auxi-
liado por su familia, cónyuge, hijos u otro socio voluntario que formalmente no son
miembros ni del comité ni de la caja, tal como se detecto en 8 grupos (Almorín, 2009).
Figura 3.3
Formación de un comité de ahorro en un gapc
acatar las reglas y entonces también los grupos pueden desintegrarse por la rigi-
dez y la inflexibilidad de las reglas, tal como sucedió en grupos de la Magdalena
Cuaxistla, «Confecciones Rox» y otros. Vemos que éste es un asunto difícil, pero
la comprensión y el lograr a acuerdos entre todas y todos puede ayudar a elaborar
un reglamento flexible y sencillo que ayude a trabajar en grupo.
Por ello, es importante que al definir las normas del reglamento se considere la
factibilidad de su cumplimiento, ya que las normas muy rígidas y estrictas (como
cuotas de ahorro muy altas o multas exageradas) desaniman a los miembros del
grupo a participar por no poder cumplirlas. Por eso es importante hacer y analizar
las reglas en común para que sean simples, claras y precisas, y esto permitirá que
el reglamento sea flexible y modificable cuantas veces sea necesario. Por ejemplo,
al principio, el grupo de «La Estación de Tecuanipan S de SS», había fijado una
tasa de interés del 6%, pero a los miembros de la sociedad se les hacía caro, en-
tonces la redujeron al 4% y así los socios se animaron a solicitar más préstamos y,
con ello, hasta la fecha, sigue funcionando bien. En el caso de la cuota de ahorro,
41% de los grupos (23) disminuyeron la cantidad de ahorro definida en un inicio, lo
que demuestra las ventajas que tienen la elaboración y la modificación de las nor-
mas de acuerdo a las situaciones particulares de cada grupo.
La asamblea general del grupo de ahorro será quien tome las decisiones
importantes que más convengan al funcionamiento del grupo.
La figura 3.4 muestra un tipo de reglamento sencillo y en el anexo final se
transcriben otros dos ejemplos de reglamento; uno es utilizado en los grupos
de mujeres de Puebla y el otro, un poco más complejo, del grupo «Vaqueros de
Hueyacatitla».
Figura 3.4
Ejemplo de un reglamento sencillo de un gapc
Figura 3.5
Ejemplo de un registro del ahorro en una hoja de colecta
Figura 3.6
Ejemplo de una tarjeta (carné) de ahorro
Figura 3.7
Hoja de ahorro personal
Las tasas de interés son menores a las que cobran los prestamistas locales y algunas
microfinancieras bancarias, pero más caras que lo que cobra un banco comercial;
pero hay que tener en cuenta que los intereses ganados en un grupo de ahorro se
reintegran a cada uno de los ahorradores. Esto es porque los participantes son clien-
tes y dueños al mismo tiempo de estos esquemas microfinancieros, mientras que
en el banco, además de no hacer préstamos pequeños, los intereses ganados son
para los banqueros.
Los préstamos, además de ayudar al que lo pide, también benefician a todo el
grupo, ya que con los intereses cobrados en los préstamos se incrementa el capital
para atender algunos préstamos que a veces rebasan la cantidad ahorrada, además
de que los ahorradores obtendrán más ganancias al final del ciclo. Por lo tanto el
interés o rédito, como se conoce en las comunidades, es en realidad la ganancia o
utilidad cobrada por un capital prestado.
Para fijar los intereses sobre los préstamos se deben considerar los siguientes
aspectos:
Considerar una tasa de interés justa para todas las personas ahorradoras adheridas
al grupo y para personas externas. Definir cuánto se quiere ganar sobre los aho-
rros y cuánto están dispuestos a pagar por los préstamos en función de la situación
económica de las familias y de las posibilidades que tengan de pagar los intereses.
Esto se facilita al explicarle a los integrantes que son dueños y clientes al mismo
tiempo, que sus ahorros ganarán en función de la tasa de interés que se aplique a
los préstamos y que cuando soliciten préstamos deberán pagar esas tasas de interés.
La importancia del cobro de la tasa de interés se justifica para evitar que el
dinero se devalúe. Como se ha visto anteriormente, cada año los productos y servi-
cios suben de precio; por ejemplo: lo que antes costaba $1.00 ahora cuesta $1.35, lo
que quiere decir que hubo una devaluación de nuestra moneda de 35 centavos por
cada peso o del 3.5%. Si en un préstamo no se cobrara intereses como mínimo esta-
ríamos perdiendo 35 centavos por cada peso. Por esta razón el índice de inflación
es uno de los indicadores a considerar al definir la tasa de interés que se cobrará por
los préstamos. También se tienen que tomar en cuenta los gastos originados por la
operación de los gapc, por ejemplo los gastos de papelería, gestión y los generados
por algún préstamo no recuperado. Estos gastos, aunque no representan un costo
alto, deben ser considerados e incluirse en los intereses de los préstamos otorgados.
Concluyendo, los indicadores más importantes que deben considerarse para de-
finir la tasa de interés son la inflación anual, los costos de operación y el nivel de
riesgo de préstamos vencidos o no recuperados.
Una forma sencilla de estimar la tasa de interés mínima a cobrar en los présta-
mos, es tener el dato de la tasa de inflación o hacer una estimación entre todas las
personas del gapc, asimismo para los costos de operación también se hace una es-
timación en términos de porcentaje; por ejemplo, si se gastan $200.00 y se piensa
I I I . D ise ñ o y manejo de u n gr u po de ahorro y pr é stamo com u nitario 63
ahorrar la cantidad de $5000.00 se procede a calcular el porcentaje que representan
los $200.00 de $5000.00. Esto es igual al 4% de interés por todo el ciclo de ahorro,
el cuatro lo dividimos entre el número de meses que dura el ciclo, vamos a suponer
que el ciclo es de seis meses, lo que sería 0.66% por mes. Este cantidad se suma al
porcentaje de inflación que, suponiendo, sería del 2.5% mensual, entonces 2.5% +
0.66% = 3.1%, quitamos la fracción para obtener un número entero y quedaría el
3% como tasa de interés mensual.
Otra forma muy sencilla de recuperar los gastos de operación, sin hacer tantas
cuentas en los grupos del pdria, es dar una cuota destinada para gastos por sepa-
rado del ahorro al inicio del ciclo de ahorro; en otros casos, al final del ciclo, en la
entrega, se restan los gastos de operación de los dividendos. Para una mejor com-
prensión de este punto es necesario que el grupo se asesore con el técnico promotor
o con alguna otra persona que conozca del tema.
Ejercicio 1
Primero se anotan siguientes datos:
Capital prestado: $ 250.00
Plazo para pagar: tres meses
Tasa de interés: 5% mensual
Luego se multiplica el capital por el tiempo $250.00 × 3 = $750.00
La cantidad obtenida la multiplicamos por la tasa de interés: 750 × 5 = 3750
Esta cantidad la dividimos entre 100 y ya tenemos el interés: 3750 ÷ 100 = 37.50
Después sumamos el interés a la cantidad prestada:$250.00 + $37.50 = $287.50
La cantidad a pagar, incluyendo los intereses es de $287.50 y la forma en como
se pague depende de los acuerdos entre el gapc y la persona que recibió el présta-
mo. Generalmente, se paga al vencimiento la cantidad prestada con sus respectivos
intereses; sin embargo, se sugiere que la cantidad a liquidar se divida en más de dos
pagos y así se evitan los retrasos o los incumplimientos. Para este fin se elabora un
calendario de pagos con plazos bien definidos.
64 I I I . D ise ñ o y manejo de u n gr u po de ahorro y pr é stamo com u nitario
Ejercicio 2
¿Cuál es el interés que se tendrá que pagar por una cantidad de $100.00 al 5%
de interés a liquidar en cuatro meses?
Capital prestado: $100.00
Plazo a pagar: cuatro meses
Tasa de interés: 5%
Multiplicar el capital por el tiempo $100.00 × 4 = $400.00
La cantidad que sale se multiplica por la tasa de interés $400.00 × 5 = $2000.00
Esta cantidad se divide entre 100 y se obtiene el interés: $2000.00 ÷ 100 = $20.00
Después sumamos el interés a la cantidad prestada: $100.00 + $20.00 = $120.00
Entonces el interés a pagar es de $20.00 por los cuatro meses.
Para evitarse estos problemas, es preferible que el grupo de ahorro se forme con
personas conocidas, lo que facilita que los miembros sean responsables en el gru-
po, respondan y ayuden entre todas y todos. Y también es muy importante que el
grupo apruebe los préstamos solicitados de la siguiente manera:
a) La solicitud se debe de leer al grupo.
b) Entre todas y todos se discutirá si es conveniente o no hacer el préstamo
tomando en consideración:
•El compromiso con el grupo.
•Su comportamiento en préstamos anteriores.
•Si está al corriente en su ahorro.
•Si la cantidad es adecuada a las necesidades a sufragar.
•Las posibilidades de pago de la persona solicitante.
Discutir este proceso en el grupo es una forma de educación para el préstamo,
ya que la mayoría de socios y socias de los grupos no están acostumbrados a so-
licitar préstamos ni créditos a instituciones financieras. En ocasiones, se limitan
algunos préstamos hasta que las personas demuestren con trabajo y compromiso
que sí pueden pagar el préstamo. Sin embargo, la mejor forma de garantizar el pago
de los préstamos es la organización y la fuerza que el grupo tenga, la confianza
que se haya construido y la disposición de todas y todos a cumplir. El préstamo
es un derecho de las socias y socios del grupo, pero tiene que ganarse cumplien-
do con las obligaciones que el grupo haya acordado.
Figura 3.8
Ilustración de otorgamiento de un préstamo
por la tesorera del gapc «Nuevo Amanecer»
En la libreta del comité de ahorro, donde se tienen los registros mensuales del
ahorro y de las salidas de los préstamos, habrá una sección de «Control de pagos».
Este control de pagos se elaborará mensualmente también, por lo que se tendrá
una hoja por mes, igual que en los casos del control de ahorro y del control de présta-
mos (véase anexos 5 y 6). También se puede hacer una hoja de control de préstamos
y pagos de forma individual como muestra la figura 3.9.
Este formato es un tipo de tarjeta que tiene que llevar la tesorería y si lo desea
el socio de la caja también puede tener una copia. Se recomienda utilizar un for-
mato para cada préstamo. Otra opción es que también el deudor lleve una libreta
personal donde él mismo llevará su control anotando los pagos que va realizando.
Figura 3.10
Control individual de préstamos
Adeudo
Fecha Interés a pagar Pago de interés Abono a capital Total pagado
acumulado
14 Enero 2001 5% 0 0 0 $2,000.00
14 Febrero 2001 $100.00 $100.00 $ 500.00 $ 600.00 $1,500.00
15 Marzo 2001 $ 75.00 $ 75.00 $ 500.00 $ 575.00 $1,000.00
15 Abril 2001 $ 50.00 $ 50.00 $ 0.00 $ 50.00 $1,000.00
15 Mayo 2001 $ 50.00 $ 50.00 $ 500.00 $ 550.00 $ 500.00
15 Junio 2001 $ 25.00 $ 25.00 $ 500.00 $ 525.00 $ 0.00
Total $400.00 $400.00 $2,000.00 $2,400.00
Fuente: Elaboración propia con base en trabajo de campo.
70 I I I . D ise ñ o y manejo de u n gr u po de ahorro y pr é stamo com u nitario
Cuadro 3.1
Principales conceptos de un corte de caja de un gapc
Figura 3.11
Corte de Caja del gapc
«Caja Comunitaria de Ahorro San Juan»,
El Palmarito Tochapan, Quecholac Puebla
Estos cinco formatos para un primer mes de operación financiera, nos indicarán
cuál fue el camino que siguió el dinero.
a) Se le dio a la tesorera o al tesorero el ahorro de todas las personas del gru-
po para un primer mes de ahorro, se indica el inicio del camino que sigue
el dinero.
b) El tesorero o la tesorera cobra las multas a las personas que no cumplan
con el reglamento interno y las cantidades de dinero recibidas por este con-
cepto las registró la secretaria en una libreta.
c) Las personas del comité reciben las solicitudes de los préstamos y una de
ellas se encarga de entregarlos previa aprobación del grupo y de todo el
comité. Esta comisionada tiene que llevar un registro en una libreta de los
préstamos que van otorgando.
d) La presidencia o responsable del gapc, también llevó, en su cuaderno o
libreta, un concentrado de los gastos que surgieron como resultado de las
actividades del grupo, esto para que no se olvide y así pueda entregar cuen-
tas al grupo.
Una vez conocidos los pasos fundamentales del proceso operativo y financiero,
se explicarán los cortes de caja y el balance anual como una fase del camino del
dinero ahorrado.
I I I . D ise ñ o y manejo de u n gr u po de ahorro y pr é stamo com u nitario 73
Figura 3.12
Las rutas y procedimientos del manejo de un gapc
(El camino del dinero en un gapc)
6
Grupo de Ahorro y Préstamo
Comunitario
Socios y socias ahorradores Pago de intereses y
recuperación de préstamos de los socios
y socias de la CAPC
Otorgamiento
más utilidades
concentrado concentrado
1ª semana de ahorro 2 Tesorero Hoja de
de pagos
del mes mensual mensual Hoja de
concentrado
1er mes mes Hoja de
concentrado
1er de ahorro
Hoja de Hoja de Secretario Presidente de
mensual Hoja de
concentrado
ahorro
colecta concentrado tercero concentrado
de ahorro
mensual
mes
Hoja de de pago
mensual
cuarto mes
de ahorro de ahorro
Hoja de
concentrado
2ª semana mensual mensual
Quinto mes
de Hoja de
concentrado
ahorro último mes
del mes 2do mes Hoja de
concentrado
de ahorro
mensual
concentrado
de ahorro
mensual
tercero mes Hoja de
Hoja de cuartodemes
ahorro
mensual balance final
colecta mensual
Quinto mes egresos-ingresos
de ahorro último mes
3ª semana
del mes 4 5
1
Hoja de Corte de
Hoja de Hoja de caja
colecta concentrado concentrado
de ahorro
4ª semana
de ahorros Ë de pagos
Hoja de
Balances
totales totales
del mes mensuales
Cuadro 3.2
Corte de caja mensual
es decir todo el dinero que salió. No se considerará el dinero pagado por présta-
mos, registrado en los ingresos, ni el dinero que salió por préstamos debido a que
es acumulativo, pero sirve para corroborar que todo el dinero que se prestó se haya
pagado y también para calcular la revolvencia financiera del dinero, que no es más
que el número de veces que se prestó éste.
Si bien las multas son ingresos, se consideran como cero ingresos porque, aun-
que sí forman parte del capital prestado, su finalidad es sancionar y no siempre son
aportadas por las mismas personas. No se consideran utilidades porque no son inte-
reses cobrados y sería injusto repartir las multas entre quienes no aportaron dinero
por este concepto. Esto es un punto que debe tomarse muy en cuenta dentro del re-
glamento interno y aclarase bien. La finalidad del ahorro y préstamo comunitario
es fomentar una cultura financiera sana, ayudándose unos a otros con la moviliza-
ción de su propio dinero proveniente de los ahorros.
Entonces, ¿qué debe hacerse con el dinero que ingresa por multas si no es con-
siderado como utilidad a pesar de que sí contribuye a generar intereses? En primer
lugar, el interés que éste genera debe calcularse por separado y descontarse de los
intereses a repartir; en segundo lugar, se deben buscar mecanismos para dar uso a
este dinero; sin embargo, la caja de ahorro siempre se enfrentará al problema de qué
hacer con él ya que por tratarse de una sanción no puede regresarse a las personas
que lo aportaron. Una posible opción para usar el dinero de las multas es destinar-
lo a un fin social que, incluso, puede ser a beneficio de la propia caja, en este caso
las personas del grupo son quienes deben decidir en su momento. Otra opción es la
creación de un patrimonio social para la caja, que es de todos. Un ejemplo de la fi-
nalidad social en algunos grupos del proyecto pdria es que el dinero colectado por
multas se destinó para apoyar a algún socio que necesitaba ayuda para alguna si-
tuación emergente, tal como un accidente o el fallecimiento de algún familiar, en-
tre otras. Un ejemplo del patrimonio social fue aportar cooperación por parte del
grupo para alguna obra comunitaria, la feria del pueblo o simplemente para la con-
vivencia de todos.
De este modo las ganancias de los ahorros dependerán del monto ahorrado y de
que siempre esté en movimiento, nunca debe tenerse guardado el ahorro acumu-
lado, sin prestarse, ni mucho menos abrir una cuenta bancaria. Esto se da cuando
siempre se está prestando y recuperando el dinero con sus respectivos intereses;
pero también en la operación financiera de un grupo de ahorro hay algunos gastos
que al principio se pagan con los ahorros y posteriormente se recuperan con los in-
tereses cobrados; por eso, a la ganancia sobre el ahorro se le restan dichos gastos.
Después de estas consideraciones se describe el procedimiento para el reparto de
dividendos o utilidades del ahorro individual.
Para esto se necesita tener una hoja donde se concentren todos los cortes de caja
realizados desde el primero hasta el último mes del ciclo definido de ahorro; algunos
grupos utilizan el año civil, es decir, comienzan en enero y terminan en diciembre.
I I I . D ise ñ o y manejo de u n gr u po de ahorro y pr é stamo com u nitario 77
Una vez concentrados los datos de cada mes y concepto en las columnas respec-
tivas, éstas se suman, excepto las cantidades por concepto de saldo anterior y saldo
del mes, debido a que el cálculo se hace con el total de la columna de interés y del
ahorro acumulado. Cabe aclarar que el corte y la entrega de dividendos no se rea-
liza el último día de depósito de ahorros, sino que se tiene que dar tiempo de más
de una semana o hasta de un mes para que el comité del gapc se reúna y concen-
tre todos los datos, así como también para dar oportunidad a que alguna persona
que se haya retrasado en algún pago se ponga al corriente. Si bien se cierra el ci-
clo de operación, por disciplina y por si quieren seguir ahorrando, necesariamente
deben seguir depositando su cuota de ahorro aunque ya no se hagan préstamos.
Para ejemplificar de manera práctica el procedimiento de reparto de dividendos
se plantean tres situaciones de un grupo del pdria: en la primera, la cuota de aho-
rro es igual para todas las personas, suponiendo que todas cumplen cabalmente, con
un ciclo de seis meses, la segunda, también con una cuota de ahorro idéntica pero
con un ciclo de doce meses; y la tercera, cuando existen diferentes cantidades de
ahorro acumulado, a pesar de que depositen las mismas cuotas de ahorro, pero que
por diversos motivos, como los ya mencionados sobre la cantidad de ahorro (pági-
nas 40-42), el ahorro individual acumulado a final del ciclo es diferente en cuando
menos una persona ahorradora.
Situación 1. Se presenta la hoja de concentrados de los balances mensuales
del Grupo Unido para el Mañana de la comunidad de La Preciosita, Municipio
de Santa Rita Tlahuapan, Puebla, correspondiente al primer ciclo de opera-
ción de seis meses; el grupo contó con veinticinco ahorradoras que guardaron
la cantidad de cinco pesos semanalmente, por lo que el ahorro colectado cada
mes fue de quinientos pesos. En este caso el grupo no contó con un fondo
para gastos, pues no lo consideraron en su reglamento, por lo que el saldo ini-
cial denominado «Saldo Mes Anterior» aparece en ceros (véase cuadro 3.3).
El saldo del mes de enero se obtiene sumando las cantidades de las columnas de
todos los ingresos de dicho mes y restándole al total obtenido el total de los egre-
sos. Como vemos en el cuadro 3.3, los primeros gastos se descuentan de los ahorros
colectados y de las multas debido a que tampoco hay pago de préstamos ni de in-
tereses. Para el mes de febrero, el saldo anterior, es decir el dinero que quedó en
caja y no se gastó al final de enero ($440.00), se pone como saldo en la columna
de ingresos. Los siguientes meses se sigue el mismo procedimiento hasta llegar al
último mes de operación y hacer las sumas totales.
El total de préstamos tanto en ingresos como en egresos no se ocupa, sirve para
verificar el movimiento del dinero, en este caso nos indica que durante los primeros
meses hubo dinero estancado que no estuvo trabajando.
El saldo final es la operación que se hace sumando todo lo que entró y restán-
dole todo lo que salió. Si observamos, todas estas operaciones ya se hicieron en los
78 I I I . D ise ñ o y manejo de u n gr u po de ahorro y pr é stamo com u nitario
Cuadro 3.3
Hoja de concentrado de los balances mensuales
Cuadro 3.4
Hoja de concentrado de los balances mensuales
Cuadro 3.5
Hoja de concentrado de los balances mensuales
Figura 3.13
Ilustración de un corte de Caja Anual del Grupo «Agricultores Unidos
de Tianguismanalco», La Trinidad Tianguismanalco, Tecali, Puebla
Figura 3.14
Entrega del ahorro y utilidades en el gapc «Caja Comunitaria
de Ahorro San Juan», El Palmarito Tochapan, Quecholac Puebla
Para que un Grupo de Ahorro y Préstamo Comunitario logre ser exitoso es nece-
sario analizar y conocer con mayor detenimiento cuáles son los principales factores
que permiten a una Caja de ahorro ser exitosa. El éxito se debe entender en térmi-
nos del logro del objetivo principal del gapc: la capacidad del grupo para ayudar
a sus integrantes a sobrevivir en un contexto contrario a su sobrevivencia.
Desde el inicio de esta obra se han reiterado las cualidades de este tipo de or-
ganización financiera de autoayuda y también se han desarrollado algunos puntos
que ayudan a manejar cajas o grupos; sin embargo, se debe reflexionar con mayor
profundidad cada uno de los elementos y principios involucrados para lograr resul-
tados favorables. Para entender cada uno de ellos, estos factores se dividen en dos
grupos, internos y externos. Los internos dependen directamente de los miembros
y de las características del grupo, mientras que los externos son ajenos a la volun-
tad propia del grupo y sus integrantes, como son los sucesos sociales y naturales
dentro de la comunidad, municipio, estado, país y el mundo. Ejemplo de lo ante-
rior puede ser una crisis o una catástrofe.
Los factores internos están relacionados con los valores humanos y morales del
ser humano que favorecen el establecimiento de múltiples relaciones sociales que
promueven la cohesión entre individuos. Ese valor activo social que muy pocas ve-
ces es considerado en la conformación de grupos comunitarios, se ha denominado
capital social y cuyo análisis se abordó en el primer capítulo, ahora es considera-
do de nueva cuenta dentro de los primeros factores internos de éxito de los gapc.
Sin embargo, el capital social tiene sus inconvenientes debido a que a veces pue-
de ser utilizado para fines negativos, de manera directa e indirecta; por ejemplo, los
grupos de una red afín excluyen a aquellos que no son afines, también se da esta si-
tuación al utilizar redes formadas de manera involuntaria o por conveniencia. Esto
favorece un tipo de capital, pero el beneficio se concentra en una persona o en un
pequeño grupo de poder que en lugar de favorecer el desarrollo social, lo inhibe y
mantiene el rezago social de los pueblos. A veces los esfuerzos para aumentar el ca-
pital social son mal encaminados por intervenciones que imponen nuevas relaciones
que no toman en cuenta la solidez de las antiguas relaciones o el capital preexistente.
Por lo antes expuesto se describen los elementos centrales del capital social
para favorecer una intervención positiva al diseñar y formar gapc. Retomando los
planteamientos del capital social de acuerdo a Coleman (1990), Putman (1993),
Bourdieu (1985); y Durston (2003).
4.1.2 Confianza
La confianza es un valor humano que se da entre dos o más personas, viene de
fianza, a decir, tiene que ver con la fe en alguien o en algo y esto es creer en otro,
es el afecto que se siente hacia una o más personas; pero también las otras perso-
nas tienen que creer en el depositario de esa confianza. A pesar de que vivimos en
sociedad y con muchas relaciones sociales no siempre confiamos en todos, a veces
entre más cercanas sean las relaciones y mayor conocimiento tengamos de las per-
sonas, puede que no haya mucha confianza. El comportamiento de las personas a
veces es una forma de saber la fiabilidad de ellas y eso les da prestigio, de ahí que
es necesario rescatar personas con valores de honestidad y honradez. La confianza
se da por las relaciones sociales establecidas en la sociedad, pero también tiene el
carácter de crear una obligación de retribuir esa confianza, de aquí que es impor-
tante entender y considerar el carácter de reciprocidad.
El ahorro en grupo exige que confíen unos en otros y se cree la confianza mos-
trando compromiso y disciplina.
4.1.3 Reciprocidad
La reciprocidad es una respuesta, por lo que es una conducta personal. Ser recí-
proco implica algo mutuo, se encuentra en las relaciones de confianza; es responder
de manera positiva y de manera incondicional a la aportación de una o más personas;
puede considerarse como una forma de intercambio o de agradecimiento que no
necesariamente es material; por ejemplo el trabajo, un préstamo monetario o de un
objeto, un regalo, alguna ayuda o favor, etcétera. La correspondencia no siempre
se presenta de la misma forma, pues muchas veces no se considera lo económico,
las horas o jornadas de trabajo, la cantidad prestada, el valor del objeto prestado,
I V. F actores de é xito y limitaciones del modelo de gapc 89
sino que más bien es la disponibilidad y la buena voluntad de corresponder por
alguna ayuda, presente o favor.
La reciprocidad pareciera algo natural, es un cualidad que existe en las comu-
nidades, o entre la gente de pequeños barrios y vecindades, siendo un elemento
importante del capital social del que hemos hablado. Las relaciones de confianza
generan normas reguladas por usos y costumbres comunitarios o, en ocasiones, es-
tipuladas en contratos mediante la lógica legal.
4.1.7 Comunicación
Aunque el ser humano está dotado para comunicarse con sus semejantes, en la
realidad el proceso de comunicación no es completamente eficiente debido a diver-
I V. F actores de é xito y limitaciones del modelo de gapc 91
sas razones; por ello, deben conocerse los principales elementos de la comunicación
y su funcionamiento. Se sugiere utilizar medios sencillos y económicos para di-
fundir información, tales como hojas de rotafolio con los principales acuerdos,
charlas frecuentes en los días de ahorro y recordar el reglamento en las asambleas
mensuales. La información es importante sobre todo cuando se trata de recursos
monetarios como lo es el dinero ahorrado; el rendir cuentas e informar la forma de
cómo se maneja el dinero de los demás es un proceso que debe ser permanente en
todas las etapas de un gapc, desde su formación hasta cuando ya está operando y
debe involucrar a todas las personas participantes. En la medida en que todos estén
informados sobre los asuntos relacionados con el grupo y sus recursos monetarios
la caja tendrá un mejor desempeño.
4.1 9 Educación
La educación (formal o informal) es un proceso con el que se forman mejores ciu-
dadanos al fomentar valores morales, como la honestidad y el respeto, entre otros. Si
bien es cierto que en nuestra sociedad se le da mucho valor a la educación escolari-
zada (debido a que en ella se aprenden aspectos más amplios y complementarios del
mundo y las ciencias mediante un proceso escalonado de conocimientos), en el caso
de los mecanismos de ahorro y préstamo comunitario, el que alguno de los miem-
bros tenga un nivel de escolaridad alto puede favorecer el proceso de formación y
consolidación de grupo; sin embargo, lo más importante para estas asociaciones es
la educación informal ya que aun cuando no se tenga una escolaridad alta, la caja de
ahorro es una escuela de aprendizaje permanente, independientemente si los miem-
bros saben leer y escribir o si cuentan con escolaridad o no, aquí todos aprenden y
92 I V. F actores de é xito y limitaciones del modelo de gapc
enseñan sin cambiar su cosmovisión local; pues en la práctica, los gapc tienen im-
plícitos valores que a lo largo del tiempo habrán de construir una cultura no sólo
financiera, sino de participación, de legalidad, de rendir cuentas etcétera.
4.1.11 Liderazgo
Esta característica es un elemento vital para que cualquier organización sea
exitosa; por lo que en un Grupo de Ahorro y Préstamo Comunitario siempre debe
existir una persona que asuma esta responsabilidad. A veces existen líderes natos,
pero en otros casos se forman como resultado de la relación mutua y dinámica en-
tre las personas que se agrupan en torno al ahorro. Es importante aclarar que un
verdadero líder no es aquel que tiene características especiales, sino el que tiene
las cualidades de coordinar y dirigir, convencer y motivar, así como de armonizar las
relaciones interpersonales. El líder representa la unidad del grupo y desarrolla
en él un «espíritu de equipo», viendo más allá de lo que la mayoría de los miem-
bros ven. El verdadero liderazgo debe ser compartido entre todos y cada uno de
los miembros del grupo, cuando se logra esto, el éxito de un Grupo de Ahorro está
asegurado. Las experiencias de algunos grupos señalan que la rotación de pues-
I V. F actores de é xito y limitaciones del modelo de gapc 93
tos cada año fomenta la participación y el liderazgo del grupo, aunque también
a veces existe un núcleo base que funciona como un consejo y permite mantener el
liderazgo. Estas situaciones de liderazgo compartido se generan más en grupos
de mujeres y grupos mixtos, no así en el caso de grupos formado exclusivamente,
o con predominancia, de hombres.
4.3.2 Migración
La migración a los Estados Unidos también ha contribuido negativamente en los
grupos del pdria. En la mayoría de los casos que fueron afectados por este fenómeno
social los esposos de las mujeres ahorradoras o los líderes que emigraron dejaron
de mandar dinero para el ahorro y el pago de los préstamos que muchas veces soli-
citaron para poder viajar y que algunos nunca pagaron. Más aún, en algunos casos
los socios de la caja quedaron en bancarrota al migrar algún representante del gru-
po, sobre todo si éste tenía el dinero y se «autoprestó».
4.3.3 Recuperaciones
Si no se tiene definido un esquema de recuperación de los préstamos que se van
atrasando se corre el peligro de que el gapc desaparezca ya que el tener una gran car-
tera vencida al final de un ciclo de ahorro provoca que se descapitalice el grupo.
4
Para mayor información véase los trabajos de Sánchez Albarrán, 1997; Colegio de Postgraduados, 2003;
Zapata Martelo et ál., 2003 y Villarreal, 2004.
98 I V. F actores de é xito y limitaciones del modelo de gapc
[100]
ANEXOS
Anexo 1
Municipio: ___________________________________
Comunidad: __________________________________
Grupo: ______________________________________
Fecha: ____________________
________________________ ______________________
Presidente Secretario
[101]
Anexo 2
Grupo: ______________________________________________
No de control: _______
Nombre:______________________________________________
Total:
____________________________ _________________________
Firma responsable de la caja Secretario de la caja
[102]
Anexo 3
Total Saldo
Mes Cantidad Cantidad Cantidad Cantidad Cantidad
del mes acumulado
Anotaciones: ________________________________________________
__________________________________________________________
[103]
Anexo 4
SOLICITUD DE PRÉSTAMO
Fecha: ____________________
Solicitud No._______________
Vencimiento: _____________________________
Observaciones: ___________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
________________________________________________________________________________
___________________________________
NOMBRE Y FIRMA DEL SOLICITANTE
[104]
Anexo 5
CONTROL DE PRÉSTAMOS
Municipio: ______________________________________________________________
Comunidad: _____________________________________________________________
Grupo: _________________________________________________________________
Mes:____________________
Pago Interés
Fecha Cantidad Saldo Beneficiario Recibió
capital y pagos
Totales
[105]
Anexo 6
Municipio: ______________________________________________________________________
Comunidad: _____________________________________________________________________
Grupo: _________________________________________________________________________
Mes: ____________________
Total:
[106]
Anexo 7
[107]
Anexo 8
Apoyos en efectivo de
instituciones
Total
Donativos
Debe haber en caja
SUMA SUMA
Sumas iguales
____________________________ _________________________
Firma responsable de la caja Secretario de la caja
______________________________________
Vo Bo Presidente de la Caja de Ahorro
[108]
Anexo 9
ACTA CONSTITUTIVA
REGLAMENTO INTERNO
Nombre Firma
ACTA QUE SE LEVANTA CON MOTIVO DE LA ASAMBLEA GENE-
RAL DE LA SOCIEDAD “VAQUEROS DE HUEYACATITLA”, S DE SS,
LLEVADA A CABO EL DÍA DIECISIETE DE OCTUBRE DE MIL NO-
VECIENTOS NOVENTA Y OCHO, EN SU DOMICILIO SOCIAL, SITA
EN LA CALLE EMILIANO ZAPATA No. 9 DE SAN ANDRÉS HUE-
YACATITLA, MUNICIPIO DE SAN SALVADOR EL VERDE, PUE.,
BAJO EL SIGUIENTE:
1. Lista de asistentes
2. Elaboración de reglamento interno de la caja de ahorro
3. Elección de cargos del comité de caja de ahorro
4. Asuntos generales
DESARROLLO DE LA ASAMBLEA
1. Lista de asistentes
Asistieron por parte del Comité Ejecutivo J. Gregorio Pérez Perea, presidente
y N. Delfino Méndez Ojeda, tesorero, por el comité de Vigilancia Angel Sánchez
Perea, presidente y los socios: J. Ignacio Sánchez Perea, Marcos Sánchez Perea,
Marciano Hernández Flores, Domingo Sánchez Perea, Alvaro Sánchez Perea, De-
metrio Pérez Perea, Jacinto Vázquez Perea. También asistieron como invitados los
vecinos Odilón Sánchez Perea y Everardo Hernández Reyes así como el MC. Igna-
cio Carranza Cerda, Ing. Renato Almorín Albino y el mvz Pascual García Aguilar,
Coordinador y Técnicos Asesores respectivamente del Proyecto de Desarrollo Rural
Integral Autosostenido para los Valles Centrales de los Estados de Puebla y Oaxa-
ca que lleva a cabo el Colegio de Postgraduados dentro del Área del Plan Puebla.
[112]
a nexos 113
2. Elaboración de reglamento interno de la caja de ahorro
En este punto, luego de analizar y discutir las partes más importantes que se
consideraron las mínimas para el buen funcionamiento de la caja de ahorro y por
consenso y acuerdo se logró redactar el siguiente:
CAPÍTULO I
disposiciones generales
CAPÍTULO II
fines de la caja de ahorro
CAPÍTULO III
el capital de la caja de ahorro
ART. 7°. El capital de la Caja de ahorro, estará representado por las aportaciones
de los socios ahorradores, quienes depositarán el domingo y lunes de cada semana
como mínimo $20.00 (veinte pesos 00/100 MN.), por concepto de ahorro indivi-
dual. La Caja de Ahorro incrementará su capital social por las donaciones de las
instituciones públicas o bien de personas físicas y morales ajenas a la Sociedad que
se sujeten al presente reglamento interno.
CAPÍTULO IV
órganos de gobierno y control
CAPÍTULO V
requisitos para obtener préstamos de la caja de ahorro
ART. 12°. Para los socios de la Caja de Ahorro que soliciten préstamo deberán
cubrir los siguientes requisitos:
1. Presentar solicitud por la cantidad del préstamo requerido al Comité de
Caja de Ahorro.
2. Si el dictamen de su solicitud fuese positivo, se le notificará en un plazo no
mayor a 12 horas y si se tratará de una emergencia sería de inmediato por
acuerdo del comité de Caja de Ahorro.
3. Firmar el convenio de préstamo acordado en la Asamblea General de socios.
Para los socios no inscritos en la Caja de Ahorro y sus familiares sólo se otor-
garán préstamos en caso de extrema necesidad y se exigirá demás de los requisitos
anteriores:
1. Presentar una garantía que respalde dos veces el monto solicitado.
2. Aval de un socio participante en la Caja de Ahorro.
3. Especificar el tiempo en el que se devolverá el recurso recibido.
CAPÍTULO VI
intereses que cobrará y que pagará la caja de ahorro
CAPÍTULO VII
ingreso de nuevos socios
ART. 14°. Para el caso de los socios no ahorradores que soliciten su ingreso
a la Caja de Ahorro, deberán hacerlo en las asambleas que tenga la sociedad, con
previa notificación al Comité Ejecutivo, para incluirse como un punto a tratar en
el orden del día.
El socio nuevo de la Caja de Ahorro podrá solicitar préstamos cuando por lo me-
nos haya depositado como ahorro el equivalente al 30% del monto de lo solicitado.
En el caso de personas ajenas a la sociedad que soliciten su ingreso a la caja de
Ahorro, deberán presentar:
1. Solicitud de ingreso a la sociedad a través del Comité de Admisión de so-
cios con la aprobación de la Asamblea General.
2. Solicitud de ingreso a la Caja de Ahorro ajustándose a las disposiciones
del párrafo anterior.
CAPÍTULO VIII
sanciones y disolución de la caja de ahorro
NOMBRE FIRMA
1. ____________________________________ ___________________
2. ____________________________________ ___________________
3. ____________________________________ ___________________
4. ____________________________________ ___________________
5. ____________________________________ ___________________
6. ____________________________________ ___________________
7. ____________________________________ ___________________
8. ____________________________________ ___________________
9. ____________________________________ ___________________
10.____________________________________ ___________________
11.____________________________________ ___________________
12.____________________________________ ___________________
118 a nexos
NOMBRE FIRMA
13.____________________________________ ___________________
14.____________________________________ ___________________
15.____________________________________ ___________________
16.____________________________________ ___________________
17.____________________________________ ___________________
18.____________________________________ ___________________
19.____________________________________ ___________________
20.____________________________________ ___________________
21.____________________________________ ___________________
22.____________________________________ ___________________
23.____________________________________ ___________________
24.____________________________________ ___________________
25.____________________________________ ___________________
4. Asuntos generales
El único punto que se trato fue el del inicio de recepción de la inscripción a la
Caja de Ahorro por parte de los socios, entrando en funciones inmediatamente el
Comité electo.
No habiendo otro asunto que tratar se da por terminada la Asamblea siendo las
19:30 p.m. del día de la fecha de su inicio firmando para constancia los que en ella
intervinieron.
a nexos 119
POR EL COMITÉ EJECUTIVO
__________________________ __________________________
J. Gregorio Pérez Perea N. Delfino Méndez Ojeda
PRESIDENTE TESORERO
SOCIOS
__________________________ __________________________
Angel Sánchez Perea Marciano Hernández Flores
__________________________ __________________________
Domingo Sánchez Perea Alvaro Sánchez Perea
__________________________ __________________________
Demetrio Pérez Perea Jacinto Vázquez Perea
__________________________ __________________________
José Ignacio Sánchez Perea Marcos Sánchez Perea
INVITADOS
__________________________ __________________________
Odilón Sánchez Perea Everardo Hernández Reyes
__________________________
mc Ignacio Carranza Cerda
__________________________ __________________________
Ing. Renato Almorín Albino mvz Pascual García Aguilar
Bibliografía
Van Der Ploeg, Jean D. (1992). “El proceso de trabajo agrícola y la mercantiliza-
ción”. En : Guzmán, E. y González de Molina, M. (eds.) Ecología, campesinado
e historia. Madrid : La Piqueta.
Villarreal, Magdalena (coord.) (2004). Antropología de la deuda. Crédito ahorro,
fiado y prestado en las finanzas cotidianas. México : ciesas, Miguel Ángel Porrúa
y H. Cámara de Diputados, lix Legislatura.
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das de Guadalajara. Guadalajara, México : Instituto Municipal de las Mujeres
de Guadalajara-Instituto Jalisciense de las Mujeres.
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Cibergrafía
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International Development (consultado en «www.oneworld.org/odi/keysheets»).
Otero, Pancho (2004). “Las microfinanzas no son finanzas en pequeño” Forum Bar-
celona (consultado en «www.folade.org/perspectiva/prensa_micro.htm#estudioso».
Índice de cuadros, figuras y gráficas
Cuadros
3.1 Principales conceptos de un corte de caja de un gapc. . . . . . . . . . . . . . . 71
3.2 Corte de caja mensual. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 74
3.3 Hoja de concentrado de los balances mensuales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 78
3.4 Hoja de concentrado de los balances mensuales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 80
3.5 Hoja de concentrado de los balances mensuales. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 82
Figuras
2.1 Reunión de reflexión sobre el ahorro entre familias campesinas en un
grupo pequeño. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33
3.1 Grupos de hombres y de mujeres rurales estudiando la factibilidad de
integrarse a un gapc. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 37
3.2 Reunión para la formalización de un gapc. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 40
3.3 Formación de un comité de ahorro en un gapc. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 50
3.4 Ejemplo de un reglamento sencillo de un gapc. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 56
3.5 Ejemplo de un registro del ahorro en una hoja de colecta. . . . . . . . . . . . 58
3.6 Ejemplo de una tarjeta (carné) de ahorro. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 59
3.7 Hoja de ahorro personal. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 60
3.8 Ilustración de otorgamiento de un préstamo por la tesorera del gapc
«Nuevo Amanecer». . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 67
3.9 Ilustración de un pagaré que fue pagado y cancelado. . . . . . . . . . . . . . . . 69
3.10 Control individual de préstamos. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 69
3.11 Corte de Caja del gapc «Caja Comunitaria de Ahorro San Juan», El Pal-
marito Tochapan, Quecholac Puebla. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 72
3.12 Las rutas y procedimientos del manejo de un gapc (El camino del di-
nero en un gapc). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 73
3.13 Ilustración de un corte de Caja Anual del Grupo «Agricultores Unidos
de Tianguismanalco», La Trinidad Tianguismanalco, Tecali, Puebla. . 84
[125]
126 Í ndice de c u adros , fig u ras y gr á ficas
Gráficas
3.1 gapc «Unión y Progreso», San Nicolás Quialana, Zimatlán, Oaxaca (com-
portamiento del ahorro 1998-2001). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 44
3.2 gapc San Pedro Mártir, Ocotlán, Oaxaca (comportamiento del ahorro
1998-2001). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 44
3.3 gapc «Grupo Unido para el Mañana», La Preciosita, Santa Rita, Tlahua-
pan, Puebla (comportamiento del ahorro 1999-2001). . . . . . . . . . . . . . . . 45
3.4 gapc «La Tejabana», La Tejabana, Zimatlán, Oaxaca (comportamiento
del ahorro 1999-2001). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46
3.5 gapc «San Isidro II», San Andrés Zautla Etla, Oaxaca (comportamien-
to del ahorro 1999-2001). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46
3.6 gapc «Tzilqueyotl», Santa Cruz Ajajalpan, Tecali de Herrera, Puebla
(comportamiento del ahorro 1999-2001). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47
3.7 gapc «Unión de Mujeres Campesinas de las Dalias», Guadalupito Las
Dalias, Santa Rita Tlahuapan, Puebla (comportamiento del ahorro 1999-
2001). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 47
3.8 gapc Santa María Ixtiyucan, Nopalucan, Puebla (comportamiento del
ahorro 1998-2000). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 48
El libro Finanzas comunitarias. Metodología para la formación de gru-
pos de ahorro y préstamo comunitario en el medio rural, de los doctores
Esteban Martínez Dajui, Ignacio Carranza Cerda y Renato Almorín Albi-
no, se terminó el 18 de octubre de 2013 por Altres Costa-Amic Editores,
S. A. de C. V., Calle 35 Poniente 302-A, Col. Chula Vista, Puebla, Puebla,
72420 México, altrescostaamic@prodigy.net.mx, tels. (222) 289 7927,
telcel 222 200 3349 y 5543 919176. La edición de 1000 ejemplares, con
la colaboración de Martha Soledad Dávila Márquez en la corrección de
estilo e Isaías Velázquez en la maquetación, estuvo al cuidado de los doc
tores Esteban Martínez Dajui, Ignacio Carranza Cerda y Renato Almorín
Albino y de Bartomeu Costa-Amic Leonardo.