Con una extensión de 160 hectáreas, el Parque La Llovizna está
conformado por una porción de las islas y saltos inferiores del Caroní, aproximadamente cinco kilómetros antes de la confluencia con el río Orinoco. Desde el mirador más alto y cercano a la caída de agua, el visitante puede sentir la llovizna o bruma que se produce por la fuerte caída del agua, acción a la cual debe su nombre el parque La Llovizna no es sino parte de un sistema de parques naturales a lo largo del río, que incluyen al Loefling, Cachamay y Punta Vista. Parte del parque alberga una retícula de 30 islas conectadas entre sí por numerosas caminerías de piedra y senderos naturales densamente arbolada. Y, el imponente Salto La Llovizna, una cascada de veinte metros es el punto culminante del parque. Además, desde el parque se puede apreciar la presa de Macagua II. Destaca en medio de este magnífico escenario, el Teatro de Piedra, hermosa obra que regala a los visitantes agradables momentos de intercambio cultural. En la Llovizna, el ingenio y el empuje del hombre han logrado una motivadora unión entre el hombre y el ambiente. Está ubicado en la avenida Leopoldo Sucre Figarella, vía San Félix, al llegar al distribuidor de la represa Macagua II, pasas por debajo y sigues la señal que indica la Llovizna. Las visitas son de Lunes a domingo, de 5:00 a.m. a 4:00 p.m. Cuando Edelca creó el Parque La Llovizna, tenía dos puentes colgantes grandes. el primero a la entrada y el segundo para pasar el salto más impresionante.,para recibir su mojada.
El Primero de los puentes colgante, que se cayó en 1964, causando la tragedia donde fallecieron varias personas que vinieron para la convención de la Federación Venezolana de Maestros Estaba construido sobre 4 cables de acero, fijados en bases de concreto no se rompió ningún cable, sino que se desprendió una de las bases, haciendo que girara y luego se desprendió el resto La mayoría de los fallecidos quedaron atrapados debajo del puente, dentro del agua.
Dicen que la falla no fue del puente, mas la falta de prudencia, se
hizo presente, pues cuentan que venían alegres de celebrar su almuerzo de la Federación se bajaron instantáneamente de las autobuses como encantados y maravillados por la naturaleza, sin pensarlo fueron directamente al puente colgante, les pareció gracioso que las maestras se asustaran con el balanceo del puente . La estructura estaba conformada por tablones de madera gruesa y guayas de acero que se expandían por los siete metros de largo más el metro y medio de ancho que tendría,Los guarda- parques les pidieron que se bajaran, pero no hicieron caso, con el fatal desenlace que todos conocemos el puente se rompió en segundos. Solo sobrevivió don Beltrán Prieto Figueroa, quien mas tarde se convirtiera en uno de los mas ilustres intelectuales del país, quien falleció hace mucho tiempo después, dejando un gran legado de educaciòn.
Después de que el Parque estuvo cerrado al público por dos años,
fue reabierto con el Puente actual de concreto y acero El segundo puente colgante, finalmente también fue reemplazado por el actual, pintado de verde, construido sobre dos vigas. Lo montaron dos metros más alto y el efecto de la llovizna del salto es menor ya han desarrollado totalmente el Parque y están planeando unirlo con el Parque Loefling, ubicado en la otra ribera del Caroní, para lo cual han solicitado el puente viejo sobre el Cuyuní, en El Dorado. Es una belleza trabajada en hierro forjado y dicen que lo construyó Gustavo Eiffel, el mismo de la famosa torre de Paris, colocado originalmente sobre el Río Apure en la época del Benemérito J.V. Gómez .
Años atrás podíamos ver una placa grande, apostada en una piedra gigantesca, con una inscripción que decía así:“LOS MAESTROS CAIDOS EN EL CARONI SON CUOTA DE VIDA PAGADA AL PROGRESO DE VENEZUELA” - Homenaje de la FAM. - 23 / 08 / 1964 - 23 / 08 / 1965 (aniversario)”. dicen que un día la bajaron para hacerle mantenimiento por el mal estado en el que se encontraba, desaparecería sin dejar rastro,, otros opinan que los amigos de lo ajeno la tomaron prestada para fundirla, ya que estaba construida de puro aluminio .…..
Ahora la historia de los maestros caídos en el Caroní pareciera un
cuento lejano, una reflexión postrada en espera de un reconocimiento o una sencilla palabra de aliento. Solo quedó latente el recuerdo de un puente colgante de madera en una ciudad nacida al calor del hierro.