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El lugar de las obras en la vida del creyente, Según Santiago, en contraste

con la enseñanza de Pablo sobre la salvación por fe aparte de obras.

Versículos: Santiago 2:14-26

I. Propósito: Motivar a los creyentes en Cristo a ejercitar su fe mediante el


servicios a los demás.

II. Introducción:

La mayoría de los creyentes en Cristo se quedan turbados con este pasaje, pensando que

Santiago contradice a Pablo, quien en tantas ocasiones dice que un hombre es salvo y

justificado libremente, sin ninguna obra, sino a través de la fe en el Señor Jesucristo y Su

resurrección.

Algo que necesitamos poner en claro es que la Palabra de Dios nunca se contradice, por lo

tanto estaré explicando, cuando la fe en Cristo es considerada genuina, y como esa fe

genuina nos mueve a servir a los demás sin distinción alguna.


III. Problema 1: HABLAR DE UNA FE EN DIOS SIN LA EVIDENCIA DEL
SERVICIO, ES VANA. (Santiago 2: 14)

A. Explicaciones:

1. Trasfondo Bíblico: El autor de esta epístola se identifica con la frase, Santiago


Siervo de Dios y del señor Jesucristo, Santiago es un nombre común en el Nuevo
testamento, esta frase podía describir a cualquier cristiano, indicando que este
Santiago en particular debió ser un líder de la iglesia que no necesitaba más
presentación.

2. Trasfondo Bíblico: La salutación identifica a los lectores de Santiago como las


doce tribus que están en la dispersión. Algunos creen que esta epístola iba dirigida a
todos los judíos que vivían fuera de Palestina, a los cristianos y a los que no lo eran.

3. Contexto Bíblico: La epístola de Santiago es más práctica que doctrinal, no


obstante la Fe y las obras son los temas más importantes de Santiago del 2: 1-14,
muchos afirman que Santiago está hablando de la Fe genuina, legitima o verdadera,
frente a la fe falsa. Sin embargo no está considerando que sus lectores eran
creyentes genuinos, en todo momento los llama hermanos o hermanos míos.
4. Explicación:

Hermanos míos, ¿de qué aprovechará si alguno dice que tiene fe, y no tiene obras?
¿Podrá la fe salvarle? (versículo 14)

A la luz de la palabra Santiago está expresando a los creyentes o lectores de su carta, su


preocupación entorno a la fe, pues estos pensaban que la fe se limitaba a su relación con
Dios y no incluía una acción motivada por la misma.

B. Ilustración y aplicación:

1. Cita: "Porque como el cuerpo sin espíritu está muerto, así también la fe sin obras
está muerta" (Santiago 2:26).

Si en un momento determinado alguien se nos acerca con una necesidad específica, como
la necesidad de alimento o comida, y solo nos limitamos a darles buenas palabra de aliento,
entonces nuestra fe es muerta.

IV. Problema 2: UNA FE DE PALABRAS, SIN OBRAS. (Versículos 15-19)


15 Y si un hermano o una hermana están desnudos, y tienen necesidad del
mantenimiento de cada día,

16 y alguno de vosotros les dice: Id en paz, calentaos y saciaos, pero no les dais
las cosas que son necesarias para el cuerpo, ¿de qué aprovecha?

17 Así también la fe, si no tiene obras, es muerta en sí misma.

18 Pero alguno dirá: Tú tienes fe, y yo tengo obras. Muéstrame tu fe sin tus
obras, y yo te mostraré mi fe por mis obras.

19 Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y
tiemblan.

A. Explicaciones:

1. Contexto Bíblico: Aquí, Santiago se dispuso a tratar el tema de la identificación de


la fe (en los versículos 15 al 20). La fe que salva puede ser reconocida e identificada por
ciertas señales. Hay una verificación de la fe genuina. Y Santiago nos dejó una ilustración
práctica.

La verbosidad cristiana no constituye una evidencia de la fe que salva. Tiene que haber una
vocación, una inclinación que lo acompañe, algo más que las palabras. Uno puede parecer
muy piadoso si le dice a un individuo que va a orar por él, y que sabe que el Señor le
proveerá lo que necesite.

La palabrería, la verborrea no es una evidencia de una fe que va más allá de creer, hasta los
demonios creen y tiemblan.

B. Ilustración y aplicación:
1. Historia: Cuenta una historia, hombre que todo el mundo lo conocía como
cristiano (creyente en Cristo) siempre estaba predicando en las calles, hablando del
evangelio y llamando el arrepentimiento a los demás, se jactaba de ser un hombre que
practicada la piedad a través de sus palabras; un día estaba sentado en un restaurante en la
parte de la terraza, parecía degustar una de pizza riquísima, al terminarse el primer pedazo
de pizza, siguió comiendo de los demás pedazos y en ese momento se le acerca un joven
hambriento y le pide un pedazo de la rica pizza este responde con agresividad pidiéndole al
joven hambriento que se aleje.

Cuando nuestra fe solo se limita a nuestra condición de cristianos o creyentes, pasamos a


ser como este predicador, centrándose solamente en las buenas o bellas palabras de
convencimiento de pecado.

V. SOLUCIÓN 1: SIRVE A LOS DEMÁS MOTIVADO POR TU FE


(Santiago 2: 14)
A. Explicaciones:

1. Contexto Bíblico: Santiago dirige es sección a personas que han puesto en práctica
la fe autentica, la fe genuina producirá buenas obras de forma natural, ambas se
complementan, cuando alguien cree verdaderamente en una causa, esa creencia cambiara la
forma de vida.

Las obras son acciones que obedecerán al amor, Santiago expone en este versículo que la fe
en cristo se demostrara allá misma en el amor por los demás. Santiago no está
contradiciendo a Pablo (quien anuncia la salvación sólo por la fe (Romanos 3:28).
Al contrario, las propuestas de Pablo y de Santiago armonizan, se complementan (Romanos
3:31).
Pablo se refiere a las obras antes de ser salvos, que éstas de ningún modo podrían salvarnos
por sí solas, sin la fe correcta en Jesucristo las obras son vanas.

B. Ilustración y aplicación:
1. Parábola: El buen samaritano (Lucas 10:30-35)

30 Respondiendo Jesús, dijo: Un hombre descendía de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de


ladrones, los cuales le despojaron; e hiriéndole, se fueron, dejándole medio muerto.

31 Aconteció que descendió un sacerdote por aquel camino, y viéndole, pasó de largo.

32 Asimismo un levita, llegando cerca de aquel lugar, y viéndole, pasó de largo.

33 Pero un samaritano, que iba de camino, vino cerca de él, y viéndole, fue movido a misericordia;

34 y acercándose, vendó sus heridas, echándoles aceite y vino; y poniéndole en su cabalgadura, lo


llevó al mesón, y cuidó de él.

35 Otro día al partir, sacó dos denarios, y los dio al mesonero, y le dijo: Cuídamele; y todo lo que
gastes de más, yo te lo pagaré cuando regrese.

Santiago se refiere a alguien que “dice tener fe en Dios” pero que esta supuesta fe no se ve
reflejada con sus hechos (Tito 1:16).
La fe verdadera salva y al mismo tiempo produce buenas obras (Efesios 2:8-10).
Así que, la idea completa es: “No somos salvos por hacer buenas obras, pero somos salvos
para hacer buenas obras”

VI. Solución 2: LOS EJEMPLOS BÍBLICOS DE UNA FE EN SERVICIO.


(Versículos 15-26)

A. Explicaciones:

1. Contexto bíblico: Santiago muestra dos claros ejemplos para entender esto:
Un hermano con frío no sólo necesita las palabras de aliento sino que le demos lo necesario
para calentarse; Los demonios también creen y hasta tiemblan, pero no sirven a Dios.

Los demonios saben quién Dios es uno, pero no lo aman, este tipo de creencia no lleva al
amor, la sumisión y la obediencia, en su lugar, lo hace el odio la rebelión y la
desobediencia, Santiago llama Vano aquel que separa la fe de las obras, enseña claramente
la justificación por fe, capítulo 15 de génesis, que obviamente relaciona la concesión de la
justicia, es decir la salvación a la fe de Abraham.
La justificación por las obras a las que Santiago se refiere es diferente se da delante otras
personas, en otras palabras emplea la palabra justificado para decir probado.

La fe y las obras deben de ir juntamente, existe una relación estrecha entre las dos, la fe
produce obras y estas hacen perfecto, que significa maduro o completo.

B. Ilustración y aplicación:
1. Citas bíblicas: El Ejemplo de Abraham: Su Fe se evidenció al obedecer a Dios.
(Santiago 2:23-24); El Ejemplo de Rahab: Su Fe se evidenció al ayudar a los espías.
(Santiago 2:25-26)

Nuestras predicaciones no tendrán el efecto deseado si antes no estamos predicando con la


vida, las iglesias o congragaciones deben poner en orden de prioridad las cosas.

Antes que campañas y programas de evangelización, antes de salir a tocar puertas o entrar
en los autobuses a proclamar el evangelio, deben unirse en un solo amor y comenzar juntos
a predicar con la vida y el ejemplo, con fervor y a la vez con excelentes relaciones. Tal vez
las personas allá afuera pregunten: Quiero de esa Fe.

El servicio está en el mismísimo corazón del cristianismo verdadero. Cuando estuvo en la


Tierra, el Hijo de Dios dijo que había venido, no “para ser servido, sino para servir, y para
dar su vida en rescate por muchos.” (Mat. 20:28, Versión Moderna) Su vida está en fuerte
contraste con la actitud egoísta, ambiciosa, de tantas personas de hoy día a quienes no les
preocupan las necesidades de otros. Por medio de una vida de servicio desinteresado, Jesús
puso el modelo perfecto que deben copiar todos sus seguidores genuinos. La vida de
nosotros como creyentes en Cristo Jesús, se debe distinguir de los demás que no conocen a
Jesús por prestar servicio desinteresado a los necesitados motivado por nuestra fe en Cristo
manifestando la generosidad.

¡Que tu fé produzca en ti, servir a los demás!

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