667440

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artículo de investigación 2016
JFM 0010.1177 / 1098612X16667440 Revista de Medicina y Cirugía Felina Johnson et al.

Artículo original

Revista de Medicina y Cirugía Felina

Análisis de las mediciones radiográficas

1-7
© The Author (s) 2016 Reimpresiones y
permisos: sagepub.co.uk/
esplénicas felinas y su correlación con journalsPermissions.nav DOI: 10.1177 /
1098612X16667440 jfms.com

las mediciones ecográficas. Este documento fue manejado y procesado

por la American Editorial Office (AAFP) para
su publicación en JFMS

Kryssa L Johnson, Erin G Porter y Clifford R Berry

Abstracto
Objetivos El propósito de este estudio fue establecer un método para la medición esplénica felina en radiografías
abdominales y evaluar la correlación entre las mediciones radiográficas y las mediciones ecográficas.

Métodos Se evaluaron cien gatos con radiografías abdominales normales y estudios de ultrasonido (EE. UU.) Del bazo. La
hipótesis era que la medición del bazo en las radiografías se correlacionaría con la medición del bazo en la ecografía. Las
mediciones radiográficas y ecográficas se tabularon y compararon mediante regresión lineal y t- pruebas que utilizan
variaciones desiguales.
Resultados La medición del bazo en la proyección ventrodorsal se caracterizó como una de tres formas (A, B o C) y, por lo
tanto, se basó en la parte más gruesa del bazo (cuando se corrigió para el aumento radiográfico: A = 9,9 ± 2,2 mm; B = 8.1
± 1,8 mm; C = 8.0 ± 2,3 mm). Hubo 48 gatos donde la cabeza del bazo se vio en las proyecciones lateral derecha (n = 10),
lateral izquierda (n = 24) o ambas (n = 14). En un lateral izquierdo, se vieron tanto la cabeza como la cola del bazo. Hubo
una correlación débil entre las mediciones radiográficas y estadounidenses (R ⩾ 0,6). El grosor esplénico de la forma A en
la proyección ventrodorsal fue significativamente mayor que las categorías B y C.
Conclusiones y relevancia La medición radiográfica del bazo no es un indicador confiable de su medición ecográfica. Las
mediciones ecográficas vistas en este estudio (media de 8.0 ± 1,6 mm) fueron similares a las medidas del bazo
informadas en estudios anteriores. Es raro ver la cola del bazo en el felino lateral.
radiografías abdominales.

Aceptado: 2 de agosto de 2016

Introducción
El bazo felino se identifica y evalúa en radiografías como
una opacidad triangular de tejido blando ubicada caudal y
lateral al fondo gástrico y craneolateral al riñón izquierdo
en la proyección ventrodorsal. 1-3 La cantidad de bazo
visualizada en las radiografías ventrodorsales y su forma
es variable debido a su movilidad y otros factores, incluida
la condición corporal, la posición, el contenido gástrico y la
patología abdominal. La cabeza esplénica felina también
se puede evaluar radiográficamente en proyecciones
laterales, caudal y dorsal al fondo gástrico. 1,3
La evaluación radiográfica del tamaño esplénico es subjetiva y la
capacidad de identificar la cola del bazo en las proyecciones
laterales se utiliza a menudo como método para declarar la
esplenomegalia en el gato. La ecografía (EE. UU.) Se considera el
estándar de oro actual para evaluar el bazo, ya que permite
evaluar el tamaño, la forma y la ecotextura parenquimatosa.
Se han realizado dos estudios que evalúan mediciones
de diagnóstico por imágenes del bazo felino normal.
y ambos se centran en sus mediciones ecográficas normales y
su ecogenicidad. 4,5 El primer estudio estableció una línea de
base de 8.2 ± 1,4 mm para la altura esplénica en gatos antes
de la anestesia. 4 Un segundo estudio encontró que la altura
media de la cabeza esplénica era de 7,1 ± 1,2 mm, la altura
media del cuerpo fue de 9,3 ± 1,5 mm y la altura media de la
cola esplénica fue de 8,7 ± 1,5 mm. 5 Los métodos
radiográficos objetivos para medir el bazo felino y los valores
estándar no se han descrito en la literatura veterinaria.
Información disponible sobre la evaluación esplénica felina
Facultad de Medicina Veterinaria de la Universidad de Florida, Ciencias Clínicas de
Pequeños Animales, Gainesville, FL, EE. UU.
Autor correspondiente:
Erin G Porter DVM, DACVR, Universidad de Florida College
of Veterinary Medicine, Small Animal Clinical Sciences, 2015 SW
16th Avenue, Gainesville, FL 32610, EE. UU.
Correo electrónico: gordone@ufl.edu

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2 Revista de Medicina y Cirugía Felina

El tamaño se encuentra principalmente en libros de texto o manuales
publicados, que reflejan la experiencia clínica de los expertos.
El propósito de este estudio fue establecer un método
para las mediciones radiográficas del bazo y correlacionar
estas mediciones radiográficas con las mediciones
ecográficas del bazo. La hipótesis nula es que las
mediciones esplénicas no se correlacionarán entre las
radiografías abdominales y la ecografía abdominal.
Materiales y métodos
La búsqueda en una base de datos se realizó a través del
Sistema de información de radiología (Fuji Synapse; Fuji
Medical Systems) en la Facultad de Medicina Veterinaria de la
Universidad de Florida. Los criterios de inclusión consistieron
en gatos domésticos, mayores de 1 año, que se habían
sometido a radiografías abdominales y ecografía sin un
diagnóstico de esplenomegalia en ninguno de los estudios de
imagen. Los estudios radiográficos de abdomen consistieron
en tres proyecciones: lateral derecha (RL), lateral izquierda (LL)
y ventrodorsal (VD). Los criterios de inclusión también
requerían que el bazo fuera identificable en al menos la VD
con buen detalle del margen seroso y ausencia de patología
esplénica o adyacente radiográficamente aparente. Las
radiografías abdominales y las imágenes ecográficas se
revisaron y midieron en el sistema de comunicación y archivo
de imágenes (PACS; Merge Healthcare).
días entre sí, y se realizaron entre el 14 de octubre de 2013 y
el 27 de septiembre de 2015. Todos los estudios contenían
informes revisados por un Diplomado del Colegio Americano
de Radiología Veterinaria (ACVR) y solo se incluyeron estudios
sin mención de esplenomegalia en ambos informes. Ninguna
exclusión se basó en enfermedad previa / concurrente, sexo,
raza o estado de sedación.
Medidas radiográficas
Todas las radiografías se tomaron utilizando un sistema de
radiografía digital (Canon Imaging System, detectores de
radiografía digital CXDI-50G). Se desarrolló un protocolo para
medir consistentemente el grosor esplénico en las radiografías
mientras se aborda la variabilidad en la posición del bazo. Se
requirió que todos los casos tuvieran una porción identificable del
bazo para medir en la proyección VD, y si la cabeza o la cola eran
visibles en cualquiera de las proyecciones laterales, también se
midió. Todas las medidas se realizaron por consenso entre los tres
autores. Las mediciones se realizaron con calibradores digitales.
Cada medición del bazo se realizó con un método consistente
basado en una forma dada. Las formas del bazo como se ven en la
proyección VD se colocaron en una de las tres categorías posibles,
etiquetadas
A, B o C (Figura 1).
La forma A se asignó cuando el bazo se identificó únicamente
como una opacidad triangular de tejido blando, caudolateral a

Figura 1 Imágenes comparativas de las tres categorías de forma del bazo observadas en las radiografías de abdomen ventrodorsal. Forma A:
opacidad triangular de tejidos blandos, caudolateral al fondo gástrico y craneal al riñón izquierdo; se muestra sin (A) y con (B) una flecha que
indica cómo se realizó la medición. Forma B: dos estructuras opacas de tejido blando contiguas con una opacidad de tejido blando triangular
centrada entre ellas; se muestra sin (C) y con (D) una flecha que indica cómo se realizó la medición. Forma C: una forma fusiforme opaca de tejido
blando a lo largo de la pared del cuerpo con extremos ahusados; se muestra sin (E) y con (F) una flecha que indica cómo se realizó la medición

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Johnson y col. 3

Figura 2 Radiografías abdominales ventrodorsal colimadas que muestran las tres categorías diferentes de forma del bazo antes y después de
que se realizaran las mediciones del bazo con calibradores digitales.

el fondo gástrico y craneal al riñón izquierdo. El triángulo se
midió en su punto más ancho, en mm, perpendicular a su eje
largo del bazo. La forma B se asignó cuando el bazo se veía
como dos estructuras de tejido blando contiguas con una
opacidad triangular de tejido blando centrada en el centro,
representativa de la cabeza y el cuerpo esplénicos a medida
que se curvaban y se superponían a lo largo de la pared del
cuerpo. La medida se realizó en mm en el punto más ancho
del triángulo, perpendicular a su eje mayor. La forma C se
asignó cuando el bazo se veía como un tejido blando,
forma fusiforme a lo largo de la pared del cuerpo con
extremos ahusados. La medida se realizó en mm, en su punto
más ancho, perpendicular al eje mayor (Figura 2).
En las proyecciones laterales derecha e izquierda, se
registró y midió la presencia o ausencia de la cabeza y la
cola esplénicas cuando eran visibles. La cabeza esplénica
se veía como una forma ovalada alargada, caudal al fondo
gástrico y craneal a los riñones. La medida de la cabeza
esplénica se realizó midiendo perpendicular al eje mayor,
en su punto más ancho (Figura 3).

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4 Revista de Medicina y Cirugía Felina
figura 3 Radiografías colimadas del abdomen lateral izquierdo antes y después de realizar la medición de la cabeza esplénica utilizando
calibradores digitales
Figura 4 La medición ecográfica del bazo se realizó
retrospectivamente cuando la imagen de medición original no se
salvado. Craneal está al lado izquierdo de la imagen y caudal está a la
derecha. Imagen de ultrasonido del bazo capturada con un
transductor lineal. La forma esplénica y la ecotextura están dentro de
los límites normales. Las mediciones se realizaron registrando el
grosor del bazo, en su punto más ancho, perpendicular al eje largo.
Para estimar el aumento retrospectivamente, se estimó
que el grosor promedio de un abdomen felino era de 8 cm, y
se estimó que el bazo felino estaba posicionado en la parte
media del abdomen, a 4 cm de la mesa. A continuación, se
realizó una radiografía de una moneda, con la moneda
colocada sobre una esponja de posicionamiento radiográfico,
a 4 cm de la mesa para imitar la ubicación del bazo. La imagen
radiográfica del cuarto se midió tres veces utilizando
calibradores digitales, y se determinó que el promedio de las
tres medidas era el tamaño de la imagen (26,6 mm). El
diámetro real de un cuarto es
24,26 mm. El factor de aumento se calculó dividiendo el
diámetro de la imagen por el diámetro del objeto y se
determinó que era 1,08.
Medidas ecográficas
Todas las ecografías abdominales (iU22; Philips Medical)
fueron realizadas por un diplomado en ACVR o un residente
de radiología en formación, utilizando un transductor
curvilíneo (C8-5MHz) o lineal (L12-5 MHz). El grosor del bazo
(denominado 'altura' en otros estudios) en EE. UU. Se midió en
la imagen capturada, en su punto más ancho,
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con el bazo en eje corto. Las imágenes capturadas se
basaron en la parte media del cuerpo del bazo. Los datos
de EE. UU. Para el estudio se derivaron de la imagen
capturada con la medición creada por el ecografista o, en
caso de que la medición no se guardara, tomando la
medición en la imagen capturada mientras se ve la imagen
en PACS. Si los autores no estaban de acuerdo con la
medición guardada, se repitieron las mediciones (Figura 4).
Recogida y análisis de datos
Los datos se tabularon y analizaron utilizando Microsoft Excel.
Se utilizó un total de 100 casos. Se calcularon y registraron el
promedio y la DE de cada tipo de medición radiográfica (forma
A, forma B, forma C, cabeza RL, cabeza LL) y las mediciones de
EE. UU. Se usó regresión lineal para observar la relación entre
cada forma esplénica radiográfica (A, B o C) y la medición de
EE. UU., Entre la medición esplénica más gruesa de cada
proyección radiográfica y la medición de EE. UU. Y entre todas
las mediciones de VD del bazo (independientemente de la
categoría) y se estimaron las mediciones de EE. UU. antes y
después de la ampliación radiográfica. Un coeficiente de
correlación (R)
⩾ 0.8 se consideró una fuerte correlación. Un independiente t-
Se realizó una prueba con varianzas desiguales (prueba de
Welch) entre las formas del bazo: A y B, B y C, C y A. Se evaluó
la frecuencia de identificación de la cabeza esplénica en las
proyecciones laterales y se realizó un análisis de regresión
lineal para comparar las medidas de la cabeza esplénica
(derecha e izquierda) con las medidas de EE. UU. Un
independiente t- También se realizó una prueba con
variaciones desiguales entre las medidas de la cabeza
esplénica derecha y la cabeza esplénica izquierda. A PAG valor
<0,05 se consideró significativo.
Resultados
Los gatos tenían edades comprendidas entre 1 y 20,5 años
con una edad media ( ± SD) de 9.2 ± 4,8 años y una mediana de
9,3 años. De las 100 mediciones esplénicas de VD, la
mayoría se clasificó como forma B (52 casos), seguida de
forma A (27 casos) y forma C (21 casos). Después
Johnson y col. 5

tabla 1 Media radiográfica y ecográfica (EE. UU.) Tabla 3 Varianza desigual t- prueba entre diferentes
mediciones con SD mediciones radiográficas

Tipo de Significar ± SD (mm) Significar METRO ± SD (mm) * Comparación PAG valor* PAG valor METRO†

medición
De la A, a la B 0,0006 0,0006
Forma A 10,7 ± 2.4 9,9 ± 2.2 BaC 0,8 0,8
Forma B 8.7 ± 1,9 8.1 ± 1.8 AaC 0,004 0,004
Forma C 8,6 ± 2.4 8.0 ± 2.3 Cabeza RL a cabeza LL 0,1 0,1
Todo VD 9.2 ± 2.3 8,6 ± 2.2
Cabeza RL 8,6 ± 2.1 8.0 ± 2.0 A, B y C según la forma del bazo ventrodorsal
*< 0.05 nivel de significancia
Cabeza LL 7.7 ± 2.2 7.1 ± 2.0 † PAG valor METRO representa el PAG valor adquirido usando medidas

nosotros 8.0 ± 1,6 - ajustadas para aumento

RL = lateral derecho; LL = lateral izquierdo
Las formas A, B y C representan la media ± SD de sus respectivas formas
en la vista ventrodorsal (VD)
* Significar METRO ± SD indica la media ± SD adquirido tras el ajuste de aumento
registrado midiendo perpendicular al eje largo en su
Todos VD = media ± SD de todas las mediciones radiográficas de VD; RL = media punto más ancho.
± DE de las medidas de la cabeza esplénica lateral derecha; LL = media Todo el valor R o PAG los valores fueron los mismos antes y
± DE de las medidas de la cabeza esplénica lateral izquierda; EE. UU. = Media ± SD del bazo en
después de contabilizar el aumento radiográfico. No se
todas las imágenes de EE. UU.
encontró una correlación estadísticamente significativa entre
ninguna de las mediciones radiográficas y estadounidenses (R
Tabla 2 Coeficientes de correlación ( R) comparar las
⩽ 0,6). La relación de la forma A y la medida de EE. UU. Tuvo la
relaciones entre radiografía y ultrasonido (EE. UU.)
correlación más alta (R = 0,6) (Tabla 2).
mediciones
Muestras independientes t- Se realizaron pruebas con
Relación R valor R valor METRO* varianzas desiguales entre las diferentes formas esplénicas A (n =
27), B (n = 52) y C (n = 21) para probar la hipótesis nula de que no
Todos VD vs EE. UU. 0.4 0.4 eran estadísticamente diferentes en tamaño (Tabla 3). Las
Más grueso vs EE. UU. 0.4 0.4
muestras independientes t- Los resultados de la prueba mostraron
Forma A vs EE. UU. 0,6 0,6
una diferencia estadística entre las mediciones de la categoría A y
Forma B vs EE. UU. 0.4 0.4
la categoría B ( P = 0,0006), así como entre medidas de categoría A
Forma C vs EE. UU. 0,2 0,2
y C ( P = 0,004). Sin embargo, la relación entre las categorías B y C
RL vs EE. UU. 0,2 0,2
fue similar y no significativamente diferente ( P = 0,8). Muestras
LL vs EE. UU. 0,1 0,1
independientes t- También se realizó una prueba con variaciones
Las formas A, B y C se basan en la forma del bazo en la imagen desiguales para comparar las mediciones radiográficas de la
ventrodorsal (VD) cabeza esplénica RL y la cabeza esplénica LL. No hubo una
RL = lateral derecho; LL = lateral izquierdo
diferencia significativa entre estas medidas ( P = 0,12).
*R valor METRO representa el R valor adquirido usando medidas
ajustadas para aumento

se tuvo en cuenta el aumento radiográfico, la media ( ± SD) Discusión

el grosor de todas las mediciones de VD fue de 8,6 ± 2.2
mm. La media ( ± SD) VD El grosor del bazo por forma fue
A = 9,9 ± 2,2 mm, B = 8,1 ± 1,8 mm y C = 8,0 ±
2,3 mm. El significado ( ± DE) el grosor de la cabeza esplénica
fue de 8,0 ± 2,0 mm en el RL y 7,1 ± 2,0 mm en el LL. El
significado ( ± SD) el grosor medido en EE. UU. Fue de 8,0 ±
1,6 mm (Tabla 1).
El bazo se identificó solo en la proyección VD en 52
gatos y en más de una proyección en 48 gatos. De esos 48
gatos, la cabeza esplénica se identificó solo en el lateral
izquierdo y VD en 24 gatos, solo el lateral derecho y VD en
10 gatos y ambos laterales y el VD en 14 gatos. Por tanto,
de los casos en los que se pudo visualizar la cabeza
esplénica en el lateral, se pudo ver en el lateral izquierdo
en 38 gatos (79%). En una sola imagen, una lateral
izquierda, se visualizaron juntas la cabeza y la cola
esplénicas. Se realizó una medición del grosor de la cola y
Los resultados de nuestro análisis aceptaron la hipótesis
nula y no mostraron una fuerte correlación entre ninguna
de las mediciones radiográficas y ecográficas del bazo.
Nuestro estudio también mostró que medir el bazo en
proyecciones VD como forma A no es equivalente a medir
el bazo como forma B o C. Las formas B y C, sin embargo,
tenían un grosor similar. Las categorías de formas se
crearon basándose en un patrón repetido observado por
los autores. El cuerpo largo y estrecho del bazo del gato
con el ensanchamiento de la cola distal (conocido como
'forma de cuchara') y la movilidad crea diferentes áreas en
las que el bazo puede doblarse sobre sí mismo, creando
las formas únicas de tejido blando que se vieron. Las
discrepancias entre la forma A y las formas B y C se deben,
en gran parte, al posicionamiento y al plegamiento del
bazo, y se forma la opacidad medible de los tejidos
blandos.

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6 Revista de Medicina y Cirugía Felina
cuerpo, con la cabeza esplénica colocada dorsalmente y
sumando una porción del cuerpo esplénico. Ambas formas B y
C se deben a la suma tisular del cuerpo esplénico a lo largo del
eje longitudinal a medida que viaja caudalmente a lo largo de
la pared corporal. Por lo tanto, se sospecha que el aumento
del grosor de las mediciones en la categoría A en relación con
B y C se debe a un grado de suma y plegamiento más que al
grosor real del bazo.
La medida promedio de EE. UU. De 8.0 ± 1,6 mm (rango
5,0-11,2 mm) en este estudio fue similar a la establecida en
gatos normales por estudios previos: 8,2 ± 1,4 mm (rango
5,3-11,1 mm) 4 y 7.1 ± 1,19 mm (rango de 5,1 a 9,1 mm). 5
En comparación con las mediciones de EE. UU. Esplénicas del
primer estudio, solo dos gatos, con mediciones de 11,1 y
11,2 mm, superan el rango de dos SD (5,4–11,0 mm); y
solo tres gatos con medidas de 4.3, 5.0 y 5.0
mm, respectivamente, cayeron por debajo del rango. 4
Se han realizado múltiples estudios que evalúan la enfermedad
esplénica felina y las características de diagnóstico por imagen
asociadas; sin embargo, estos estudios no definen los criterios
utilizados para describir la esplenomegalia en el gato. 6-10 El
diagnóstico del bazo felino como agrandado en la ecografía a
menudo se ayuda mediante el uso del límite superior de 10 mm y
la opinión subjetiva del observador de su forma, marginación y
ecogenicidad. Este límite de 10 mm se suele citar como la opinión
del autor o como referencia al primer estudio sobre la medición
del bazo en EE. UU. En felinos. 1,11 En el segundo estudio sobre la
medición de los EE. UU. Felinos, los autores sugieren utilizar 9,1
mm como límite superior de la normalidad para la altura o el
grosor de la cabeza esplénica en el EE. UU.
De los casos en los que se pudo identificar la cabeza esplénica
en una proyección lateral, fue 1,5 veces más probable que la
cabeza se visualizara en el lateral izquierdo que en el lateral
derecho. Esto no es sorprendente porque la cabeza esplénica se
fija en la cavidad abdominal izquierda a través del ligamento
gastroesplénico. 1,2,12
Por lo general, la identificación de la cola esplénica en una
proyección lateral es anormal y se considera sugestiva de
esplenomegalia. 13 Nuestros hallazgos apoyan el concepto de
que es raro ver la cola esplénica en una proyección lateral
(1%), pero según el diseño de nuestro estudio, no podemos
concluir que ver la cola esplénica en una proyección lateral se
correlacione con la esplenomegalia. Solo hubo una proyección
en la que se identificaron simultáneamente la cabeza y la cola
esplénicas, y ocurrió en el lateral izquierdo. El gato tenía
obstrucción uretral y una vejiga urinaria marcadamente
distendida, lo que provocaba un desplazamiento hacia la
derecha del colon descendente. Es posible que la cola del bazo
se identificara más fácilmente debido al desplazamiento de la
cola esplénica de la vejiga urinaria distendida.
Un posible factor que contribuye a nuestra incapacidad
para identificar una correlación entre las mediciones
radiográficas y ecográficas del tamaño esplénico es la falta
de un método estándar para medir el bazo en radiografías
basadas en las diferentes posiciones esplénicas vistas en
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la imagen VD. Esto presentó un desafío al realizar
mediciones esplénicas radiográficas retrospectivas. La
categorización de las formas esplénicas en la proyección
VD fue útil para mantener la consistencia de dónde medir
la porción más gruesa del bazo en la imagen VD. Es cierto
que existe subjetividad en el proceso de medir el bazo
felino en las radiografías, y es probable que exista
variabilidad intra e interobservador al realizar las
mediciones. Estos no se probaron en este estudio.
Como limitación adicional, la naturaleza retrospectiva de
este estudio confundió nuestra capacidad para explicar el
aumento radiográfico, ya que los marcadores de aumento no
se incluyen de forma rutinaria en la colimación de las
radiografías abdominales en nuestra institución. La técnica
utilizada en este estudio proporciona solo una estimación
aproximada del verdadero aumento radiográfico. En realidad,
existe una variabilidad en el aumento según el tamaño del
paciente y la posición del paciente (LL, RL o VD). Debido a que
la magnificación debería afectar todas las mediciones
radiográficas de manera similar dentro de cada paciente, no
esperaríamos que los valores comparativos entre las
mediciones radiográficas se vieran afectados. Sin embargo, El
efecto de la ampliación debe tenerse en cuenta al evaluar las
mediciones radiográficas absolutas del bazo y al hacer
comparaciones entre las mediciones radiográficas y
ecográficas. Dicho esto, la correlación entre las mediciones
radiográficas y ecográficas no mejoró cuando se tuvo en
cuenta el aumento radiográfico.
Aunque el tamaño de la muestra de 100 casos ayuda a explicar los valores atípicos anormales,
la muestra solo es representativa de una población de gatos atendidos por el hospital con bazos
que eran visibles en las proyecciones radiográficas de VD, y no necesariamente gatos sanos. En los
casos excluidos, la mayoría de las razones por las que no se pudo identificar el bazo en la
proyección VD fueron el borrado del borde con derrame peritoneal, una disminución en el detalle
del margen seroso debido a una condición corporal delgada y una cirugía reciente que condujo a
derrame y gas peritoneal mixto, masa abdominal y distensión del lumen gástrico. Estas razones
también llaman la atención sobre el hecho de que las radiografías abdominales incluidas en este
estudio no fueron todas estudios normales, sin patología. Además, la citología o histopatología
esplénica no fueron criterios de inclusión para este estudio. Los estudios de imágenes no se
incluyeron si se había diagnosticado esplenomegalia en el informe de imágenes; sin embargo, no se
hicieron más esfuerzos para asegurar que los bazos evaluados en este estudio estuvieran ausentes
de la enfermedad. Por lo tanto, debe tenerse en cuenta que los hallazgos de este estudio no son
representativos de una población felina normal y sana y que los datos no pretenden proporcionar
un intervalo de referencia normal para el tamaño esplénico. Estos datos proporcionan un ejemplo
representativo de las apariencias radiográficas y ecográficas variables de los bazos felinos en
nuestro hospital universitario durante un período de tiempo determinado. población felina sana y
los datos no pretenden proporcionar un intervalo de referencia normal para el tamaño esplénico.
Estos datos proporcionan un ejemplo representativo de las apariencias radiográficas y ecográficas
variables de los bazos felinos en nuestro hospital universitario durante un período de tiempo
determinado. población felina sana y los datos no pretenden proporcionar un intervalo de
referencia normal para el tamaño esplénico. Estos datos proporcionan un ejemplo representativo
de las apariencias radiográficas y ecográficas variables de los bazos felinos en nuestro hospital
universitario durante un período de tiempo determinado.
Johnson y col.
El estado de sedación no se consideró como parte de los
criterios de inclusión en este estudio. En el primer estudio que
midió los bazos felinos en EE. UU., El sevoflurano como único
método de anestesia general condujo a un aumento
estadísticamente significativo en la altura, el ancho y el área
transversal del bazo felino. Sin embargo, los cambios se
consideraron mínimos y se cuestionó si eran clínicamente
relevantes. 4 Se han realizado estudios para demostrar la
esplenomegalia canina secundaria a agentes anestésicos con
resultados variables. 14-16 No sería justo hacer suposiciones
similares sobre el bazo felino, ya que las diferencias
histológicas y fisiológicas en el bazo felino pueden alterar su
respuesta a la sedación. Teóricamente, si el tamaño del bazo
se alterara debido a la sedación, esa proporción de cambio
sería la misma en las mediciones radiográficas y ecográficas
en aquellos gatos en los que los estudios de imagen se
realizaron consecutivamente con una dosis de sedación y, por
lo tanto, no afectaría la grado de correlación entre los dos.
Debido a los métodos variables de sedación utilizados en los
gatos y la naturaleza retrospectiva de este estudio, no
pudimos clasificar de manera confiable los casos en función
del estado de sedación.
Conclusiones
Este estudio no detectó una correlación significativa entre las
mediciones radiográficas y ecográficas del bazo. En este
estudio, hemos establecido tres categorías de formas básicas
para identificar radiográficamente el bazo felino en la imagen
VD. El aspecto esplénico radiográfico y el método de medición
en gatos determinados por este estudio pueden servir como
comparación para estudios futuros. Más estudios de la
medición radiográfica del bazo felino serían beneficiosos para
establecer un método estándar. Las medidas estadounidenses
esplénicas promedio encontradas en este estudio son
similares a las encontradas en estudios anteriores de una
población felina normal.
Conflictos de interés Los autores declararon no tener ningún
conflicto de intereses potencial con respecto a la investigación, autoría
y / o publicación de este artículo.
Fondos Los autores no recibieron apoyo financiero para la
investigación, autoría y / o publicación de este artículo.
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7
Referencias
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libro de radiología diagnóstica veterinaria. 6ª ed. Filadelfia, PA:
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Kealy JK, McAllister H y Graham JP (eds). Radiología diagnóstica
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Elsevier, 2011, págs. 23–198.
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anatomía radiográfica del perro y el gato. Oxford: Blackwell
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4 Reese SL, Zekas LJ, Iazbk MC, et al. Efecto de sevoflu-
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Spangler WL y Culbertson MR. Prevalencia y tipo de
enfermedades esplénicas en gatos: 455 casos (1985-1991). J Am Vet
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