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TRABAJO PRÁCTICO

Neuropsicología y Psicosomática

Patología: Hipertensión Arterial

Descripción:

Patología plurideterminada en la que influyen factores bio-psico-sociales.


Se la ubica entre los trastornos Cardiovasculares.
Consiste en una elevación crónica de la presión de la sangre en las arterias, aumento que se refleja
tanto en la presión sistólica como en la distólica (OMS). El hipertenso presenta un aumento del nivel de
excitabilidad adrenérgica que conlleva, tanto una acción directa sobre los vasos renales como una
secreción aumentada de adrenalina y noradrenalina.
Por otra parte, el nivel de arousal que la tensión emocional conlleva, somete a una activación
permanente a la red interneuronal que constituye la formación reticular, lo que da lugar, a la estimulación
hipofisiaria, tanto de su lóbulo posterior (corticotrofina y somatotrofina), al mismo tiempo que se altera el
metabolismo de las monoaminas cerebrales (serotonina, dopamina, noradrenalina, normetanefrina, etc.)
que en definitiva son aminas depresoras.
La hipertensión puede ser debida, tanto a un aumento del rendimiento cardíaco sin elevación de la
resistencia vascular o viceversa. Pero también puede ser la causa, un aumento de la resistencia vascular
perisférica que produce secundariamente elevación del débito cardíaco y mutuo refuerzo consiguiente. Lo
cierto es que los enfermos comienzan por sufrir labilidad tensional y acaban en la hipertensión permanente.
Se produce en enfermos con estado permanente de tensión emocional. Aunque sigue siendo desconocido
desde el punto de vista neurofisiológico.
La investigación psicológica ha llegado a establecer un tipo esencial de conflicto que da razón casi
específica del trastorno. El hipertenso, que es al mismo tiempo cefálico, es un sujeto que inhibe y controla
constantemente sus reacciones emocionales, y añade que la inhibición conciente y voluntaria de la tensión
emocional –que tiene por base la agresividad y la ansiedad- hace que estas no encuentren una salida o
solución aceptable para el sujeto (agresividad sexual, laboral, profesional) y determine una activación cada
vez más permanente de los mecanismos psicofisiológicos que se responsabilizan de la elevación de la
tensión. El hipertenso tiene los siguientes rasgos: inhibición de las tendencias hostiles y agresivas, lo que
siguiendo el camino de una derivación psiconeurofisiológica, eleva el tono de las arteriolas; incapacidad de
expresar sentimientos negativos, dando la impresión en ocasiones de ser personas afables y tranquilas
cuando en su intimidad albergan fuertes contenidos de cólera y mal humor; son sujetos sexualmente
inhibidos, ansiosos, culpables y con sentimientos de inferioridad, lo que conlleva una especie de
enfriamiento y parálisis afectiva, junto a una necesidad de autoafirmación y reconocimiento.

Patrón dinámico específico de la HTA:


1. Tendencias hostiles de competencia.
2. Intimidación debida a la represalia y al fracaso.
3. Aumento de las ansias de dependencia.
4. Sentimientos de inferioridad.
5. Reactivación de la competencia hostil.
6. Ansiedad e inhibición resultante de los impulsos agresivos hostiles.
7. HTA.

Bernsheimer ha recogido las frecuencias de las diferentes formas de Hipertensión:


 Hipertensión esencial: 79%
 Hipertensión renal: 14%
 Hipertensión endocrina: 3,5%
 Hipertensión cardiovascular: 2%
 Hipertensión neurógena: 0,6%
En caso de una predisposición reactiva individual, marcada por la biografía de la persona, las
influencias del entorno pueden actuar como situaciones desencadenantes de los cambios en la presión
arterial. En el primer estadio de la hipertensión, las oscilaciones de situación de la presión arterial parecen
depender de la altura, la duración y la frecuencia de las reacciones vasoconstrictoras, constituyendo un
riesgo cada vez mayor con respecto al desarrollo de una hipertensión estable.

Factores de Riesgo:

 Factores genéticos: Importantes porque existen familias con HTA persistentes en varias
generaciones
 Edad: La Tensión Arterial tiende a aumentar con la edad, principalmente la TA sistólica.
 Sexo: La HTA es más frecuente en el sexo masculino, aunque a partir de la menopausia el número
de mujeres hipertensas iguale al de los hombres.
 Dieta: Estudios muestran que sujetos con dietas ricas en sal tienen mayor propensión a la HTA.
 Tabaquismo: Es considerado factor de riesgo importante en enfermedades cardiovasculares y
cerebro vasculares.
 Consumo de Alcohol: Niveles elevados de alcohol y cafeína están asociados con niveles elevados
de TA.
 Obesidad y sedentarismo: El exceso de peso corporal es responsable de los niveles más elevados
de presión arterial.
 Factores psicológicos y estrés: El estrés, el tipo de personalidad y los factores psicológicos están
asociados a la adopción de estilos de vida, que a su vez, están relacionados con la HTA y las
enfermedades cardiovasculares. Especial mención refiere el patrón de conducta Tipo A. Estudiado
desde hace 20 años por especialistas diversos del ámbito de la salud.

Patrón de Conducta Tipo A y el estudio de su relación con la enfermedad coronaria . Friedman y


Rosenman refieren, en su estudio sobre este patrón conductual, que la primera observación de un posible
vínculo entre las características de personalidad y el riesgo de enfermedades cardíacas fue hecha por dos
cardiólogos sobre una base clínica. Las observaciones mostraron que muchos pacientes jóvenes que
padecían problemas cardíacos tenían una constelación peculiar de características conductuales que
incluye esfuerzo competitivo de logro, un sentido de urgencia temporal y agresividad. Observaciones
posteriores llevadas a cobo en investigaciones de laboratorio, confirmaron que los sujetos que puntúan alto
en conducta tipo A tendían a solucionar más problemas, a trabajar a niveles más cercanos a los limites de
su resistencia, manifestaban menos cansancio, conducta mas impaciente y respondían con mayor
hostilidad cuando se los provocaba o se frustraban. Estas investigaciones dejaron en evidencia que el
componente de hostilidad del patrón de conducta Tipo A parece ser el más dominante. En cuanto a esto,
parece comprensible la relación entre hostilidad reprimida y el creciente riesgo de enfermedades
coronarias.

Personalidad

Los estudios de Alexander, quien describió la aparición de una hipertensión combinada con el deseo de
manifestar abiertamente las enemistades, teniendo al mismo tiempo la necesidad de observar un
comportamiento pasivo y adaptado, fueron seguidos en un gran número de estudios acerca de la estructura
de personalidad del hipertenso. Su comportamiento social está excesivamente adaptado, es
condescendiente, orientado a alcanzar el máximo rendimiento, pasivo y con tendencia a evitar los
conflictos, caracterizándose por la contención de las pasiones positivas y negativas.
La estructura familiar de un integrante familiar hipertenso se manifiesta, por ejemplo, en el conflicto
entre impulso agresivo y dependencia del hipertenso, afectando el comportamiento interactivo de toda la
familia. En cada familia se forman reglas entre padres e hijos, según las cuales se forman los conflictos. En
las familias con padres hipertensos, los niños no aprenden cuales son las posibilidades efectivas para
afrontar y superar un conflicto, tal y como lo demuestra el gran peso de la comunicación negativa-no verbal
(no se dan respuestas, se agacha la cabeza y se evita el conflicto visual). Múltiples estudios indican que la
limitada percepción de los conflictos y el estrés, además de la tendencia a evita los conflictos están
relacionados con la aparición de la hipertensión. Representan formas de comportamiento que los niños
aprenden en el proceso de socialización.
El comportamiento interactivo dentro de la familia parece caracterizarse por una prohibición para hablar
o comunicarse, que llega hasta comprometer el ámbito de lo no verbal, aumentando el peso de las
actividades de recepción, observación, control y contención, mientras que las manifestaciones de entrega,
participación y confianza aparecen raras veces.

Las condiciones para el tratamiento del hipertenso se caracteriza por:

 Poca motivación, ya que por lo general solo se quejan de dolencias subjetivas de poca
importancia.
 Buenas posibilidades de tratamiento medicamentoso.
 Factores de la personalidad, que se destacan por un conflicto entre agresividad-dependencia, la
cual puede producir tensiones en la relación médico paciente, que se manifiesta sobre todo en l
falta de rigor en la ingesta medicamentosa.
 Según las normas de la OMS, el primer paso para el tratamiento de la HTA es modificar el estilo
de vida, Aún en la hipertensiones moderadas y severas, la terapia medicamentosa no debe ser
aislada; debe acompañar a una modificación del estilo de vida. La OMS recomienda una dieta
alimentaria saludable, rica en frutas, verduras y cereales, y pobre en grasas saturadas. También
recomienda una reducción de la ingesta de sal hacia valores de aproximadamente 6 g de clorato
de sodio. Por último señala el aumento del ejercicio físico, abstinencia del tabaco y abandono
del consumo de alcohol.

Bibliografía

 Plosas, Boris. “El enfermo psicosomático en la práctica”.


 Martinez Pina. “Patología Psicosomática. Trastornos psicosomáticos en la Clínica Médica”.
 Alexander, Franz. “Medicina Psicosomática: sus fundamentos y aplicaciones”
 Lawrence Pervin. “La Ciencia de la Personalidad”

Alumno: Martín Pasquini – Comisión D – Turno tarde – 2do año – Lic.en Psicología

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