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UNIDAD Nº 4
LA DEMANDA COMERCIAL
1. INTRODUCCIÓN
El mercado es clave para toda inversión que se hace con la intención de generar
ingresos y ganancias. La medida de la demanda para un producto o servicio será la
cantidad de personas que lo compran o hacen uso del mismo. Ningún proyecto
destinado a la generación de ingresos puede sostenerse a sí mismo si no consigue
responder a las demandas del mercado. Esto significa que, cuando se elabora un
producto o se presta un servicio y se lo coloca en el mercado, el producto debe
cumplir con las características que los usuarios buscan, en términos de volumen,
precio, embalaje, calidad, y oferta estacional, entre otros factores. Si esto se
consigue, el producto o servicio se vende y el dinero generado se emplea para
continuar con las operaciones y para cubrir los costos de la inversión.
Las tareas necesarias para evaluar la demanda del mercado varían, dependiendo del
tipo de producto o servicio analizados. Se pueden identificar cuatro categorías
generales de bienes y servicios, cada una presenta sus propias características y
requiere un enfoque distinto para evaluar la demanda. Estas categorías son:
Los productos especializados pueden incluir productos con ventas limitadas (en
donde no hay muchos competidores debido al tamaño reducido del mercado) o
pueden ser productos que cuenten con mercados bastante sustanciales. En este
caso, a diferencia de los productos básicos los compradores se fijan en las
diferencias en el sabor, calidad y durabilidad que existe entre los productos que
están en competencia.
Los productos especializados pueden ser una mermelada, una camisa o, incluso, un
carro, si se manufactura un carro, no se puede suponer que simplemente se le puede
poner el mismo precio que a un Toyota y vender tantos cuantos sea posible. De
hecho puede suceder que no se vendan siquiera a la mitad del precio de un Toyota,
porque, para el consumidor el carro producido por usted y el Toyota no son lo mismo.
4. LA ESTACIONALIDAD DE LA DEMANDA
Por tanto se conoce como demanda estacional al interés de compra que muestran
los consumidores por un producto o servicio durante una determinada parte del año.
Por ejemplo, los trajes de baño, tienen demanda estacional durante el final de la
primavera y el principio del verano.
Por lo tanto, el gran desafío es conseguir gestionar su flujo de fondos para no gastar
todo el dinero de una sola vez y necesitar de capital de trabajo para sobrevivir a los
períodos de baja. Así, las empresas que tienen estacionalidades muy acentuadas,
Sea enjuto: Esto quiere decir, si su negocio tiene estacionalidad, busque una
estructura que le permita flexibilidad. Esto implica disminuir costos fijos con
alquileres, empleados o compra de materia prima. Por ejemplo, para muchos hoteles
vale la pena tener un pequeño equipo fijo y contratar por temporada, aunque salga
más caro el resto del equipo.