ESCUELA DE PSICOLOGÍA MAGÍSTER PSICOLOGÍA DEL TRABAJO Y DE LAS ORGANIZACIONES PERSONAS Y PROCESOS I
ARTÍCULO DE VON FOERSTER: PRINCIPIOS
DE AUTOORGANIZACIÓN EN UN CONTEXTO SOCIOADMINISTRATIVO
DOCENTE GUIDO DEMICHELI
ESTUDIANTE DANIELA GALAZ
VALPARAÍSO, 24 DE MAYO DE 2019
Tome UNA IDEA, aquella que les resulte más "útil" en tanto les ilumina algún aspecto de sus propias prácticas personales y realidades organizacionales y la desase calificará según: claridad de la relación establecida entre lo conceptual del artículo - situación descrita y la apropiada articulación lógica entre ambas cosas.
Von Foerster (1984) al inicio de su artículo, en dónde analiza perspectivas de autores
que han producido conocimiento en torno a los principios de autoorganización, destaca la siguiente cita: “En tanto administradores debemos [...] aprender a ser lo que realmente somos: no hacedores y caudillos, sino catalizadores y cultivadores de un sistema auto organizador en un contexto en evolución”. Esta cita me parece muy esclarecedora y destaca la trascendencia de la propuesta epistemológica.
El posicionamiento del “Administrador” en el texto como un elemento del sistema que
esta administrando, se extrapola a nuestro propio rol, permite ampliar la mirada a la aplicación de las percepciones y actos “organizacionales” (ya no sólo administrativos) en uno mismo. Destaca que, en consecuencia, la administración o para los términos actuales como la gestión, es un concepto autológico, es decir, que cumplen con la condición de que su significado se puede aplicar a sí mismos.
Cuando se realiza la bajada de la concepción autológica al quehacer profesional, se
aplica una epistemología cibernética de segundo orden en la que se puede hacer uso de la reflexividad como herramienta que permita el mejoramiento del ejercicio profesional (desde la eficacia, eficiencia, ética, entre otras). Si a esto se le adiciona que cada participante (ya no solo nosotros) en un sistema administrativo autoorganizado, es también un organizador del sistema (heterarquía) entonces, cada uno de los integrantes de un equipo de trabajo, realizan este mismo ejercicio reflexivo. Esto permite mejorar, a su vez, el adecuado funcionamiento del sistema pues, aumenta el número de alternativas del proceder en diversas situaciones.
Esta propuesta la visualizo especialmente en equipos de trabajo multidisciplinarios, en
dónde se pueden maximizar las alternativas de proceder, justamente en la riqueza de sus diferencias de formación profesional. Es importante al ser el “organizador” de un equipo con estas características dar la posibilidad, potenciar el ejercicio reflexivo de cada uno de los participantes y dar cabida a la expresión de las mismas en dinámicas de equipo. Otorgar injerencia en los ajustes del proceder general, para cataliza alternativas, mejorar y crecer como equipo. Me tocó en una oportunidad liderar un equipo de trabajo en que cada integrante pertenecía a disciplinas muy distintas, cada una de ellas indispensables para la ejecución del proyecto. La estrategia para llevarlo adelante, mirándolo en retrospectiva, fue funcionar como un sistema auto organizado. Yo actuaba como una moderadora, la organización implicaba conocer la visión desde cada área y dar autonomía en su realización. Funcionar así implicó un ejercicio reflexivo personal constante de como llevar en si misma la organización para organizarse adecuadamente, entendiendo que trabajaba con disciplinas en las que no yo no poseía competencias.