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La CA Como Importancia en El Diagnostico
La CA Como Importancia en El Diagnostico
La CA Como Importancia en El Diagnostico
ISSN: 1132-0559
pi@cop.es
Colegio Oficial de Psicólogos de Madrid
España
ESPACIO ABIERTO
RESUMEN
Este trabajo ofrece una panorámica conceptual y aplicada de la conducta adaptativa,
tal y como suele entenderse en el ámbito de la discapacidad. Primero, se ubica su papel
en las definiciones actuales de la discapacidad intelectual. Segundo, se trazan las dimen-
siones básicas del concepto. Tercero, se analizan algunos de sus elementos más relevan-
tes en procesos profesionales de evaluación e intervención. Y en cuarto lugar, se examinan
algunas herramientas de esta clase creadas o adaptadas en las universidades de nuestro
país.
PALABRAS CLAVE
Retraso mental, Discapacidad intelectual, Conducta adaptativa, Diagnóstico, Test.
ABSTRACT
This paper offers an overview, both conceptual and applied, on adaptive behavior, as it
is usually defined in the disability field. Firstly, its role in present definitions of mental
retardation is established. Secondly, the basically dimensions of the concept are outlined.
Third, some relevant traits of it for professional processes are examined. And, fourth, some
tools created or adapted into Spanish cultural environment are analyzed.
KEY WORDS
Mental retardation, Intellectual disability, Adaptive behavior, Diagnosis, Test.
* Universidad de Deusto
sus orígenes en 1876, siempre tuvo inte- darizadas para comprobar si la persona
rés en distinguir la discapacidad intelec- se halla dos desviaciones típicas por
tual de otras problemáticas. debajo de la media, b) administrar una
varias escalas de conducta adaptativa y
Durante las últimas décadas, la defi- comprobar que su resultado es coherente
nición de discapacidad intelectual de la con el desempeño real de esas habilida-
AAMR se ha caracterizado por la consi- des en los entornos concretos en los que
deración de tres criterios (Heber, 1961; la persona vive, se educa, se divierte, etc.
Grossman, 1973, 1977, 1983; Luckas- Pueden verse en CUADRO 1 algunos
son et al., 1992; Luckasson et al., 2002). ejemplos de destrezas adaptativas con-
Primero, debe constatarse la existencia ceptuales, sociales y prácticas. Una
de un funcionamiento cognitivo significa- buena evaluación de estas dimensiones
tivamente por debajo del promedio, ope- será de gran utilidad para determinar que
racionable mediante la aplicación de una apoyos precisa aquel o aquella a quien
o más escalas de inteligencia adecuada- evaluamos. Por último, tercer criterio, el
mente tipificadas en la población gene- equipo de evaluación debe constatar que
ral. Junto a éste, en segundo lugar, las limitaciones en ambos criterios –inteli-
debieran existir limitaciones también sig- gencia y conducta adaptativa, se han pro-
nificativas en la conducta adaptativa ducido antes de los 18 años.
(Luckasson et al., 2002), o en las habili-
dades adaptativas, Luckasson et al., La inclusión de conducta adaptativa
1992) de la persona, o lo que es lo en la definición de la AAMD (hoy AAMR),
mismo, en las áreas de autonomía perso- sucedida al filo de las décadas de los
nal y de competencia social. Tercero, las cincuenta y sesenta, ocasionó un
dos condiciones anteriores deben mani- extraordinario debate, lleno de contro-
festarse durante el período evolutivo, es versia y entusiasmo. Creo que la situa-
decir, antes de los dieciséis (Heber, 1961) ción originada por la publicación de la
o los dieciocho años (Grossman, 1983; definición de 1992 (Luckasson et al.,
Luckasson et al., 2002; MacMillan y 1992), ofrece analogías con la que se
Reschly, 1997). creó a partir del llamado manual de
Heber (1961). Aunque entonces no se
La definición de discapacidad intelec- habló de cambio de paradigma, como
tual propuesta en la edición de 2002 es hoy hacemos, de hecho lo hubo. ¿O no
ésta: es eso acaso dejar de caracterizar la dis-
capacidad intelectual por lo que miden
“... es una discapacidad caracte- los tests de inteligencia y/o por lo que
rizada por limitaciones significativas dicen los informes médicos; y, a cambio,
tanto en el funcionamiento intelec- dirigir la mirada también a la evaluación
tual como en conducta adaptativa, de las habilidades necesarias para, por
expresada en habilidades adaptati- ejemplo, comer o desplazarse de forma
vas conceptuales, sociales y prácti- autónoma por la ciudad o aprender a
cas. Esta discapacidad se origina esperar a que llegue su turno en un
con anterioridad a los 18 años.” juego, es decir, hacia la conducta adap-
(Luckasson et al., 2002, p. 1). tativa? Familiares, amigos, profesiona-
les -y muchas personas con discapaci-
En la práctica profesional, de manera dad intelectual- saben que son exacta-
muy sintética, la labor del equipo de eva- mente cuestiones como éstas algunas
luación consiste en: a) aplicar una o de las más relevantes de sus preocupa-
varias escalas de inteligencia bien estan- ciones cotidianas.
CONCEPTUALES
- LENGUAJE (RECEPTIVO Y EXPRESIVO)
- LECTURA Y ESCRITURA
- CONCEPTOS SOBRE EL DINERO
- AUTO-DIRECCIÓN
SOCIALES
- INTERPERSONALES
- RESPONSABILIDAD
- AUTO-ESTIMA
- FACILIDAD PARA SER ENGAÑADO/A
- INOCENCIA
- SEGUIR NORMAS
- OBEDECER LEYES
- EVITAR PONERSE EN PELIGRO
PRÁCTICAS
- ACTIVIDADES COTIDIANAS
• COMIDA
• MOVILIDAD
• RETRETE
• VESTIDO
-ACTIVIDADES INSTRUMENTALES COTIDIANAS
• PREPARACIÓN DE COMIDAS
• LIMPIAR LA CASA
• TRANSPORTES
• TOMAR MEDICACIÓN
• MANEJO DE DINERO
• USO DEL TELÉFONO
- HABILIDADES OCUPACIONALES
- SEGURIDAD EN DISTINTOS ENTORNOS
cia de la edad en las expectativas socia- características más estables. Sin embar-
les hacia los individuos, lo que propor- go, las dificultades encontradas para su
ciona al constructo un fuerte carácter delimitación, no debieran hacernos per-
evolutivo. Y lo mismo sucede con el reco- der de vista algunos aspectos positivos.
nocimiento del papel de entornos socia- Primero, no puede negarse la significati-
les concretos en las variaciones encon- va, aunque aún insuficiente, clarificación
tradas en esas expectativas. General- producida durante las dos pasadas déca-
mente, estos dos elementos son recono- das. No hay más que pensar en el pobre
cidos como vigas maestras de las distin- bagaje teórico y aplicado con el que reali-
tas concepciones de la conducta adapta- zó su entrada en el campo de la discapa-
tiva. cidad intelectual de la mano de la AAMR
(Heber, 1961). En segundo lugar, en la
Gran parte de las propuestas defini- evidente complejidad del concepto, que
cionales llevan implícita una visión pudiera ser uno de sus puntos débiles,
situacional más que de rasgo (Reschly, tal vez se halle, paradójicamente, una de
1982). Sin embargo, y paradójicamente, sus ventajas, al presentar la conducta no
muy a menudo se evalúa el comporta- atomísticamente reducida, sino en la
miento adaptativo como si de un rasgo interacción presente de un alto número
individual se tratase. Otra faceta sobre la de variables.
que existe consenso es la que señala que
la conducta adaptativa es definida por la Leland (1983 y 1991) ha explicado
ejecución habitual (hace) y no por la muy bien el sentido de la última idea a
capacidad (puede hacer) (Meyers, Nihira través de su concepto de “visibilidad”.
y Zetlin, 1979). “Visibilidad” debe entenderse como el
efecto que el comportamiento de una
Suele destacarse la modificabilidad de persona produce en otros; es ese conjun-
la conducta adaptativa en comparación to de signos que les induce a pensar que
con la de otras dimensiones, como la la persona tiene discapacidad intelec-
cognitiva, que son menos moldeables a tual. Tal es el caso, por ejemplo, de con-
partir de la intervención (Langone y Bur- ductas relacionadas con problemas para
ton, 1987). Esta relativa plasticidad es la mantener un intercambio personal habi-
que hizo afirmar a Leland (1978) que la tual, desconocimiento de normas de eti-
conducta adaptativa es el aspecto rever- queta, dificultades lingüísticas, necesi-
sible de la discapacidad intelectual. Por dad de supervisión por parte de otros,
consiguiente, una mejor conceptualiza- etc. Esas conductas tan “visibles” o lla-
ción y medida de la misma podría contri- mativas, en una calle o en un lugar
buir significativamente en los actuales público, u otras similares pueden perte-
esfuerzos dirigidos mejorar la calidad de necer a un extenso número de ámbitos:
vida de las personas con discapacidad destrezas sociales, lenguaje, aspectos
intelectual. académicos funcionales, desarrollo físi-
co, problemas de conducta, habilidades
¿Cómo es posible ensamblar elemen- de autonomía, responsabilidad social,
tos tan dispares como los perfilados en etc. Todas estas facetas tan diversas se
las líneas precedentes? Por el momento combinan dentro del concepto de com-
no es nada fácil la respuesta. Las dificul- portamiento adaptativo “como los hilos
tades para lograr un encuadre teórico de una alfombra” (Leland, 1983), para
preciso de la conducta adaptativa tienen perfilar un retrato de las destrezas de la
aquí una de sus causas. La complejidad persona. La observación de esta clase de
del constructo parece ser una de sus conductas ha sido decisiva tanto para
DATOS DE IDENTIFICACIÓN
A. INFORMACIÓN DESCRIPTIVA
PUNTUACIÓN DE SERVICIO
COMPORTAMIENTO
AUTOLESIVO
HÁBITOS ATÍPICOS Y
INTERNO E. PROBLEMAS DE CONDUCTA
REPETITIVOS-ESTEREOTIPIAS
RETRAIMIENTO O FALTA DE
F. UBICACIÓN RESIDENCIAL
ATENCIÓN
HETEROAGRESIVIDAD
G. SERVICIOS DE DÍA
O DAÑO A OTROS
I. ACTIVIDADES SOCIALES
CONDUCTA DISRUPTIVA
Y DE OCIO
J. INFORMACIÓN GENERAL
CONDUCTA SOCIAL OFENSIVA
Y RECOMENDACIONES
CONDUCTAS NO
ASOCIAL
COLABORADORAS
PUESTA AL
DÍA Y
REVISIÓN
1. 2. 3. 4. 5. 6. 7. 8.
APLICAR COMPLETAR CONVERTIR APLICAR DETERMINAR ESCOGER SEGUIR EVALUAR Y
EL ÍNDICE DE PUNTUACIONES MODULOS OBJETIVOS DE ESTRATEGIAS EL PROGRESO PLANIFICAR
ICAP DESTREZAS DEL ICAP SELECCIONADOS ENSEÑANZA EN DE ENSEÑANZA CON EL INTERVENCIÓN
ADAPTATIVAS OPCIONAL) DE DESTREZAS EL ALSC DEL ALSC CUESTIONARIO ADICIONAL
DEL CALS DEL CALS DE RESPUESTAS
DEL CALS
REPASAR/
REVISAR LAS
VUELTA A ESTRATEGIAS
EVALUAR DE INTERVEN-
CIÓN
SIN EXITO
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