0 calificaciones0% encontró este documento útil (0 votos)
281 vistas1 página
Este documento presenta una serie de oraciones para diferentes temas de la iglesia. Estas incluyen oraciones para cumplir la Gran Comisión de Jesús, para la formación integral de ministros e iglesias, para el desarrollo de la familia, para la incidencia pública y social de la iglesia, y para el cuidado y desarrollo ministerial.
Descripción original:
Es una guía para orar durante la década en base al Proyecto de IDDLA CONEXIÓN 2030
Este documento presenta una serie de oraciones para diferentes temas de la iglesia. Estas incluyen oraciones para cumplir la Gran Comisión de Jesús, para la formación integral de ministros e iglesias, para el desarrollo de la familia, para la incidencia pública y social de la iglesia, y para el cuidado y desarrollo ministerial.
Este documento presenta una serie de oraciones para diferentes temas de la iglesia. Estas incluyen oraciones para cumplir la Gran Comisión de Jesús, para la formación integral de ministros e iglesias, para el desarrollo de la familia, para la incidencia pública y social de la iglesia, y para el cuidado y desarrollo ministerial.
1. Que la presencia de Dios se manifieste poderosamente en cada iglesia, de tal forma que se avive la pasión para cumplir la Gran Comisión en ministros e iglesias. 2. Que los proyectos de evangelismo, discipulado y plantación de iglesias se realicen en todo el territorio, en ciudades y pueblos, cumpliendo las metas propuestas. 3. Que Dios levante obreros para las misiones y plantación de nuevas iglesias en el territorio y para enviar a campos transculturales llevando el Evangelio.
II. Formación Integral.
4. Que ministros e iglesia en general experimenten un fuerte avance educacional teológico y secular de esta década en adelante. 5. Que Dios nos lleve a ser una iglesia territorial capacitada en las competencias y habilidades necesarias para ser relevantes en el tiempo que vivimos ante las realidades sociales que nos rodean. 6. Que la vivencia pentecostal sea manifiesta en todas nuestras iglesias con manifestación del Espíritu Santo empoderando a la iglesia con dones, ministerios y señales poderosas que respalden la obra de la iglesia.
III. Desarrollo Integral de La Familia.
7. Que Dios nos dirija y respalde como iglesia (líderes, pastores y maestros) en la debida formación de las nuevas generaciones de niños, adolescentes y jóvenes; fundamentadas en los principios de vida cristianos. 8. Que los matrimonios y familias de la iglesia sean fortalecidos en los principios de la Palabra, afirmándose como la base de la formación de nuevas generaciones sólidamente educados como cristianos influyentes en la sociedad en que vivimos. 9. Que toda persona, hombres y mujeres adultos de la iglesia, hallen su lugar en Cristo y reciban la atención óptima que los lleve a afirmarse y servir con esmero a Dios alcanzando a otros para el reino de Dios.
IV. Incidencia Pública Y Social.
10. Que Dios guíe a las iglesias para asumir con responsabilidad integralmente nuestra misión hacia adentro y hacia afuera ante la sociedad de la que somos parte, convirtiéndonos en una influencia positiva y agentes de cambio para nuestras comunidades. 11. Que Dios levante líderes sociales y líderes de alto impacto entre nuestros miembros y ministros y lleguen a lugares estratégicos de las diferentes esferas de la sociedad como instrumentos divinos para poner en alto los valores cristianos. 12. Que Dios levante personas con corazón por los necesitados y por las personas para llegar como capellanes a lugares donde hasta ahora la iglesia no ha logrado llegar con el Evangelio y los principios bíblicos.
V. Cuidado y Desarrollo Ministerial.
13. Orar por el liderazgo espiritual y administrativo de la iglesia en sus diferentes niveles para que sean efectivos en su labor y de gran bendición en la gestión que ejercen en la iglesia, ministerio o red que lideran. 14. Por los Matrimonios Ministeriales, familias ministeriales e Hijos de Ministros; que Dios los guarde, respalde, prospere, y use en su vida pública y privada. 15. Por un continuo avance en todos los ministros: en unción espiritual, en carácter cristiano, en niveles educacionales, en rangos ministeriales, en logros materiales, en relaciones familiares,… etc.