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  • Margarita Garcia Robayo Hasta Que Pase Un Huracan PDF

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    416033957 Margarita Garcia Robayo Hasta Que Pase Un Huracan PDF

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    HASTA QUE PASE UN HURACAN Margarita Garcia Robayo Lo bueno y lo malo de viv frente al mar es exactamente lo mismo: que el mundo se acaba en el horizonte, 0 sea que el rmundo nunca se acaba. Y uno siempre espera demasiado. Primea espera que todo lo que est esperando le llegue un ddia en un barco, y cuando se da cuenta de que nada va a Iegar entiende que tiene que salir 2 buscarlo. Yo odiaba mi ciudad porque era belisma y también fesima,y yo estaba ‘eel medio. El medio era el peor lugar para estar: casinadi salia del medio, en ef medio vivia la gente insalvable; allt no se era ean pobre como para resignarse a ser pobre para siempre, entonces la vida se gastaba en el intento de escalar y redimirse. Cuando todos los intentos fallaban —era lo ‘que solfa pasat—, desaparecia la autoconciencia, y en ese panto ya todo estaba perdido. Mi familia, por ejemplo, no femulas para evadiese, para mirarlo todo desde arriba, por alla lejos, en su pedestal de ‘humo. ¥ en general lo consegutan. tenia autoconciencia. Te ‘Mi papé era un sefor bastante inal se la pasaba todo el da eearando de resolver cosas insignificantes que a él le pa recan. importantsimas para que el mundo siguiera su cu cosas como hacer rendir mas el par de taxis que teniamos y vigilar que los choferes no le estuvieran robando. Pero siempre le robaban, Su amigo Félix, que manejaba la fargoneta de una farmacia, e enia con las quejas por alli vial muérgano que te imaneja el ax... Por dénde? Por la Santander, gastando rue- sda con una patica. Mi paps echaba y contrataba choferes cada dia de por medi y es0 le servia, unos para sentitse poderoso; los: para no pensar en nada mis. Mi mama también se manten‘a ocupacla, pero en otras co sas: todos los dias se zambullia en una poqueta conspiraciin familar. Todos los dias, esa era su bemula. Mi mam ee paraba de [a cama y alzaba el telefono, lamaba a mi ta, 0.4 mi to, 0a bay Horaba yes descaba la mucrte —allosy su maldita madee, que era a misma suya, mi abuela~; a veces ‘también lamaba a mi abuela:y griaba y Horaba y le deseaba la muerte —a ella y as maldita deseendencia—. A rf mam le encantaba decir a palabra “mali Ieproducia una sensaciin catéticay liberadora; aungue ella nunca lo habria expresido asi porque tenia poco vocabulari La tercers llamada del dia «era para Don Héctor, con dl era siempre muy amable porque le fiaba: Buenas, Don Héctor, zebmo le va, zpodeia mandarme ‘una almobadilla de pan y media docena de huevos? ¥ ls cara empantanada en kigrimas, Su frm eral misma quela de mi papi: no dejar baches de dempe muereo que les hicieran mise alrededor y dats eventa de dé estaban en wn departarnen- to chiguito en un barrio de medio pelo al quel aeavesaba un caso y varias busts Ya no era como ells, yo me di cuenta muy sipido de dé dle estaba y alos sete aos ya sabia que me ibaa iz. No sabia citindo ni a dénde, A mi me preguntaban:zgué quieres ser cuando grande? Y yo deca: extranjera. Mi hermano también sabia quese iba ie romé las decsiones que ms le convenian en ese sentido: deel bachillerao se dediod gurosamente, alevantarpesas ene gianasioy ringas en la playa. Porque, para yee era ques lo Mlevaran. Queria viv en Miami o en [Nacra York nose deciia, Bsuudiaba inglés porque en ambas ciudadesleiba serve. Bn Miami menes, eo ledeca su amigo Raf, que babia ido una vex evando eca may chigaito. A mt tne gustaba Rafa porque habia sli del pais y exo me patecia mertoio, Peo despues canoe a Gustav, que no habia said Sino llepado, y no de uno ni de dos, sno de varios paises. ‘Guseavo: Gustavo era unser que viva en una cata fence al mac. Una choss, mis bien. Afuera de fa choza habia un parapeto de cuatro estaasy tech dela impermeable debsjo del prapeo: una mesa de raj con sa bane lego, un asenco doble de mader, wna hamaca. Mi pap ha a compra pescado los dominos, ya veces mse levabs. Ades de pescado, Gustavo tenia una piscina con bichos enormes que él mismo crabas cangrejos, langostas y hasta culebras de mar. o italiane, segin el dla. La primera vex que mi papi se Hews a su chor, yo debia tener doce as, y él me dj: -quie- res que te ensetie a desescamar? 2A qué? A limpiar el pescado, Gustavo estaba sentado de patasabiereas sobre un pretil que bbordeabs la piscina, la palangana de pescades aun lado, en cl piso, Dos palanganas: una era para poner los pescados limpios. Yo me sent igualito que d, pero adelante, dindole 1a espalda; y él me agarré las manos y me ensefs. Despads sme acaicéallé abajo con dos dedos: arriba, abajo arriba, aba- Jo, decia, mientras yo impiaba el pescado con una champeta, afilada y Al dibujaba una Hines vertical en mi botén de Faga —asiledecfa Charo, una amigs de mi mam, cuando queria contatle un chiste que involuceaba Ia palabra “chucks” y yo stab rondando—, Mientras Gustavo hacia eso, mi paps esti aba unos bills sobre la mesa de trabajo: viserasy tips de pescado para hacer acite,arrumadas en un periSdivo, Viste lo que hizo Gustavo, le pregunté cuando fbamos en el taxi, de vuelta casa, Mi papa manejba lento, sanaba un bolero de Aley Acosta. Te ensené a impr el pescado, dij. Si, pero, también... También qué? No importa. ¥ después segut yendo ala casa de Gustavo veces sola, vees con mi pap, veces a Ia sada del colegio, veces en reemplazo del colegio. ‘Me gustab el sonido de as olas Goszavmellevasa raia?,A qu? Aviv No. Va Argeatina? 2A qué? Alo mismo. No. ‘los dedos. Un dia fui al colegio, esperé a que pasaran lista y después me fai Antes hacia eso con Maritea Caballero, una amiga que ya no estaba porque a su paps, que era milcar de la Marina lo hhabiantrasladado a Medellin, No entendlia qué ibaa hacer en Medellin, que era pura montafia. Los militares dela Macina vivian en Manzanillo, un bario cerrado ala orilla dela bahia, con casis prefabricadas que olan a moho por la humedad. lagua ya madera no son buenas amigas eso decia Maicea demas, ‘Asi que ese dia pasaron lista y yo me fu, pero sin Maritza. Sali del colegio a las ocho menos cuarto, tenia hambre y poca plata. Di unas vuetas por el centro, que estaba leno de la gence aque ibaa trabajar en losjuzgados, 0 queiba asentarseen la Plaza Bolivar a lee el periédico, Me senté en la Plaza y me abure ‘Cuando estaba Maritza nos sentébamos en fa muralla a smirar la avenida, el malecén y,detris, el mar. Ella queria ser abogada y trabajar en los juzgidos yo le decia que yo también, pero era mentira. Yo no queria ser nada, Maritza decia que yo podia ser cualguier cosa porque me iba bien en el colegio. Maritza me miraba joy a mime daba impresién: tenia el pelo amarillo y os ojos amarilles lapel muy pada. No conociaa nadie an desteido como ella. Estuve a un eromosoma de ser albina, eso decia Maritza desi misma, Pero era bonita, sobre todo ala noche, porque en el dia bajo sol se le notaban mucho las venas. ‘Cogi un bus hacia a casa de Gustavo y fo encontré miran- do jos: ewando lo enconteaba as era porque ese dia enfa que ‘entregat un pedico ficil. Una langosta, por ejemplo, no era sino meter la mano en la piscina ysacarla en el momento. ‘Haazme un coctlic, led ye extend una bolsa de linvones ‘que abla agarrado de una carrea mal parada, antes de subieme albus, Recén ace votes a mirarme, enerecerr os ojos ydes- pp dij: esta mana un chiflet de aie fro ente por larend- jadela puereay se me metié por ls pies. At. Ysiguié hablando: ‘eso me sacé de a cama, entonces me com un ron para entrar en calor y mastgué un pan viejo que me acalarbes Ia mandibala delogomoso que estaba, Y despues qué hicste# Después me fui a pesca, pero no pesqué nada el mar estaba picado. Ya Bran as nucve y media Gustavo descascaré unos camaronesy me mandala cocina por la cebolls, kt mayonesay el picante La cocina de esachoza era jnmunda, coda la choza era inmunda y no me gustaba entras Lede que yano queria ningin coctlito Qué? Que yano quit ‘un canjo. Y contest: te voy lava esa boca con Leja. Enton- «es fai porlo que faltaba y Gustavo preparé un cocelito deiio- 0, que me tragu ineero, Sorbie ugo rosad que qued6 abafo y laboca me quedé picante. Despiéreame a la una, le dije, ‘Me fui a dormir ala hamaca ‘Oro dia hice lo misme, pero legué sn limones, asf que enseguida me fui a la hamaca. Gustavo no me puso mucha ‘atencién porque estaba pelando una moncaita de lzngostinos ‘que iba poniendo en una neva de icopor con hielo, A la tarde tenia que entregar varios kilos para una festa de quince. Despidrtamea la una le dij, y cer los ojo ‘Tardé en quedarme dormidas hata calo, olla sal, a piel se seria pegajosa. CCeando abri fo ojos me enconteé con ls de Gustavo, Qué haces? Nada, Estaba escudeifindome,seneado en un banquito frente a la hamacs. El ol entraba por wn flanco del techo donde a loa estaba correla y le caf en un pedazo de la cara Le die que se ibaa poner negro de un soo lado, como una _ndscara de carnaval. Mi hermano tenia una mascara de earnae val que se habia comprado en Barranquilla, El diay la noche, se llamaba. ¥ yo a veces me la ponfa, pero me quedaba grande, Gustavo se pars del bangutoy vlvé alos langostinos. aes tuna, le preguneé. No. Qué hora es? Once y media Lasigniene vez que atlas jos, no estaba Gustavo, Estabala ‘montaiadelangostinosenla mesa yuna camioneracuatropuertas nla playa, Me senté en I amma y minéel macs un boc, un hombre yuna mal, jos En alguna preladeaba un pre. "Alrato, Gustavo salé de la camionets,acomodandose el short. Mis aces sais una sera acomodéndose el peinado. Gustavo agar a nevera de icopory alle’ al camionera. Lasefra me dea cumplist os quince? No Mejor. Porque? Y ella porueikimament a estas de quince se han vueko nezqunasycortonchas Sie buf no ponen mariscos mi por dccidene en plac en mesa, menos, 2Y qué ponen? Ponen tn aroz con pollo yuna ensalada russ cundida de ecbolay dlespuds as nifias se van a hablar con ls machacics con ee alizntoaeareas gus. Melba no, Melisa vaa tener una isa dle quince com se debe. Melisa? Gustavo voli, la mujer esac unos billets de excorey sels do, Los voy a servi con retard, gqué te parece tdrtara El puso losbilletes en la mess, pensé que sel iban a toler Me prec un omit dij Hubo una época en la que el lima cambié, Llovia siempre, todos los dias ovis. Eso era malo para la titra porque se erosonabay ‘malo parael mat porque se piabas malo paral tlevisin, porque se perdi a seal, Quedabala radio. La radi decia quel ciudad atraessba una suai trig no en Is zona moderna, donde vin Tos cos, sino en los bavis que bodeaban la Cifnaga dela ‘Virgen que, como extaballen de porquerias, se desbordab, Y las casa enclengues 3 hundan en el fango, Por esos dias se emer a hablar del EmisrioSubmarino, un tubo de hero que raga bala mien esancada en la Cénage, sa levaba mar adenteo y Inescupla rala slucén para rods los males de laciudad. Nolo

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