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Eran cien ovejas, que había en el 1.

- Entre Tus manos está mi vida,


rebaño, eran cien ovejas, que Señor. Yo soy esa bebida,
tenían pastor, pero en un día tarde, Entre Tus manos pongo mi existir. que se prueba y no se siente sed,
al contarlas todas, le faltaba una, le el que siempre beba de mi Sangre,
faltaba una y triste lloro. Hay que morir, para vivir. vivirá en mí, y tendrá la vida eterna.
Entre Tus manos yo confío mi ser ESTRIBILLO.
Las noventa y nueve, dejo en el
aprisco, y por las montañas, a 2.- Si el grano de trigo no muere,
buscarla fue, la encontró llorando, si no muere solo quedará, CAMINARÉ EN PRESENCIA DEL
temblando de frio, vendo sus pero si muere en abundancia dará SEÑOR(2)
heridas, la tomo en sus brazos, y al un fruto eterno que no morirá.
rebil volvio Amo al señor porque me escuche
mi voz suplicante
Esa misma historia, vuelve a porque inclina su oído hacia mí
repetirse, todavia hay ovejas, que Yo soy el Pan de Vida,
el día en que lo invoco.
vagando estan, vagan por el el que venga a mí no tendrá hambre,

mundo, sin Dios sin consuelo, el que crea en mí no tendrá sed, Me envolvían redes de muerte
sin Fe sin consuelo, sin Dios sin nadie viene a mí, si mi Padre no le caí en tristeza y en angustia
consuelo y sin su perdon. atrae. invoqué el nombre del señor
señor, salva mi vida!!.
Las noventa y nueve, dejo en el / / YO LE RESUCITARÉ / (3)
aprisco, y por las montañas, a EN EL DÍA FINAL. / (2) El señor es benigno y justo
buscarla fue, la encontró llorando, nuestro dios es compasivo
El Pan que Yo daré, el señor guarda a los sencillos
temblando de frio, vendo sus
estando yo sin fuerza me salvó.
heridas, la tomo en sus brazos, y al es mi Cuerpo vida para el mundo,
rebil volvió el que siempre coma de mi Carne,
vivirá en mí, como Yo vivo en mi Padre.
ESTRIBILLO.

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