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“EL CICLO DEL AGUA”

Prof. Roger Manuel Molina

Cascari, 15 de Marzo de 2011


El agua.
1.- El agua.

1.1 Introducción

Agua es todo lo que nos rodea, lo que vemos y lo que no vemos. Es un recurso
natural que todos conocemos y que es muy importante para todos los organismos.

Cada segundo, cada minuto, cada hora y cada día experimentamos con el agua.
Hay agua en el aire que respiramos. Esto es vapor que está en el ambiente. El agua nos
rodea, está en el mar, los ríos, lagos, está en el hielo, la lluvia, arroyos, la nieve y los
glaciares.
Nuestro cuerpo está compuesto por 65% de agua, nuestra sangre está compuesta de
80 a 90% de agua, nuestros músculos tienen alrededor de 75% de agua. Nosotros
necesitamos tomar al menos 8 vasos de agua al día para que nuestro cuerpo sea saludable.
El ciclo del agua es importante porque si lloviera continuamente y no hubiera evaporación
todos los organismos moriríamos ahogados

1.2 Definición del agua.

El agua es un componente de nuestra naturaleza que ha estado presente en la Tierra


desde hace más de 3.000 millones de años, ocupando tres cuartas partes de la superficie del
planeta. Su naturaleza se compone de tres átomos, dos de oxígeno que unidos entre si
forman una molécula de agua, H2O, la unidad mínima en que ésta se puede encontrar. La
forma en que estas moléculas se unen entre sí determinará la forma en que encontramos el
agua en nuestro entorno; como líquidos, en lluvias, quebradas, ríos, océanos, etc., como
sólidos en témpanos y nieves o como gas en las nubes.

Gran parte del agua de nuestro planeta, alrededor del 98%, corresponde a agua
salada que se encuentra en mares y océanos, el agua dulce que poseemos en un 69%
corresponde a agua atrapada en glaciares y nieves eternas, un 30% está constituido por
aguas subterráneas y una cantidad no superior al 0,7% se encuentra en forma de ríos y
lagos.

1.3 El ciclo del agua

En la atmósfera, con la ayuda del aire y del Sol, el vapor de agua se convierte en
humedad, niebla, neblina, rocío, escarcha y nubes. Y como nieve sobre las montañas, o
como lluvia o granizo en los valles, se escurre, desliza o se filtra en la tierra, donde la
recogen los ríos, y de los ríos va al mar. El mar retiene la sal del agua que recogió del suelo,
la tierra y las rocas que se encontraban en los lugares por donde pasa el río, la envía a la
atmósfera, pura y evaporada. De la atmósfera, el agua cae como lluvia baja sobre los
prados, los campos, nutre las cosechas y la fruta, y corre por los troncos, ramas de las
plantas y árboles, llenándolos de flores. Al encontrar grietas en las rocas y en el suelo, el
agua penetra hacia adentro de la tierra, formando los ríos subterráneos que llenan los pozos,
a veces sale en pequeñas cascadas o manantiales. A todo este proceso se le llama el Ciclo
del agua, o ciclo Hidrológico, gracias a él, probablemente tú volverás a beber esta misma
agua cien veces durante toda tu vida.

El agua que tomamos ahora es la misma que se ha estado usando durante millones
de años. Se ha conservado casi sin cambio tanto en cantidad como en tipo desde que se
formó la Tierra. El agua se mantiene en tres estados: como líquido, gas (vapor) o sólido
(hielo), se recicla constantemente, es decir, se limpia y se renueva trabajando en equipo con
el sol, la tierra y el aire, para mantener el equilibrio en la Naturaleza. La interminable
circulación del agua en la tierra se llama el ciclo hidrológico.

Aunque el agua está en movimiento constante, se almacena temporalmente en los


océanos, lagos, ríos, arroyos, cuencas, y en el subsuelo. Nos referimos a estas fuentes como
aguas superficiales, aguas subterráneas.

El sol calienta el agua superficial de la Tierra, produciendo la evaporación que la


convierte en gas. Este vapor de agua se eleva hacia la atmósfera donde se enfría,
produciéndose la condensación. Así se forman pequeñas gotas, que se juntan y crecen
hasta que se vuelven demasiado pesadas y regresan a la tierra como precipitación en forma
de lluvia.

A medida que cae la lluvia, parte de ella se evapora directamente hacia la atmósfera
o es interceptada por los seres vivientes. La que sobra se mete a la tierra a través de un
proceso que se llama infiltración, formando las capas subterráneas. Si la precipitación
continúa cayendo a la tierra hasta que ésta se satura, el agua excedente entonces pasa a
formar parte de las aguas superficiales.
Tanto las aguas superficiales como las aguas subterráneas finalmente van a dar al
océano o lagos, donde comienza el ciclo nuevamente.

Se estima que el volumen total de agua en la tierra es de 1.400 millones de km3,


volumen constituido en un 97% por agua salada. De los 39 millones de agua dulce
disponibles, sólo 10 millones de km3 de agua son utilizables (la otra parte se encuentra bajo
la forma de hielo).

El lago Baikal en Siberia constituye el mayor depósito de agua dulce en el mundo: 22000
km3.

Sólo 10 países comparten el 60% de las reservas mundiales de agua.

Las regiones áridas cubren el 31 % de las tierras emergidas que, a su vez han sido
alcanzadas en un 40% por el fenómeno de desertización: reforzado por la progresión del
nivel de los océanos, este fenómeno de desequilibro en la distribución del agua en el
planeta se acentúa ineluctablemente.

CICLO DEL AGUA.

Por lo que acabamos de ver el agua es importante para nuestra vida, la de los demás seres
vivos; es muy importante cuidarla, no contaminándola. Es cierto que el agua dulce en la
tierra se está acabando, por lo tanto no debemos desperdiciarla.

Si quieres vivir, el agua es vida, ¡consérvala!

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