Está en la página 1de 7

REPÚBLICA BOLIVARIANA DE VENEZUELA

Ministerio del Poder Popular para la Educación Universitaria, Ciencia y


Tecnología
Universidad Nacional Experimental de los Llanos Centrales “Rómulo Gallegos”
Área de Ciencias Económicas
Escuela de Contaduría Pública
San Juan de los Morros
Estado Guárico

ANALISIS

Materia: Problemática Socioeconómica


Sección: CPM06

Facilitador: Estudiantes:
Deixy Villarroel Andrés Martínez -C.I: 23.564.489
Jesús Escalona–C.I: 26.446.518

San Juan de Los Morros, Martes 13 de Mayo del 2019


El aún joven año 2018 ha nacido con mucho temor y expectativa por parte de
los venezolanos, el deterioro de la situación económica y los elevados precios
no desaparecieron conforme finalizó el mes de diciembre. Enero arrancó con
aumentos diarios, mucha escasez y negocios cerrados, en un escenario que
podría repetirse por todo el año. El ejecutivo nacional anunció el pago
adelantado de la primera quincena de enero y la aprobación de millones de
bonos de “Reyes” como una forma de ayudar a paliar la situación económica.
 
En este escrito se realizará una pequeña revisión de factores que se creen
esenciales y su posible comportamiento, sin ánimos de querer ser profeta, solo
analizando y estudiando las dinámicas y los comportamientos que han venido
presentando algunas variables. Vale la pena acotar que este escenario está
planteado bajo un contexto en el que no ocurra nada extraordinario o fuera de
lo común que trasgreda la democracia venezolana.
 
1.- Profundización de la crisis económica: Durante 2018 se acrecentarán los
problemas y las distorsiones que afectan a la economía venezolana. En el corto
o mediano plazo no se percibe el punto de quiebre que dé fin a la crisis. La falta
de acciones contundentes y la aplicación de medidas paliativas, más no
estructurales, por parte del Estado venezolano, la caída inevitable en la
producción petrolera y el incremento de las sanciones por parte de los EE.UU y
la Unión Europea, así como el progresivo aislamiento que viene sufriendo
Venezuela con respecto a la OEA y el MERCOSUR incrementarán la crisis.
 
2.- Incremento exponencial del dólar paralelo: En el último año la moneda
estadounidense fue devaluada más de 3200% con respecto al bolívar. La
hiperespeculación que se ha venido efectuando de manera descarada con el
dólar no oficial continuará, ello se debe al carácter dominante como referencia
sobre el mercado de divisas que posee la página web dólar today, sumado a la
complacencia de instituciones como el Banco Central de Venezuela y al
garrafal sistema de dualidad cambiaria que desangraría cualquier economía a
nivel mundial. La manipulación del tipo de cambio representa la columna
vertebral de la crisis, el Gobierno Nacional tiene la obligación de tratar de
manera seria este tema, mientras no atienda este área no habrá medida
económica que funcione. La eliminación del subsidiado, exclusivo y vergonzoso
dólar DIPRO no puede dilatarse más, la denuncia ante organismos
internacionales del ataque y complicidad que efectúa el Gobierno colombiano
no puede ser obviada, a nivel endógeno, la eficiente administración de las
divisas tiene que privar.

3.- Aumento imparable y descontrolado de la hiperinflación: Influenciado


por el dólar paralelo, la creciente incertidumbre y la desbocada liquidez (la cual
aumentó en el último año más de 1000%), la espiral hiperinflacionaria tenderá a
incrementarse. En anteriores artículos he mencionado que la velocidad de la
espiral tiende al alza, a su vez que los precios de bienes y servicios llegarán
muy probablemente a presentar variaciones por horas 

4.- Polarización de la riqueza (incremento de la desigualdad): Dada la


estructura capitalista de la economía venezolana, la crisis tenderá a
incrementar la riqueza de los más pudientes a costa de la expoliación de los
ingresos de los pobres. Los innegables avances que presentaba nuestro país
con respecto a la reducción del índice de desigualdad (Coeficiente de Gini) y
que le llevó más de una década lograr lo estamos perdiendo en un par de años.
 
5.- Caída significativa del PIB: Entre 2012 y 2017 el Producto Interno Bruto
venezolano ha tenido una abrupta caída, la firma Torino Capital estima la
reducción en por lo menos 36%, y la tendencia sigue siendo al descenso. Esto
se traduce en que muy probablemente y conforme a las previsiones del FMI y
del propio Banco Mundial, la economía venezolana tendrá el PIB de finales de
la década de los 90 con la población de 2018.
 
6.- Mayor estabilidad política, pero mayor inestabilidad económica y
social: Aunque pudiera sonar contradictorio la situación política de Venezuela
se estabilizará en 2018. Los dos grandes grupos que se disputan el poder
político llegarán a “acuerdos de gobernabilidad”. Ya se han anunciado
resultados en las negociaciones que se vienen llevando a cabo en República
Dominicana. La Mesa de la Unidad Democrática (MUD) presenta urgencias de
sobrevivir y de no ser desplazado por las corrientes radicales con
tinte facistiode que lideran Machado y Ledezma. Ante un escenario económico
tan complejo la opinión mayoritaria es no tomar el poder, resulta más rentable y
con menor costo político continuar siendo oposición. No obstante y a pesar de
los acuerdos que firmen las élites, las protestas dentro del pueblo en general se
incrementarán producto del ahogo y expoliación sistemática de los dueños del
capital contra los asalariados.

7.- Fallas en el suministro de los servicios: Electricidad, telefonía, cajeros


automáticos e internet presentarán continuas fallas producto de la falta de
mantenimiento e inversión. Situación semejante ocurrirá con el transporte y con
el propio Metro de Caracas. La dualidad cambiaria y los subsidios absurdos
que aún se mantienen le pasaran factura a este sector.

8.- Incremento de la gasolina: Dentro del seno de la Asamblea Nacional


Constituyente se ha estado asomando un muy posible incremento en los
precios de la gasolina para contrarestar el contrabando de extracción y las
largas colas. No obstante esta medida no será del todo efectiva. El enorme
diferencial cambiario producto de la depreciación arbitraria de la moneda se
seguirá ampliando, esto garantizará enormes tasas de rentabilidad para los
contrabandistas, aún con un precio que se podría considerar “elevado” para el
bolsillo del venezolano. A la fecha un litro de combustible en la ciudad de
Cúcuta cuesta más de 60.000 bolívares, situación semejante ocurre si
comparamos el precio del combustible en Aruba, Curacao, Trinidad, Guyana o
Brasil.
 
9.- Deterioro significativo de la vialidad, lo cual conducirá al resurgimiento
de procesos de privatización a través de concesiones: La falta de
mantenimiento e inversión también se evidencia en las principales arterias del
país. La hiperinflación devalúa de manera fugaz cualquier presupuesto u obra
por mas recursos y créditos adicionales que se le asignen. Ante este escenario
algunos Gobernadores, según sus facultades, reactivaran peajes
desaparecidos.
 
10.- Mayor escasez: Los índices de escasez, conforme al comportamiento que
han venido presentando, se incrementarán producto del aumento del
contrabando de extracción y de la caída en la producción. Leyes como la de
Precios Acordados, acciones, tipo “dakaso” como las que actualmente ejecuta
la SUNDDE, y el cierre de pequeñas y medianas industrias duramente
golpeadas por la crisis, reducirán el abastecimiento que requiere el mercado
venezolano.
 
11.- Cierre de cientos de pequeñas y medianas
empresas/comercios/industrias: Las pequeñas y medianas empresas,
comercios e industrias poseen cortos flujos de capital que la hacen altamente
vulnerable a la galopante crisis. Los períodos de recesión económica generan
que “el pez grande se coma al pez pequeño”. Éstas
empresas/comercios/industrias dependen de los grandes proveedores que
dominan el mercado y el precio, y que previo estudio de costos y de mercado,
colocan el valor a la mercancía previendo los altísimos niveles de inflación. En
pocas palabras, quienes terminan pagando, con la llamada reposición de
mercancías, la desgracia devaluativa el sector de las PyMES, a menos que la
transfieran en su totalidad al consumidor final, la víctima de todas las víctimas.
 
12.- Aparición casi generalizada del trueque como modo de intercambio
comercial dada la creciente escasez de billetes: Los billetes en Venezuela
continuarán escaseando por dos causas: El contrabando de billetes que se
movilizan a diario a territorio colombiano y la elevada inflación que amerita que
cada vez se requieran más unidades de papel moneda para pagar el mismo
bien. Aún cuando se dificulte el acceso al dinero físico e incluso prácticamente
desaparezca, la dinámica comercial y económica no se detendrá sino mutará a
nuevas formas de intercambio que eludan el papel moneda tradicional por
mecanismos originarios y eficientes.

13.- Aumento de salarios de manera más periódica: La escalada


hiperinflacionaria llevará al Gobierno Nacional a efectuar incrementos salariales
de manera más periódica y porcentualmente más elevada que los presentados
en 2017. Si bien el aumento de salarios trae más liquidez a la calle, es
importante acotar que la situación de la clase asalariada venezolana sería más
catastrófica de tener un Gobierno que congelara salarios o incluso los
disminuyera. La escalada de precios en el mercado nacional es permanente y
no se encuentra condicionada a los incrementos salariales. Es también
evidente que este tipo de acciones son meramente paliativas y que si el
Gobierno Nacional cree que va a recuperar el poder adquisitivo de los
asalariados bajo este mecanismo o está engañando al pueblo o está pecando
de ingenuidad.
 
14.- Aprobación de más bonos especiales: A través del carnet de la patria el
Ejecutivo Nacional aprobará más bonos especiales, más allá de las
implicaciones en el corto, mediano y largo plazo. Esta medida populista, muy
semejante a la tarjeta “Mi Negra” de Manuel Rosales, le resulta efectiva al
gobierno en un año electoral: Garantiza ayudas directas al pueblo que no
influyen como tal en el salario del trabajador.

15.- Incremento significativo y descontrolado del gasto público: Sólo en


diciembre pasado los dos bonos que entregó el gobierno ascienden a 4 billones
de bolívares, lo que representa el 50% del presupuesto total de la nación
aprobado para ese año. Para este año y como ya se dijo, se prevén nuevos
bonos, el presupuesto asciende a los 36,1 billones de bolívares, el cual,
también presionado por la hiperinflación, resultará insuficiente, ameritando el
endeudamiento y la salida a la calle de ingestas cantidades de dinero
inorgánico.

16.- Aparición de nuevos billetes de alta denominación y probable


anuncio de reconversión monetaria: A la fecha el billete de mayor
denominación alcanza para comprar medio cartón de huevos o un cuarto de
kilo de queso. La galopante hiperinflación obligará a la emisión de nuevos
billetes de 200.000, 500.000, 1.000.000 y hasta 2.000.000 de bolívares, los
cuales también serán absorbidos por la espiral. En Brasil, que vivió una crisis
semejante por más de 10 años, se eliminaron 12 ceros a la moneda. Resulta
inevitable, por más costo político que tenga, el anuncio de nuevos procesos de
reconversión monetaria.
 
17.- Incremento del darwinismo social: La crisis capitalista incrementa dentro
de la sociedad el “sálvese quien pueda”, la opulenta clase alta y la ávida clase
media son expertas en ello, también un importante sector de las clases pobres
se han lumpenizado o están a punto de serlo. Empresas privadas e
Instituciones del propio Estado venezolano llevan a buena parte de las masas a
ello; la otrora solidaridad en los precios de Abastos Bicentenario, por solo
mencionar un caso, quedó en el pasado.

18.- A su vez, en el seno de las clases más golpeadas surgirán


interesantes procesos de economía solidaria: La propia crisis conducirá a
que una parte importante de la sociedad, incluso dentro de las clases medias,
generen nuevas formas de asociación colectiva, bien sea familiar o comunal,
para la producción, distribución y consumo de bienes y servicios que rompan el
enorme entramado especulativo que dominan los circuitos del mercado
venezolano y que a su vez resistan a la crisis. La aparición de mercados
comunales con producción traída directamente por el campesinado, algunos
alejados de la intervención del propio Estado, las compras multifamiliares al
mayor y el trueque serán elementales para la entereza moral de quienes no
nos damos por vencidos.
.
19.- El escenario electoral seguirá favoreciendo al gobierno nacional: Aún
con la peor crisis económica de nuestra historia contemporánea, las elecciones
presidenciales a disputarse en el primer semestre del año favorecerán al
gobierno. Está comprobado que las sanciones económicas y políticas que
aplica los EE.UU son ineficientes. Corea del Norte posee sanciones mucho
más drásticas a las venezolanas y aún así presenta un asombroso crecimiento
económico, semejante situación ocurre en Irán y Rusia. La oposición
venezolana se encuentra profundamente fraccionada, con un liderazgo
disminuido y con una Asamblea Nacional que desde ya garantizó su salida por
la puerta de atrás. El gobierno nacional ha sido altamente cuestionado por las
fallas y errores en la distribución del pernil navideño y los juguetes que
prometió, no obstante la maquinaria electoral, el estar en el poder y la cohesión
del chavismo a la hora de enfrentar procesos electorales inclinan la balanza.
 
20.- ¿Qué papel jugará el Petro?: La moneda virtual venezolana ha generado
amplia expectativa, no sólo a nivel nacional sino internacional. El atractivo que
genera ser la primera moneda virtual en el mundo con un respaldo en petroleo
de 100 mil millones de dólares americanos, da un importante interés para
inversionistas de todo el mundo. Con un valor inicial anclado al valor del barril
del crudo venezolano y con una tendencia al alza de este commodity a nivel
internacional, se garantiza una buena herramienta para romper el cerco
comercial y financiero que desde los EE.UU se pretende instalar. A nivel
nacional esto se traduce en un posible incremento de las importaciones, lo cual
no necesariamente significa que disminuirá la escasez, puesto que mientras no
se ataque de manera eficiente el contrabando de extracción la carencia de
bienes puede continuar. En el corto o mediano plazo no se observaran
resultados por la puesta en marcha del Petro, tampoco desaparecerá la
denominada guerra económica, ni las enormes distorsiones que afectan
nuestra economía. Es importante aclarar que los posibles resultados positivos
de esta medida se comenzarán a apreciar el siguiente año, dependiendo de las
normas de funcionamiento y demás regulaciones que se coloquen para tal fin

También podría gustarte