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2. El.cuidado de sf, Retacion entre el conocimiento y of cuidado de uno mismo. EL CUIDADO DES! Plat6n, Alcibiades 0 de la nafuraleza de! hombre, Buenos Aires, Aguilar, 1989, pags. 84 / 90; 100/123 y 128/ 437. Foucault, Michel, La henmenéutica de! suefo, La Piata, Altamira, 1997, Lecciones 1*/ pags. 35 / 68. Platén, Alcibiades 0 de a naturateza del hombre, Buenos Aires, Aguilar, 1959, pags. 84 / 90; 100/123 y 126/137, Pags. 85/90 ‘SOCRATES EY no lo es también que los mejor criados, si son bien instruidos, tecminan por perfeocionarse en fa virud? ALCIBIADES Indudablemente, ‘SOCRATES Examinemos, pues, comparando nuestres cosas @ las de aquéllos, en primer lugar silos reyes de los lacedemonios y de fs persas nos parecen ser de raza inferior. 2No sabemos nosotros que unas provienen de Heraces, los ottes de Aquerenes, y que ellinaje de Heracesy el de Aquemenes se emontan a Perseo, hijo de Zeus? ALCIBIADES ‘Yel nuestro, Sécrates, desciende de Eurysaques y el de Eurysaques de Zeus. ‘SOCRATES I nuestro, noble Alcibiades, desciende de Dédalo y Dédalo de Hefaistos, el hijo de Zeus; pero el inaje de cellos, comenzando por eos mismos, es una linea de reyes hasta Zeus: unos, reyes de Argos y de los lacedemonios; otros, que reinaron siempre en Persia y muchas veces en toda Asia, como ahora; nosotros, por el ‘conirario, somos simples particulars, al igual que fo fueron nuestros padres. Y si prelendieses mostrar a tus antepasados y a Salamina como patria de Eurysaques © a Egina, patria de Ayax, su predecesor cerca de ‘Artajeres el hijo de Jexjes, 2a que inisién no te expondrias? Cuda, pues, que no seamos inferiores en cuanto a la ‘majestad de la raza y aun en cuanto ala educacién. gDesconoces, acaso, cuél es la grandeza actual de los reyes lacedemonios, cuyas mujeres son guardadas oficialmente por los éforos, para evitar en lo posible que nazca inadvertidamente un rey que no eve la sangre de Heracles? Y en lo que respecta al rey de los persas, sobrepasa testa majestad hasta el punto de que nadie tiene la sospecha de que el padre pueda ser otro que el rey, por lo cual la reina esté quardada por el temor. Cuando nace el primer hi, considerado como heredero, primeramente todos Jos siibdaos de! reino lo festejan, y luego, en cada aniversario de su nacimiento, el Asia entera celebra esta fecha ‘con sacrificios y festejos. En cambio, cuando nacemos nosotros, Alcibiades, como dice el poeta cémico, ni apenas ‘se dan cuenta nuestros vecinos. Después de esto, entre ells, no se cuida al nto por una mujer cualquiera a ‘sueldo, sino por eunuces, escogidos entre los mejores de los que rodean al rey, a quienes se encomienda todo fo ‘eferente al cuidado del recién nacido, a fin de que se procuren con su ingenio que llegue a ser el mAs bello, ‘ecomponiendo y enderezando los miembros del infante. Y por hacer esto son tenidos en gran estima. En cuanto legan a los siete aiios menudean en la monta y en las lecciones de equitacién y comienzan fentonces a cazar, cuando alcanzan por dos veces fos siete aios entregan al muchacho a fos Hamados por eos ‘pedagogos reales, que son persas de edad madura elegidos entre los mejores en niimero de cuatro: uno, como e ‘mds sabio; otro, como el ms justo; un tercero, como el mas prudente, y por itimo, uno considerado como el mas valeroso, De los cules, el primero ensefia la magia de Zoroastro, et hijo de Horomasde, esto es, el culo de 10s dioses; ensefia también el arte de reinar, El més justo, a decir la verdad toda su vida. E] més prudente, a no Escaneado con CamScanner dejarse dominar por ningiin placer, a fin de que se acostumbre a ser ibre y a conducirse como un verdadero rey, ‘efrenande primero sus instintos, sin hacerse esclavo de ellos. El més valeroso, le procura intrepidez y coraje, haciéndole ver que ef temor es esclavitud. En Cambio, Pericies te dio como pedagogo a uno de sus criados, inservible por la edad, Zopyro el traci. ‘Asi, podria darte a conocer toda la educacion infantil de tus rivales, si esto no se prolongase demasiado, y a la vez mostrarte todas las iamente se siquen de éstas, tt quisieras volver los ojos hacia las riquezas, el luo, las vestiduras y los mantos, los unguentos de esencias, ef numeroso cortejo de servidores y todo el restante esplendor de los persas, ti misino te avergonzarias de lo baja que queda tu propia condiciin, Pero, induso, sh quisierns considerar la prudencia, la moderacién, la destreza, el buen temple, la grandeza de espint, la discipina, el valor, la perseverancia, la laborosidad, sentito de la emulacién y de tn honra de fos lacedemonios, to estimarfas a la atura de un nifio en todas estas cosas. ‘Anora, si ti apfcas la atencign a la rqueza y croes ser algo en este aspecto, que no quede esto tampoco cen secreto para mostrarte fo que en reaklad eres. Pues si quieres tender fa vista a las riquezas de los lacedemonios, conocerts que las de ellos dejan afrts con mucho a las nuestras. Porque es tal la propiedad tertorial que poseen en su solar y en Mesenia, que nadie de entre nosotros les disputaria en canthdad y cabiad, fi siquiera de cabatos 0 de cualquier otr ganado que se apaciente en Mesenia, Mas, daremos de lado a esto para decir que todos fos grieges no tienen oro ni plata suficientes para Kualar a un simple particular lacederonio; pues desce hace varias generaciones esta entrando alli procedente de todas las ierras helénicas, muchas veces incluso de los birbares, sin que saipa a ninguna parte, por lo cual viene muy a punto recordar la tabula de Es0p0 fn la que ta zorra d9o al led det dinero que entra en Lacedemonia estén bien visittes as huellas que le evan hasta ali, pero nadie descubeia las las del que sale a parte alguna, en tal manera que es preciso reconoceries como los mis ncos de los gregos en oro y plata y de entre ellos, precisamente, a su rey. Porque para los reyes son los mayores y mas numeroses ingresos de oro y de plata y exste ain el tibuto real, nada despreciable, que Jes pagan los laceiemonios ‘Las nquezas de los lacedemonios son ciertamente considerables en relacién con tas de fos griegos, pero ‘no son nada en comparacén con las de los persas y su rey. Pues he oido decir en cierta ocasién a un enviado fidedigno de fos que han ido a ver al rey persa, quien aseguid haber atravesado una regién muy fb en una marcha de cerca de un dia, regién a la que los del pais taman ef cinturdn de ta reina, y hay otra a la que Genominan Su velo y muchas otras todavia, excelentes y féles, reservadas para su compostura y que tienen cada una el nombre de cada objeto de su alavio, de tal medio que yo pienso que si alguno djese a la madre del fey y esposa de Jerjes, Amestrs “Un hombre puensa rivakzar con ty hjo'es el hijo de Deincmnaques, a la que se Colca una fqueza de cnoventa minas, como mixime, y a su hyo, en Emuia, una posesién de tesclentas fanegas”, eta 32 preguntaria admirada en qué puede confiar este Alctiaves para luchar con Artajeres. y pienso que tla meena tendria que darve la respuesta de que no en otra cosa realmente sino en el cuddado y en ia Sesireza, armas las Gricas en las que prevaiccen los griegos. Aunque si se infornase que este Alablavies ‘emprende esto ahora sin Begar a tener los veinte aflos, en estado de completa ignoranda y diciéndole quien le lema que lees preaso, en primer lugar, instnirse, preocuparan de si mismo y ejercitarse antes de entrar en lucha Con el rey, cosas que él no desea por creerse ya en la actuatidad con suficiente preparacin, yo plenso que ella se ‘asombratia y preguntaria: “;Pero entonces, en qué confa este adolescente?” St ahora le diéramos que en su della, en su tata, en su Knaje, en su rqueza y en su naturaleza espeutual, pensaria, Alabiades, que nos hemos ueto loces, comparando todas estas cosas a las que ella pose Y prensa que Lampxso, hija de Leotyquides, esposa de Arquidames y madre de Ages, todos los cuales fueron reyes, ve admaria al considerar las rquezas de fos suyos y ver que ti, Ian deficentemente educado, tras de luchar con su hyo. Cietamente, ano te parece ‘vergonzos0 que las mujeres de nuestros, mejor do nosotios, incluso que nosolvos menos? En verdad, ingenuo tus rales son éstos y no los que lu prensas, de quienes ‘aan ALCIBIADES: on, $I RRR IEIY ces eschrt En dec, ma parce soe vera enter area oreo SOCRATES el w ma Escaneado con CamScanner ‘SOCRATES, i ara nse! el edad de 5 msm, vo que muchas veces fo pasamos por alto aunque creyendo realizado, y cudndo fo leva el hombre 2 ges acaso cuidando sus asuntos cuando se Pues bien: preocupa de si mismo? ALCIBIADES: so me parece a mi. SOCRATES: Mas, vamos a ver, Zcual es el arte con el que podriamos cuidar de nosotros mismos? ALCIBIADES ‘SOCRATES: ALCIBIADES mee ‘SOCRATES me ungenan stan tt renting ALCIBIADES De todo punto imposible. ‘SOCRATES ALCIBIADES: mt ‘SOCRATES: Enionces,gpoames condos gHb aBTibsinace meseesdesnesande en feaede aves resccyy Pd ALCIBIADES: ‘De ningiin modo. ‘SOCRATES aa hombre vulgar el que puso esto en el ALCIBIADES: ‘Ami me parecid muchas veces, Sécrates, que estaba al alcance de cualquiera, pero otras también me parecié muy dif, ‘SOCRATES Escaneado con CamScanner Claro que si. ‘SOCRATES. 25) que sive de una cosa y la casa de que se sirve no cumplen el mismo fin? ALCIBIADES Qué quieres decir? ‘SOCRATES Asi, el zapatero cotta con el ranchete, la cuctilla y otros tiles. ALCIBIADES si. SOCRATES Pues bien, gno distinguimos uno de otro, e! util que carta y el obrero que lo utiliza para corta? ALCIBIADES Sin duda alguna. ‘SOCRATES Y no ocurre, de la misma forma, con el citaista que toca la citara y los instrumentos de que el se sive? ALCIBIADES Si ALCIBIADES Ami me parece que si SOCRATES £Qué ciremos entonces det zapatero, que cota solamente con sus instrumentos o también con las ‘manos? ALCIBIADES ‘También corta con las manos. ‘SOCRATES Por consiguiente, se sirve de elias, 2n0 es eso? ALCIBIADES Si. ‘SOCRATES €¥ cota, alli mismo, siviéndose de sus ojos? Escaneado con CamScanner ALCIBIADES Asis ‘SOCRATES Sea, pues, Gee aa sere a sav ano Porue siendo esto téci, weonemes también amente lo que nosotros mismos somos, en tanto ‘que resultaria imposible si lo ALCIBIADES Tienes razin, ‘SOCRATES iEa, pues, por Zeus!, 2con quien hablas tii ahora? éN0 eS acaso conmigo? ALCIBIADES Si. SOCRATES Y yo contigo, gno es €50? ALCIBIADES Si. SOCRATES 2s Séerates el que habla? ALCIBIADES En efecto. ‘SOCRATES 2Y Alcibiades et que escucha? ALCIBIADES si ‘SOCRATES, LY Séerates no habla valiéndose del lenguaie? ALCIBIADES Sin duda, SOCRATES 2Y hablar y servirse del lenguaje no son para ti lo mismo? ALCIBIADES: Escaneado con CamScanner ALCIBIADES Indudablemente, SOCRATES. Estamos de acuerdo en distinguir al que se sirve de una cosa y la cosa de que se sirve? ALCIBIADES si. ‘SOCRATES eDistinguiremos, pues, al zapatero y a citarista de las manos y de los ofos con lo que trabaja? ALCIBIADES. Claro que si ‘SOCRATES. Pero el hombre, ademas, ¢ no se sirve de todo su cuerpo? ALCIBIADES Sin duda, ‘SOCRATES Hay distincién, por tanto entre el hombre que se sirve de una cosa y fa cosa misma de que se sive? ALCIBIADES SI SOCRATES: Se distingue, pues, el hombre de su cuerpo? ALCIBIADES: Ast parece. SOCRATES Cf gubesenamoeey ALCIBIADES JAy!, no 86 qué responder. SOCRATES Prev (TSHR dai, des Wego; que. es quién so sive. doh over ALCIBIADES Gerd SOCRATES «YO Gi TASS sve do i sino Taba ALCIBIADES Escaneado con CamScanner Nadie mas, ‘SOCRATES ALCIBIADES Si ‘SOCRATES Creo que aiin hay una cosa sobre la que no existe divergencia. ALCIBIADES eCudl es? ‘SOCRATES ALCIBIADES ‘SOCRATES ALCIBIADES ‘Sin duda. ‘SOCRATES ues bien; nos hemos puesto de acuerdo en qve gsseiRERSEUEN anTaleneT cuerpo ALCIBIADES. Si, eso hemos acondado. SOCRATES: Pero es el cuerpo quien se ordena a si mismo? ALCIBIADES De ningiin modo. ‘SOCRATES Es claro que &! mismo recibe Srdenes. ALCIBIADES Si SOCRATES [No es esto, por tanto, lo que nosotros indagébamas. ALCIBIADES 4 Escaneado con CamScanner ‘SOCRATES ALCIBIADES Posiblemente. ‘SOCRATES IAh!, eso to menos posible: pues si una de las partes no participa en el m: i ep riptltis partes no participa en el mando es de todo punto imposible ALCIBIADES En verdad que resulta imposible, SOCRATES son og Se one 1 todo son el hombre, resta decir, segin yo creo, que, @ no son nada 0, si ALCIBIADES Cierto es. SOCRATES Hay ain necesidad de demostrarte algo més evidente, a saber, que el alma es e! hombre mismo? ALCIBIADES 1 iPor Zeus!, A mi esto me parece suficiente. SOCRATES Mas, aunque la demostracién no sea rigurosa, pero si apropiada, nos basta. La examinaremos todavia mas atentamente cuando volvamos de nuevo a lo que ahora dejamos de lado como necesitado de mucho examen. ALCIBIADES: eA qué te refieres? SOCRATES Alo deciamos hace y yo ave eel ala eralo mls importante que hay en nosotros. ALCIBIADES: Asies. SOCRATES Por tanto, es uso pensar as: que SSRVERSE UY Val iercaMBRUBTpensamienos son las alas, Qeorsr ALCIBIADES: Indudablemente B Escaneado con CamScanner SOCRATES Pues eso es precisamente lo que deciamos hace un momento: que si Sécrates conversa con AXcibiades not nace cont oso de came y hueso, come parece, sina que rezona con Atbiadesmisme, de, conta ALCIBIADES Eso debe ser SOCRATES ALCIBIADES Cietamente ‘SOCRATES -—" lengua gue eonbes Ge 6B Geo conoc Ta Wfterte' ee, pero 6 econo atsh ALCIBIADES ates SOCRATES Pues en realidad, ning’n médico se conoce a si mismo en tanto que médico, ni ningtin profesor de dimnasa en tanto qu preter de gnnasia ALCIBIADES: Parece que mo. ‘SOCRATES: Muy conveniente serfa, por tanto, que los agricutores y dems obreres manuales se conociesen @ si rmisinos; pues ni conocen al menos, segin parece, sus propias cosas, sino que, por sus respectivas profesiones, tin més alejados de elas. Conocen, si acaso, las cosas del cuerpo 0 aquellas de que éste se sirve, ALCIBIADES: en ‘SOCRATES si, es, RIESE cro we UW AD ccm de entre ests es sabio por et vn ‘SOCRATES a ALCIBIADES 2A qué te refieres, Socrates, con esta suposicién? Escaneado con CamScanner SOCRATES, Yo te Giré lo que sospacho que quiere decir y aconsejamos esta madma, aunque ne hay muches téminos de comparacién, sina sila servese de la vista, ALcIBIADES: 20s quieres deci? SOCRATES = Retieiona conmigs: ALCIBIADES Claro que ‘SOCRATES: Pues a qué objeto hemos de mia pra que ala vez nos veamos a nosotros mises? ALCIBIADES Es manifesto, Socrates, que 2 GESTED cosa que se le pareza. SOCRATES Dices bien; pero, QITRIOEBSTCon SUE WEnes no hay algo de esta dase? ALCIBIADES Sin dude SOCRATES ALCIBIADES Exadamente ‘SOCRATES De este modo, et ojo al considerar y mirar a olro ojo y a la parte que él cree que él cree mejor, asi como ta ve también se ve a si mismo, ALCIBIADES Eso parece. ‘SOCRATES Pero si, en cambio, mira a otra parte del cuerpo humano 0 a cualquiera otra cosa, excepto @ aquello que tiene con 6! semejanza, no'se verd a si mismo. ALCIBIADES Asis. ‘SOCRATES NO Escaneado con CamScanner a ee Foe, . Precisamente, ala parte de este ojo en la que se iva, esta facuitad es lo que llamamos vision ALCIBIADES: Sin duda, ‘SOCRATES: bien, c: ALCIBIADES Ese es iqualmente mi parecer, Socrates. SOCRATES > CPues hay en el alma, en efecto, una parte mas dvina que ésta donde se encuentran el entendimiento y ta ALCIBIADES: ‘SOCRATES: sn a as ALCIBIADES: SOCRATES: ALCIBIADES: ‘SOCRATES ALCIBIADES. Si ‘SOCRATES: 2 6 CGESRERETRTETo hemos conoido en tama sdESREET buen seis? ALCIBIADES Claro que st. SOCRATES 4A Escaneado con CamScanner ALCIBIADES: 2Y cémo ibamos a poder, Sécrates? SOCRATES Pues parece en efecto imposible que no conociendo a Alcibiades se conozca que las cosas de Alcibiades. Son las propias de él ALCIBIADES: Por Zeus, que es imposible! SOCRATES NNi seria tampoco posible que conociésemos lo que nos conviene a nosotrus sino nos conocemos a ‘nosotros mismos. ALCIBIADES: Sin duda alguna, SOCRATES ‘Si, pues, no conocemos nuestras cosas, tampoco conoceremos lo que a ellas se refiere, ALCIBIADES: Asi parece, ‘SOCRATES ‘que abarca lo que es en ély lo que a él se refiere, ) Lo que necesitan tas ciudades, Alcibiades, no son murals, tirremnes 0 arsenales, si quieren disfrutar de la felicidad, ni siquiera mucha poblacién ni grandeza, a falla de la vit. ALCIBIADES che ‘SOCRATES: ( ERR eae TR TN ALCIBIADES ‘Sin duda alguna, ‘SOCRATES ALCIBIADES De ningan modo. a2 Escaneado con CamScanner SOCRATES Ge ar persinsy de Ss anions comb ew oda was oes ALOIBIADES Dices la verad, SOCRATES sete rane. aswaereor’ Yl poder, a tu antojo, tanto en tu beneficio como en el ALCIBIADES Astes. SOCRATES Pues BBS Stay Sbiament tanio ti como a replica, agradaréis alos doses. ALCIBIADES Seguramente. SOCRATES, YY. como deciamos hace un momento, EARS Vita Bi WICSTaS aESGRES a luminosidsaaHina ALIBIADES Sin duda, SOCRATES ALCIBIADES Si Michel Foucault (1926- 1984) flésofo francés; estudié en ta Ecole Normale Supérieur de Paris; doctorado en flosofia porla Sorbona. Su trabajo suele dividrse alrededor de tres problemas: ef Saber, el Poder, la Gobemabiidad; fa etapa del Saber, aparece expuesta en Historia do fa focura en la época lsica (tess doctora), en El nacimiento de fa clinica. Una arqueolagla de la mirada médica, en Las palabras. y fas cosas,y en La arqueologia del saber. La pregunta de la etapa (pregunta ‘arqueoligica) debe responder por qué en una época delerminada emergen las condiciones para que se Produzcan cierlos campos de decibiidad y vistiidad — y no olros- que_coniguran formaciones discursivas 0 ‘epistémes de certs objetos, cuerpos y verdades. La etapa del Poder, en El orden del discurso (clase inaugural de {a cdtedra de “Historia de los sistemas de pensamiento" del College de France), en Nietzsche, fa gonealogla, fa historia, La verdad y las formas jurdicas, y a obra culminante Vigiar y castigar, se incuye también Historia do fa ‘Sexualidad, Tomo |. Da cuenta de las redes de poderes/saberes, en cuyos entramados se construyen cuerpos y ‘verdades, a partir de su genealogia y de los cispostivos discipinarios que los han estructurado. La etapa de la Gobemablidad, en Historia de la Sexualdod, Tomos I y Il, gira alrededor de las tecnologias del yo: parte de ta senualidad como dispositivo de construccién de cuerpes y deseos, interés vinculado con su miltancia en defensa {de espacios nuevos para las minorias (grupos homosexuals); el andlisis de las tecnologias del yo y las del poder

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