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➢ Solo expreso lo que quiero ver hecho realidad. Hago cada día lo máximo que puedo (ni más
ni menos). Dejo atrás la crítica y la queja
➢ Hablo bien de mí conmigo mismo. Me felicito por cada logro
➢ Miro la foto de mi niño en el cuaderno: ¿Qué quiere escuchar de mí?
➢ Este mes estoy sembrando amor, abundancia y alegría para el resto de mi vida

➢ Me perdono por todo aquello que creo haber hecho “mal”. Me doy cuenta de que siempre hice
lo mejor que pude
➢ Dejo ir todos los pensamientos dolorosos. A cada uno le digo “Gracias, ya puedes irte. No te
necesito. Sólo tengo pensamientos positivos para mí. “
➢ Tomo un minuto varias veces al día para tomar consciencia de mi cuerpo y de lo que me
rodea.
➢ Agradezco mi cambio

➢ Pensar lo peor nunca ayuda. Di adiós a la tristeza y al drama.

➢ Evitar la infelicidad no es el camino a la felicidad. Puedes amarte y sentirte bien contigo en
todo momento.
➢ El miedo es un impedimento para la felicidad. Di cada día: “Estoy a salvo”
➢ No exageres. Permanece en el ahora. Busca diariamente un chiste para contárselo a alguien.
Mira comedias. ¡Ríe!

➢ No te tomes nada personalmente. Cada uno vive en su sueño. Sólo importa lo que tú pienses
de ti
➢ Aprende nuevas maneras de pensar: lee, investiga, escucha cosas que te hagan bien
➢ Evita las malas noticias, los noticieros, los chismes. Habla de los demás como te hablas a ti
mismo.
➢ No esperes a tener un nuevo trabajo, más dinero o mejor cuerpo para estar feliz contigo. Si
no aprendes a amarte ahora, no lo harás después. Di: “Me amo, me acepto, admiro mi
capacidad”
➢ Observa tus pensamientos a cada momento. Recuerda: tú eres el observador, no tu
pensamiento.
➢ Se amable con tu mente: si la adiestraste para tener pensamientos de crítica y temor no
cambiará de un día al otro. Busca belleza a tu alrededor en pequeños detalles y genera
pensamientos de agradecimiento.
➢ No te quedes “pensando en un problema”. Ciertamente eso no resuelve nada. Respira, mírate
dentro de un año: ¿cómo quieres ser/ estar? Ese pensamiento de felicidad y salud es en el que
debes enfocarte.
➢ Sonríe, alégrate, baila: el Universo se alegrará contigo

➢ Empieza una lista escrita de felicitaciones a ti mismo. Todo lo que tienes para felicitarte desde
el mes 1 hasta el momento escríbelo comenzando siempre con “te felicito por…”
➢ Escribe algo más en la lista diariamente. No importa lo pequeño que sea ¡Te felicito!
➢ Usa este mes las palabras FELIZ, MARAVILLOSO, EXCELENTE, MILAGROSO,
BRILLANTE, ESTOY FELIZ, ME SIENTO MUY BIEN, CADA DÍA ESTOY MEJOR,
LO HAGO MUY BIEN.
➢ Revisa tu estrella de autoestima ¿qué puedes agregar?

➢ Toma al menos cinco minutos al día a la misma hora, cierra los ojos y siéntete agradecido.
Busca en tu memoria ese sentimiento y deja que te inunde. Cuando lo tengas repite
interiormente: GRACIAS
➢ Aprovecha el recorrido hacia el trabajo, el estudio o por tu casa para observar cosas que te
hagan sentirte agradecido: unas nubes bellas, un pájaro o una flor escondida bastan para
decir ¡Gracias!
➢ Termina tu día agradeciendo. Cada día hay algo para agradecer. Cierra los ojos con ese
sentimiento
➢ Agradece a tu cuerpo, a tus células. También a tus síntomas: todos trabajan para tu cambio
y bienestar.

➢ Repite el trabajo que hicimos y busca la intención positiva de cada uno

➢ Estate atento a lo que criticas o te molesta de otras personas y piensa ¿qué es lo que debes
cambiar en ti?
➢ Deja los “SIEMPRE, NUNCA, TODOS”. Pregúntate ¿Eso es verdad??? Sé impecable con
tus palabras: si no son mejor que el silencio no las pronuncies
➢ No intentes cambiar a los demás. Si algo no te gusta, cambia tú
 ➢ ¿Qué estás haciendo hoy por ti?
➢ Dedica tiempo a estar contigo a solas.
➢ Dedica tiempo a hacer algo que realmente te guste.
➢ Anímate a hacer algo que nunca has hecho. ¡Diviértete!

➢ ¿Cuántas veces al día te miras al espejo? Cada vez que pases por un espejo mírate a los
ojos y di ¡TE AMO!
➢ Obsérvate cuando estás solo y cuando estás con otras personas. ¿Eres igual? ¿De qué
tienes miedo?
➢ Anímate a ser tú mismo. Canta en voz alta. Baila. Ponte la ropa que se te dé la gana. Ríete
en voz alta.

➢ Busca nuevas formas de expresarte. Deja de acusar, criticar y elige decirles a las personas
que te rodean: “TE AMO, APRECIO LO QUE HACES, ME GUSTA COMO ERES, TE
VES FELIZ, ME GUSTA EL BRILLO DE TUS OJOS, TU SONRISA”
➢ Deja atrás la costumbre de buscar defectos en las personas: “estás más flaco/a gordo/a, te
ves cansada/a, no me gusta… “Elige algo positivo y díselo en voz alta.
➢ Dile “TE AMO” a tus mascotas, a tus plantas, a tus amigos, a tu pareja. Cuenta cuántas
veces al día expresas cosas positivas y hazlo más y más seguido. ¡Todos querrán estar con
alguien como tú”
➢ ¡Brilla!

➢ Juega, diviértete
➢ Ríete de ti mismo ¡Es genial! No te tomes la vida con seriedad, hazlo con sentido del humor
➢ Si alguien te critica no lo tomes personal. Ríe. Di “ESTOY EN PROCESO DE CAMBIAR”
➢ Besa, abraza. Demuestra tu amor y tu alegría con algo más que con palabras. Ten un gesto
amable con quienes no conozcas. Saluda en el micro o en las colas. ¡En vez de quejarte, RÍE!