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JESÚS QUIÑONES
DOCENTE
VIII SEMESTRE
CUBARÁ-BOYACÁ
MAYO 2021
Título
Introducción
Resumen
Desarrollo
Conducta con aspectos muy numerosos y diversos que sigue una trama de tipo
fantástico, y que corresponde a una necesidad psicológica de tipo hedónico. Se
manifiesta en el niño, en el joven, en el adulto y en los animales. Según el
psicoanálisis, el juego del niño se explicaría por una tentativa de sublimar
impulsos de carácter sexual y agresivo… (p.105).
En otras palabras, el juego que los niños llevan a cabo es una de las actividades más
importantes de sus primeros años; debido a que a través de él aprenden a comunicarse
con su cultura, a desarrollar sus mentes y sus cuerpos, así como también a expresar y
manejar los sentimientos. Además, es una forma de aprendizaje, por eso es llamado
algunas veces actividad lúdica para identificar las acciones de juego y trabajo que se
realizan en los primeros años de la escuela; es decir, aprender jugando.
Sin embargo, para enseñar a partir del juego, o bien para desarrollar actividades
lúdicas desde lo lógico-científico, en este caso con los procesos de adición, se exhorta
a los docentes para que busquen estrategias innovadoras donde cuente la creatividad
del niño para potenciar sus habilidades en el campo lógico-científico, en
concordancia con la aplicación de actividades constructivistas y significativas. De
este modo, es necesario que el docente sea mediador en los procesos lógicos
científicos que emprenden los niños y no cohibirlos ante preguntas, sino motivarlos a
indagar y descubrir las respuestas. Además, se requiere que el docente sea un
constante investigador, que sea proactivo e innovador.
Así mismo, Laguna (2007), destaca lo expuesto por Chirino, quien afirma que el
maestro investigador “es aquel que sin abandonar el aula de clase, cuya vivencia es
irrepetible, es capaz de buscar alternativas de solución a los problemas de su quehacer
profesional por la vía de la ciencia" (p.1). De esta manera, se considera muy
importante que el docente sea un investigador constante y buscar soluciones prácticas
a las diferentes problemáticas que pueda encontrar en su aula de clase, que es la
acción que la docente practicante desarrolló para la implementación de esta
propuesta.
Así entonces, una vez la docente practicante planificó las estrategias y los recursos, y
dio inició al desarrollo de práctica pedagógica III en la Institución Etnoeducativa
Uwa Izketa Sede Uncacias, ubicada en el corregimiento de Samoré del departamento
del Norte de Santander, específicamente en el aula del primer grado de educación
primaria. Basándose en los conocimientos de la carrera y sumado a toda la
investigación relacionada con la temática que iba a desarrollar, inicia la práctia
propiamente en el aula de clases de primer grado. Allí hace su presentación formal e
inicia algunas dinámicas para que el grupo de estudiantes se sientan en confianza con
la misma, y así empezar a aplicar las actividades.
Las actividades fueron aprender los números del 1 al 100 e iniciar la base para los que
le siguen, el árbol de la adición, los bolos de la adición, las fichas de la suma, jugando
a hacer mercado y a comprar juguetes, sumando los elementos naturales, el rey pide,
entre otros. A cada actividad, se le impregnó el estilo lúdico y así llamara la atención
de los niños, de quienes se puede decir que estuvieron muy atentos, aprestos y
motivados por las actividades lúdicas desarrolladas. Todas las actividades
planificadas se desarrollaron a cabalidad, y además, se adicionaron otras que no
estaban pautadas al inicio de la propuesta, de manera que se pudieran ofrecer más
actividades motivadoras para que los niños del primer grado se iniciaran en los
procesos de adición.
Cabe destacar que en la enseñanza de los números, aunque se trabajó con fichas
didácticas, los niños se les dificultó el aprendizaje, y más aún que en esta comunidad
como se trabaja con dos lenguas (uwa y castellano) los procesos tendieron a ser más
lentos, sin embargo, se logró avanzar significativamente a partir de la repetición de
actividades para la enseñanza de los números, variando los materiales y recursos,
hasta que se logró que la mayoría demostraran su conocimiento certero. Luego de
aprender los números hasta el 100, se procedió a aplicar las demás actividades lúdicas
para motivar los procesos de suma. Algunos recursos fueron realizados por la docente
practicante, mientras que por ejemplo el árbol de la adición y los bolos de la adición
fueron construidos por los mismos niños con el apoyo de la docente practicante.
Conclusiones
Se puede concluir que para fortalecer los procesos básicos de adición se planificaron
acciones basadas en actividades lúdicas, a partir de algunas investigaciones de autores
quienes recomiendan esta forma de enseñar para hacer de los aprendizajes de los
niños una forma amena y divertida, pero a la vez significativa. Luego, para el
desarrollo de las acciones lúdico-pedagógicas para el fortalecimiento de las nociones
básicas de adición, se implementaron a cabalidad en su totalidad de acciones
planificadas. En estas se observó la participación activa de todos los niños y niñas,
quienes de forma significativa pero divertida aprendieron los procesos básicos de
adición desarrollando así el conocimiento lógico-científico.
Referencias