El escritor Juan Romero, en su libro la Geografía Humana, trata básicamente sobre las
paradojas de la democracia. En dónde él comprende que las personas han perdido la
confianza, tanto en los partidos políticos como las mismas personas que forman parte de ello, es decir de los políticos. Es cierto que una gran parte de la sociedad a perdido la confianza en las personas que llegan al poder. Por el simple hecho de que la sociedad, cada vez se vuelve más pobre (Pobreza y pobreza extrema). Es decir su calidad de vida empeora. Pero también es cierto que las mismas personas reconocen que el sistema democrático es la mejor solución, para la representación de ellos, pero critican ferozmente a los que nos gobiernan. La política argentina a dado mucho que desear en las últimas décadas. Hemos llegado a índices de pobreza escalofriantes. De modo tal que uno se pone a cuestionar, si es que, el país está destinado a ser pobre, o las medidas económicas que tomó cada gobierno, no fueron las mejores en concluir. Según los datos del INDEC, la pobreza en Argentina cerro el año pasado 2020 al 42% en todo el país. Y la verdad muchos dirán, la pandemia. Es cierto, hubo pandemia. Pero tan bien es cierto que esto no sucedió solo ahora. Si no la Argentina viene arrastrando hace décadas el aumento de la pobreza y las crisis que hemos tenido, a lo largo de toda la historia. Solo por citar que, antes de la pandemia la pobreza en todo el país Argentino, según los datos del INDEC, estaba en el 35,5% y 8% de indigentes (2019). El descontento que reflejaba Juan Romero de la sociedad hacia la clase política, es bastante cierto. Solo basta por mirar las protestas organizacionales en todo el país y tan bien en la provincia de Jujuy. Los mismos jujeños presentan estos síntomas, de modo tal que en las participaciones electorales, no se presentan todos. Para brindar algunos datos oficiales, podría comenzar diciendo que en las elecciones generales del 2019 participo solo el 80% de los jujeños. Hubo un 20% que no se presentó, tal vez algunas personas no votaron por qué no se encontraban en la provincia, o incluso en el país, por motivos que no nos incumben. Pero hay muchas personas que no votaron por qué no creen en la política. Sienten que la política los engaño, los descuido, los trato mal, entre muchas otras quejas, que tiene la sociedad hacia la política. Muchos jujeños tan bien piensan, que ser político es un negocio. Hay bastantes ejemplos de ello. El otro día pregunté a algunas personas sobre que piensa de la política y la democracia. Y me lleve una gran sorpresa y al tiempo tristeza. Porque mi pregunta fue la siguiente, que tendríamos que hacer para tratar de eliminar la pobreza en nuestro país. Y la gente me respondió, correr a un costado a los políticos. Otro me contestó, que no vota porque considera que la mayoría de ese conjunto son ladrones y lo único que hacen es empobrecer a las personas a través de la democracia, la democracia no está mal, lo que está mal son ellos. Para brindar algunos datos del INDEC sobre la pobreza en los aglomerados de San Salvador de Jujuy y Palpalá, se estima un 37,7% de pobres y 4,7% de indigentes, con respecto al segundo semestre de 2019. Esto demuestra el enfado de la gente, pero lo bueno es que todavía no escuché, sustituir a la democracia. La democracia es un sistema de gobierno en dónde todos nosotros somos participes, y lo tenemos que cuidar como ciudadanos pertenecientes a este país y provincia. Para ir terminando, es cierto que la política de nuestra provincia y nuestro país, nos ha dado mucho que desear. Pero lo cierto, es que es, el único sistema de gobierno en dónde las personas eligen a sus representantes para que estas puedan dirigir, controlar y administrar a través de las instituciones del estado, el país. La democracia representativa es la forma de gobierno más usada en todo en todo el mundo actual y la debemos cuidar. . Para terminar y concluir el tema, podría decir que las personas que quieran formar parte de esta profesión, lo hagan. De modo tal que las personas vean sus intenciones buenas y honestas. Y las personas que nos gobiernan deberían fomentar a un más la participación electoral de los ciudadanos. Incrementar las políticas públicas hacia los sectores más vulnerables y al mismo tiempo generar trabajo privado genuino. Los planes sociales, son ayudas de emergencia, de modo tal que sería una locura eliminar todas esas ayudas en un momento a otro. Por lo tanto, las políticas que deberían acentuar más el gobierno, tanto provincial como nacional, es generar fuentes de trabajo genuino. De modo tal que las personas que reciben una ayuda económica, por parte del estado, pasen por si solas al sector privado. Por qué en las marchas de todo el país, provincia e incluso en la ciudad en donde yo vivo (Monte Rico), la gente pide trabajo en las manifestaciones de las organizaciones. Se que no es fácil e incluso, todavía me falta aprender bastante. Pero creo en esta convicción y espero en el día de mañana presentar proyectos económicos para erradicar esa tortura que tenemos el día de hoy, que sin lugar a duda es la pobreza.