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CONTAMINACIÓN DE SUELOS: RESIDUOS ENVASES Y EMBALAJES

Un suelo está contaminado cuando su calidad natural ha sido alterada por la presencia de
componentes de carácter tóxico y peligroso cuyo origen esté relacionado con actividades
humanas, con el consiguiente desequilibrio de las funciones que le son propias. Las principales
actividades que producen contaminación en los suelos son:

 Vertederos
 emplazamientos industriales
 áreas de desguace de vehículo
 estaciones de servicio
 industrias que han cesado su actividad (ruinas industriales)

La contaminación de suelos puede producir lixiviados que se incorporan al ciclo hidrológico.

Un residuo es un desecho generado en actividades de producción, los residuos producidos por la


industria pueden ser asimilables a residuos urbanos (RSUs), residuos sólidos inertes, residuos
tóxicos y peligrosos (RTPs) y residuos radioactivos.

Se denomina RESIDUO INERTE a aquel que no experimenta transformaciones físicas, químicas


o biológicas significativas; los residuos inertes no son solubles, ni combustibles, ni reaccionan
física ni químicamente de ninguna otra manera, ni son biodegradables, ni afectan negativamente
a otras materias con las cuales entran en contacto de forma que puedan dar lugar a contaminación
del medio ambiente o perjudicar a la salud humana; la lixiavilidad, la cantidad de contaminantes
de los residuos y la ecotoxicidad totales del lixiviado deberán ser insignificantes.

Los RESIDUOS TÓXICOS Y PELIGROSOS tienen efectos nocivos a corto, medio o largo
plazo sobre el medio ambiente, los recursos naturales o sobre las personas físicas. Alteran las
condiciones de los recursos naturales, pudiendo no ser biodegradables y produciendo
bioacumulación que al pasar a las cadenas tróficas pueden producir patologías a los seres
humanos y al resto de los seres vivos, dando lugar a procesos irreversibles. También pueden
producir accidentes incontrolados. Debido a ello requieren tratamientos en condiciones exigentes
y bajo control.
Los RESIDUOS RADIACTIVOS disminuyen la calidad del aire, sus efectos producen
mutaciones en los seres vivos causando alteraciones y patologías.

Los residuos sólidos y líquidos que contaminan los suelos, hacen que estos no puedan ser
utilizados para otros usos, y en ciertos casos la presencia de sustancias tóxicas puede ser un
peligro para la salud pública. Los residuos tóxicos depositados en suelos pasan a la red
hidrológica contaminando acuíferos y llevando la contaminación a puntos muy lejanos. La
recuperación de estos suelos o la de los lodos contaminados en lechos de ríos, puede ser una
carga ambiental muy costosa.

La gestión de envases y embalajes, y sus residuos es muy importante en la protección de los


suelos. Se define “envase” como todo producto fabricado con cualquier material de cualquier
naturaleza que se utilice para contener, proteger, manipular, distribuir y presentar mercancías,
desde materias primas hasta artículos acabados y desde el fabricante hasta el usuario o el
consumidor, incluyendo los artículos “desechables” utilizados con el mismo fin.

De acuerdo con la normativa referida a envases es necesario poner en práctica medidas de


reducción en origen, de reutilización, de reciclado y de valorización. La reducción en origen
supone no sólo la reducción de la cantidad global de residuos, sino también la reducción de su
nocividad, mediante el desarrollo de técnicas y productos no contaminantes. La reutilización es
toda operación en la que el envase, concebido y diseñado para realizar un número mínimo de
circuitos o rotaciones a lo largo de su ciclo de vida, sea rellenado o reutilizado con el mismo fin
para el que fue diseñado.

El reciclado consiste en la transformación de los residuos, dentro de un proceso de producción,


para su fin inicial o para otros fines. Se incluye en este concepto el reciclado orgánico”, bien por
tratamiento aerobio “compostaje”, o bien por tratamiento anaerobio “biometanización”, no se
considera reciclado la “recuperación de energía”, es decir la utilización de los envases para la
generación de energía mediante la incineración directa, con o sin otros residuos, pero, con
recuperación de calor.

La valorización es todo procedimiento que permita el aprovechamiento de los recursos


contenidos en los residuos de los envases, incluida la incineración con recuperación de energía,
sin poner en peligro la salud humana y sin utilizar métodos que puedan causar perjuicios al
medio ambiente.

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