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La fuerza de las mujeres: un estudio de las

Investigación
estrategias de resiliencia y la transformación
en la ocupación humana de mujeres víctimas
del conflicto armado en Colombia1
Women’s strength: a study on resilience strategies and transformation
in the human occupation of women victims of the armed conflict in
Colombia

Luz Ángela Albarracín Cerquera2


Karol Andrea Contreras Torres3

Recibido: 27 de febrero 2017 • Enviado para modificación: 24 de junio 2017 • Aceptado: 11 de agosto 2017
Albarracín, L.A. & Contretas, K. (2017). La fuerza de las mujeres: un estudio de las estrategias de resiliencia y
la transformación en la ocupación humana de mujeres víctimas del conflicto armado en Colombia. Revista
Ocupación Humana, 17 (1), 25-38.

RESUMEN
La investigación tuvo por objetivo identificar estrategias de resiliencia frente a la transforma-
ción de la ocupación humana en mujeres víctimas de desplazamiento forzado en el marco
del conflicto armado colombiano. Se definen los conceptos de resiliencia, ocupación huma-
na, cuerpo y conflicto armado, y hechos victimizantes, diferenciados hacia las mujeres, así
como sus consecuencias en la transformación de las actividades significativas. Se realiza un
estudio cualitativo en el que participan cuatro mujeres mayores de 18 años, residentes en
Bogotá y víctimas de desplazamiento forzado. Se emplean entrevistas semi-estructuradas e
indagación corporal mediante elementos de danza orgánica, danza butoh y danza contacto.
Los datos fueron analizados a la luz de categorías de ocupación y resiliencia previamente
establecidas. Las principales estrategias de resiliencia de estas mujeres están relacionadas
con el hacer por los otros; el autoconocimiento y la autogestión en el restablecimiento de
sus proyectos de vida, y la espiritualidad, desde la conciencia de sus fortalezas para hacer
frente al día a día. Se observa una búsqueda activa de nuevos espacios de encuentro per-

1
Artículo derivado de la investigación La Fuerza de las Mujeres: un Estudio de las Estrategias de
Resiliencia y la Transformación en la Ocupación Humana de Mujeres Víctimas del Conflicto Armado
en Colombia, realizada por las autoras en 2016 en el marco de la Especialización en Desarrollo
Humano con Énfasis en Procesos Afectivos y Creatividad de la Universidad Distrital Francisco José de
Caldas.
2
Terapeuta Ocupacional. Especialista en Desarrollo Humano con Énfasis en Procesos Afectivos y
Creatividad. Fundación Art Suigeneris. Bogotá, Colombia. angelaac87@hotmail.com
3
Psicóloga. Especialista en Desarrollo Humano con Énfasis en Procesos Afectivos y Creatividad.
Bogotá, Colombia. Corporación Mujeres Transformando. karolacontrerast@gmail.com

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sonal, de reconocimiento de sus capacidades y potencialidades a partir de la formación, el
disfrute e interacción con otros y la productividad.

Palabras clave
Conflicto armado, persona desplazada, víctima de guerra, mujer, expresión corporal

Abstract
The research aimed to identify strategies of resilience against the transformation of human
occupation in women who are victims of forced displacement, in the context of the Colom-
bian armed conflict. Concepts defined here are resilience, human occupation, body and
armed conflict, and victimizing events, characterized to women, and their consequences
in the transformation of meaningful activities. A qualitative study is carried out, in which
the participants were four women over the age of 18, living in Bogotá and victims of forced
displacement. In addition, semi-structured interviews were conducted and body language
(dance) is investigated, through elements of organic dance, Butoh dance and Contact im-
provisation. The data was analyzed in the light of previously established occupation and
resilience categories. The main resilience strategies of these women are related to “doing
for others”; self-knowledge and self-management in the restoration of their life projects, and
spirituality, from the awareness of their strengths to face the day to day. There is an active
search for new spaces of personal encounter, recognition of their capabilities and potential,
derived from training, enjoyment and interaction with others, and from productivity.

Key works
Armed conflict, displaced persons, war victims, woman, corporal expression

Introducción para la conceptualización de la resi-


liencia se deben comprender sus dos
Colombia, desde hace más de 50 años, nociones básicas: adversidad, enten-
vive un continuo de violencias so- dida como el trauma, riesgo o amena-
ciopolíticas que han afectado directa- za presente en la vida de una persona
mente y de forma diferencial a la po- como una herida que la aproxima a la
blación civil, de acuerdo al nivel de muerte; y la adaptación positiva, en-
vulnerabilidad en que se encuentren. tendida como la superación del trau-
A la luz de esta realidad y en el es- ma. En este sentido, Cyrulnik (2007)
cenario de postconflicto, se requiere afirma que para “resiliar” una situa-
conocer las estrategias de resiliencia ción de malestar hace falta que la per-
que estas personas han desarrollado sona haya sido vulnerada, herida, trau-
frente a la transformación de sus acti- matizada, fracturada o desgarrada, es
vidades significativas ante situaciones decir, que haya sufrido tal magnitud de
de adversidad, en aras de aportar a la lesión para que se dé la transformación
reparación del tejido social. de su vida. De esta forma, se asume
que la resiliencia es la capacidad de
De acuerdo con Fores y Grané (2011), cualquier ser humano para reconocer

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y usar sus propios recursos y los que ye directamente en el proceso resilien-
le provea el medio para hacer frente a te. De igual manera, para esta categoría
una situación de adversidad. Desde la se determina la ampliación de redes, lo
experiencia de las investigadoras en la cual favorece la participación en otros
atención a víctimas, se reconoce que entornos y la adquisición de nuevos ro-
la resiliencia se revela de diferentes les ocupacionales; se valida la voz de
maneras, entre ellas se definen las si- las mujeres y se promueven espacios
guientes categorías, que son las que se de disfrute como eje fundamental en el
emplean en esta investigación. desarrollo de actividades con sentido y
significado para ellas.
Agenciamiento : Yo para mí. Acciones
que propende y realiza la persona por Espiritualidad: Si bien esta categoría
sí misma, sin presión ni refuerzo de no se explora directamente, se recono-
otras, sino que considera debe hacer ce como la vinculación afectiva de las
para su propio bienestar. Entre estas mujeres con una fuerza interior que
se observan acciones de autoconcep- les permite hacer frente a las situacio-
to, autovaloración, hacer por otros y nes de adversidad. Se manifiesta como
otras, la capacidad de perdón, el dis- reconocimiento de una fuerza innata,
frute de la sexualidad y la reflexividad. la vinculación con un ser supremo o
el arraigo a la vida. La espiritualidad,
Vinculación afectiva: De los otros según Castañeda (2002), implica tener
para mí. Acciones cuya procedencia cada día una razón para vivir, para hu-
está en los otros y son percibidas como manizarse e intentar alcanzar los sue-
de bienestar para la persona. Se rela- ños; aquella capacidad propia que tie-
ciona con el establecimiento de sanas ne el ser humano de tomar conciencia
relaciones interpersonales, de apropia- de su fortaleza para superarse día tras
das redes de apoyo y predisponentes en día sin desfallecer.
los sistemas de creencias y las prácticas
culturales del contexto. De otro lado, la ocupación huma-
na se entiende como uno de los ejes
Acciones del E stado: El Estado para centrales del ser en sus distintas di-
mí. Acciones ordenadas por la juris- mensiones. De acuerdo con el Marco
prudencia del Estado que tienen como de Trabajo para la Terapia Ocupacional
fin dar trámite y atención a las situa- de la Asociación Americana de Terapia
ciones de adversidad en el marco del Ocupacional (AOTA, 2008/2010), se
conflicto armado. Para ello se hace refiere a diversas áreas del desempeño
hincapié en la percepción de justicia y que determinan aspectos fundamenta-
en la mirada crítica frente a las accio- les del ser humano para desarrollarse
nes estatales. en los diferentes entornos. Tales áreas
se definen de la siguiente manera: ac-
Entorno para mí: Se define como la tividades de la vida diaria, que en este
influencia que tiene el entorno en el documento se denominan actividades
desarrollo o fortalecimiento de las es- básicas o de supervivencia; actividades
trategias de resiliencia. Da cuenta de instrumentales de la vida diaria, deno-
las redes de apoyo que pueden facilitar minadas potenciamiento o actividades
el proceso y de cómo el contexto influ- más estructuradas; ocio y tiempo libre,

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que corresponden a la categoría de dis- La participación social o comunita-
frute; por último, el área de participa- ria alude a patrones de comportamien-
ción social o comunitaria. to organizados que son característicos
y esperados de un individuo dentro
Las actividades cotidianas -básicas de un sistema social (Mosey, citada en
o de supervivencia- están orientadas al AOTA, 2008/2010). Se centran en la
cuidado del propio cuerpo (Rogers y participación en la comunidad, la cual
Holm, citados en AOTA, 2008/2010). busca la interacción en el barrio, con
También se refieren a las actividades los vecinos y las organizaciones socia-
básicas de la vida diaria, son funda- les, teniendo en cuenta el contexto de
mentales para vivir en un mundo so- las mujeres víctimas.
cial y permiten la supervivencia y el
bienestar (Christiasen y Hammecker, El ocio, tiempo libre o actividades
citados en AOTA, 2008/2010). Las ac- de disfrute hace referencia a activida-
tividades de la vida diaria contemplan des no obligatorias, intrínsecamente
la realización de tareas como dormir, motivadas y en las cuales se partici-
descansar, el acicalado, la alimenta- pa durante un tiempo discrecional o
ción y el baño. La ejecución de las libre, es decir, un tiempo no compro-
mismas promueve el bienestar, el cui- metido con ocupaciones obligatorias
dado de sí mismo y la resignificación tales como el trabajo o el cuidado pro-
en la vida, ya que aumentan la autoes- pio (Parham y Fazio, citados en AOTA,
tima, la motivación y el autoconcepto. 2008/2010). Incluye actividades de
exploración y participación en el ocio.
Las actividades instrumentales de la
vida diaria o actividades más estructu- Ligar las categorías de resiliencia y
radas hacen referencia a actividades de ocupación humana a las realidades de
apoyo a la vida cotidiana en la casa y la guerra implica reconocer primero el
la comunidad; requieren interacciones conflicto armado colombiano como un
más complejas, en comparación con conflicto interno, teniendo en cuenta
las que se utilizan en las actividades de que sus raíces son motivaciones domés-
la vida diaria. Dentro de ellas se inclu- ticas y no de magnitud internacional,
yen el cuidado de otros y el cuidado razón por la cual se perpetúa dentro de
de los hijos. Estas actividades se con- las fronteras del Estado. Así, se entien-
sideran más complejas ya que requie- de como el enfrentamiento de diferen-
ren e involucran a otros; su desarrollo tes grupos armados que utilizan como
permite la construcción del proyecto estrategias la amenaza, la violación de
de vida, determinado por aspectos rela- los derechos humanos y la protección
cionados con la motivación intrínseca como búsqueda para incrementar su
para la participación, la habituación y poder sobre la población civil. Involu-
la ejecución de roles ocupacionales a cra a diferentes actores: las guerrillas,
partir de los propios intereses y el fun- los grupos paramilitares y las fuerzas
cionamiento volitivo. Incluyen la edu- del Estado (Salazar y Castillo, citado
cación y el trabajo, actividades y ejes por Valencia, 2006; Trejos, 2013).
importantes para las mujeres víctimas
del conflicto armado. Por otro lado, se requiere introdu-
cir las realidades de la estructura so-

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cio-cultural y política que han facili- De este modo, la guerra produce
tado el sostenimiento de una violación desarraigos y malestares emocionales
sistemática de los derechos de las mu- que se traducen en los lenguajes del
jeres en el país. La violencia hacia la cuerpo. Dando soporte a esta postura,
mujer se define, según la Ley 1257 de María del Carmen Castañeda (2011)
2008 (Congreso de Colombia, 2008), enuncia el cuerpo como un lugar sim-
como cualquier acción u omisión que bólico de comunicación y de escritura
le cause muerte, daño o sufrimiento fí- en donde se registran representacio-
sico, sea este sexual, psicológico, eco- nes, imágenes y metáforas que evocan
nómico o patrimonial, por su condi- más de lo que en realidad se dice. La
ción de mujer, así como las amenazas narración sobre los cuerpos puede re-
de tales actos, la coacción o la priva- velar historias colectivas que consti-
ción arbitraria de la libertad, bien sea tuyen prácticas del existir humano en
que se presente en el ámbito público o tanto sus emocionalidades, comporta-
privado. Esto implica que la violencia mientos, creencias. Desde la noción
hacia las mujeres en el marco del con- de guerra, vemos que el cuerpo no es
flicto armado es también una violencia solo carne, también es un escenario de
basada en el género, pues está soporta- relaciones de poder, es un texto don-
da en prácticas y preconcepciones so- de se inscribe y naturaliza lo político
cioculturales acerca de la desigualdad (Campero, 2011).
de las mujeres.
A partir de esta comprensión del
El Auto 092 de 2008 de la Corte cuerpo como instrumento de lengua-
Constitucional refiere: je y de interrelación con el mundo,
se realiza un acercamiento a la dan-
“la violencia ejercida en el con- za como vía de indagación, no so-
flicto armado interno colombiano lamente como movimiento corporal
victimiza de manera diferencial acompañado por música, sino como
y agudizada a las mujeres; por producciones discursivas a través de
su condición de género están ex- “performances emocionales” (Belli,
puestas a riesgos particulares y Rom & Lupicinio, citados por Muntan-
vulnerabilidades específicas (…), yola-Saura & Belli, 2014).
que a su vez son causas de des-
plazamiento, y por lo mismo, ex- Siguiendo la percepción de Britto
plican en su conjunto el impacto (2009), las mujeres no solo son vícti-
desproporcionado; como víctimas mas en tanto madres, esposas e hijas,
sobrevivientes de actos violentos, sino que sus cuerpos han sido también
se ven forzadas a asumir roles fa- campo de batalla; por ello, la preser-
miliares, económicos y sociales vación de la memoria se hace una ta-
distintos a los acostumbrados. Las rea dolorosa, pero puede ser también
mujeres deben sobrellevar cargas una forma de conjurar el pasado trági-
materiales y psicológicas de na- co y redefinir un proyecto de vida. Lo
turaleza extrema y abrupta, que anterior pone en evidencia la necesi-
no afectan de igual manera a los dad de buscar estrategias para superar
hombres.” las repercusiones de estos hechos y las
(Corte Constitucional, 2008) implicaciones que esto tiene sobre la

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ocupación humana. una continuidad más extrema entre la
danza y la vida cotidiana, y además
Las danzas seleccionadas para permite acercar las zonas tabú de la
identificar estas estrategias de resi- interacción social, dado que propone
liencia fueron: danza orgánica, danza un modo de interacción íntimo y sen-
contacto y danza butoh. La danza or- sitivo entre individuos sin importar sus
gánica o no movimiento parte de com- diferencias y sin un valor sexual o de
prender que el ser humano tiene códi- confrontación (Menacho, 2008). Para
gos de lenguaje no verbal transmitidos esta investigación, la danza contacto
a través de sensaciones, emociones permite evidenciar desde el cuerpo los
que emite cada uno de los órganos vi- estados de resiliencia frente a los otros
tales. Toma como eje central la postu- para mí y el entorno para mí, a través
ra de Pina Bausch, para quien cobran de las actividades significativas de par-
particular importancia la gestualidad, ticipación comunitaria.
los sonidos, el silencio prolongado,
los gritos, las risas, la respiración des- En cuanto a los elementos de danza
esperada, la palabra que evoca; tiene butoh, en la investigación se utilizan la
en cuenta el expresionismo a partir de relación cuerpo y mente y la relación
la época de la postguerra y agrega que con los opuestos, que en este caso tie-
“incluso las palabras solo pueden evo- nen que ver con aspectos de malestar
car cosas, ahí es donde la danza entra vividos por las mujeres víctimas, ha-
de nuevo” (Bausch, citada por Qui- ciendo un paralelo con sus dinámicas
roga, 2012, p.4). De esta manera, la de vida y su situación actual. Teórica-
danza orgánica permite identificar el mente, se entiende que “el cuerpo en
encuentro consigo mismo, el Yo para el Butoh es el Butoh-tai, muy difícil
mí donde la mujer víctima del con- de traducir pero al que nos podemos
flicto armado realiza un autoreconoci- aproximar a través de una actitud físi-
miento desde la subjetividad de su ser. ca y mental que logre integrar los ele-
mentos dicotómicos del ser humano,
Entre tanto, la danza contacto pro- del funcionamiento de la lógica, de
vee experiencias perceptuales de los esa necesidad que tiene el cerebro, la
cuerpos externos en relación con la mente, de discernir, seleccionar, elegir
captación de experiencias internas, entre conceptos opuestos (danza-tea-
las cuales se manifiestan en la inte- tro, bueno-malo, viejo-joven, hombre
racción del propio cuerpo con las mujer, blanco-negro). En la dicotomía,
fuerzas físicas de otros que lo afectan el discernimiento, la mente elige, y de
en todo momento. Además, ofrece el los aspectos opuestos selecciona uno”
surgimiento de una fuerza creada por (Soler, 2008, p.13). La exploración se
la interacción cooperativa entre las centró en los cambios que han presen-
bailarinas a partir de los sentidos del tado las mujeres en la ciudad, desde la
tacto y kinestésico, que es definida influencia que han tenido el Estado y
por el equilibrio de las inercias, psi- el entorno en su proceso.
cologías y espíritus de los participan-
tes, entre quienes se desarrolla una A través de las técnicas descritas
conversación táctil. La danza contac- anteriormente, esta investigación bus-
to, a diferencia de otros tipos, plantea có identificar las estrategias de resi-

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liencia frente a la transformación de Previo a la toma de datos se hizo
la ocupación en mujeres víctimas de lectura de un consentimiento informa-
desplazamiento forzado por cuenta do en el que se especifican los fines
del conflicto armado colombiano. académicos de la investigación y la
confidencialidad de sus datos perso-
nales, despejando dudas y realizando
Método la respectiva aprobación del mismo. A
partir de esto se clarifica a las partici-
En el estudio realizado en la ciu- pantes que el objetivo de la investiga-
dad de Bogotá participaron cuatro ción no está centrado en la narrativa
mujeres mayores de 18 años, víctimas específica de los eventos victimizan-
de desplazamiento forzado por cuenta tes, al contrario, se propende por un
del conflicto armado, procedentes de abordaje con una perspectiva proyec-
los departamentos de Nariño, Tolima y tiva desde aspectos resilientes.
Cundinamarca; su permanencia en la
ciudad oscila entre 3 meses y 10 años.
Se utilizó un diseño de investigación Resultados y discusión
cualitativo y como instrumentos se em-
plearon: entrevistas semi estructuradas Transformación de la
con base en los constructos adoptados ocupación humana
de resiliencia y ocupación humana, e
indagación corporal a través de ele- A partir de la indagación fue eviden-
mentos de la danza orgánica, danza te que las mujeres participantes han vi-
butoh y danza contacto. vido diferentes hechos victimizantes,
no solo han sufrido el desplazamiento,
Se llevaron a cabo cuatro etapas de también delitos contra la integridad se-
recolección de datos. En la primera se xual, torturas, amenazas, homicidios y
realizó la entrevista semiestructurada desapariciones forzadas. Esto conlleva
a cada una de las participantes, en las situaciones de adversidad que se rela-
siguientes tres la indagación a partir cionan con la transformación de sus
de elementos de danza. Se inició por ocupaciones en la vida cotidiana, en-
la danza orgánica, para explorar la tendiendo que ocuparse es importante
categoría yo para mí, en relación con para las personas de todas las edades y
las actividades diarias y estructuradas. que ello contribuye al estar-bien indivi-
Posteriormente la danza butoh, para dual, al progreso y a la equidad social
la indagación de las categorías Estado (Grupo de Investigación Ocupación y
para mí y otros para mí, en relación al Realización Humana, 2011). Dichas
disfrute. Finalmente, la danza contac- transformaciones se evidenciaron, se-
to, para analizar las categorías otros gún sus narrativas, en la afectación de
para mí y entorno para mí, en relación sus roles cotidianos en razón al cambio
con la participación comunitaria. Se hostil y abrupto del contexto, el cual
realizó análisis categorial de la infor- no les garantiza los mínimos para una
mación recolectada a partir de una adecuada adaptación.
matriz de cruce de categorías diseña-
da para tal fin. Tales cambios pueden variar de
acuerdo al tiempo de permanencia en

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la ciudad, lo que se reflejaba en sus en actividades de ocio y tiempo libre,
estrategias de resiliencia y en la eje- incluso antes del desplazamiento. Sin
cución de actividades ocupacionales. embargo, las dinámicas de estas acti-
Se identificó una mayor dificultad en vidades se han visto afectadas por as-
el proceso de reestructuración del pro- pectos contextuales como la distancia
yecto de vida en las participantes que y las posibilidades de acceso. Uno de
llevaban poco tiempo en la ciudad, su- los aspectos fundamentales que me-
mado a que sus vínculos afectivos más dia la participación en estos espacios
significativos permanecían en el muni- es el recurso económico que deman-
cipio expulsor; esto genera una carga dan; mientras en sus lugares de origen
emocional adicional, dados los cam- tenían alternativas de disfrute y ocio
bios en las dinámicas de sus roles. que no significaban gastos, como ir al
río, participar de eventos locales, entre
En relación con la transformación otros; en la ciudad ir a los parques, ci-
en la participación comunitaria, esta se nes, presentaciones u otras actividades,
puede potenciar o limitar de acuerdo no solo implica gastos de desplaza-
a las características o facilitadores del miento, también de alimentación y de
entorno, que pueden ser particulares acceso. La participación en actividades
al rol que desempeñen dentro de las de disfrute se centra más en su núcleo
estructuras formales de organización familiar que en ellas mismas, en razón
comunitaria. A las limitaciones en la a una búsqueda de bienestar para sus
participación comunitaria se suma un allegados que compense las pérdidas
malestar emocional relacionado con la generadas por el conflicto armado.
culpa, el duelo y la impotencia ante la
imposibilidad de continuar haciendo Las transformaciones en la ocupa-
parte de acciones cooperativas para po- ción humana de las mujeres participan-
blaciones vulnerables, esto implica que tes contrastan con las comprensiones
su posición de liderazgo se convierta del Grupo de Trabajo Mujer y Género,
en vulnerabilidad como consecuencia por la Verdad, la Justicia, la Reparación
del desplazamiento forzado. Las parti- y la Reconciliación (2008), quienes
cipantes que han permanecido por un consideran que en el conflicto armado
periodo prolongado en la ciudad iden- el cuerpo y la dignidad de ser mujer
tificaron mayores oportunidades para son especialmente vulnerados, junto al
la participación comunitaria, desde la menosprecio por ella, también se desea
validación de su voz en los diferentes someterla, demostrar el poder de unos
espacios que les ofrece el contexto; sobre otros: de los hombres sobre las
esto redunda en su bienestar y en el mujeres y de los hombres de un bando
empoderamiento que se deriva del re- sobre las mujeres que se encuentran en
conocimiento de sus derechos, poten- el otro. El grupo afirma que se usa a
cialidades y recursos propios. la mujer y a su cuerpo como arma de
guerra para humillar al enemigo, dispo-
Finalmente, en la transformación niendo de este y de su dignidad para
de los roles ocupacionales relacio- señalar que se puede ser “dueño” de la
nados con actividades de disfrute, se vida y del placer o alegrías que ellas
evidenció que estas mujeres han reco- pueden dar; se actúa de manera arbi-
nocido su derecho a la participación traria como omnímodos dueños con un

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territorio. En períodos de conflicto ar- te en el cuidado de sus hijos/as; esta
mado, los antivalores y las tendencias estrategia es más evidente justo en el
más primitivas y violentas del hombre momento de llegada a la ciudad. Los
como género se permiten, se toleran otros facilitan el proceso resiliente, el
y reciben un permiso tácito de usar lo facilitador es la realimentación que re-
femenino al arbitrio de eso masculino ciben de la satisfacción de sus hijos/
más primitivo. Por eso, la violación de as por las acciones que ellas realizan,
los derechos de las mujeres en las gue- lo cual funciona como un reforzador
rras y los conflictos armados tiene una de su agenciamiento en la ciudad que
connotación aún más brutal que en pe- les permite tener la percepción de que
riodos diferentes. “después que estén mis hijos bien, yo
estoy bien”.
Identificación de estrategias
de resiliencia En contraste, se evidenció que en
la priorización de la estrategia resi-
Categoría Yo para mí – Otros para mí. liente de otros para mí se han dejado
Ante las situaciones de adversidad vi- en segundo plano otros roles como ser
vidas, las mujeres participantes han amiga, ser estudiante y ser pareja. Aun
generado diferentes estrategias. Si bien así, la categoría del yo para mí también
hay un ejercicio activo en las diferentes juega un papel fundamental en la resi-
categorías de resiliencia (yo para mí, liencia de las mujeres, en tanto se ma-
otros para mí, entorno para mí y Estado nifiesta en su rol de ser mujer a partir
para mí), este se enfoca en las catego- de prácticas de autocuidado y de reco-
rías otros para mí y yo para mí. De esta nocimiento de potencialidades, herra-
manera, manifestaron que su principal mientas y recursos propios, referidas
fuente de motivación es la vinculación en expresiones como: “mi misión... dar
afectiva con sus hijos, encontrándose un ejemplo de vida... de ser una mu-
narrativas como: “¡mis hijos, mi mayor jer trabajadora, verraca y echada para
motivación!”, “mis hijos, el motor de mi delante... esa es mi misión... que saco
vida, por ellos todo…”, lo cual muestra a mis hijos adelante, siempre mis hijos
que sus acciones resilientes están en- por delante…”, “lo guerreras, o sea,
caminadas al desarrollo de actividades nunca nos dejamos…”, “lo verracas
para sus hijos/as. De lo anterior se des- para salir… nunca nos dejamos vencer
prende que sus roles, como ser madre, por ninguna circunstancia”, “yo que
ser trabajadora y ser proveedora, son el soy una persona guerrera, trabajadora”,
eje fundamental para la reconstrucción “ganas de vivir”; lo cual muestra que
de su proyecto de vida en la ciudad. identifican su potencialidad de ser mu-
jer en la ciudad a partir de atribuciones
Dentro de esta categoría se eviden- de fuerza y arraigo a la vida.
cia además que el tiempo de perma-
nencia en la ciudad puede influir. El Por otra parte, en esta categoría
sentimiento por el cuidado de los otros se encuentran sus metas y sueños es-
se magnifica cuando hay una mayor tablecidos, como factores que siguen
urgencia de satisfacer las necesidades latentes a pesar de la adversidad. Es-
básicas de las personas a cargo, oca- tos conllevan la reconstrucción de
sionando que se centren exclusivamen- sus proyectos de vida, principalmen-

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te relacionados con acciones para sí razón a que favorecen el desarrollo de
mismas como estudiar, emprender actividades que dan sentido y significa-
unidades productivas y tener acceso do a sus vidas. Esto se manifestó en las
a vivienda propia, las cuales hacen referencias de las mujeres a la ciudad
parte de los procesos de reparación y como un entorno con mejores posibili-
mitigación del daño que se desarrollan dades de acceso para ellas y los suyos
en el país ante las consecuencias del en términos de salud, educación, traba-
conflicto armado. jo y actividades de disfrute, oportuni-
dades que hacen parte de los ejercicios
Marcela Lagarde (2004) menciona de restitución de derechos y que se re-
que el desarrollo del cuidado propio flejan en la interacción con el medio.
y de los otros se configura en la vida
de las mujeres como un sincretismo Como consecuencia de las oportu-
de género donde “la cultura patriarcal nidades que provee el entorno, las mu-
fomenta en las mujeres la satisfacción jeres identificaron que este valida sus
del deber de cuidar, convertido en de- habilidades y facilita que las mismas
ber ser ahistórico natural de las mujeres sean reconocidas y potenciadas. Por
y, por tanto, deseo propio y, al mismo ejemplo, la costura o el arte pueden
tiempo, la necesidad social y económi- ser vistos no solo como actividades do-
ca de participar en procesos educati- mésticas y de ocio, sino con capacidad
vos, laborales y políticos” (p.157); de de transformar su ocupación humana,
ahí que el uso del tiempo y la energía comprendiéndolas como estrategias de
se invierta prioritariamente en los otros, productividad y de construcción de so-
más que en ellas mismas, encontrando ciedad. Esto redunda en su desarrollo
que esa inversión se traduce en una re- humano, entendido como un proce-
troalimentación del deber cumplido y so de expansión de libertades del que
de retribución afectiva del cuidado. disfrutan los individuos en la elección
de una amplia gama de oportunidades
Categoría entorno para mí. Dentro de (Sen, 2000).
esta categoría se encontró que existen
algunos facilitadores que permiten el Frente a esta categoría, y en relación
proceso resiliente, los cuales son de- con la propuesta de desarrollo huma-
terminados a partir de la red de apoyo no de Amartya Sen (2000), se recono-
con que se cuente durante la llegada y ce que las posibilidades de apertura a
la permanencia en la ciudad, como re- nuevas oportunidades también están
des institucionales, sociales, familiares, mediadas por la construcción colectiva
entre otras. Otro facilitador de este pro- frente a la adversidad, lo que Sánchez
ceso es el reconocimiento del entorno, (2002) presenta como energía social y
el cual provee una percepción de se- energía cultural, que define como fuen-
guridad y mayor desenvolvimiento en tes de motivación, cohesión, persisten-
la ciudad. cia humana y acción colectiva, y que
en los discursos legos de Colombia se
Las oportunidades que provee el traduce como la búsqueda colectiva
contexto también son determinantes para salir de la vulneración constante
en la reestructuración de la ocupación a partir del dolor de patria, del dolor
humana posterior a la adversidad, en colectivo y empático. Entonces, juega

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un rol importante en la resiliencia de gente que no tiene ninguna formación
las mujeres víctimas el reconocimiento y hay gente que no sabe desempeñar-
que provea el entorno de la colectivi- se en algo, entonces pues, en un si-
dad como construcción social. tio donde no lo conocen... si es como
algo que ayuda más”.
Categoría Estado para mí. En contraste
a lo evidenciado previamente, el apor- Aporte de la corporalidad
te del Estado al proceso resiliente de frente a las estrategias de
las mujeres participantes fue percibido resiliencia
como insuficiente frente a sus necesi-
dades, dada la poca efectividad de los Es relevante analizar las formas
programas en las medidas de asisten- de indagación que se utilizaron para
cia, atención, reparación, rehabilita- identificar las estrategias de resiliencia
ción y garantías de no repetición. Tales de las mujeres víctimas ante la trans-
programas son competencia del Go- formación de la ocupación humana.
bierno Nacional, de acuerdo a la Ley A través de estos medios se logró re-
1448 de 2011 (Congreso de la Repú- conocer que las mujeres participantes
blica, 2011). Si bien se identificó que sentían mayor fluidez con la expresión
algunas medidas de asistencia huma- verbal que con la corporal, lo cual
nitaria inmediata que provee el Distri- puede entenderse como producto de
to Capital son facilitadoras del proce- que el contexto cultural ha priorizado
so de resiliencia en la satisfacción de la comunicación a través del lenguaje
necesidades básicas, se hace hincapié, hablado, dejando en segundo plano
de acuerdo a la narrativa de las mu- aspectos corporales. Si bien el lengua-
jeres, en que se deben potenciar los je verbal jugó un rol importante en la
programas de acompañamiento psico- comprensión e identificación entre las
social con el fin de facilitar estrategias participantes, y en el reconocimiento
de agenciamiento y autonomía frente de las estrategias de resiliencia, el len-
a la transformación de sus proyectos guaje corporal hizo posible un contac-
de vida, ocasionada por la guerra, y to más cercano entre ellas, la expre-
que a su vez interfiere en el desarrollo sión de emociones y sentimientos y la
sostenible del país. El Estado se con- transformación de su narrativa en un
vierte de este modo en un medio de código meta-representacional que les
control para la población, la cual se ve permitió una exploración más profun-
instrumentalizada a través de políticas da y personal de sí mismas y de las
asistencialistas enmascaradas en ayu- otras en torno a su sentir, sus sueños,
das económicas que no apuntan a las sus proyectos, su misión y su fuerza
necesidades reales de autonomía y go- motivadora en el tránsito por la ciu-
bierno sobre sus propias vidas. En este dad. La indagación corporal permitió,
sentido, las mujeres afirmaban: “no, no solamente identificar la resiliencia,
no me han tenido en cuenta porque también dio cabida al trámite emocio-
a nosotros a ninguno nos han tenido nal, generando mecanismos propios
en cuenta nunca, apenas cuando ne- de afrontamiento y re-significación.
cesitan firmas de nosotros, ahí sí nos Este trámite emocional, sumado a la
llaman. Ahí sí me conocen que yo me construcción colectiva del código
llamo Z” y “capacitación porque hay corporal, facilitó la apropiación y el

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fortalecimiento de las estrategias de sonal, de reconocimiento de sus ca-
resiliencia, el sentirse agentes en su pacidades y potencialidades a partir
propio mundo. de espacios de formación, de disfrute,
de interacción con los otros y, sobre
todo, de su productividad. Esto en
Conclusiones tanto reconocen que desde que los
hechos adversos ocurrieron, sus ac-
Las principales estrategias de resi- tividades significativas se han visto
liencia frente a la transformación de afectadas por el desarraigo, la insegu-
actividades significativas en las mu- ridad, el temor por sus vidas, la rup-
jeres participantes están relacionadas tura de vínculos afectivos, el castigo a
con el hacer por sus vínculos y el auto la organización social y, en general,
reconocimiento de capacidades y re- el cambio de estatus de habitante de
cursos propios para hacer frente a las un territorio expulsor a desplazada en
situaciones de adversidad. Ello forta- la ciudad; con lo cual han desarrolla-
lece su propósito de “salir adelante” do una intención de contraste que les
desde los sueños y metas personales genera bienestar y les permite resigni-
de reivindicación de su lugar en el ficar el desarrollo de actividades y la
mundo, de trabajo por solidaridad a participación en diferentes contextos,
la sociedad, de independencia y auto- desde la fuerza que reflejan para ha-
suficiencia, que además se refleja en cer frente a la adversidad a partir de
la comprensión de los hechos victimi- nuevos estilos de vida en la ciudad.
zantes como experiencia de aprendi-
zaje y arraigo a la vida. La indagación de estrategias de re-
siliencia a través del lenguaje corpo-
La percepción de las participan- ral permitió a las investigadoras obte-
tes frente a su capacidad de agencia- ner evidencias para cada una de las
miento en el desarrollo de actividades categorías propuestas, convirtiéndose
significativas está relacionada con la en una opción para aproximarse a la
independencia emocional y económi- subjetividad, desde el ser y el sentir
ca para la reconstrucción de su pro- propio, y para favorecer la construc-
yecto de vida en la ciudad, mediado ción colectiva.
a través del equilibrio emocional que
les puede facilitar el medio en el que Para próximas investigaciones, se
se desenvuelven. Dicho medio puede sugiere realizar un abordaje con ma-
ser transformador de sus actividades yor número de sesiones en las que
cotidianas, lo que conlleva un cam- se utilicen elementos de danza que
bio y resignificación de su ocupación favorezcan un espacio terapéutico y
humana. potencien el proceso resiliente. Se su-
giere adicionalmente indagar formas
La transformación de las activi- resilientes en mujeres víctimas de
dades significativas, a partir de las hechos diferentes al desplazamiento
estrategias de resiliencia que tienen forzado que presentan una alta pre-
las mujeres participantes, guarda re- valencia y pueden incidir de manera
lación con la búsqueda activa de significativa en la transformación de
nuevos escenarios de encuentro per- la ocupación humana de las mujeres,

36 Revista Ocupación Humana • Vol. 17 No. 1 • 2017 • ISSN-e 2590-7816


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