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Derecho Civil de Personas

Ensayo
La patria potestad como limitación al desarrollo de los adolescentes

Autora:
Andrea Grijalva Lucas

Docente:
Ab. Ciro Morán

Aula:
C-303

Febrero 2020
La patria potestad como limitación al desarrollo de los adolescentes
Por: Andrea Grijalva L

Cuando somos adolescentes gran parte de nuestros pensamientos y actos se


dirigen a encontrar el significado de la vida mediante los distintos y cotidianos
placeres que obtenemos, ya sea en fiestas con amigos, viajes, salidas, grupos
afines a alguna actividad en particular, deportes extremos, arte y relaciones
sexuales a temprana edad sin tener el debido conocimiento sobre las precauciones
para evitar riesgos de contraer un embarazo fortuito.

Con el fin de orientar al puberto y al menor adulto a tomar decisiones responsables


sobre su futuro y persona, las familias prohíben, niegan o condicionan a sus hijos
menores para autorizarlos o no a realizar determinado acto que por influencia del
entorno o curiosidad del joven desea experimentar. Frases comunes dentro del
hogar se convierten en reglas y frustraciones para los chicos, algunas tales como:
“si no ordenas tu cuarto y sacas buenas calificaciones, no sales”, “en esta casa se
hace lo que yo diga”, “mientras vivas bajo mi techo tienes que hacer lo que tus
padres quieren”, “no te atrevas a salir sin mi permiso porque yo tengo tu patria
potestad y mando sobre ti”, “mientras seas menor de edad no puedes hacer lo que
quieras”.

Estas dos últimas frases marcaron mi etapa de crecimiento y madurez como


adolescente, siempre me preguntaba por qué mi madre decía que tenía autoridad
sobre mi mediante la patria potestad, mis padres nunca estuvieron casados, pese a
vivir siempre con mi progenitora compartía momentos muy amenos con mi padre
fuera del hogar, él era muy permisivo y consentidor, mientras que mi madre muy
controladora y enojona. En el colegio, para obtener permiso de comprar algo, para
cualquier cosa siempre me pedían hablar con mi representante legal, y es aquí
donde surge la principal cuestión y causa de este ensayo argumentativo que con
mucho interés y expectativa pongo a disposición de quien lo lea, ¿es la patria
potestad y la representación legal lo mismo, hasta dónde llega la patria potestad,
qué comprende, qué es, qué función tiene, quién la ejerce, qué atribuciones y
facultades la acreditan a limitar el actuar de los menores de edad?
En las próximas paginas se expondrán las respuestas a esta interrogante que de
cierto modo no comprende únicamente el escenario jurídico sino el comportamiento
familiar.

Es menester definir los términos patria y potestad, se entiende por patria, un origen,
lugar de nacimiento, principio, de donde surge algo, y por potestad, la facultad, el
derecho de hacer o no algo y que indistintamente traerá consigo consecuencias
jurídicas, uniendo estos dos conceptos se concluye que la patria potestad es el
conjunto de derechos que tienen los padres en cuanto a las personas y bienes
sobre sus hijos no emancipados.

En base a lo antes mencionado, destaco que no es lo mismo la patria potestad que


la representación legal, ya lo establecen las leyes civiles diciendo que son
representantes legales de una persona, el padre o la madre, bajo cuya patria
potestad vive; su tutor o curador, es decir que la representación legal es un efecto
de la patria potestad. La patria potestad no es subjetiva, es un deber intransmisible,
irrenunciable e imprescriptible pese a que la autoridad judicial puede negarla a
alguno de los interesados, tendrían que comprobarse minuciosamente esos
aspectos que descarten y desacrediten la capacidad de uno de los padres para no
poder ejercerla si es que no han tenido complicaciones previas.

Por otro lado, la representación legal es ejercida por una persona a quien
legalmente se le ha confiado el poder de actuar en nombre de su representado, así
que lo obliga en cuanto no exceda los parámetros y condiciones de la delegación
que le ha sido confiada. La representación legal permite que el delegado se haga
cargo de los negocios, obligaciones y hasta derechos del representado o delegante;
que los administre y disponga de ellos según las condiciones acordadas en el
momento de crearse la representación.

Históricamente se le ha concedido a la madre el cuidado de sus hijos, mientras que


el padre ha asumido el rol del proveedor, mientras exista la institución y el contrato
de matrimonio ejercerán la patria potestad ambos padres en igual medida, en la
Antigua Roma el único que ejercía este derecho era el páter families, es un poco
contradictorio que haya sido el padre el que decida sobre sus hijos, cuando quien se
encargaba de educarlos y cuidarlos era la madre, este asunto propio del derecho de
familia ha trascendido de un escenario privado a un espacio privado-público donde
el Estado vela por los intereses y la protección de los niños, niñas y adolescentes.

Teniendo claro lo que es la patria potestad, me permito discutir cuáles son esos
derechos que tienen los padres sobre sus hijos no emancipados, donde hay
derecho hay obligación y es un ciclo recíproco entre padres e hijos, quienes se
deben y se permiten conjuntamente. Los derechos derivados de la patria potestad
van a depender de la pareja de padres unidos en matrimonio o del padre que tenga
en su facultad el poder de cuidar del menor, son derechos y obligaciones de quien
ejerce y está sometido a la patria potestad:

 Gozar del usufructo de todos los bienes del hijo de familia (hay excepciones).


 No está obligado en razón del usufructo legal, a la fianza o caución que 
generalmente deben dar los usufructuarios. 
 Administrar los bienes del hijo cuyo usufructo les concede la ley.
 No está obligado a hacer inventario solemne de ellos mientras no pase a
otras
nupcias; pero deberá llevar una descripción circunstanciada de dichos
bienes, desde que empiece a administrarlos.
 Es responsable en la administración de los bienes del hijo, hasta de la culpa
leve.
 Habrá derecho para quitar al padre o a la madre la administración de los
bienes del hijo cuando se haya hecho culpable de dolo o de grave
negligencia habitual.
 El padre o la madre, en su caso, pierde la administración de los bienes del
hijo, mientras por resolución del juez, esté suspensa la patria potestad.
 Los actos y contratos que el hijo de familia celebre fuera de su peculio
profesional o industrial, y que el padre o la madre autorice o ratifique por
escrito, obligan directamente al padre o a la madre, y subsidiariamente al hijo,
hasta el monto del beneficio que éste hubiere reportado de dichos actos o
contratos.
 No se podrán enajenar ni hipotecar en caso alguno los bienes raíces del hijo,
aún pertenecientes a su peculio profesional, sin autorización del juez, con
conocimiento de causa.
 No podrá el padre o la madre hacer donación de ninguna parte de los bienes
del hijo, ni darlos en arriendo por largo tiempo, ni aceptar o
repudiar una herencia deferida al hijo, sino en la forma y con las limitaciones
impuestas a los tutores y curadores.
 El hijo de familia no puede comparecer en juicio, como actor contra un
tercero, sino representado por el padre o la madre que ejerza la patria
potestad. Si el padre o la madre niegan su consentimiento al hijo para la
acción civil que éste quiere intentar contra un tercero, o si están inhabilitados
para prestarlo, podrá el juez suplirlo, y al hacerlo así dará al hijo un curador
para la litis.
 En las acciones civiles contra el hijo de familia deberá el actor dirigirse al 
padre o a la madre que ejerza la patria potestad, para que represente al hijo
en la litis
Si el padre o la madre que ejerza la patria potestad no pudiere o no quisiere p
restar su representación, podrá el juez suplirla, y dará al hijo un curador para
la litis.
 No será necesaria la intervención paterna para proceder penalmente contra
el hijo; pero el padre o la madre que ejerza la patria potestad
estará obligado a suministrarle los auxilios que necesite para la defensa.

Los derechos y obligaciones anteriores comprenden el cuidado, la suministración de


alimentos, la defensa, la protección y la administración de los derechos e intereses
del menor de edad, se sobreentiende que es necesaria la guía y orientación
mediante la educación, pero no por eso se debe impedir y restringir a los
adolescentes la oportunidad de adquirir nuevas experiencias que sean en beneficio
de su crecimiento personal.

Por ejemplo, el caso de los adolescentes que tienen algún talento privilegiado y
desean formarse en ello como los deportistas y artistas y que por criterio del padre
es un desperdicio invertir en ello y piensan que existen otras alternativas
supuestamente más productivas. No se puede sobreponer el interés y las
frustraciones que el padre no ha logrado satisfacer o sanar en su vida frente a los
intereses de su hijo, no puede obligarlo a elegir su vestimenta, ni imponerle sus
gustos y preferencias, ni exigirle a trabajar o estudiar algo a cambio de darle su
apoyo, peor aún escudarse en que utilizó los bienes de su hijo para su beneficio
personal simplemente porque es el padre o la madre.

La Constitución reconoce el derecho de los niños, niñas y adolescentes a construir


su identidad, pero ¿qué se puede hacer cuando el adolescente sufre
constantemente de discriminación y maltrato psicológico, verbal o físico por parte de
sus padres quienes legalmente tienen su patria potestad y representación legal?,
mucho se habla de que el Estado debe tomar las respectivas medidas, pero cuando
un menor desconoce cómo actuar y defenderse de quienes se supone que deben
protegerlo y es controlado y amenazado constantemente para que guarde silencio,
esto va más allá de hablarlo con una persona mayor de confianza que pueda
ayudarlo porque aunque no se quiera finalmente los padres van a hacer lo imposible
por quedar bien librados y maquillar su culpa.

Con el acceso a las nuevas tecnologías sería bueno una aplicación o programa en
donde los menores puedan denunciar dichos abusos sin la necesidad de un
representante legal, dándoles la credibilidad y atención necesaria, no contradecirles
diciendo que si sus padres los maltratan o castigan es porque se lo merecen, todo
ese tipo de rechazo genera en el adolescente, timidez, nerviosismo, miedo y dificulta
su capacidad para tomar decisiones correctas porque teme que para sus padres eso
sea equivocado, creando a futuro adultos inseguros, incapaces y dependientes de la
opinión ajena.

Si por suerte, los menores logran obtener la ayuda a sus perjuicios, se debe tomar
en cuenta que los padres también pueden ser privados o suspendidos del ejercicio
de la patria potestad cuando su conducta ponga en peligro la formación de los
menores o incapaces o cuando se les trate con una dureza excesiva, lo que implica
no sólo fuertes castigos físicos sino toda clase de actos que supongan crueldad o
abuso de autoridad.

También puede conducir a la privación la patria potestad, la falta del ejercicio de los
derechos y, principalmente, de los deberes que comporta la misma. Por otro lado,
los progenitores podrán ser restituidos en la patria potestad si acreditan que ya no
concurren las circunstancias que motivaron su privación, pero por mucha restitución
y perdón que conceda la ley y el hijo a su padre, el daño, el dolor emocional, el
maltrato ya han sembrado la desconfianza y la inseguridad, no existe tratamiento ni
remedio que curen la traición al amor más grande que se asume que es el de un
padre hacia un hijo.

La patria potestad finaliza con la emancipación judicial, legal o voluntaria, ya sea


que la autorice un juez, por los casos que prevea la ley especialmente el
cumplimiento de la mayoría de edad de dieciocho años o porque los padres decidan
otorgarla, la emancipación tampoco significa hacer con la propia vida lo que mi
voluntad disponga, los hijos siempre se deberán a sus padres y a devolverles lo
mucho o poco que les hayan brindado, durante sus etapas difíciles y en la
ancianidad.

Hay jóvenes que desde temprana edad muestran las actitudes necesarias y las
decisiones maduras que le permiten hacerse cargo de sí mismos , sin embargo, hay
quienes siendo mayores de edad dependen de sus padres en asuntos mínimos.
Las leyes no son exactas ni perduran en el tiempo, están sujetas a modificación
constante en medida que el hombre vaya cambiando sus acciones, aquí deben
intervenir otros factores como los valores morales, los principios y la educación que
las familias inculquen desde los primeros años de vida.

Finalmente, la patria potestad no es un argumento válido para los padres que


intenten modificar y moldear la conducta sus hijos adolescentes privándolos del
desarrollo de sus talentos y de las oportunidades para descubrirse a sí mismos, ese
poder judicial no significa hacer con mis hijos lo que me de la gana, sino protegerlos
y velar porque ninguno de sus derechos e intereses sea vulnerado, sin anteponer
los propios deseos no logrados como metas y obligaciones a cambio de cierto
apoyo o remuneración.

Los adolescentes tienen derecho a disfrutar de su vida siempre en medida de


aquello que no atente contra su seguridad e integridad, así como los hijos deben
obediencia a sus padres, y a su vez estos deben cuidado y sobre todo amor a sus
hijos, brindándoles las herramientas necesarias para su construcción como seres
humanos libres y capaces de tomar sus propias decisiones.

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