Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
ORIGINAL
Fractura de cadera y deterioro cognitivo: un estudio seccional
cruzado
Nele Manzanares Bracke, M.D.
Servicio de Traumatología del Hospital Enrique Garcés. QuitoEcuador.
________________________________________________________________________________
Resumen
El deterioro cognitivo es un factor de riesgo no modificable para fractura de cadera. Objetivo:Determinar si
los pacientes con fractura de cadera mayores de 60 años presentaron asociación con deterioro
cognitivo. Métodos: Estudio seccionalcruzado. Pacientes: Todos los pacientes mayores de 60 años
internados en traumatología del hospital Enrique Garcés (HEG) en QuitoEcuador.Recolección de
datos: Se realizó mediante: la historia clínica, entrevista con el paciente que incluyó la valoración del
estado cognitivo mediante el minimental test (MMT) y el test de las fotos, y entrevista con los familiares si
estos acompañaban al paciente durante su estancia hospitalaria. Las variables fueron analizadas en
porcentajes, Odds Ratio, intervalos de confianza y se calculó la significancia de cada uno. Resultados: De
los 56 pacientes incluidos 83,92% presentaron deterioro cognitivo, de estos 85,10% presentaron demencia
y 42,55% presentaron demencia severa. La asociación de las siguientes variables fue significativa:
pacientes mayores de 80 años con demencia severa OR 8 (IC 1,75 – 41,18), analfabetos relacionado con
demencia severa OR 5,33 (IC 1,13 – 27,97), fractura de cadera con demencia severa OR 6,28 (IC 1,54 –
30,24), fractura de cadera por caída OR 19,09 (IC 3,36 – 187,38). Conclusiones: La demencia severa
presentó una mayor asociación con edad mayor de 80 años y analfabetismo, y la fractura de cadera
presentó una mayor asociación con demencia severa y con caída.
Palabras clave: Demencia. Demencia severa. Deterioro cognitivo. Fractura de cadera.
Abstract
Cognitive impairment is a non modifiable risk factor for hip fracture. Objective: To determine if patients
older than 60 years old with hip fracture presented association with cognitive impairment.Method: Cross
sectional study. Patients. All patients older than 60 years admitted in the traumatology service of Enrique
Garcés Hospital in QuitoEcuador. Data recollection. It was made by: clinical history, interview with the
patient that included valoration of cognitive state by minimental test and the photograph test, interview with
the relatives of the patients if they where during his or her hospital stay. The variables were analyzed in
percentages and the data was utilized to evaluate if there was a mayor association between cognitive
impairment and hip fracture. Results. Of the 56 patients included 83,92% presented cognitive impairment,
of this patients 85,10% presented dementia and 42,55% presented severe dementia. The association
between the following variables was significant: patients older than 80 years old with severe dementia OR 8
(IC 1,75 – 41,18), analphabets with severe dementia OR 5,33 (IC 1,13 – 27,97), hip fracture with severe
dementia OR 6,28 (IC 1,54 – 30,24), hip fracture with falling OR 19,09 (IC 3,36 –
187,38). Conclusions: Severe dementia presented an association with age older or equal to 80 years and
analphabetism, and hip fracture presented an association with severe dementia and falling.
Keywords: Cognitive impairment. Dementia. Hip fracture. Severe dementia.
________________________________________________________________________________
Introducción
Se ha catalogado al deterioro cognitivo como un factor de riesgo no modificable para fractura de cadera. Se
realizó este estudio para conocer la prevalencia de deterioro cognitivo en pacientes mayores de 60 años en
el servicio de traumatología, ya que, no existen estudios ecuatorianos sobre el tema y para saber si hay
una mayor asociación entre fracturas de cadera y deterioro cognitivo.
La cognición se refiere al proceso mental de saber1,2 Tiene mucha relación con la memoria, la cual es
vulnerable a varios procesos patológicos3 La disfunción cognitiva más prevalente en pacientes de edad
avanzada es la demencia, que se define como un síndrome adquirido, crónico, de alteración intelectual
persistente que compromete 2 o más áreas de la cognición, que interfiera con el diario vivir del paciente.1,6
En los pacientes de edad avanzada los riesgos de caída son mayores, incrementando el riesgo de fractura
de cadera hasta 100 veces.7,8 De hecho, uno de los riesgos no modificables para fractura de cadera es el
deterioro cognitivo, ya que, en la demencia hay una disfunción en el procesamiento central como
consecuencia de degeneración estructural y neuroquímica cerebral que se evidencian a través de
disminución de la atención, apraxia de la marcha y apraxia ideomotora tres factores que aumentan en el
riesgo de caída en estos pacientes.1,2,7,15 Los pacientes con demencia tienen una incidencia anual de
caída de 4060%, el riesgo de fractura también aumenta, el pronóstico es peor y la mortalidad más
alta9,11,13
Tabla 1: Operacionalización de variable independiente
Tabla 2: Operacionalización de variables moderadoras
Objetivos
Los objetivos de este trabajo fueron:
1) Determinar la prevalencia de deterioro cognitivo en los pacientes mayores de 60 años ingresados en el
servicio de traumatología;
2) Determinar si los pacientes con fractura de cadera tienen una mayor asociación con deterioro cognitivo y
3) Investigar la causa de fracturas en pacientes con deterioro cognitivo.
Pacientes y métodos
Se realizó un estudio seccionalcruzado. Se incluyeron a todos los pacientes mayores de 60 años
internados en el servicio de traumatología del hospital Enrique Garcés, entre el 20 de noviembre del 2006
hasta el 20 de mayo del 2007, y se excluyeron a los pacientes que no quisieran ser evaluados, con
deterioro cognitivo severo que impidiera una buena evaluación, ciegos, con hipoacusia severa o sordera y
pacientes con retardo mental.
Se recolectó la información mediante entrevista, encuesta y exploración directa al paciente, y la historia
clínica del paciente. En los pacientes alfabetos se aplicó el minimental test sobre 30 puntos y en los
analfabetos el test de fotos, ambos test de cribado considerados válidos para la detección de demencia en
muestras poblacionales14,15
La variable dependiente estudiada fue la presencia de fractura de cadera. La variable independiente
analizada fue: deterioro cognitivo. Las variables de control fueron: edad y lugar. Las variables moderadoras
analizadas fueron: género, rangos de edad, severidad del deterioro cognitivo, soporte familiar, diagnóstico
traumatológico, localización de fractura, caída, antecedentes patológicos (APP) clínicos y traumatológicos.
La variable dependiente estudiada fue la presencia de fractura de cadera. La variable independiente
analizada fue: deterioro cognitivo. Las variables de control fueron: edad y lugar. Las variables moderadoras
analizadas fueron: género, rangos de edad, severidad del deterioro cognitivo, soporte familiar, diagnóstico
traumatológico, localización de fractura, caída, antecedentes patológicos (APP) clínicos y traumatológicos.
No se realizó manejo intervencionista directo de los pacientes, pero si un manejo diagnóstico. Se solicitó la
autorización de los familiares si estos acompañan al paciente, del Jefe del Servicio de Traumatología y al
Jefe del Servicio de Docencia del Hospital Enrique Garcés. Se mantuvo la confidencialidad de la
información recopilada.
Resultados
De los pacientes ingresados en traumatología durante los 6 meses estudiados 56 (93,33%) fueron
incluidos, 4 pacientes (6,66%) cumplieron con criterios de exclusión.
De los 56 pacientes incluidos, 40 fueron del género femenino (71,42%) y 16 del género masculino
(28,57%). Cumplieron criterios de deterioro cognitivo 47 pacientes (83,92%) de los cuales 7 pacientes
tuvieron deterioro cognitivo leve (14,89%) y 40 pacientes demencia (85,10%) de estos 20 (42,55%) tuvieron
demencia moderada y 20 demencia severa (42,55%).
Se incluyeron a 25 pacientes (44,64%) entre 60 a 70 años, 17 pacientes (30,35%) entre 71 a 80 años y 14
(25%) mayores de 80 años. El promedio de edad fue de 73,73 años. Del total de pacientes 12 fueron
analfabetos (21,42%), 27 primaria incompleta (48,21%), 11 primaria completa (19,64%), 5 secundaria
incompleta (8,92%) y 1 paciente con escolaridad superior (1,78%).
En cuanto al diagnóstico traumatológico 7 pacientes presentaron artrosis (12,5%), 40 fracturas (71,42%), 5
luxación (8,92%) y 4 pacientes tuvieron otros diagnósticos (7,14%). De los 40 pacientes con fracturas, 8
fueron de miembro superior (20%) y 32 de miembro inferior (80%). De los 40 pacientes que fueron
diagnosticados con fracturas, 32 se ubicaron en miembros inferiores, de estos 30 fueron fracturas de
cadera (93,75%) y 2 de pierna y pie (6,25%).
De los pacientes incluidos 18 (32,14%) refirieron antecedentes patológicos personales traumatológicos; de
los mismos 9 (50%) fueron por fractura de cadera previa y de estos, 8 (88,88%) fueron diagnosticados de
deterioro cognitivo. Se incluyeron 26 pacientes con antecedentes patológicos clínicos de importancia de los
cuales 22 (84,61%) presentaban deterioro cognitivo.
Género y deterioro cognitivo. De las pacientes femeninas, 34 (85%) presentaron deterioro cognitivo; de las
mismas, 12 presentaron demencia moderada y 16 demencia severa (47,07%). En los pacientes
masculinos, 13 (81%) presentaron deterioro cognitivo; de los mismos 8 presentaron demencia moderada y
4 demencia severa (30,76%).
Edad y estado cognitivo. De los pacientes mayores de 80 años, 14 (100%) presentaron deterioro cognitivo;
de los mismos, 10 (71,42%) presentaron demencia severa. Al relacionar las variables de pacientes
mayores de 80 años y demencia severa se encontró un odds ratio de 8, intervalo de confianza (IC) inferior
1,75, IC superior 41,18 y una significancia de 0,0014.
Alfabetismo y estado cognitivo. De los pacientes analfabetos, 11 (91,66%) presentaron deterioro cognitivo,
y de los mismos, 8 (66,66%) presentaron demencia severa. El 91,66% de los analfabetos (11 pacientes)
fueron del género femenino. Se relacionaron las variables de analfabetismo con demencia severa
obteniéndose un odds ratio de 5,33, IC inferior de 1,13, IC superior de 27,97 y una significancia de 0,012.
También se comparó primaria in completa y completa en relación a presencia o ausencia de deterioro
cognitivo obteniéndose un odds ratio de 21,67, IC inferior de 1,75, IC superior de 1062,24 y significancia de
0,0015.
Tabla 3: Relación entre las variables moderadoras con
fractura de cadera y severidad de demencia.
Fractura de cadera y deterioro cognitivo. 27 de los pacientes (90%) con fractura de cadera presentaron
deterioro cognitivo y el diagnóstico de demencia se realizó en 24 de estos pacientes (88,88%). Se
relacionaron las variables: pacientes con fractura de cadera y demencia severa, con pacientes con fractura
de cadera y demencia moderada o deterioro cognitivo leve, encontrando un odds ratio de 6,28, IC inferior
de 1,54, IC superior de 30,24 y una significancia de 0,003. También se encontró un odds ratio de 8, IC
inferior de 1,04, IC superior 68,08 y significancia de 0,016 al relacionar la variable de pacientes con fractura
de cadera y demencia severa en comparación a pacientes con fractura de cadera y sin deterioro cognitivo.
Fractura y caída. De los 56 pacientes con fractura, 39 (69,64%) sufrieron caída y 17 (30,35%) tuvieron
fractura por otras causas. 16 (80%) de los 20 pacientes con diagnóstico de demencia severa presentaron
lesión por caída. En cuanto a la causa de la fractura de cadera 28 fueron por caída (93,33%). Se asociaron
las dos variables obteniendo un OR de 19,09, IC inferior de 3,36 IC superior de 187,38 y una significancia
de 0,0000405.
En la Tabla 3 se relacionan las variables moderadoras que tienen fractura de cadera con la severidad de la
demencia.
Resultados clave:
1. De los 56 pacientes incluidos 47 (83,92%) presentaron deterioro cognitivo.
2. Al asociar las siguientes variables: pacientes con fractura de cadera y demencia severa con pacien tes
con fractura de cadera y demencia moderada o deterioro cognitivo leve, se encontró un odds ratio de 6,28,
intervalo de confianza inferior de 1,54, intervalo de confianza superior de 30,24 y una significancia de
0,003.
3. La causa de fractura de cadera en 28 pacientes fue por caída (93,33%).
Discusión
Existe un porcentaje mayor de pacientes femeninas en el estudio (71,42%), y la mayoría de las mismas
(85%) presentaron deterioro cognitivo. Esto puede deberse a que las mujeres tienen mayor expectativa de
vida y alcanzan edades de mayor riesgo,2,20 también puede tener relación con el hecho de que las
mujeres en Ecuador tienen menos oportunidades de recibir educación, disminuyendo su probabilidad de
trabajar y obtener atención médica por parte del seguro social al contrario del género masculino. No se
observó diferencia significativa en la prevalencia de deterioro cognitivo o demencia entre géneros, sin
embargo se evidenciaron diferencias en cuanto a la severidad de la misma. En el grupo femenino el
número de pacientes con demencia severa cuadriplica la del grupo masculino. Este dato coincide con la
bibliografía revisada.21 Se ha propuesto en cuanto a la demencia y el género femenino que se podría
deber a la deprivación estrogénica durante el período menopáusico, lo que aportaría para la severidad de
la demencia que presentan, junto con edad y escolaridad; teniendo en cuenta que el estrógeno según lo
reportado afecta la supervivencia neuronal en áreas cerebrales vitales para la función cognitiva, también
regula la formación de sinapsis en el hipocampo e induce la formación de enzimas como la
acetilcolinatransferasa y acetilcolinesterasa.22,23
La edad mayor de 80 años tuvo una asociación mayor con demencia severa, lo cual concuerda con la
bibliografía que la menciona como factor de riesgo.10 Existen varias teorías para el deterioro cognitivo
durante el envejecimiento normal, entre estas se encuentra una disminución del número de neuronas y de
las dendritas de las mismas particularmente en los ganglios basales que explicaría el enlentecimiento de la
función cognitiva, esto con los cambios neuroquímicos cerebrales durante el envejecimiento10 y con la
complicación por los efectos de algunas enfermedades prevalentes durante esta edad2 (78,57% de los
pacientes mayores de 80 años del estudio) podría explicar que la mayoría de pacientes y la totalidad de los
pacientes mayores de 80 años presenten demencia.
Se encontró que el ser analfabeto presenta un una mayor asociación para demencia severa. También los
pacientes con primaria incompleta tienen más riesgo que los pacientes con primaria completa para
presentar deterioro cognitivo. La educación como factor de riesgo para demencia es todavía controversial.
Se cree que la educación ayudaría a desarrollar la función cognitiva porque induce crecimiento dendrítico
en el cerebro con lo cual se explicarían los resultados de este estudio en el que ser analfabeto o con
primaria incompleta favorecería a la aparición de la demencia, al contrario de una persona con un nivel de
educación superior en las que se ha encontrado que se asocia con un riesgo reducido de padecer la
misma.21,24,25 Sin embargo en otro estudio se llegó a la conclusión que un mayor número de años de
estudio tampoco reduce el riesgo de demencia, por lo que el autor sugiere que las personas que tienen un
diploma que implicó cierto grado de dificultad tienen bajo riesgo de demencia así continúen estudiando o
no, y propone que un nivel cognitivo bajo en una edad temprana es un riesgo para demencia, inclusive
porque las personas que no logran obtener un diploma se encuentran en la obligación de realizar tareas
que no demanden mucha actividad cognitiva con lo cual el cerebro pierde estimulación y se limita la
cognición. 24 Esta última teoría de “úsalo o piérdelo” propone que un nivel educacional y ocupacional alto
es protector contra la demencia de Alzheimer por 3 mecanismos: primero establece una reserva cognitiva
al aumentar el número de sinapsis efectivas así se debe de perder más masa cerebral antes de que se
manifieste la enfermedad; segundo al aumentar la actividad intelectual el cerebro podría activar
mecanismos de reparación y recuperación, enlenteciendo la progresión de la enfermedad; y tercero otras
regiones cerebrales pueden tomar las funciones de aquellas que se encuentran afectadas al principio de la
enfermedad.26
La caída tiene mayor asociación con fractura de cadera, esto concuerda con la bibliografía y dentro de las
causas de las caídas en estos pacientes se encuentran: apraxia de la marcha, apraxia ideomotora,
disminución de la atención, medicamentos utilizados por los pacientes, desórdenes cardiovasculares entre
otros,1,2,11,13,27
Las limitaciones que se tuvieron fueron: tamaño de la muestra, falta de familiares de pacientes que
pudieran otorgar el consentimiento informado y la historia clínica del paciente, falta de recursos
económicos para realizar exámenes diagnósticos complementarios para determinar tipo de demencia, y la
utilización de dos test de tamizaje.
Referencias
1. Christopher G. Gotetz, MD; Eric J. Pappert, MD. Textbook of Clinical Neurology. 1ra edición. Estados
Unidos de América, Saunders Company, 1999, 514p.
2. Robert E. Hales, MD; Stuart C. Yudofsky, MD; John A. Talbott, MD. Tratado de Psiquiatría. 2da edición.
Barcelona España, S.A. Mallorca, 1996, 1550 p.
3. Andrew E. Budson, M.D., and Bruce H. Price, M. D.. Memory Dysfunction. N Engl J Med 2005;352:6929.
4. David S. Knopman, MD; Bradley F. Boeve, MD; and Ronald C. Petesen, PhD. Essentials of the Proper
Diagnoses of Mild Cognitive Impairment, Dementia, and Major Subtypes of Dementia. Mayo Clin Proc.
2003;78:12901308.
5. Kevin C. Fleming, M.D., Jonathan M. Evans, M.D., David C. Weber, M.D., and Darryl S. Chutka, M.D.
Practical Functional Assessment of Elderly Persons: A PrimaryCare Approach. Mayo Cin Proc 1995;
70:890910
6. S. LópezPousa, J. GarreOlmo, S. MonserratVila, M. BoadaRovira, L. TárragaMestre, M. Aguilar
Barberá, et al. Propuesta para un registro clínico de demencias. REV NEUROL 2006; 43: 328.
7. Charles A. Rockwood, Robert W., Md. Bucholz, James D., Md. Heckman, David P. Green. Rockwood
and Green`s Fractures in Adults. Quinta edición. Estados Unidos de América, Lippincott Williams & Wilkins
Publishers. 2001.
8. Gene Feder, Margaret Clark, Jacqueline Close, Colin Cryer, Carolyn CzoskiMurray, David Green, et. Al.
Falls: The assessment and prevention of falls in older people. LondonEngland. National Institute for Clinical
Excellence; 2004 Nov. 29 p. ISBN: 1842578294.
9. Josefa Sotorres Sentandreu. Morbilidad y mortalidad en pacientes con fractura de cadera [Tesis].
Valencia, España: Universidad de Valencia; 2004.
10. J. Grimely Evans, T. Frankin Williams. Oxford Textbook of Geriatric Medicine. Oxford Medical
Publications. 2000.
11. Fiona E. Shaw, Rose Anne Kenny. Can falls in patients with dementia be prevented?. Age and Ageing
1998; 27: 79
12. Claudia H. Kawas, M.D. Early Alzheimer´s Disease. N Engl J Med 2003; 349:105663.
13. S. Della Sala, H. Spinnler and A. Venneri. Walking difficulties in patients with Alzheimer`s disease might
originate from gait apraxia. Journal of Neurology Neurosurgery and Psychiatry 2004; 75: 196201
14. C. VillanuevaIza, F. BermejoPareja, A. BerbelGarcía, R. TrincadoSoriano, J. RiveraNavarro.
Validación de un protocolo clínico para la detección de demencia en ámbito poblacional. REV NEUROL
2003; 36: 11216
15. C. CarneroPardo, M.T. MontoroRíos. Test de las fotos. REV NEUROL 2004; 39:8016.
16. S. Della Sala, A. Francescani, H. Spinnler. Gait apraxia after bilateral supplementary motor area lesion.
Journal of Neurology, Neurosurgery and Psychiatry 2002; 72:7785.
17. F. AbadSantos, J. NovalbosReina, S. GallegoSandín, A.G. García. Tratamiento del deterioro
cognitivo leve: utilidad de la citicolina. REV NEUROL 2002; 35:67582.
18. L. E. FontánScheitler, J. LorenzoOtero, A. SilveiraBrussain. Perfil de alteración en el MiniMental
State Examination en pacientes con deterioro cognitivo leve. REV NEUROL 2002; 35:67582.
19. Kevin C. Fleming, M.D., Andrea C. Adams, M.D., and Ronald C. Petersen, Ph.D., M.D. Dementia:
Diagnosis and Evaluation. Mayo Clin Proc 1995; 70:10931107
20. Paz Guilló Martínez. Comprender el Alzheimer. Primera edición. ValenciaEspaña. Generalitat
Valenciana. Conselleria de Sanitat; 2002.
21. I. McDowell, G. Hill, J. Lindsay, B. Kristjansson, L. Costa, B.L. Beattie, et. Al. Canadian Study of Health
and Aging. Canada. CSHA.ca. 2004
22. Alejandro Rodríguez Constantín, Clemente Couso Seoane, María Iluminada Orozco González, Inés
Aurora del Pino Boytel y Alicia Tintores Tamés. Factores de riesgo asociados a la demencia degenerativa
en pacientes geriátricos. Rev Cubana Med Gen Integr 2003; 19(2).
23. Richard Mayeux, M. D. Can Estrogen or Selective Estrogen Receptor Modulators Preserve cognitive
Function in Elderly Women? N Engl J Med 2001; 344:16.
24. L Letenneur, V Gilleron, D Commenges, C Helmer, J M Orgogozo and J F Dartigues. Are sex and
educational level independent predictors of dementia and Alzheimer´s disease? Incidence data from the
PAQUID Project. Journal of Neurology Neurosurgery and Psychiatry 1999; 66:177183.
25. L. H. Kuller. Factores de riesgo de la demencia en el Cardiovascular Health Study Cognition Study. III
Conferencia BarcelonaPittsburgh. REV NEUROL 2003; 37:1226.
26. John V Bowler, David G Munoz, Harold Merskey and Vladimir Hachinski. Factors affecting the age of
onset and rate of progresión of Alzheimer´s disease. Journal of Neurology Neurosurgery and Psychiatry
1998; 65:184190.
27. Richard J. Perry and John R. Hodges. Attention and executive deficits in Alzheimer`s disease. A critical
review. Brain 1999; 122: 383404.