Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Vivimos en un mundo que, desde hace algunos años, está al punto del colapso
en diferentes ámbitos: político, económico, social, ecológico y humano. Esto nos
lleva a preguntarnos ¿En qué estamos fallando? ¿Por qué, a pesar de que hemos
alcanzado un gran desarrollo a nivel tecnológico y científico, no hemos podido
superar situaciones adversas como el hambre, las guerras, el egoísmo, la
inequidad, la injusticia, la destrucción y el odio, entre muchas otras más? Ante las
distintas respuestas que se ha dado, la mayoría de ellas desde el ámbito
económico tradicional, sosteniendo que entre más bienes tengamos, podremos
ser más felices, y que entre más personas tengan acceso a estos bienes, existirá
un mayor desarrollo, podemos notar que esto no es así. El afán por acumular
riquezas y bienes por parte de unos pocos (países y personas), buscando su
propio bienestar y progreso, ha llevado a que muchas personas, sobre todo, de los
denominados países subdesarrollados, vivan situaciones que atentan contra la
dignidad del ser humano y que no puedan satisfacer sus necesidades básicas que
les permitan vivir de la mejor manera. Ante esta realidad, existen propuestas
como las de Manfred Max-Neef y el Pensador económico Amartya Kumar Sen,
que pretenden transformar la manera como se concibe el desarrollo económico,
buscando plantear soluciones que ayuden a superar desde las bases, esas
situaciones adversas que nos agobian.
Dentro del mismo enfoque que Max-Neef se encuentra Amartya Kumar Sen,
pues según Rafael Cejudo Córdoba: “en el corazón de su perspectiva
interdisciplinar se halla una noción de capacidad, el enfoque de las capacidades
(capabilities approach), que vincula la calidad de vida y el bienestar con la libertad.
Con ayuda de esta concepción se ha ido formulando un concepto de desarrollo
humano consistente en el proceso de aumentar las oportunidades de las
personas.[CITATION Cej06 \p 365 \l 9226 ] . Según Sen, el bienestar de una persona se
puede medir analizando su calidad de vida y esta puede entenderse como un
conjunto de funcionamientos interrelacionados entre sí, basados en estados y
acciones que se promueven a través del desarrollo de sus capacidades
El análisis de estos dos pensadores, nos permite comprender el desarrollo más
allá de la elaboración de objetos y modificación del medio físico, debido a que
supone la preponderancia de lo humano en todo su contexto.
La economía es transversal a la vida del ser humano pues casi todas sus
acciones tienen que ver con ella, desde el inicio de la civilización cuando el
hombre se torna sedentario, acumulador y siente la necesidad de modificar el
medio físico que lo rodea hasta el consumismo desmesurado que da cuenta de
políticas económicas poco o nada sustentables.
Es claro que sus postulados riñen con el neoliberalismo que propende por la
competencia, el predominio del mercado y el desdeño de la satisfacción plena de
las necesidades humanas de la mayoría de los individuos. Además, de la
explotación indiscriminada de los recursos con el objetivo de acumular riquezas.
Es claro que esta visión económica es dominante en el mundo entero por lo que
cada vez más se ven grandes grupos de persona en situación carencial. En
Colombia existen altos índices de pobreza lo que implica la insatisfacción de
necesidades básicas como la alimentación que desbordan en necesidades
afectivas insatisfechas.