Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
En la novela Las tentaciones de san Antonio de Gustave Flaubert, considerada por otros
trabajo investigativo que resulta sofocante y tedioso para quien se acerque a la obra
esperando encontrar un rato de distracción o relajación mental. En ella hay una cantidad
de las muy variadas culturas y de diversas épocas plasmadas en esta obra. En este
ensayo se pretende señalar que una de las ideas principales, si no es que la fundamental,
La novela sobre la que se basa este ensayo narra el mito de la tentación de san
Antonio que, tras sentirse desdichado por el tipo de vida que lleva, la soledad, tantas
carnales, llega a dudar que la vida que eligió sea la correcta, con todas las verdades
(morales, religiosas, etc.) que ello conlleva, y termina siendo tentado por el Diablo por
medio de diversas ilusiones. Podría decirse que Antonio tiene un combate interior entre
la fe, incapaz de cuestionar la realidad, y las pasiones y la razón científica, que observa
elemento propio del romanticismo, el momento más propicio del sujeto para la
Novalis. Por ello, para explicar lo referente a este recurso romántico se usará la
siguiente cita:
la que el autor intentaba encontrar una escapatoria de su realidad yendo por una época
lejana al escribir, así como ver lo sublime en cuanto a grandeza absoluta en este caso de
la idolatría con la figura de san Antonio como un incomprendido, pues él decía vivir de
provocar la ceguera emocional y la falta de límites.” (Costa: 111) Esto explicaría que
Ahora bien, para tener una noción más clara de la propuesta hecha por Flaubert a
propuesta por Goldmann. La primera (la clase social) tiene una función de producción
para determinar una clase específica, al igual pueden establecer relaciones con otras
clases y tienen una escala de valores; por lo que estas tendrán visiones del mundo que
incapacidad de ofrecer una respuesta de organización social general; por lo tanto, esta
caso, San Antonio forma parte de las clases sociales y, el Diablo, presente gran parte de
sociales. Esto se puede afirmar ya que, al principio de la obra, se expresa de parte del
mismo protagonista, su relación con las distintas clases sociales antes de su retiro; por
de una vida como ciudadano a una como eremita. Mientras que el tentador, quien le
nuestro protagonista.
Saba, la opulencia del rey Nabucodonosor, entre otros. Para mostrar cómo los valores y
creencias del protagonista pueden verse puestas en tela de juicio mediante las
tentaciones, y aún así este las pueda rechazar, el autor recurre al empleo de las imágenes
grotescas.
no solo en cuanto a integrantes, sino miembros de su cuerpo: “Les crecen brazos en los
hombros, y en los brazos manos que llevan estandartes, hachas, escudos, espadas,
quitasoles y tambores. Les brotan fuentes de la cabeza y les salen hierbas en los
orificios de la nariz.” (Flaubert: 86) También se podría pensar en las expresiones del
personaje como muestra de lo aferrado que se encuentra a sus propias creencias, o bien
lo curioso de tener su religión como la única, sin respetar o considerar cualquier otra, lo
dicho se observa en el siguiente fragmento: “ aparece una criatura singular, con cabeza
de hombre y cuerpo de pez. Avanza por los aires en línea recta, pegando con la cola en
la arena; y esta figura de patriarca con brazos cortitos provoca la risa de Antonio.”
(Flaubert: 91)
filosóficos, presentados por los teólogos cristianos y los herejes, los cuales resultan más
parte de los mismos dioses, pues estos se lamentan porque han perdido su poder y, uno
HÉRCULES
se ha quitado su piel de león y afianzándose con los pies, arqueando la espalda y
mordiéndose los labios, hace esfuerzos desmesurados para sostener el Olimpo que se derrumba.
“Vencí a los Cercopes, a las Amazonas y a los Centauros. Maté a muchos reyes.
Rompí el cuerno de Aquelo, que era un gran río. Seccioné montañas, uní océanos. A los
países esclavos, yo los liberaba y a los países deshabitados, yo los poblaba. Recorrí las
Galias. Atravesé el desierto en donde uno siente tanta sed. Defendí a los dioses y me
deshice de Ónfale. Pero el Olimpo pesa demasiado. Mis brazos pierden fuerza. ¡Me
muero!”
Hércules cae aplastado por los escombros. (Flaubert: 107)
Inclusive, se hace mención del Dios de Israel, el mismo reconocido por los
cristianos, que pierde su fuerza. Él que había inundado el mundo, liberado, guiado y
fiesta de resurrección; cada golpe contra el viejo mundo facilita el nacimiento del
nuevo. Esto queda más claro en la afirmación de Bajtín acerca de que la muerte, en este
Pasando esto es el momento que nos resulta más crucial para el tema que estamos
a su suerte, hasta que aparece un haz de luz muy peculiar, el Diablo, quien dice de sí
mismo “me llaman la Ciencia”. (Flaubert: 117) Este es propuesto como el portador de la
incuestionables de la religión.
los misterios más lejanos que se le han planteado al hombre. “Por eso habla Bajtin de
nuevo y superior (...) es ambivalente porque niega y afirma a la vez, porque lo inferior
que Flaubert nos presenta de las explicaciones religiosas que se conocían acerca del
mundo, o de las que el autor tenía conocimiento, y no eran pocas, estaba en función de
la presentación de una visión más madura y superior a esta: la visión racional científica.
rechaza; y, por último, surgen las apariciones de las criaturas mitológicas, la Quimera y
la Esfinge, que tienen una discusión y terminan desapareciendo, la primera por los aires
y la otra tragada por la tierra. También surgen criaturas como el Grifo, el Cinocéfalo, el
insinuación, de parte de Flaubert, de que todo este mundo de fantasías que se quiso
resurgir.
pesar de no utilizar Flaubert la teoría del reflejo, sino hacer de su novela toda una
metáfora para hacer una crítica a las clases sociales aún apegadas a la religión o, más
bien, alejados de su entorno, quienes, según él, impedían el progreso. O bien, cerrar con
romanticismo.
Bibliografía
Barcelona.
Rodríguez Pequeño, Javier (2001) “Poética del realismo grotesco: el carnaval en El
1989.