NÚMERO DE PRÁCTICA PRE-PROFESIONALES: A.02 NOMBRE DE LA PRÁCTICA: BIOFUMIGACION 1. DATOS INFORMATIVOS: CARRERA: AGRONÓMÍA ESTUDIANTE: HUGO NICOLÁS GUMÁN HOLGUÍN CICLO/NIVEL: SÉPTIMO DOCENTE RESPONSABLE: DR. SALOMÓN BARREZUETA UNDA 2. FUNDAMENTACIÓN Biofumigación Es el control de plagas y patógenos del suelo por medio de la liberación en el suelo de compuestos originados naturalmente de la descomposición de residuos orgánicos. Una amplia gama de residuos orgánicos puede ser utilizados para biofumigar, desde distintos tipos de estiércoles a residuos de cultivos como batata, papa, sorgo, maíz, entre otros (INTA, 2005). La biofumigación, es una alternativa orgánica utilizada para la desinfección del suelo en la producción de hortalizas, ya sea al aire libre o bajo invernadero. Esta consiste en la incorporación de material vegetal al suelo en el momento de la preparación del mismo, es decir antes de sembrar. Este material vegetal, al descomponerse, produce sustancias tóxicas volátiles que elimina hongos y nematodos perjudiciales para los cultivos (Carrasco, 2020). 3. OBJETIVOS: • Preparar con hojas de col, lechuga, y otras hortalizas de hoja un sustrato para generar gases tóxicos para los nematodos e insectos barrenadores de la raíz del cocotero. • Construir varias fosas para colocar el sustrato y fermentar con urea y compost, para de esta forma lograr la biofumigación. 4. MATERIALES 4.1 EQUIPOS Y MATERIALES • Urea • Lechuga • Brócoli • Repollo • Hojarasca • Col • Palas • Plástico transparente • Machete • Fundas plásticas 5. PROCEDIMIENTOS Con las fundas plásticas se recolectó hojarasca de la cacaotera, la cual se usó como materia orgánica. Se realizó un cuadrado de 0,5 x 0,5 m y 15 cm de profundidad en el suelo, cerca del cultivo de mango. Con un machete se picaron las hojas de lechuga, col y demás hortalizas. Se cubrieron los restos picados de las hortalizas con una capa de hojarasca. Se agregó la urea de manera uniforme y con una pala se mezcló. Con la misma pala se agrega un poco de suelo que anteriormente se extrajo y se coloca el plástico transparente. Finalmente, se agrega suelo alrededor del plástico para garantizar la hermeticidad y los gases no se liberen. 6. RESULTADOS Para verificar eficiencia, se colocaron semillas de lechuga con la finalidad de observar su comportamiento, lo cual nos indicaba que si estas emergían se debía a que debió haber una mala realización en el procedimiento, lo que acidifico el pH, por lo tanto, había presencia de hongos, bacterias y nematodos. En esta ocasión si hubo formación de gases (glucosinolatos) y a su vez presentaba un pH de neutro a alcalino. 7. CONCLUSIONES Se elaboraron fosas para biofumigación donde se colocaron hojas de hortalizas como col y lechuga, materia orgánica como hojarasca y urea, que debido a la mezcla de estos se producirán gases capaces de eliminar nematodos u otros insectos que puedan resultar nocivos para los mangos. 8. RECOMENDACIONES Recolectar y agregar la hojarasca que ya se encuentre en proceso de descomposición para evitar tomar la superficial. Utilizar guantes para manipular la urea o verificar que no se tenga heridas en la mano antes de hacerlo. 9. BIBLIOGRAFÍA • INTA. (2005). La biofumigación en el marco del MIP y Enfermedades en cultivos Hortícolas. Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria. • Carrasco, J. (2020). Biofumigación: Una alternativa orgánica para la desinfección de suelos en invernaderos. Instituto de Investigaciones Agropecuarias. 10. ANEXOS