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ESTUDIO BÍBLICO: SANTIAGO

El autor: En hebreo es YA”AKOV / En griego IAKOBOS

a. Santiago: Hay varios hombres con el nombre de Santiago mencionados en el Nuevo Testamento, pero la tradición
confiable asigna este libro a aquel llamado Santiago el Justo, el medio hermano de Jesús (Mateo 13:155), y hermano de
Judas (Judas 1), el cual dirigió la iglesia en Jerusalén (Hechos 15:13).

i. Otros hombres con el nombre de Santiago son:


· Santiago, hermano de Juan hijo de Zebedeo, el primer apóstol martirizado, también conocido como Santiago el Menor
(Mateo 10:2, Marcos 15:40, Hechos 12:2).
· Santiago (Jacobo) el hijo de Alfeo, otro de los doce discípulos (Mateo 10:3).
· Santiago, el padre del «otro» apóstol Judas (Lucas 6:16).

ii. El escritor de esta carta es el mismo Santiago que recibió una aparición especial de Jesús en la resurrección (1
Corintios 15:7). Esta fue probablemente la causa de su conversión, porque hasta ese momento los hermanos de Jesús
parecían no apoyar ni su mensaje ni su misión (Juan 7:5).

iii. Cuando siguió a Jesús, lo hizo con gran devoción. Una historia temprana de la iglesia dice que Santiago fue tal hombre
de oración que sus rodillas tenían callos grandes y gruesos, que parecían las rodillas de un camello. También dice que
Santiago fue martirizado en Jerusalén, ya que lo empujaron desde un punto alto del templo. Sin embargo, la caída no lo
mató, y en el suelo fue golpeado hasta morir, incluso mientras oraba por sus atacantes.

SANTIAGO 1: UNA FE VIVA EN LAS PRUEBAS Y TENTACIONES


A. Pruebas y sabiduría
1. (1) Saludos de Santiago
Santiago, siervo de Dios y del Señor Jesucristo, a las doce tribus que están en la dispersión: Salud.

b. Siervo de Dios y del Señor Jesucristo: Saber que este Santiago era el medio hermano de Jesús hace que su auto-
introducción sea más significativa. Él no se proclama a sí mismo como «el hermano de Jesús», sino solo como un siervo
de Dios y del Señor Jesucristo. Jesús no era solamente el hermano de Santiago, Él era su Señor, lo que es más importante
aún.

i. La palabra siervo es importante. Se traduce de la antigua palabra griega doulos: «Un esclavo, un siervo, uno que está
en constante servidumbre hacia otro. Señor es una palabra importante. Se traduce de la antigua palabra griega kurios.
Esto significa que Santiago consideraba a Jesús Dios.

c. A las doce tribus: A lo que se refiere Santiago con la referencia de las doce tribus es difícil de entender. ¿Está Santiago
escribiendo una carta solamente a los cristianos con un trasfondo judío, o a todos los cristianos? En verdad, la carta
aplica para todos los cristianos; pero, probablemente, Santiago la escribió antes de que los gentiles fueran traídos a la
iglesia, o antes de que emergieran los cristianos gentiles en un número significativo.

vi. De muchas maneras, escuchamos al libro de Santiago debido a que repite las enseñanzas de Jesús. Hay al menos
quince alusiones al Sermón del Monte en Santiago. Santiago era un hombre que conocía las enseñanzas de Jesús y que
las tomó en serio cuando escribió esta carta.

d. Salud: El saludo «Salud» era la costumbre griega para comenzar una carta. Pablo nunca lo usó, él prefería saludar a
sus lectores con las palabras «gracia y paz». Pero aquí Santiago usa un saludo más común.
2. (2-4) Paciencia en las pruebas

a. Tened por sumo gozo cuando os halléis en diversas pruebas: Santiago considera las pruebas como inevitables. Él dice
«cuando», y no «si» os halléis en diversas pruebas. Al mismo tiempo, las pruebas son ocasiones para el gozo, no para
una resignación desalentadora. Podemos tened sumo gozo en medio de las pruebas, debido a que son utilizadas para
producir paciencia.

iv. Paciencia proviene de la antigua palabra griega hupomone. Esta palabra no describe una espera pasiva, sino el «sufrir
sin rendirse». No es tanto la cualidad que te ayuda a aguardar calladamente en la sala de espera de un doctor, sino la
cualidad que te ayuda a terminar el maratón.

b. Sabiendo que la prueba de vuestra fe produce paciencia: La fe no es «producida» en las pruebas, es «probada» a
través de las pruebas. Las pruebas revelan qué tipo de fe tenemos; no debido a que Dios no sepa qué tipo de fe
tenemos, sino para hacer nuestra fe evidente a nosotros mismos y a aquellos a nuestro alrededor.

ii. ¿Si las pruebas no producen fe, entonces qué lo hace? Romanos 10:17 nos dice: «Así que la fe es por el oír, y el oír,
por la palabra de Dios». La fe es edificada en nosotros mientras oímos, entendemos y confiamos en la Palabra de Dios.

iii. Santiago no quería que nadie pensara que Dios envía las pruebas para quebrantar o destruir nuestra fe; por lo tanto,
volverá a retomar este punto en Santiago 1:13-18.

3. (5-8) ¿Cómo recibir la sabiduría que necesitas de Dios?


a. Y si alguno de vosotros tiene falta de sabiduría: Las pruebas son temporadas necesarias para buscar sabiduría de Dios.
Muy a menudo no sabíamos que necesitábamos sabiduría sino hasta que llegaron nuestras pruebas. Ya dentro del
tiempo de prueba, debemos de saber si una prueba en particular es algo que Dios quiere que eliminemos por fe o algo
en lo que quiere que preservemos por fe. Y esto requiere sabiduría. En las pruebas necesitamos la sabiduría mucho más
que el «conocimiento». El conocimiento es información en bruto, pero la sabiduría es la que te dice cómo usar esta
información.

Semejante a la onda del mar, que es arrastrada por el viento: «El hombre que no está completamente persuadido de
que si pide a Dios recibirá, se asemeja a una ola del mar; está en un estado de agitación continua, impulsado por el
viento, echado de una parte a otra: ahora la esperanza lo levanta, luego se hunde por la desesperación».

ii. La onda del mar es una descripción adecuada de quien se ve obstaculizado por la incredulidad y las dudas
innecesarias:

· La onda del mar «no tiene descanso», y lo mismo ocurre con los que dudan.
· La onda del mar «es inestable», y también lo es el que duda.
· La onda del mar «es impulsada por los vientos», y también lo es el que duda.
· La onda del mar «es capaz de una gran destrucción», y también lo es el que duda.

e. El hombre de doble ánimo es inconstante en todos sus caminos: Pedir a Dios, pero pedirle dudando de alguna
manera, muestra que somos de doble ánimo. Si no tuviéramos fe, entonces ni siquiera pediríamos; pero si no
tuviéramos incredulidad, entonces no dudaríamos. Estar a mitad del camino, entre la fe y la incredulidad, es ser de doble
ánimo.

4. (9-11) Ánimo para aquellos afectados por las pruebas

B. VIVIENDO PARA EL SEÑOR EN TIEMPOS DE TENTACIÓN

1. (12) Una bendición para aquellos que soportan la tentación


Esto suena como una de las bienaventuranzas de Jesús en el Sermón del Monte (Mateo 5:1-12). En esas grandes
declaraciones de bendición, Jesús no había terminado de decirnos cómo podemos ser bienaventurados. Aquí
aprendemos que podemos ser bienaventurados mientras soportamos la tentación.

Aquí Santiago declara el propósito de Dios al permitir la tentación. El propósito es «aprobarnos»; que a través de la
prueba nos revelemos como genuinos y fuertes en nuestra fe.

2. (13-16) ¿Cómo llegan las tentaciones?


La tentación no viene de parte de Dios. A pesar de que Él la permite, Él, en sí mismo, no nos seduce a hacer mal; Dios
puede probar nuestra fe sin una solicitud al mal (ni él tienta a nadie).

3. (17-18) La bondad de Dios permanece, en contraste con las tentaciones a las cuales nos enfrentamos
i. En los versos anteriores, Santiago nos dijo lo que la lujuria del hombre produce: el pecado y la muerte. Aquí nos dice lo
que la voluntad del Dios bueno trae: la salvación para nosotros, como una especie de primicias de sus criaturas.

4. (19-20) Manteniéndonos firmes en contra de una ira pecaminosa


a. Todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse: Podemos aprender cómo ser tardo para
airarse al aprender primero a ser pronto para oír y tardo para hablar. Mucha de nuestra ira y enojo proviene de estar
centrados en nosotros mismos y no centrados en los demás. Pronto para oír, es una manera de estar centrados en los
demás. Tardo para hablar, es una manera de estar centrados en los demás.Nuestra ira siempre defiende nuestra propia
agenda.

5. (21) Estando firmes en contra de las lujurias de la carne

6. (22-25) ¿Cómo recibir la Palabra de Dios?


ii. Jesús utilizó el mismo punto para concluir su gran Sermón del Monte. Él dijo que aquel que escuchaba la Palabra sin
aplicarla era semejante a un hombre que edificó su casa sobre la arena; pero el que escuchaba la Palabra de Dios y la
hacía era como un hombre que edificó su casa sobre la roca, la cual podía soportar las inevitables tormentas de la vida y
la eternidad (Mateo 7:24-27).

7. (26-27) Ejemplos de lo que significa el ser un hacedor de la Palabra de Dios


La religión del tal es vana: Tu caminar con Dios es vano si no se traduce en la manera en la que vives y en la que tratas a
los demás. Muchos son engañados en su propio corazón con respecto a la realidad de su caminar con Dios.

ii. «La verdadera religión no solo da algo para el alivio de los afligidos, sino que los visita, los supervisa, los cuida; esto es
lo que significa episkeptesthai. Va a sus casas y habla a sus corazones, alivia sus necesidades, simpatiza con ellos en sus
angustias, los instruye en las cosas divinas y los encomienda a Dios; y todo esto lo hace por el Señor. Esta es la religión
de Cristo». (Clarke)

SANTIAGO 2: UNA FE VIVA EN LA VIDA DE LA IGLESIA


A. PARCIALIDAD Y DISCRIMINACIÓN EN LA FAMILIA DE DIOS
1. (1) El principio establecido
Hermanos míos, que vuestra fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo sea sin acepción de personas.

a. La fe gloriosa que tenemos, la fe en nuestro Señor Jesucristo, nunca debe estar asociada con acepción de personas
(discriminación). El mismo glorioso Señor no mostró parcialidad (Deuteronomio 10:17, Hechos 10:34), así que tampoco
deben de hacerlo los que han puesto su confianza en Él.

i. Un aspecto significativo de la obra de Jesús era el romper esas murallas que dividían a la humanidad, y traer adelante
una nueva raza humana en Él (Efesios 2:14-15). La unidad y apertura de la iglesia primitiva era un asombro para el
mundo antiguo. Pero esa unidad no llegó automáticamente. Como se muestra en este mandato de Santiago, los
apóstoles debían de enseñar a la iglesia primitiva a tener la fe en nuestro glorioso Señor Jesucristo […] sin acepción de
personas.
2. (2-4) Un ejemplo del tipo de parcialidad que no debe de tener lugar entre los cristianos

3. (5-7) La parcialidad del hombre en raras ocasiones está de acuerdo con el corazón de Dios
Cuando elegimos a las personas por su apariencia, entonces perdemos el enfoque de Dios. Recuerde que Judas
aparentaba tener mejores características de liderazgo que Pedro.

4. (8-9) La parcialidad es condenada por las Escrituras

5. (10-13) El asunto serio de obedecer todos los mandamientos de Dios


Aquí Santiago nos advierte acerca de tener una obediencia selectiva, que es esa clase de obediencia que selecciona y
escoge los mandamientos de Dios que deben de ser obedecidos y los mandamientos que se pueden ignorar de una
forma segura.
Santiago está relatando otro principio dado por Jesús en el Sermón del Monte: «Porque con el juicio con que juzgáis,
seréis juzgados, y con la medida con que medís, os será medido» (Mateo 7:2).

B. LA DEMOSTRACIÓN DE UNA FE VIVIENTE EN ACCIONES DE AMOR


(14) El principio establecido: una verdadera fe estará acompañada de acción

2. (15-17) Un ejemplo de fe muerta

3. (18-19) Una fe viva no se puede separar de las obras


La apelación de Santiago es clara y lógica. No podemos «ver» la fe de alguien, pero podemos «ver» sus obras. No puedes
ver fe sin obras, pues la realidad de la fe se demuestra por las obras.

c. Tú crees que Dios es uno; bien haces. También los demonios creen, y tiemblan: La falacia de la fe sin obras es
demostrada por los demonios, los cuales tienen una fe «muerta» en Dios. Los demonios creen en el sentido de que
reconocen que Dios existe. Pero esa «fe» no hace nada por los demonios, debido a que no es una fe real, y es probada
por el hecho de que no tiene obras en ella.

4. (20-24) Abraham como un ejemplo de fe viva


Abraham fue justificado por la fe mucho antes de que ofreciera a Isaac (Génesis 15:6). Pero su obediencia al ofrecer a
Isaac demostró que realmente confiaba en Dios.

5. (25-26) Rahab como un ejemplo de una fe viva


b. Rahab la ramera, ¿no fue justificada por obras?: Rahab demostró su confianza en el Dios de Israel al esconder a los
espías y al buscar salvación de su Dios (Josué 2:8-13). Su fe se mostró como una fe viva debido a que hizo algo. Su
convicción en el Dios de Israel no hubiera salvado su vida si ella no hubiera hecho algo con esa fe.

i. La lección de Abraham es clara: si creemos en Dios, entonces haremos lo que Él nos diga que hagamos. La lección de
Rahab también es clara: si creemos en Dios, entonces ayudaremos a su pueblo, aun cuando tengamos que pagar un
costo.

SANTIAGO 3: DOMANDO LA LENGUA SALVAJE


A. LA DEMOSTRACIÓN DE UNA FE VIVA AL CONTROLAR LO QUE DECIMOS
1. (1-2) Observaciones de entrada
No os hagáis maestros muchos de vosotros: Santiago tiene una amonestación sobria para aquellos que se hacen
maestros en la iglesia. Ellos deben de tomar en serio esta responsabilidad, porque su responsabilidad es mayor,
sabiendo que recibirán mayor condenación.
Es fácil tomar la posición de maestro a la ligera en la iglesia, sin considerar sus costos en términos de responsabilidad.
Jesús advirtió: «mas el que sin conocerla hizo cosas dignas de azotes, será azotado poco; porque a todo aquel a quien se
haya dado mucho, mucho se le demandará; y al que mucho se le haya confiado, más se le pedirá» (Lucas 12:48).
Todos ofendemos: Santiago se incluyó a sí mismo entre aquellos que ofendemos. Pero él no excusa «su» o «nuestra»
ofensa. Sabemos que todos ofendemos, pero deberíamos de procurar un mejor andar con el Señor, que esté marcado
por menos ofensas.

Santiago proveyó una forma de medir la madurez espiritual de los maestros y de todos los cristianos. Jesús demostró en
Mateo 12:34-37 que las palabras son la revelación del carácter interior.

No ofender en palabra muestra la verdadera madurez espiritual. Esto es especialmente relevante para los maestros, que
tienen muchas más oportunidades de pecar con su lengua.

· Ofendemos en palabra con respecto a nosotros mismos, con nuestra jactancia, con nuestra exageración y nuestros
reportes selectivos.

· Ofendemos en palabra con respecto a los demás, con nuestras críticas, chismes, calumnias, crueldad, doble cara y
enojo; o con halagos y palabras poco sinceras destinadas a ganar el favor de los otros.

2. (3-6) El poder de la lengua


i. El freno y el timón son pequeños, pero extremadamente importantes. Si estos no son controlados, entonces el caballo
entero está fuera de control, y todo el barco está fuera de control. Algo tan pequeño como la lengua puede tener un
tremendo poder, ya sea para el bien o para mal.

iii. Si la lengua es como las riendas en la boca de un caballo o el timón de un barco, nos deja con la pregunta: ¿Quién o
qué lleva las riendas, o quién o qué dirige el timón? Algunas personas no tienen sus manos en las riendas o el timón y,
por lo tanto, dicen lo que se les ocurre. Otros usan su lengua según sus emociones o desde aspectos de su naturaleza
carnal. Santiago nos señala que el Espíritu de Dios, obrando a través del nuevo hombre, pone las manos en las riendas y
el timón que es nuestra lengua.

ii. Lo que otros nos dicen y lo que nosotros les decimos a otros puede durar toda una vida, para bien o para mal. La sátira
casual o el comentario crítico pueden infligir una herida duradera en otra persona. El ánimo que se da en el tiempo
correcto o el elogio pueden inspirar a alguien por el resto de su vida.

3. (7-8) La dificultad de dominar la lengua

4. (9-12) El carácter contradictorio de la lengua

Nuestro hablar debe de estar consistentemente glorificando a Dios. No debiéramos de usar un tipo de vocabulario o
tono para hablar en la iglesia, y un vocabulario y tono diferente en nuestra casa o trabajo. Como una fuente de agua,
nuestra boca no debiera echar por una misma abertura agua dulce y amarga.

B. LA PRESENCIA DE SABIDURÍA ES UNA DEMOSTRACIÓN DE UNA FE VIVA


1. (13) La sabiduría nos muestra cómo hacer buenas obras
¿Quién es sabio? […] Muestre por la buena conducta: La sabiduría no es solamente conocimiento almacenado en la
cabeza. La verdadera sabiduría, y el que es entendido, lo mostrará en su vida por su buena conducta.

2. (14-16) El carácter de la sabiduría terrenal


a. Celos amargos y contención: Esto es lo opuesto a la «sabia mansedumbre» que se mencionó en Santiago 3:13. Estas
palabras en realidad se refieren a alguien que tiene una actitud crítica, contenciosa y provocadora.

3. (17-18) El carácter de la sabiduría celestial


La sabiduría de Dios también tiene frutos. Santiago aquí está exactamente definiendo lo que significaba la «sabia
mansedumbre» de Santiago 3:13.
SANTIAGO 4: LA HUMILDE DEPENDENCIA DE UNA VERDADERA FE
A. EL HUMILDE CARÁCTER DE UNA FE VIVA
1. (1-3) Razones de contienda en la comunidad cristiana
La fuente de guerras y pleitos entre los cristianos siempre es la misma. Hay alguna raíz de carnalidad, una guerra interna
dentro del creyente con respecto a las lujurias y la carne. Dos creyentes, ambos caminando en el Espíritu de Dios, no
pueden vivir con guerras y pleitos entre ellos.

Después de tratar el problema de la falta de oración, ahora Santiago trató el problema de la oración egoísta. Estos,
cuando pedían, lo hacían con motivos puramente egoístas.Debemos recordar que el propósito de la oración no es
persuadir a un Dios renuente a hacer nuestra voluntad. El propósito de la oración es alinear nuestra voluntad con la suya
y, en asociación con Él, pedirle que cumpla su voluntad en esta tierra (Mateo 6:10).

2. (4-5) Una reprensión por falta de compromiso y por codicia entre los cristianos
a. ¡Oh almas adúlteras!: Esta es una reprensión en la que se emplea el vocabulario del Antiguo Testamento. Dios habló
de esta manera en el Antiguo Testamento cuando su pueblo fue atraído a ciertas formas de idolatría (Jeremías 3:8-9,
Ezequiel 6:9, Ezequiel 16:32, Ezequiel 23:37, y Oseas 3:1). Como aquí lo ve Santiago, su codicia es idolatría (Colosenses
3:5) y es amistad del mundo.

b. ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Santiago reconoce que nosotros no podemos ser
amigos del sistema del mundo, que está en rebelión contra Dios, y ser amigos de Dios al mismo tiempo (Mateo 6:24).
Aun el deseo de ser amigo (quiera ser amigo) del mundo constituye enemistad con Dios.

3. (6-10) Las soluciones para la contienda: en humildad, ponerse bien con Dios
a. Pero él da mayor gracia: El mismo Espíritu Santo que nos convence de nuestro compromiso, también nos dará la
gracia de servir a Dios como debemos.
A la luz de la gracia ofrecida a los humildes, solo hay una cosa que hacer: someterse a Dios. Esto significa ordenarse bajo
Dios, rendirse a Él como un Rey conquistador, y comenzar a recibir los beneficios de su reinado.

ii. «Si fuera un tirano sería valiente resistirse, pero como es un Padre es ingrato rebelarse». Spurgeon (en otro sermón)
sugirió razones por las que deberíamos someternos a Dios:

· Debemos someternos a Dios porque Él nos creó.


· Deberíamos someternos a Dios porque su gobierno es bueno para nosotros.
· Debemos someternos a Dios porque toda resistencia a Él es inútil.
· Debemos someternos a Dios porque tal sumisión es absolutamente necesaria para la salvación.
· Deberíamos someternos a Dios porque es la única manera de tener paz con Dios.

iii. «Deseo susurrar una pequeña verdad en tu oído, y rezo para que te asuste: ‟Te estás sometiendo, incluso, ahora”.
Dices: ‟Yo no, yo soy el señor de mí mismo”. Sé que piensas así, pero mientras tanto te estás sometiendo al Diablo. El
versículo que tenemos ante nosotros insinúa esto: ‟Someteos a Dios. Resistid al Diablo, y él huirá de vosotros”. Si no te
sometes a Dios nunca resistirás al Diablo, y permanecerás constantemente bajo su poder tiránico. ¿Cuál será tu amo,
Dios o el Diablo? Porque uno de ellos debe ser. Ningún hombre está sin amo». (Spurgeon)

ii. Resistid viene de dos palabras griegas: «estar de pie» y «en contra». Santiago nos dice que «estemos de pie en
contra» del maligno. Satanás puede huir por la resistencia del creyente de menor rango, el cual viene con la autoridad
de lo que Jesús hizo en la cruz.
Mientras nos acercamos a Dios somos condenados por nuestro pecado. Así que afligíos, y lamentad, y llorad, pues es
apropiado en cuanto a la convicción de pecado, y somos obligados a buscar limpieza en la cruz.

4. (11-12) Las soluciones para la contienda: sea correcto con otras personas
El humillarnos y el ponernos bien con Dios debe resultar en ponernos bien con los demás. Cuando estamos bien con los
demás, se mostrará en la forma en la que hablamos acerca de ellos. Así que no murmuréis los unos de los otros y no
juzgue a su hermano.
i. La palabra «murmuréis» se traduce de la antigua palabra griega katalalia. «Katalalia es el pecado de aquellos que se
reúnen en las esquinas y se juntan en pequeños grupos y pasan información confidencial que destruye el buen nombre
de los que no están allí para defenderse». (Barclay)
ii. Este pecado está mal por dos razones: primero, rompe la ley real de que debemos amarnos los unos a los otros;
segundo, requiere un derecho de juicio que solo Dios tiene.

B. UNA DEPENDENCIA HUMILDE DE DIOS


1. (13-16) Una precaución en contra de una actitud de independencia de Dios
Santiago reprende el tipo de corazón que vive y hace sus planes aparte de una conciencia constante de la soberanía de
Dios, y con una subestimación de nuestra propia limitación (cuando no sabéis lo que será mañana).

2. (17) Un reto para vivir de acuerdo a lo que conocemos en el Señor


Santiago sabe que es mucho más fácil pensar y hablar sobre humildad y dependencia de Dios que vivirla. Pero él pone en
claro la mente de Dios: ya que sabemos estas cosas, nosotros somos responsables de hacerlas.

SANTIAGO 5: ¿CÓMO SE MANIFIESTA UNA FE VIVA?


A. UNA EXHORTACIÓN AL RICO IMPÍO
1. (1-3) El rico y la ilusión de la riqueza
Santiago ha desarrollado la idea de una necesidad de completa dependencia de Dios. Ahora reprende de una manera
natural a aquellos que en su mayoría viven independientemente de Dios: los ricos.
i. Aunque Jesús contó a algunas personas ricas entre sus seguidores (como Zaqueo, José de Arimatea y Bernabé), nos
vemos obligados a reconocer que las riquezas representan un obstáculo adicional y significativo para el reino (Mateo
19:23-24). También es cierto que la búsqueda de riquezas es una motivación para todo pecado concebible (1 Timoteo
6:10).
ii. «Les habla no solo como ricos (porque las riquezas y la gracia a veces pueden ir juntas), sino como malvados; no solo
por revolcarse en la riqueza, sino por abusar de eso con orgullo, lujo, opresión y crueldad». (Poole)

2. (4-6) Los pecados de los ricos son condenados


Habían retenido los salarios de sus trabajadores. Vivían con complacencia y no tenían en cuenta a los demás (como el
hombre del relato de Jesús sobre el rico y Lázaro [Lucas 16:19-31]). Habían condenado y asesinado desde su posición de
poder.

B. UN LLAMADO A LA PACIENCIA A LA LUZ DEL JUICIO VENIDERO


1. (7-8) Imiten la paciencia del labrador
Santiago trajo el asunto del juicio final ante nosotros en su observación sobre los ricos impiadosos y sus destinos. Ahora
llama a los cristianos (especialmente a aquellos que tienen paciencia en las dificultades) a tener paciencia para soportar
hasta la venida del Señor.
d. Afirmad vuestros corazones; porque la venida del Señor se acerca: El pronto regreso de Jesús requiere que nosotros
establezcamos nuestros corazones, corazones que estén arraigados en Jesús y en su eterna resolución de todas las
cosas.

2. (9) Practicando la paciencia entre el pueblo de Dios


a. No os quejéis unos contra otros: El tiempo de dificultad puede provocar que seamos menos que afectivos con
nuestros hermanos y hermanas cristianos. Santiago nos recuerda que no podemos quejarnos ni rezongar en nuestras
dificultades —para que no seáis condenados.

3. (10-11) Siguiendo ejemplos de paciencia


Santiago nos recuerda que los profetas del Antiguo Testamento soportaron aflicciones, pero practicaron la paciencia. Los
podemos tener como ejemplos.

4. (12) Una exhortación a la luz del juicio venidero ante Jesús


a. No juréis: Los judíos de los tiempos de Santiago hacían distinciones entre «juramentos obligatorios» y «juramentos no
obligatorios». Los juramentos que no incluían el nombre de Dios eran considerados como no obligatorios, y el utilizar
dichos juramentos era como estar «cruzando los dedos» detrás de tu espalda mientras decías la mentira. Son estos
juramentos los que Santiago condena.

b. No juréis, ni por el cielo, ni por la tierra, ni por ningún otro juramento: Santiago de nuevo repite las enseñanzas de
Jesús en el Sermón del Monte (Mateo 5:34-37). La necesidad de jurar o hacer juramentos, más allá de un simple y claro
sí o no, traiciona la debilidad de tu palabra. Esto demuestra que no hay suficiente peso en tu propio carácter para
confirmar tus palabras.

c. Para que no caigáis en condenación: Esta falta de carácter será expuesta en el tribunal de Cristo. Esto nos motiva a
prepararnos más para aquel juicio por medio de hablar con integridad.

C. EXHORTACIONES PARA QUE LOS CRISTIANOS SE CUIDEN UNOS A OTROS


1. (13-14) ¿Cómo satisfacer las necesidades que se levantan entre los cristianos?
i. En lugar de «quejarse» (como en el versículo anterior), el que sufre debe orar. «En vez de murmurar unos contra otros
(Santiago 5:9), o quejarte de mala manera, o romper en maldiciones, ora a Dios». (Moffatt)

2. (15-16) La respuesta de Dios a las oraciones de su pueblo


- Deberíamos orar por los demás con fe, esperando que Dios los sane, y luego dejar el asunto en manos de Dios.
- Confesaos vuestras ofensas unos a otros, y orad unos por otros, para que seáis sanados: Santiago nos recuerda que la
confesión mutua trae sanidad, espiritual y física. Esto nos libra de las pesadas cargas (físicas y espirituales) de pecados
no resueltos, y remueve obstáculos para la obra del Espíritu Santo.
- Unos a otros: La confesión unos a otros en el cuerpo de Cristo es esencial, debido a que el pecado nos demandará que
seamos solo de él, aislándonos los unos de los otros. La confesión rompe el poder de los pecados ocultos. Pero dicha
confesión no necesita ser hecha a un «sacerdote» o a una imagen que sirva como mediadora; simplemente nos
confesamos unos a otros como sea apropiado. La confesión es buena, pero debe hacerse con discreción. Una confesión
del pecado sin sabiduría puede ser causa de más pecado.

3. (17-18) Elías como un ejemplo de una oración contestada


Elías es un modelo de una oración ferviente que fue contestada por Dios. ¡Su efectividad en la oración se extendió aun al
clima! Pero esto muestra que el corazón de Elías estaba en sincronía con el corazón de Dios. Él oró para que la lluvia se
detuviera y comenzara debido a que sentía que estaba en el corazón de Dios en cuanto a su trato con Israel.
4. (19-20) Ayudando a un hermano en pecado
Habiendo introducido los tópicos del pecado y la confesión, Santiago nos recuerda la necesidad de confrontar a aquel
que se ha extraviado de la verdad. El estar extraviado de la verdad es una buena imagen. La mayoría de las personas no
se extravían deliberadamente —solamente ocurre. Sin embargo, esto los mantiene alejados y los pone en peligro.
Santiago concluye con esto porque esto es exactamente lo que ha tratado de hacer a través de esta carta retadora:
confrontar a aquellos que se han extraviado de una fe viva para tratar de salvar sus almas de la muerte, al demandarles
que no solamente escuchen la Palabra, sino que la practiquen, debido a que una fe viva tendrá su demostración.

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