48 la Apinión de Tenerife

Jueves, 17 de diciembre de 2009

Cultura Y ESPECTÁCULOS
WALDO VINCES CUELGA ‘MAPAS PARA VOLVER A CASA’ Santiago Díaz Bravo

Cuando tu DE PUÑO Y TECLA

casa es un Animales
y libros
bote n viejo y muje-

U
riego amigo
mantiene des-
de hace años
El norteamericano Waldo Vinces continúa una singular
su trayectoria vital de viajero en un trayec- teoría sobre
to que le ha traído, esta tarde a partir de las las damas. En su
19:00 horas, hasta la sala de exposiciones opinión, y tan con-
de La Caixa con Mapas para volver a casa. vencido se halla de ello como de
que el cielo se extiende sobre
ALMUDENA CRUZ | Santa Cruz de Tenerife
nuestras cabezas, las féminas que
convienen a un hombre deben
cumplir un ineludible requisito:
amar a un tiempo a los animales

W
aldo Vinces es, a la vez, de muchos y a los libros.
sitios, de distintos lugares. Ha vi- Mi querido amigo, antaño ocu-
vido la mayor parte de su vida via- pante habitual de las más afama-
jando, cambiando de dirección, de das barras del Puerto de la Cruz,
teléfono, de referencias y paisajes. donde durante lustros dio rienda
Todo eso, que le ha conformado co- suelta a amoríos con turistas de
mo persona y como artista, se re- todas las edades y nacionalida-
fleja también en su obra pictórica des, decidió un buen día que ha-
que, desde hoy, cuelga en la sala de exposiciones La Caixa, en bía llegado el momento, si no de
La Laguna. Vinces nació en Lima pero creció entre Buenos Ai- sentar la cabeza, porque tal ac-
res y Caracas. Lleva quince años viviendo en el sur de Estados titud difícilmente resulta compa-
Unidos, donde contrajo matrimonio y donde la vida, como en an- tible con un varón en edad de me-
teriores ocasiones, le ha traído sorpresivamente hasta Canarias. recer, sí al menos de hacerla re-
“Esto es el resultado de una situación simpatiquísima. Los posar largo rato. Tan a la
padres de mi mujer son tinerfeños que emigraron a Venezue- tremenda se tomó tal determina-
la. Nos casamos en Estados Unidos pero ella siempre me ha- ción que comenzó a frecuentar
blado de sus recuerdos en Tenerife. Hace un año, mis suegros re- los parques portuenses con un
gresaron a la Isla y vinimos a visitarlos. Para mí, Tenerife es yorkshire lanudo que le dejó en
reencontrarme con todos los recuerdos que guardaba en mi me- herencia su última novia y un li-
moria, en cada reconozco una parte de los sitios donde he vivi- bro deshecho y roído.
do. Cada vez me enamoro más de esta Isla”, detalla Vinces. Bajo palmeras y flamboyanes
Admite que la forma más auténtica que conoce de “estar real- comprobó que un ejército de jóve-
mente” en un sitio es mostrando su arte. Por eso, hace año y nes hermosas paseaba cada tarde
medio decidió presentar su proyecto al ayuntamiento de La a perros de todas las razas, las
Laguna. El trabajo ha dado sus frutos y, hasta el próximo 31 de di- más de las veces animales consen-
ciembre, los cuadros de Vinces colgarán en la sala de la mítica tidos y altivos. Les sonreía, las sa-
calle de La Carrera. En total, 27 cuadros creados especialmen- ludaba y en ocasiones cruzaba
te para esta primera muestra del artista en Tenerife. “Son el dos o tres palabras con alguna de
intento de hacer un símil entre el hecho de ir envejeciendo y la ellas, pero sin llegar a mayores,
realidad del emigrante. He tenido que empezar muchas veces porque el perro solo no le valía. Él
y en distintos lugares”, explica el artista respecto a su mues- buscaba a una mujer que acari-
tra, titulada Mapas para volver a casa. ciara a un perro con una mano y
Así, los lienzos de Vinces se presentan como una abstrac- portara un libro en la otra. Le da-
ción donde “desde una perspectiva bastante idílica, juego con el ba igual de qué autor se tratase,
recuerdo, con la melancolía de lo que fue y ya no existe más. que fuese de su gusto o lo despre-
Cada cuadro narra una pequeña historia, un pequeño tesoro ciase, que mantuviese prejuicios
de mi memoria”. Por este motivo, y como metáfora de lo que contra él o que ni siquiera lo co-
ha sido su trayectoria vital, un pequeño bote es parte casi in- nociese. Un animal y un libro. Ese
dispensable de cada una de sus obras, altamente influidas por su era su objetivo y no cejaría has-
formación como arquitecto. “El símbolo último del inmigran- ta lograrlo.
te es ese bote, un pequeño barquito vacío, la capacidad de lle- Una tarde de invierno, al tiem-
nar, de reaprender el mundo”, añade. “La iconografía que re- po que la lluvia hacía acto de apa-
currentemente se observa en mi trabajo, los círculos y esferas, rición, mi amigo comprobó con
la casa, el teléfono, el bote, aluden a conceptos de tiempo y es- desbordante euforia como un
pacio, presente y pasado, realidad y fantasía. Al igual que los enorme pastor belga arrastraba a
dibujos y apuntes de tópicos aislados que voy coleccionando una bella mujer que parecía inca-
en mis cuadernos de bolsillo y que asocio con algún recuerdo paz de dominar a la fiera. Con las
de la infancia”, concluye. dos manos trataba de sujetar in-
fructuosamente la correa, y del

TRAYECTORIA bolso que colgaba de su hombro

sobresalía un libro de Paul Aus-
ter. Se levantó y la ayudó. Una nu-
o es la primera vez que Waldo Vinces expone en be rebosante de agua los obligó a

N España, anteriormente llevó sus cuadros hasta Málaga,

en una colectiva con distintos autores latinoamerica-
nos. En Estados Unidos, son seis las galerías encargadas de
refugiarse en una cafetería cerca-
na.
Claudia era argentina, de Mar
representar su obra y trabaja, además, con museos y curado- del Plata, y amaba a los animales.
res de arte. “Estar en contacto con el mundo del arte es vital Y a los libros también. Era la mu-
para mí”, confiesa. En su haber, Waldo Vinces ha sido galardo- jer perfecta, la mujer que tanto
nado con distintos premios entre los que destacan haber sido tiempo llevaba esperando. Y se hi-
reconocido como Ciudadano Ejemplar del Estado de Georgia, zo de noche. Y él la acompañó has-
haber recogido el título de Embajador de Buena Voluntad ta un portal en una callejuela jun-
otorgado por la secretaria de estado Kathy Cox y el premio al to a la estación de guaguas. Y ella
Artista e Intelectual Hispano de 2004. “El mercado de arte le invitó a pasar. Y le sirvió una
norteamericano es, sencillamente, gigantesco. Como en todo copa. Y al rato, bajo los efluvios
negocio, tienes que empezar paulatinamente y, con trabajo, del 100 Pipers, él hizo ademán de
todo llega. Hay mercados sumamente importantes como el de besarla. Y ella se aparto. Y miró al
Nueva York, de sobra conocido, y otros como el de Santa Fe, perro. Y miró al libro. Y le pre-
que nadie se imagina su importancia. Por supuesto, sin olvidar LA OPINIÓN guntó con rostro compungido:
la ciudad de Miami”, asegura. Fragmento de una de las obras expuestas. “¿Pero vos no sos maricón?”.