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ROJA JAZMÍN LABRIN

ROJA

De Jazmín Labrin

Personajes:

ANA madre

LIA hija de 9 años

Noche de invierno. Una niña en pijama está sentada en su cama, está jugando
con su muñeca de trapo, tararea una canción.

Ingresa su madre.

Ana

Ya es tarde, Lia, vamos a dormir.

Lia

Un ratito mami (sigue tarareando una canción y va a acostar a su muñeca en


una cuna de juguete, le da un beso) ¡Listo!

Ana la carga en sus brazos y la lleva a la cama.

Ana

Estoy muy cansada, hoy ha sido un día largo… así que a dormir, a dormir, que
mami está muerta de sueño.

Lia

(Llamándole la atención) ¡Mami! ... ¿y mi cuento?... tú sabes que no puedo


dormir sin que me leas un cuento… Por fi.. ¡por fi, ma!... prometo que me
duermo al toque… dices FIN y yo ya me dormí… ¿ya?... vamos, mamita
bonita… yo sé que quieres… solo un cuentito…
ROJA JAZMÍN LABRIN

Ana la mira, sonríe, la termina de arropar y parece que apagará la lámpara.

Lia

(Engriéndose) Bueno… tampoco quería el cuento hoy… igual, ya me dio


sueño… (Se acuesta de lado, dándole la espalda a su mamá)

Ana

(Haciéndole cosquillas) No es bueno renegar antes de dormir, vas a


despertarte llena de arrugas y con el pelo rojo… (Lia se ríe. Ana va por un
cuento de la caja de libros de Lia) Hoy nos toca éste. Te lo sabes así que
llegamos rápido al final para que duermas pronto.

Lia abre mucho los ojos y espera su cuento con una gran sonrisa.

Ana

Había una vez una niña, muy linda, inteligente… una niñita juguetona y un poco
engreída… que se resentía con su mamá, que era la más buena del mundo,
cuando tenía sueño y no quería contarle un cuento…

Lia

¡Ay, Mamá!

Ana

(Riendo) Está bien, está bien… aunque tú sabes que es mi cuento y todo
vale… Bueno, ¿puedo continuar, señorita?

Lia

Por supuesto, señora.

Ana

La niña que era tan linda, tan linda, vivía con su mamá en el bosque. A las dos
les encantaba preparar postres, hacían tortas, chocolates y todas las cosas
ricas que te puedas imaginar… un día hicieron el pye de limón más rico del
mundo… es más, hasta las inscribieron en los guiness por eso. Ambas eran
muy felices juntas, bailaban, leían, cocinaban, jugaban y se contaban cuentos
todo el tiempo.
ROJA JAZMÍN LABRIN

Lia

¿Mami, me enseñas a hacer postres?

Ana

Señorita, no interrumpa a la cuentacuentos, por favor…

Lia

(Imitando otra voz) Disculpe, disculpe… continúe usted.

Ana

Un día, el frío helado del bosque enfermó a la mamá de nuestra amiga, y ya no


pudo acompañarla al colegio como todos los días. Estaba en cama tomando
muchas sopas calientes y medicamentos… la señora estaba realmente
enferma y como su pequeña hija, que era la más linda de las lindas no quería
que su mami se siga enfermando, alistó sola su lonchera, preparó su mochila y
su uniforme, sacó el lazo rojo del cajón de su velador y le pidió a su mamá que
le hiciera un moño en la cabeza. ¡Estaba lista para ir al colegio! Le dio un beso,
y ella le pidió por favor que no hable con extraños, que cruce el bosque con
mucho cuidado y que esté muy atenta, porque el bosque estaba lleno de
peligros… sisisisisí, mamá – contestó la niña con una gran sonrisa – y se
enrumbó sola al colegio. (Lia se acomoda en su cama para prestar más
atención)… Entonces, la niña salió de casa tarareando una linda canción
(tararea la canción que al inició tarareaba Lia) al cruzar el bosque se encontró
con flores hermosas que recogía para su profesora y sus amigos, conversaba
con los pajaritos que cantaban en los árboles, saltaba sobre las piedras para
cruzar el río… estaba viviendo la mejor de las aventuras… hasta que un ruidito
llamó su atención… (Pausa)

Lia

¿Qué era? … (Muy impaciente) Mami sigue…

Ana

La niña se acercó despacito hacia unos arbustos, desde donde salía el


sonido… caminó lento, muy lento… se asomó… y… ¡Boo! (Lia grita y da un
salto. Ana ríe y la abraza) no te preocupes, solo era el lobo del bosque...

Lia

¿Cómo que solo era el lobo?... ¡Los lobos son malos, mamá!... no dejes que se
acerque al lobo…

Ana
ROJA JAZMÍN LABRIN

No te preocupes, los papás de esta niñita le habían enseñado a amar a todas


las criaturas del bosque, a encontrar la belleza en el corazón de los que la
rodeaban… Y por eso la niña no tuvo miedo… cuando vio al lobo saltó
sorprendida… pero luego se echó a reír al verlo paralizado… “¿tan grande y
todo peludo, aun así me tienes miedo?” Dijo Lia. El lobo se dio cuenta que la
niña quería jugar con él, la tomó de la mano y entre sonrisas y gestos de
amabilidad se la llevó entre los árboles… la niña lo miró a los ojos y quedó
prendada, algo de él la seducía… y como entre nubes caminó a su lado, hacia
donde la llevaba… (Pausa larga)… Las risas que al inicio eran grandes
carcajadas se perdieron entre el bosque y luego quedó solo el silencio… (Ana
baja la mirada - pausa - vuelve a mirar a su hija, se pierde en su mirada.
Vuelve a mirar el libro, lo revisa) Que raro… este era un cuento para niños…
(Lia se destapa, baja de la cama por el lado contrario de donde está su mamá,
tiene los pies llenos de barro y camina hacia la puerta de su cuarto dejando sus
huellas en el piso. Coge su muñeca. Llega al umbral de su puerta y desde allí
mira a su mamá como si nunca más la fuese a ver. Ana lentamente ha tomado
las sábanas de su hija y las ha ido abrazando muy fuerte. Busca a su hija entre
las sábanas, se desespera, llora. Lia apaga la luz de su habitación. Sale).

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