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Director y Editor Rodolfo Monteverde Sotil Revisores de articulos Cristian Jacob / Ivan Leibowicz / Rodolfo Monteverde Sotil / Tatiana Stellian Difusién Mayra Delgado Valqui Diseito y diagramacién Emesto Monteverde P. A. Fotografia de ta caratula Rodolfo Monteverde Sotil, 2012. Huancavelica. Imagenes de los indices y de la relacién de colaboradores Rodolfo Monteverde Sotil, 2012. Obreras en excavacién en Tiahuanaco. Bolivia / Familia Quispe Huata de Taquile, Puno-Perd. / Martin de Murta (2004 [1590]). Sinchi Roca. Detalle Las opiniones vertidas, en los articulos publicados en esta revista, son de entera responsabilidad de cada autor. La revista no se hace responsable por el contenido de los mismos. © Prohibida la reproduceién total o parcial de la revista sin el permiso expreso de su Director. Revista Haucaypata. Investigaciones arqueolégicas del Tahuantinsuyo Ao 2. Numero 5, diciembre 2012 Publicacién cuatrimestral ISSN: 2201-0369 Hecho el Depésito Legal en la Biblioteca Nacional del Pera N° 2011-00350 Hecho por computadora Jr, La Libertad 119 Santa Patricia, La Molina, Lima-Pert https: //sites. google.com/site/revistahaucaypata/ revistahaucaypata@gmail.com Todos los derechos reservados Dedicatoria A mi madre, por su constante lucha, no puedo hacer nada més, que s6lo apoyarla (aus) indice Editorial Relacién de Colaboradores Hallazgos de Canis familiaris en el santuario de Pachacamac Isabel Cornejo, Denise Pozzi-Escot, Katiusha Bernuy, Enrique Angulo y Luis Miguel ‘Tokuda Proyecto arqueolégico Ychsma. Breve informe metodolégico de las investigaciones arqueoboténicas de la temporada 2012 en Pachacamac, Lima ‘Tatiana Stellian El Curacazgo de Coayllo durante el Imperio Inca Rommel Angeles Faleén Arqueologia y arteen dos viajeros franceses del siglo XIX. Elcaso de Choquequirao, Cusco Gori Tumi Echevarria Lépez y Zenobio Valencia Garefa aaa aes El Qhapaq Nan a través de las fuentes etnohistéricas andinas Reinaldo Andrés Moralejo Resefia de la conferencia: Los incas, propuestas y debates interdisciplinarios Rodolfo Monteverde Sotil Normas editoriales 21 27 46 62 90 ae La Revista Haucaypata. Investigaciones arqueolégicas del Tahuantinsuyo, es una publicacién peruana cuatrimestral que se centra en los estudios arqueolégicos ¢ interdisciplinarios, tanto nacionales come internacionales, del Imperio incaico La revista nacié con Ta intencién de cumplir tres objetivos que todo arqueblogo debe proponerse en su carrera: la defensa del patrimonio arqueolégico, su investigacion y divulgacién de dichas investigaciones. Después de haber publicado cuatro mimeros entre el 2011 y el 2012, les alcanzamos el quinto rtimero, que contiene cinco articulos yuna resena. Un equipo interdisciplinario conformado por Isabel Cornejo, Denise Pozzi-Escot, Katiusha Bernuy, Enrique Angulo y Luis Miguel Tokuda, nos entregan losresultados de las excavaciones y andlisis de perros (Canis familiaris) encontrados en Pachacamac. La doctorante en arqueologia Tatiana Stellian, nos presenta un breve informe de las, investigaciones arqueobotanicas realizadas por el Proyecto arqueolégico Yehsma en la temporada 2012 en Pachacamac. El Licenciado Rommel Angeles nos aleanza una interesante muestra de las evidencias arqueolégicas en el vaile de Asia ante y durante la presencia del Tahuantinsuyo. Por su parte, los arqueélogos Gori Tumi Echevarria Lopez y Zenobio Valencia Garcia, anatizan los aportes arqueolégicos y artisticos de dos viajeros framceses del especificamente acerca del sitio Choquequirao. El colega argentino Reinaldo Andrés Morale realize tma achoustiva teviatin de loo juentes emohistsrions para estudiar los caminos, tambos y chaskiwasis en épocas del incanato y de la colonia. Finalmente, quien escribe les hace entrega de una reseita de la conferencia que organizaramos en el mes de setiembre, del presente aio, titulada: Los incas, propuestas y debates interdisciplinarios Come siempre, queremos expresar nuestro més sincero agradecimiento a todos aquellos que han colaborado con sus articulos y participado en la realizacién del quinto niimero dela Revista Haucaypata. Investigaciones arqueolégicas del Tahuantinsuyo Ademiés, queremos agradecer a los lectores por los comentarios eriticos y por la buena acogida de los mimeros anteriores de la revista. Con la entrega del presente mimero podemos decir que estamos orgullosos de seguir cumpliendo con la meta de publicar una revista arqueolégica e interdisciplinaria de temética incaica en casi dos anos consecutivos. Con esta quinta entrega, hemos logrado difundir 31 articulos, cuatro entrevistas realizadas a cientificos sociales y han participado 33 autores de distintas partes del Peniiy del mundo Desde ya invitamos a todos los arquedlogos, estudiantes de arqueologia y profesionales de otras ciencias apublicar en el sexto miimero dela Revista Haucaypata, ‘programado para el mes ce marzo del 2013 Rodolfo Monteverde Sotil Director y Editor OCOOCOOCCOGSE IL REVISTA HAUCAYPATA 5 a Tivestigncrones arqueologicas del Tahuanunsuyo Colaboradores eM a al Rommel Angeles Faleén a 2 ity Licenciado en Arqueologia (Universidad Aad = Nacional Mayor de San Marcos). Museo Huaca | ae Malena-Asia , Enrique Angulo Médico veterinario (Universidad Nacional Mayor de San Marcos). Museo de sitio de Pachacamac | (MSPAC), > Katiusha Bernuy Arqueéloga (Universidad Nacional Mayor de San Marcos), Jefe del Area de Investigacién del) ‘Museo de Sitio de Pachacamac (MSPAC). Isabel Cornejo Rivera Arqueéloga (Universidad Nacional Mayor de San Marcos). Asistente del Area de Investigacion del Museo de Sitio de Pachacamac (MSPAC). Gori Tumi Echevarria Lopez Arqueélogo y Candidato a Doctor en Historia del Arte (Universidad Nacional Mayor de San ff Marcos). Rodolfo Monteverde Sotil ; Maestristaen Arqueologia(Pontificia Universidad Catdlica del Pert). Lieenciado en Arqueologia (Universidad Nacional Federico Villarreal). Reinaldo Andrés Moralejo Doctor en Ciencias Naturales. Licenciado en Antropologia (Facultad de Ciencias Naturales y ‘Museo-Universidad Nacional de La Plata). CONICET. Divisién Arqueologia, Museo de La Plata Denise Pozzi-Escot Arqueéloga (Universidad Nacional Mayor de San Marcos). Directora del Museo de Sitio de Pachacamac (MSPAC). Ministerio de Cultura. Tatiana Stellian Doctorante del Fonds National de la Recherche Scientifique-Bélgica (Université Libre de Bruxelles), Luis Miguel Tokuda Artista plastico (Escuela Nacional Superior Auténoma Bellas Artes) (Universidad Peruana de Ciencias Aplicadas). Zenobio Valencia Gareia Arqueélogo (Universidad Nacional San Antonio Abad del Cusco). REVISTA HAUCAYPATA. 6 Hallazgos de Canis familiaris en el santuario de Pachacamac Isabel Cornejo icornejo@meultura.gob pe Denise Pozzi-Escot dpozzi@meultura.gob pe Katiusha Bernuy Kbernuy@meultura.gob pe Enrique Angulo Iuuamachito @yahoo.com Luis Miguel Tokuda yoshitokuda@hotmail com Resumen El santuario arqueolégico de Pachacamac, con una ocupacién de mas de 1200 aiios, durante el Horizonte Tardio (1470 ~ 1533 d.C.) extendid su fama como el més importante centro ceremonial de la costa peruana al cual acudian peregrinos de diversos lugares. De las intervenciones arqueolégicas realizadas en la Segunda Muralla y la Pirémide con Rampa 07 (PCR 07) del santuario, efectuadas por el equipo del Museo de sitio, se han recuperado una serie de hallazgos, entre los que se encuentran los restos de més de una veintena de canes con pelo (Canis familiaris) Gracias al trabajo multidisciplinario realizado (arqueologia, medicinaveterinaria, artes plésticas), se ha podido determinar la identificacion de la especie, la variedad de las caracteristicas fenotipicas de los canes y proponer una hipstesis sobre la variedad y la presencia de éstos en el santuario, Palabras claves: Pachacamac, Segunda Muralla, Piramide con Rampa 07, Canis familiaris, Abstract The Pachacamac archaeological sanctuary, with an occupation of more than 1200 years, during the Late Horizon (1470 -1533..D.) extended his reputation as the most important ceremonial center of the Peruvian coast to which there were coming pilgrims of diverse places. Of the archaeological interventions realized in the Second Wall and the Pyramid with ramp 07 (PCR 07) of the sanctuary, effected by the equipment of the Museum of site, have recovered a series of findings, between which they find the remains of more than one score of khans with hair (Canis familiaris). Thanks to the multidisciplinary work (archaeology, veterinary medicine, plastic arts) realized, one could have determined the identification of the species, the variety of the phenotypic characteristics of the Khans and to propose a hypothesis on the variety and the presence of these in the sanctuary. Keywords: Pachacamac, The Second Wall, Pyramid with Ramp 07, Canis famtliaris. ElsantuarioarqueolégicodePachacamae un afloramiento rocoso recubierto por arena de El santuario de Pachacamac se ubicaa 31km. _origen edlico que forma parte del tablazo de Lu- al sur de la ciudad de Lima, en la margen dere- rin, provocé la aridez del sitio a pesar de limitar cha del rio Lurin, frente a las costas del Océa- _por el sur con la franja cultivable del rio Lurin, no Pacifico. Su emplazamiento elevado, sobre __y al oeste con un area de lagunas y humedales. CORNEJO, Isabel; POZZI-ESCOT, Denise; BERNUY, Katiusha; ANGULO, Enrique y TOKUDA, Luis Miguel, 2012. Hallazgos de Canis famuliaris en el santuario de Pachacamac. Revista Haucaypata. Investigaciones ar- queolégicas del Tahuantinsuyo. Nro. 5: 6-20. Lima. Isabel Cornejo, 2ti-Escot, Katiusha Enrique Angulo y Luis Miguel Tokuda Zz Hallaagos de Canis jamilianis on Océano Pacifico Leyenda area urbana Ee] valle agricola g Islas Pachacamac a Santuario de Pachacamac Figura 1. Mapa de ubieaci6n del santuario de Pachacamac. Peri. e Por el norte limita con la Quebrada de Atocon- go y por el este con el valle y las primeras estri- baciones andinas. El clima de la zona es carac- teristico de la costa central: arido, semicalido y hiimedo, con bajo indice de precipitacién pluvial (2 milimetros anuales segiin la Estacion, Meteoroldgica — Museo de Sitio de Pachaca- mac). Todas estas condiciones, han favorecido notablemente la preservacién de los restos or- sginicos recuperados en las intervenciones ar- ‘queolégicas (Figura 1). La ocupacion y construcci6n del santuario fue continua, desde el periodo Intermedio Tem- prano (300 a 700 d.C.) hasta el Horizonte Tar~ dio (1470 a 1533 d.C). Fue un centro ceremo- nial que en el Horizonte Tardio llegé a extender su fama como oréculo (Fernandez de Oviedo 1945: 46-54 (1535: Libro XII, Capitulo XI); Cie- 2a 1986: 213 - 214 [1553: Capitulo LXXII, folio 97¥]; Villar 1935: 212). Bajo el dominio Inca, acudian al santuario peregrinos de diversos y lejanos lugares del imperio para realizar con~ sultas y obtener vaticinios del oraculo, En la actualidad el érea intangible del santua- rio comprende 465 hectareas, donde se distri- buyen importantes edificaciones construidas en base a adobes y piedra, como el Templo del Sol, el Templo Viejo, el Templo Pintado, el Acllawasi yalrededor de quince PCR’. Estas edificaciones se encuentran distribuidas en sectores deli- mitados artificialmente por murallas y por un eje de calles internas (Norte-Sur y Este-Oeste) que mantenfan conexién con el Gran Camino ‘© Qhapaq Nan*. Dicha infraestructura habria servido para controlar tanto el flujo de las pere- grinaciones (Paredes 1991) como el crecimien- to y ordenamiento interno de sus edificaciones. Desde el anio 2010 el equipo del Museo de sitio de Pachacamac viene realizando excavaciones en la Segunda Muralla y en la PCR 07. Como, parte de estos trabajos, hemos recuperado una serie de hallazgos de la época Inca, entre ellas los restos de mas de una veintena de canes con pelo (Canis familiaris) de distintas edades y en buen estado de conservacién, El trabajo multi- disciplinario que conjuga la arqueologia, la me- PCR os la abreviatura para las edificaciones conoci- das como Pirémide(s) con Rampa(s) 2 Este camino articul6 buena parte de la region de los Andes Contrales antes de la conquista espaiiola REVISTA HAUCAYPATA 8 Tnvestigaciones arqueologicas del Tahuantinsuyo dicina veterinaria y las artes plasticas, nos_per- mite realizar propuestas basadas en recons- trucciones fenotipicas?, sefalar el modo en que fueron utilizados estos animales y formular un planteamiento hipotético sobre su variedad y presencia, relacionada a las peregrinaciones, en el santuario. Hallazgos de canes en el santuario Evidencias de canes con pelo, similares a nues- tros hallazgos, han sido encontradas en varias edificaciones del santuario: en el Templo del Sol a fines del siglo XIX (Uhle 2003 [1896]); en la PCR 02, al pie del Templo Viejo (Paredes y Fran- co, 1984 yi989); en la PCR 03, 07y 13 (Eeckhout, 1995 y 2008; Pozzi-Escot y Chavez 2009; Pozzi- Escot y Bernuy 2010) y en la PCR 08 (Malaga 2008) Entre estos restos, se ha podido determinar que solo algunos presentaron evidencias de enfarde- lamiento por los fragmentos o restos de textiles que tenfan en el cuerpo 0 sobre la cabeza. Se resalta el hecho de que los mejores conservados tienen un caracteristicopelaje corto, lacio y de color marrén amarillento y/o marrén oscuro. El entierro de estos canes como “acompanantes de entierros humanos” para los periodos tardios (1000 — 1533 4.C) fue recurrente en el santua- rio (Uhle 2003[1896]; Eeckhout 1995; Paredes y Franco 1984). Asimismo, fueron ofrendados en Jas nuevas construcciones de edificaciones 0 ele- mentos arquitecténicos del santuario (Eeckhout 2008; Malaga 2008). El reporte de hallazgos de canes en el santua- rio es bastante frecuente. Sin embargo, en esta oportunidad la participacién de especialistas en los analisis biolégicos y zoolégicos nos ha permi- tido confirmar su identificacién a nivel de sexo y especie y otras caracteristicas que a continuacién deseribiremos y comentaremos. Otras evidencias de canes en Ia costa pe- ruana prehispanica Los diversos hallazgos de canes registrados en el santuario se diferencian de los canes de las re- presentaciones iconograficas Moche y Nazca (In- termedio Temprano) que son de talla pequetia, cola enroscada sobre el lomo, pelo corto y de co- lor blanco con grandes manchas oscuras 0 negras 3 Conjuntos de rasgos visibles de un organismo. Isabel Cornejo, Denise Pozti-Escot, Katiusha Bernuy, Enrique Angulo y Luis Miguel Tokuda ___9 Hallangos de Canis famiharis on el santuario de Pachacamae Segunda alla Priytera Miralta Figura 2. Foto area de los aitos 70 del santuario de Pachacamac con indicacién de las areas de exeavacién en la Segunda Muralla y PCR 07. (ver Donnan y MacClelland 1999: 89, Fig 4.20). También difieren de los canes sin pelo de las representaciones Chancay (Intermedio Tardio) (ver Weiss 1976:41, Lam. III); asimis- mo de los conocidos como “perros pastores” de Chiribaya (Intermedio Tardio) excavados en Ilo por Sonia Guillen y del ejemplar recupera- do por Engel en un cementerio localizado en la peninsula de Paracas, que son de talla menor, orejas semicaidas, patas cortas y pelo largo de color amarillento o blanco en casi todo el cuer~ po (ver Engel 1987: 125, Fig, Ill-19b). Esta comparacién general, pone en evidencia que los canes de Pachacamae no parecen tener relacién directa o descienden de ellos, debido alas evidentes diferencias de forma de cuerpo, pelaje y color. Los hallazgos en Ia PCR 07 y Segunda Muralla del santuario El conjunto de hallazgos de canes con pelo, identificados como Canis familiaris, provienen de las excavaciones realizadas en la PCR 07 y en la Segunda Muralla que delimita la concen- tracion de edificaciones del santuario, princi- REVISTA HAUCAYPATA Tavestigaciones arqueoldgicas del Tahuantinsuyo 10 palmente a las PCR (Figura 2). Los hallazgos en la PCR 07 corresponden a una excavacién realizada al pie del acceso que conec- taba la Calle Norte-Sur a una de las plazas late- rales de dicha PCR. El hallazgo en su conjunto procede de los tiltimos niveles de utilizacion de la plaza durante la época Inca; cinco de los canes se encontraron asociados al entierro del fardo de un nio y un sexto can fue localizado al interior de un pequeia intrusién hecha en uno de los apisonados de la plaza (Pozzi-Escot et al. 2012) (Figura 3) En la Segunda Muralla, en un tramo colindan- te con la via conocida como Calle Este-Oeste, area aprovechada para configurar una plaza rec- tangular, se recuperaron los restos de diversas ofrendas entre los que resaltan objetos de estilo local y fordneos consistentes en dos escultura en madera de estilo Chimt e Yehsma, vasijas cera- micas de estilo Ychsma, Inca y Casma moldeado, asi como los restos de una veintena de canes de distintas edades en buen estado de conservacion. Por las caracteristicas estilisticas de las vasijas y esculturas, se ha podido establecer que este con- junto de hallazgos dataria del Horizonte Tardio. capa Flemente 3 (capa 8 Nivel Capa s Nivel? apa Nivel No Excavado Pogo ne LS ===aeap S| eens capa s Niel? 4 capa 10 0 El 1m Figura 3. Corte Transversal de la excavacién en la plaza lateral de la PCR 07 con distribucién de los hallazgos de canes (CNS42¢ (©NS427, CNS428, CNS42 ENS 490 y CNS431) Isabel Cornejo, Denise Pozzi-Escot, Katiusha Bernuy, Enrique Angulo y Luis Miguel Tokuda n Tallazgos de Canis jamiliaris en elsantuario de Pachacamae Figura 5. Variedad de los restos de canes recuperados de las excavaciones en la Segunda Muralla y PCR 07. Sin embargo, el contexto fue disturbado por ‘un huaqueo probablemente de la época Colo- nial (Figura 4) Los restos de los canes recuperados, en su mayoria, se encuentran muy bien conservados (piel, pelos y huesos articulados). El tratamien- to mortuorio es diverso, algunos se encuentran envueltos con textiles de algodén (enfardela- dos), otros no tienen ningfin tipo de envolto- rio, otros tienen solo una tela envolviéndoles la cabeza (a la altura de los ojos) y al menos uno tiene las extremidades amarradas con una soguilla de fibra vegetal (Figura 5). Los textiles usados no parecen haber sido elaborados ex- clusivamente para fines mortuorios ya que evi- dencian desgaste, recortes, falta de orillos, todo lo cual indicaria que provienen de otras piezas textiles que tuvieron otro uso previo. Metodologia de estudio Para el estudio de nuestros recientes hallazgos de canes, hemos realizado ex4menes anatémi- cos-forenses para determinar aspectos como sexo y especie, edad, tamanio, patologias éseas y traumas pre o perimortem que podrian aso- Ciarse a posibles causas de muerte, etc. Para ello, utilizamos una coleccién de material 6seo comparativo de individuos modernos y fuentes, bibliograficas especializadas (Fiennes y Fien- nes 1968; Smith y Jones 1962; Blanco et al 2009), asi como la revisién de informacién so- bre hailazgos similares en Pachacamac que he- mos desarrollado en la parte inicial del articulo La edad fue determinada teniendo en cuenta el tamaiio y estado de fusion de las epifisis y diafisis de los huesos largos, en los dientes se observé si éstos eran deciduos* o permanen- tes, los cuales terminan de erupcionar alre- dedor de los siete meses, asi como el desgaste en dientes incisivos, premolares y molares en los adultos. Con esta informacién se agrupa- ron a los canes por rangos de edad (Tabla 1) Para el céleulo de la altura de los canes se con- sideré la sumatoria de las medidas de las fa- langes, radio-cibito, htimero y escapula’. Para el largo del cuerpo se consideré la medida en 4 Los deciduos son dientes provisionales que se van reemplazando por permanentes, esto se completa a los 7 meses con lo que el animal se reconoce como tun individuo adulto joven, REVISTA HAUCAYPATA 12 Tavestigaciones arqueoldgicas del Tahuantinsuyo centimetros de la distancia desde el pecho hasta la base de la cola. El peso corporal fue obtenido en base al tamano aproximado del can mejor conservado (Figura 6) y comparado con un perro vivo de similares caracteristicas fisicas. Todo esto nos dié una aproximacién al tamaiio que habrian tenido los canes. Para caracterizar el tipo de craneo, se empled la propuesta veterinaria de Dyce et al. (2004), quienes realizaron una tipologia basada en la forma y tamaiio del craneo en canes: dolicocefi- lica, mesocefalica y braquicefélica (ver Dyce et al 2004: 308, Fig. 11-1). ‘Tabla 1. Rango de edad en canes. Propuesta a partir de los cambios observados en el crecimiento del ani- mal: aparicién de dentadura permanente y el estado de fusion de los huesos, ete. Las reconstrucciones fenotipicas del conjunto de hallazgos analizados corresponden a ejem- plares que representan la variedad del grupo, Estas se han realizado mediante la observacién directa de los restos seos. El primer paso para la reconstruccién fue la realizacién de bocetos hechos en base al esqueleto armado de los ejem- plares seleccionados (Figura 7), el boceto con- sidera las medidas de los huesos y la forma de craneo. El siguiente paso fue la reconstruccion de los planos musculares (miolégica). En un ter- cer paso se agregaron las caracteristicas corpo- rales como las dimensiones y colores del pelaje mediante el uso de lapices de colores y conside- rando la intensidad y distribucién de la pigmen- tacién del pelaje observado en cada uno de los ejemplares; las imégenes fueron digitalizadas y editadas en el programa Adobe Photoshop CS3, donde se trabajaron por eapas para retocar eada 5 Medida tomada de uno de los miembros anteriores, Isabel Cornejo, Denise Pozzi-Escot, Katiusha Bernuy, Enrique Angulo y Luis Miguel Tokuda__13 Tallazgos de Canis jamiliaris on elsantuario de Pachacamae Figura 6. Restos de can on buen estado de conservacién (Hallazgo CNS430) provei ‘en la Plaza lateral de la PCR 07. Figura 7. Intervencién del Médico-Veterinario Enrique Angulo en la reconstruccién del esqueleto de uno de los ejemplares y realizacién del boceto base por el artista plistico Luis Miguel Tokuda, REVISTA HAUCAYPATA 4 Tavestigaciones arqueolégicas del Tahuantinsuyo ery 1 ‘Solve el duo anterior, se apregaa ns carctriicasconporals del perv (color y tp de els, ete:). Fialnente, Ia imagen se digi, se retoce cas uno des detalles como la intended de olor, el mat J oo, ca § oes Figura 8, Proceso de reconstruccién fenotipica mediante dibujos y toma de medidas, realizado por el artista pléstico Luis Miguel Tokuda. uno de sus detalles como la intensidad de color, _considerado por el momento el desenfardelamiento de el tamaiio de ojos, cola y orejas (Figura 8). los hallazgos, por lo que la revisién de los restos Enesta etapa de nuestras investigaciones no hemos _se ha realizado aprovechando la condicién de desgas- Figura 9. Imagen del Hallazgo CNS 426 con su correspondiente placa radiografica. Obsérvese que es notorio que los huesos estn intactos (sin fracturas), sin fusionar y aparentemente hay restos de algunos érganos en la rogién ventral (chigado?), e te y roturas en que se encuentran los envolto- rios. Por ahora, y debido a las dimensiones de los hallazgos, hemos empleado el uso de placas radiograficas en uno de los pequenos fardos para examinar las condiciones del animal al in- terior (Por ej. lesiones, fracturas, ete.) (Figura 9). ‘Tenemos evidencia de restos de pupas de in- sectos asociadas a cada uno de los hallazgos que indican que estos quedaron expuestos ala intemperie por algin tiempo. A futuro debere- ‘mos ampliar las investigaciones hacia la ento- mologia forense, lo que permitiré identificar al tipo de insecto al que pertenecen, los posibles traslados de cuerpo y las caracteristicas de las zonas de procedencia EI anilisis histopatolégico® se ha incorpora- do recientemente a nuestros estudios. En esta etapa inicial, se ha realizado un examen visual de los ejemplares mejor conservados (momifi- cados) y que no tienen lesiones éseas aparen- tes. El examen ha incluido la toma de muestras, REVISTA HAUCAYPATA, 36, Tavestigaciones arqueoldgicas del Tahuantinsuyo correspondientes al hallazgo SM162, éstas co- rresponden a restos orginicos oscuros disemina- dos sobre y alrededor de las vertebras cervicales, que por sus caracteristicas y apariencia podrian tratarse de restos de cofgulos de sangre (Figura 10), indicio probable de que la causa de muerte fuera por ahoreamiento. Los resultados del ana- lisis nos brindarén informacion mas detallada y abriré un nuevo campo de evaluacién sobre la causa de muerte de los estos animales. Conclusiones preliminares Hemos realizado el estudio de los restos de al menos 26 Canis familiaris 0 perros domésticos Y en su mayoria se trata de cachorros de 1 sema- na hasta adultos jovenes de 18 meses de edad. Comunmente a la idea del perro prehispanico que se tiene y gracias a que las condiciones elimi- 6 Estudio al microscopio de tejidos y restos de érganos en biisqueda de anomalias. Figura 10. Restos de can en buen estado de conservacién (Hallazgo SM162) procedente de la Segunda Muralla, con indicacién de la zona de recoleccién de muestras para anilisis histopatolégicos Isabel Cornejo, Deni Pozzi-Escot, Katiusha Bernuy, Enrique Angulo y Luis Miguel Tokuda___17 Tallazgos de Canis jamiliaris on elsantuario de Pachacamae ticas de las costa peruana que han permitide la preservacién de los restos estudiados, los canes analizados tienen pelaje de tamaiio corto 0 me- dianamente largo (entre 1a2em. y3a4.5em.), y principalmente en dos colores: marron ama~ rillento y marrén oscuro que se manifiestan de forma individual o en combinacién. Eran canes de talla mediana (38-42 em. ala cruz’) y gran- de (45- 52.em. ala cruz), de orejas cortas, cola larga, con estructura rectangular del cuerpo y miembros y, con un peso corporal entre 12 ~ 14 kilos para los de talla mediana y entre 18 - 22 kilos para los de talla grande. El tratamiento mortuorio es variado e indi- ca que el enfardelamiento no fue planificado Casi todos se encontraron en posicién cubito- lateral; los encontrados en las excavaciones de la Segunda Muralla, y que mantuvieron su posicién original, nos indican que fueron en- terrados dentro de fosas individuales de poca profundidad En al menos tres canes, se ha identificado patologias éseas compatibles a raquitismo y desnutricién (Figura 11). No se encontraron cevidencias de cortes o lesiones en los huesos de los ejemplares analizados que nos den certeza sobre la causa de muerte de los animales. Fu- turos anilisis toxicolégicos (por ejemplo: en- venenamiento) y los resultados de los anélisis histopatolégicos nos podran ayudar a deter- minar con seguridad los indicios que tenemos sobre la muerte por ahorcamiento y/o sacrifici. Si bien las causas de muerte de estos animales pueden sernaturalesy/o intencionales, solo iden- tificamos su utilizacidn en contextos rituales. La variabilidad en el_ pelaje (longitud y den- sidad), la distribucién de colores y caracteristi- cas 6seas del craneo indican que estamos ante tres diferentes fenotipos de canes (Figura 12). Y, aunque no hay una correlacién entre el tra- tamiento mortuorio y los fenotipos senalados, consideramos que esias caracteristicas deberian ser estudiadas a futuro para poder determinar si se tratan de indicadores de procedencia. En cuyo caso, seria posible plantear que los canes fueron traidos al santuario por peregrinos provenientes de diversos lugares (locales y foraneos), y fueron dados como acompaiantes de entierros huma- nos u ofrendas para el oraculo Sobre la utilizacién de los canes como “acompa- jiantes en la otra vida” existen varias referencias en crénicas y otros documentos, tal como lo su- giere una referencia recogida del Padre Arriaga, extirpador de idolatrias del Pera del siglo XVII, que sefiala que “los muertos van a la tierra del silencio pasando por un puente de palos y lle- 7 Lugar ubicado en el lomo del perro, a la altura de las paletas de la escapula. Es el eruce entre una linea vertical (patas delanteras) y una horizontal (columna vertebral). 4%) El 0 Som Figura 41. Evidencias éseas compatibles con raquitismo y desnutricién, A la izquierda: Vertebras dorsales, se observa el crecimiento 6s00 asi ico del cuerpo de una de ellas (Hallazgo CNS 427). la derecha: Epifisis de costillas dilatadas en forma de copa (Hallazgo CNS 431), Feaoip 1. Cae de tino mesetio, ‘ala metkra crs sora ela mode a pekije coro 25-7 emp de coor ma (ear y naan al en, Vande, ores coras, cola arg (13cm pele demo y rps @.3 = 4c) de cole urn ono y marin sara tho, REVISTA HAUCAYPATA, 18 Tavestigaciones arqueolégicas del Tahuantinsuyo Fenotpa 3 Ces crime gi tala scan ras conus, ca mean pljccono (L529 de color mara Figura 12, Fenotipos de canes del santuario de Pachacamac, propuesta basada en los hallazgos de canes de la Segunda Muralla y PCR 07. vados por perros negros, que en algunas par- tes los crian para ese fin” (Citado por Weiss 1976: 43). ‘Asimismo, en el incanato los perros habrian formado parte de los cultos relacionados a la peticién del agua realizados bajo la presencia de la luna o en el mes lunar cuando escasea el agua. Guaman Poma y Garcilaso de la Vega re- fieren que los incas amarraban y golpeaban a sus llamas y a sus perros en las plazas, mientras que ellos mismos y sus hijos lloraban y hacian ruidos con caracoles, tambores y otros instru- mentos; expresaban dolor, exponiendo sus su- frimientos y los de sus animales para atraer la atencion de la luna, que segin Garcilaso “Ila- ‘masen la luna, que por cierta fabula que ellos contaban, decian que la lund era aficionada a los perros, por cierto servicio que le habian hecho, y que oyéndolos llorar, habria lastima de ellos” (Garcilaso 1941: 182-183 [1609: Libro Segundo, capitulo XX1IT]) Los canes procedentes de diversas edificacio- nes del santuario (Templo del Sol, Templo Vie- jo, PCR 02, PCRo3, PCR 08 y PCR 13) guardan ‘similitudes anatomicas con los tres fenotipos propuestos en base a los recientes hallazgos. Muy por el contrario, este conjunto no parece tenerrelacién directa con los tipos de canes en- contrados en otros sitios de la costa peruana, debido a las diferencias de forma de cuerpo, pelaje y color, que permitan establecer relaciones de descendencia y/u otros aspectos biolégicos y culturales. La importancia de estas evidencias hace necesa- rio continuar y desarrollar nuestra investigacion mediante los’ andlisis propuestos (entomologia forense, patologia forense, etc), el estudio de contextos similares de los Andes Centrales, fuen- tes etnohistéricas ete. En un nivel comparativo, lo que podremos obtener es una visién amplia sobre su procedencia, variantes en sus caracte- risticas fenotipicas y las diversas formas en que fueron utilizados éstos animales por las socie- dades prehispanicas involueradas en el culto a Pachacamac, a través del tiempo y del territorio andino. lecimientos A Sonia Quiroz Calle; Maria Luisa Patrén; Dr. Héctor Guzman Iturbe de la Clinica Veterinaria “Las Garzas”, quien nos apoyé con la radiogr: fia de uno de los fardos; Dr. Ivanoe Vega por su colaboracién con los anélisis de patologia vete- rinaria y a todo el equipo del Museo de Sitio de Pachacamac. Bil iografia BLANCO, Alicia, RODRIGUEZ, Bernardo y VA- LADEZ, Rail. 2009, Estudio de los cénidos ar-

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