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Técnicas especiales
CHAD A. KLIGER PAUL SORAJJA
●
Indicaciones
Las indicaciones del cateterismo cardíaco transeptal son:
1. Evaluación hemodinámica directa de la AI y el VI en pacientes en los
que dichos datos no se pueden obtener mediante técnicas aórticas
retrógradas, cateterismo anterógrado del corazón derecho o evalua
ción mediante técnicas de imagen no invasivas.
2. Acceso para técnicas intervencionistas estructurales cardíacas percu
táneas. Estas técnicas incluyen la valvuloplastia mitral con balón, el
implante de válvulas mitrales transcatéter, el cierre de la orejuela de
la AI, la reparación de la válvula mitral transcatéter, las técnicas de
válvula dentro de otra válvula (valve in valve) mitral y el tratamiento
de la insuficiencia paravalvular protésica mitral.
Contraindicaciones
Las contraindicaciones para el cateterismo cardíaco transeptal son:
• Pacientes incapaces de permanecer en posición supina.
• Trombo en la AI o en la aurícula derecha (AD).
Descargado para
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544 9 — Técnicas especiales
• Mixoma auricular.
• Ausencia de acceso venoso femoral derecho a la AD como resultado
de masas, trombos u otras causas de obstrucción.
Se debe sopesar cuidadosamente el cateterismo cardíaco del
lado izquierdo transeptal en pacientes con anatomía cardíaca dis
torsionada como resultado de una cardiopatía congénita, raíz aórtica
dilatada, dilatación auricular marcada o deformidad esquelética
torácica. Como abordaje alternativo, en casos seleccionados se ha
empleado el cateterismo cardíaco transeptal utilizando el acceso
yugular interno derecho.
Técnica
Material
La figura 9.1 muestra una vaina transeptal con un dilatador curvo y una
aguja hueca larga que se utilizan para cruzar el tabique interauricular. La
vaina transeptal suele ser de 7 u 8 F, a menudo con un brazo lateral que
facilita la evaluación hemodinámica en múltiples lugares con un solo
acceso transeptal (p. ej., medida desde del orificio final para la medida
de la presión del VI; puerto del brazo lateral para la presión de la AI). El
dilatador curvo y el conjunto de la vaina transeptal albergan en su interior
una guía metálica de 0,032 pulgadas que se pasa de la vena femoral a
la vena cava superior (VCS). La aguja transeptal modificada tiene una
punta de calibre 21 para reducir el riesgo de punción accidental de la
aorta o de la pared auricular. Hay disponibles agujas transeptales con
varias formas y tamaños de curva, y su selección depende de la anatomía
específica del paciente (fig. 9.2). El sistema de aguja transeptal tiene una
suave curva y se une a un transductor de presión mediante un adaptador
giratorio que permite el movimiento libre de la aguja larga mientras viaja
por el sistema venoso a través del catéter, y su manipulación para dirigirla
hacia el tabique auricular.
Fig. 9.1 Para la inserción del catéter transeptal curvo (A) desde la vena
femoral en la aurícula derecha (AD), se utiliza el estilete recto (B). La aguja
transeptal modificada (C) tiene un extremo de calibre 21 para reducir el
riesgo de punción accidental de la aorta o la pared auricular, y el catéter
(E) tiene orificios laterales (para mejorar la inyección de contraste) y una punta
cónica para facilitar la entrada en la vena femoral y a través del tabique
interauricular. (D) Detalle de la punta de la aguja transeptal. (Tomado de
Ross J, Jr. Transseptal left heart catheterization a 50-year odyssey. J Am
Coll Cardiol. 2008;51:2107-2115.)
Fig. 9.2 (A) Montaje del catéter transeptal. La distancia entre la aguja
transeptal y el conector del dilatador (flecha) se establece de modo que
la aguja se encuentra justo en el interior del dilatador. (B) Fotogramas de
cineangiografía del ventrículo izquierdo (VI) utilizando una vaina transeptal
y un catéter Berman en el VI. Izquierda: fotograma sistólico; derecha:
fotograma diastólico. Obsérvese el anillo de la válvula aórtica protésica.
(A, tomada de Weiner RI, Maranhao V. Development and application
of transseptal left heart catheterization. Cathet Cardiovasc Diagn.
1988;15:112-120.)
Fig. 9.5 (A) El pigtail marca la ubicación de la válvula aórtica en las imá-
genes en proyección anteroposterior, con el extremo del catéter transeptal
inferior y medial a la válvula aórtica. (B) En la proyección lateral, el lugar
de punción transeptal está aproximadamente a dos tercios de la distancia
entre la válvula aórtica y la pared posterior de la aurícula izquierda (AI). (C) En
la proyección oblicua anterior derecha (OAD), el dilatador transeptal se
engancha en la fosa oval posterior al catéter pigtail (válvula aórtica), pero
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
14. Para acceder al VI, se inserta una guía metálica en el catéter tran
septal o la vaina y se avanza a través de la válvula mitral y al VI. No
se debe girar la vaina sin una guía o dilatador en su interior, ya que
sus paredes son delgadas y se pueden doblar fácilmente. Se pasa
un catéter-balón (relleno de dióxido de carbono para minimizar el
riesgo en caso de rotura del balón) a través de la vaina transeptal y
se dirige el catéter flotante al VI. El operador puede utilizar el catéter-
balón para medir la presión ventricular o utilizarlo como riel para
pasar el catéter transeptal al VI.
15. El momento de la administración de heparina queda a discreción
del operador. Algunos operadores prefieren administrarla antes de
la punción transeptal, otros prefieren administrarla después. A pesar
de todo, la heparinización completa (100 U/kg i.v.) debe producirse
una vez que se haya obtenido con éxito el acceso transeptal.
La fosa oval se encuentra localizada en el tercio medio del tabique
interauricular y es cóncava hacia la AI en corazones normales. Las val
vulopatías pueden alterar significativamente la ubicación de la fosa oval.
En la enfermedad valvular aórtica, una aorta ascendente dilatada puede
desplazar la fosa en sentido superior y anterior. En la enfermedad de la
válvula mitral, la AI generalmente se encuentra dilatada en sentido pos
terior e inferior, y desplaza la fosa oval inferiormente. En la enfermedad
mitral grave, la fosa puede encontrarse evertida y desplazada al tercio
inferior del tabique. Esto hace que la fosa sea difícil de localizar al ir
descendiendo el catéter, y la técnica de punción transeptal debe modi
ficarse en consecuencia. En general, la dilatación auricular izquierda
produce un desplazamiento horizontal que, por lo general, requiere una
trayectoria superficial de la aguja (∼50 grados). La dilatación de la AD
conduce a un desplazamiento vertical, que requiere una forma de aguja
más agresiva (∼70 a 90 grados).
En algunos pacientes, el tabique interauricular puede encontrarse
engrosado y ser difícil de cruzar con la aguja transeptal o el conjun
to del catéter. Se ha desarrollado un método transeptal que utiliza
energía de radiofrecuencia para ablacionar el tabique interauricular.
Una aguja, que está completamente aislada excepto en su punta del
calibre 21, se conecta a un generador que crea una salida monopolar
capaz de suministrar 10 W de energía durante 2 segundos (Baylis
Medical Company, Quebec, Canadá). Comparando el método de
radiofrecuencia con las técnicas convencionales de aguja transeptal,
un ensayo aleatorizado mostró un tiempo más corto para la punción
transeptal (2,3 min frente a 7,3 min) y una mayor tasa de éxito (100%
frente a 72,2%) para la radiofrecuencia.
Cuando existe preocupación por la presión hacia adelante nece
saria para avanzar una aguja transeptal o el conjunto del catéter, el
tabique interauricular se puede cruzar inicialmente con una guía de
bajo perfil. En esta técnica, el conjunto del catéter y la aguja se utilizan
para abombar el tabique, y seguidamente se avanza una guía de nitinol
de 135 cm de largo y 0,014 pulgadas de diámetro (SafeSept, Pressure
Products, San Pedro, CA). La punta de esta guía es afilada para permitir
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Indicaciones
Las indicaciones de la punción ventricular izquierda directa son:
1. Evaluación hemodinámica directa del VI y ventriculografía izquierda,
cuando los datos diagnósticos no se pueden obtener utilizando
otro acceso vascular o a partir de estudios de imagen no invasivos.
Esta indicación se da principalmente en pacientes que han sido
sometidos a sustitución de las válvulas mitral y aórtica por prótesis
mecánicas.
2. Intervenciones cardíacas estructurales cuyos dispositivos se aplican
a través del ápex del VI o requieren la creación de rieles cardíacos
transcatéter para su aplicación. Estas técnicas terapéuticas incluyen la
colocación válvulas mitrales y el cierre percutáneo de insuficiencias
protésicas paravalvulares.
Se debe evitar la punción directa del VI en pacientes con trombos
intracardíacos y en aquellos con anticoagulación terapéutica.
Técnica
La punción directa del VI se realiza habitualmente con guía ecocardio
gráfica. Recientemente, también se han desarrollado técnicas de guía
mediante cubierta de TC en el laboratorio de cateterismo (v. «Imágenes
de fusión para facilitar el cateterismo cardíaco»).
Cuando se guía mediante ecocardiografía, el ápex del VI se
muestra desde la ventana apical para determinar la dirección del
eje largo del VI en una posición superior al reborde costal. El ope
rador memoriza este ángulo y marca la posición en el tórax con un
rotulador indeleble. Después de la preparación estéril del área de
punción, se inserta una aguja de calibre 18 con una funda de teflón.
Algunos operadores prefieren agujas con estilete para evitar lesionar
el miocardio, mientras que otros optan por conectar la aguja a un
transductor de presión para permitir la monitorización hemodinámica
durante la inserción. Una vez que la aguja entra en el VI, se avanza de
2 a 3 mm más para asegurarse de que la vaina exterior de teflón está
completamente avanzada en el VI. A continuación, se retira la aguja,
dejando la vaina en su lugar para uso diagnóstico o intervenciones
terapéuticas. Hay que tener en cuenta que, después de su extracción,
la aguja no debe ser reintroducida a través de la vaina de teflón en
el paciente. Las figuras 9.7 y 9.8 ilustran un caso típico de punción
directa del VI y su hemodinámica asociada.
Después de completar el procedimiento, el lugar de acceso apical
se puede cerrar con la colocación de un dispositivo de oclusión. Actual
mente, no hay dispositivos aprobados por la FDA para el cierre del ápex
del VI, pero se han utilizado varios dispositivos (AMPLATZER Muscular
VSD Occluder, AMPLATZER Duct Occluder y AMPLATZER Vascular
Plug II, St. Jude Medical, St. Paul, MN). Tras la reversión de la anticoagula
ción, el disco distal del dispositivo de cierre se retira hasta que se fija a la
Fig. 9.8 Presión ventricular izquierda (VI), auricular izquierda (AI) y aórtica
(Ao) (escala de 0 a 200 mmHg) que muestra los gradientes valvulares pro-
tésicos aórtico y mitral. Obsérvese la influencia de los ritmos estimulados
en los gradientes valvulares.
Complicaciones
Se debe observar cuidadosamente al paciente por si de produce
un hemopericardio, un hemotórax o un neumotórax. Si se presenta
alguna de estas complicaciones, se pueden tratar mediante aspira
ción directa o cirugía, según sea necesario. Se puede producir una reacción
vasovagal con bradicardia e hipotensión. Las complicaciones de
sangrado pueden ser el resultado de la laceración de la descendente
anterior izquierda, sus ramas o las arterias intercostales. Los pacientes
que han tenido una cirugía cardíaca previa generalmente tienen el
espacio pericárdico obliterado, lo que disminuye la probabilidad de
taponamiento cardíaco.
Biopsia endomiocárdica
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.
Indicaciones, contraindicaciones
y complicaciones
El seguimiento del rechazo en los trasplantes cardíacos y la determi
nación de la cardiotoxicidad de la antraciclina son las dos únicas indica
ciones definitivas para la biopsia endomiocárdica (cuadro 9.2). Otras
indicaciones incluyen el estudio de las miocardiopatías infiltrativas,
miocarditis que pueden beneficiarse del tratamiento inmunosupresor
y, ocasionalmente, para realizar el diagnóstico diferencial entre mio
cardiopatía restrictiva y constrictiva. Las contraindicaciones relativas
de la biopsia endomiocárdica son la anticoagulación y las anomalías
anatómicas.
Las complicaciones de la biopsia endomiocárdica pueden estar
relacionadas con el lugar de acceso (3%), insuficiencia valvular (3%),
Fig. 9.14 El fotograma muestra una válvula St. Jude con una guía de
presión Radi de 0,014 a través de la válvula, avanzada a través de un
catéter multiusos. La válvula de disco basculante (DV) en posición mitral
hizo imposible un acceso transeptal. A, catéter multipropósito 6 F; B, guía
de presión Radi; C, velo de la válvula St. Jude.
Tabla 9.1
Registro de las complicaciones mayores
de 2.505 procedimientos (retrospectivo) y
543 procedimientos (prospectivo) de biopsia endomiocárdica
Retrospectivo Prospectivo
(absoluta/%) (absoluto/%)
Taponamiento pericárdico 2/0,08 0/0
con pericardiocentesis
Bloqueo AV completo permanente 1/0,04 0/0
con necesidad de un marcapasos
permanente
Cirugía cardíaca urgente 0/0 0/0
Soporte vital cardíaco avanzado 0/0 0/0
Hemotórax o neumotórax 0/0 0/0
Muerte 0/0 0/0
AV, auriculoventricular.
Tomado de Holzmann M, Nicko A, Kuhl U, et al. Complication rate of right
ventricular endomyocardial biopsy via the femoral approach: a retrospective
and prospective study analyzing 3048 diagnostic procedures for a 11-year period.
Circulation 2008;118:1722-1728.
Dispositivos de biopsia
Existen dos tipos básicos de biotomos: 1) dispositivos de eje rígido (pre
formados) (biotomos Konno, Kawai y Stanford; fig. 9.15), y 2) dispositivos
de eje flexible (biotomos King y Cordis; fig. 9.16) que se colocan con la
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Técnica
La biopsia endomiocárdica se puede realizar bajo guía fluoroscópica o
ecocardiográfica desde un acceso femoral o yugular interno.
Acceso femoral
Después de que el paciente reciba anestesia local, la vena femoral dere
cha o izquierda se perfora utilizando la técnica de Seldinger modificada,
y se avanza una guía de 0,038 pulgadas en la vena femoral. Sobre la guía
se avanza una vaina de biopsia de 7 F con un dilatador 7 F. Se utiliza una
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566 9 — Técnicas especiales
Fig. 9.15 Biotomo Scholten. (A) Abierto; (B) cerrado. (Tomado de Tilkian AG,
Daily EK. Cardiovascular Procedures: Diagnostic Techniques and Therapeutic
Procedures. St Louis; Mosby: 1986.)
Fig. 9.17 Acceso yugular interno. El extremo del biotomo está en el ápex
del ventrículo derecho (VD), apuntando hacia el tabique interventricular.
(Tomado de Tilkian AG, Daily EK. Cardiovascular Procedures: Diagnostic
Techniques and Therapeutic Procedures. St Louis; Mosby: 1986.)
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568 9 — Técnicas especiales
Pericardiocentesis
La pericardiocentesis puede ser necesaria para el diagnóstico y el
tratamiento de derrames pericárdicos agudos y crónicos. En el tapo
namiento cardíaco, esta es una técnica que salva vidas. La pericar
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9 — Técnicas especiales 569
Acceso
El acceso más frecuente es el subxifoideo, pero otras rutas de acceso son
aceptables, dependiendo de la profundidad desde la piel y la ubicación y
el volumen del derrame pericárdico (fig. 9.19). La ventaja del acceso subxi
foideo es una menor probabilidad de laceración de las arterias coronarias
y mamarias internas. La colocación de la aguja aproximadamente un dedo
por debajo del borde de la costilla es necesaria para evitar dificultades al
avanzar el catéter a través del tejido fibroso, cerca del apéndice xifoides.
Configuración y colocación
El paciente se coloca con el cabecero en un ángulo de 30 a 45 grados
para permitir que el líquido pericárdico se acumule en la superficie infe
rior del corazón. Se administra anestésico local en el lugar de punción
de la aguja y se infunde más a través de la aguja pericárdica, según se
avanza, inicialmente perpendicular a la piel; luego se baja a un ángulo
casi paralelo al suelo desplazándose por debajo del apéndice xifoides
hacia el hombro izquierdo. Si el paciente es obeso, puede ser necesario
usar una aguja más larga y emplear algo de fuerza para inclinar la jeringa
bajo el apéndice xifoides hacia el corazón (fig. 9.20).
En los procedimientos electivos, las presiones del corazón derecho
Descargado
se miden paracon
Franklin Correa Prieto
un catéter con(fcorreap@ucvvirtual.edu.pe)
balón en la punta colocado en Universidad Cesar Vallejo
en la arteria
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9 — Técnicas especiales 571
Fig. 9.25 (A) Lazo utilizado para capturar el extremo de un catéter. (B) Los
lazos se puede utilizar para capturar fragmentos de catéter. (Reproducido
con permiso de Covidien.)
Lecturas recomendadas
Bell CA, Kern MJ, Aguirre FV, et al. Superior accuracy of anatomic positioning with echo
cardiographic- over fluoroscopic-guided endomyocardial biopsy. Cathet Cardiovasc
Diagn. 1993;28:291-294.
Brockenbrough EC, Braunwald E. A new technique for left ventriculography and trans
septal left heart catheterization. Am J Cardiol. 1960;6:1062-1064.
Croft CH, Lipscomb K. Modified technique of transseptal left heart catheterization. J Am
Coll Cardiol. 1985;5:904-910.
Holzmann M, Nicko A, Kühl U, et al. Complication rate of right ventricular endomyocar
dial biopsy via the femoral approach: a retrospective and prospective study analyzing
3048 diagnostic procedures over an 11-year period. Circulation. 2008;118:1722-1728.
Hsu JC, Badhwar N, Gerstenfeld EP, et al. Randomized trial of conventional transseptal
needle versus radiofrequency energy needle puncture for left atrial access (the
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Kern MJ, Deligonul U. The Interventional Cardiac Catheterization Handbook. St Louis:
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1989;79:971-979.
Miller LW, Labovitz AJ, McBride LA, et al. Echocardiography-guided endomyocardial
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Ross Jr J. Transseptal left heart catheterization a 50-year odyssey. J Am Coll Cardiol.
2008;51:2107-2115.
Wadehra V, Buxton AE, Antoniadis AP, et al. The use of a novel nitinol guidewire to
facilitate transseptal puncture and left atrial catheterization for catheter ablation
procedures. Europace. 2011;13:1401-1405.
© Elsevier. Fotocopiar sin autorización es un delito.