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Intervención Psicopedagogica en Talleres Protegidos: Algunas Lineas de Reflexión
Intervención Psicopedagogica en Talleres Protegidos: Algunas Lineas de Reflexión
EN TALLERES PROTEGIDOS:
ALGUNAS LINEAS DE REFLEXIÓN
El artículo más que definirse en todos los temas que componen la intervención
psicopedagógica, define un marco general y luego aporta aquellos elementos —casi a
modo de esquema— que debieran considerarse para planificar correctamente un pro-
ceso socio-educativo.
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nosotros, intentando huir de las clasificacio- noma Vasca asumiendo que el acceso a un
nes y deficiones al uso (Grossman, 1983) y puesto de trabajo (no simulado, sino real,
siguiendo la consigna de Zigler nos parece esto es su inclusión en el círculo produc-
de utilidad una concepción de las personas ción-consumo) sigue siendo uno de los
con minusvalía desde sus derechos (no principales mecanismos con que contamos
desde sus déficits), pensando que éstos son de cara a la integración social de las per-
producto de la interacción de los sujetos, sonas con deficiencia mental, se ha esti-
con sus características y unos entornos con mulado un desarrollo importante en cuanto
deficiencias y discapacidades —reconocien- a la creación de posibilidades laborales a
do la importancia de los procesos sociales través de los talleres protegidos. Este de-
en la configuración personal de los suje- sarrollo viene caracterizado por:
tos—. Trabajamos en la idea de que algún
día no haya necesidad, ni de llamar a nadie Incremento considerable de puestos
deficiente, ni de crear estructuras específi- de trabajo.
cas para ellos.
Diversificación y especialización de
los trabajos que se realizan.
La legislación Adopción de estructuras empresa
riales.
Un segundo aspecto que habremos de
pensar será nuestra visión del desarrollo le- A partir de estos aspectos previos
gislativo. Aunque la legislación define clara-
pensamos que la realidad actual de los ta-
mente los tipos de centros posibles. (Cen-
lleres se ha ido configurando como com-
tros Especiales de Empleo y Centros
pleja y contradictoria. Veamos en qué nos
Ocupacionales) y su naturaleza (productiva
o facilitadora del desarrollo a través del tra- basamos para afirmar esto.
bajo) e impide otras fórmulas (enclaves, por Por una parte nos encontramos con
ejemplo) a nosotros no nos parece positivo que el sistema productivo capitalista es
que estas formas organizativas que la legis- marginante y competitivo. Intentar introdu-
lación prescribe se lleven a la práctica de cirnos con lo más "improductivo" de ia so-
manera estanca, separando tanto físicamen- ciedad (2) en los vericuetos de la produc-
te, como en maneras de funcionar, unos ción es cuando menos complicado. La cosa
centros de otros. Nuestra propuesta sería se complica si pretendemos rentabilizar
situarse en una fórmula básicamente flexi- desde un punto de vista económico los ta-
ble, que no marque diferencias estrictas en- lleres. Aún podemos ir más allá (si nos
tre un tipo de centros u otros (evitando re- atrevemos), y pretender además que en
producir ciertos esquemas del exterior) (1), esos talleres se atiendan las necesidades
y que permita un fluido trasvase entre unos particulares de las personas que trabajan
servicios y otros y que, en definitiva, permi- en ellos (algo impensable en otros "tipos"
ta diseñar situaciones particulares para ne- de empresas). Nos situamos, pues, en una
cesidades particulares. cierta utopía caminando hacia un trabajo
liberador. Tampoco podemos olvidar que,
en función de que el colectivo de deficien-
Situación actual de los talleres tes mentales es producto de una definición
exterior, y que se da una exagerada hete-
Otro aspecto que habremos de clarifi- rogeneidad dentro del mismo, en los talle-
car es nuestra posición con respecto al va- res podremos encontrarnos a sujetos que
lor del trabajo como medio de inserción "pasan rohipnoles" con sujetos que se mi-
social. Tal como recoge el informe de la ran la mano todo el día o que no controlan
OCDE (OCDE/CERI, 1988), queda fuera de esfínteres.
toda duda que el trabajo es de capital im-
portancia en el acceso a la condición de En línea con estos condicionantes apa-
adulto de los jóvenes en general y de las recen algunas contradicciones cotidianas.
personas con deficiencia mental en parti-
cular. En el caso de la Comunidad Autó-
(2) Fierro (1981, pág. 40) hace un análisis es-
pecialmente interesante de este punto: "En el prin-
cipio de todo está el trabajo rentable (y no sólo el
(1) Saizarbitoria (1985, pág. 45) señala, por productivo). Se es subnormal porque se es o se va
ejemplo, que se han encontrado fuertes correlacio- a ser inepto para un trabajo rentable. El modo de
nes entre el nivel salarial y el cociente intelectual producción designa de antemano quiénes van a ser
en los talleres protegidos de la C.A.V. sus subnormales".
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Una de las más importantes es la de si talleres", no hay una manera específica de
además de todo lo anterior pretendemos funcionar, hay tantas como modelos teóri-
integrar a determinados trabajadores en el cos o como personas o grupos concretos
mercado ordinario, nos quedaremos sin que hacen lecturas de esos modelos. En lí-
nuestros "mejores" trabajadores con lo que nea con esto hay algunos conceptos de
el objetivo de productividad se complica comprensión de la realidad socio-educativa
todavía más. que se nos aparecen útiles para intervenir
de una manera adecuada: concepto de
Así pues nos vamos a mover en un contexto, de sistema y de comportamiento
triángulo con tres vértices-objetivos en el adaptativo.
que hemos de hacer equilibrios:
1. Contexto
Producir y vender en un mercado
exigente y competitivo.
Las situaciones humanas, en tanto que
Desarrollar las posibilidades de los configuradas por personas son singulares,
sujetos y atender problemáticas es únicas, irrepetibles y complejas. Las per-
pecíficas. sonas nos comportamos de manera dife-
rente según el medio en el que actuamos
Integrar (no sólo en la función social —se llega a decir que el comportamiento
sino en la empresa ordinaria). de una persona es más parecido al de
otras personas en la misma situación que
Equilibrios que se reflejan en la evolu- al suyo propio en situaciones diferentes—.
ción de los mismos talleres (Alkorta, 1985), El contexto lo definimos como el conjunto
y en los que no siempre es fácil conjugar de elementos que configuran una situación
de manera armoniosa los tres objetivos. determinada, tal como dice Selvini Palaz-
zoli (1985, pág. 69-71):
Aunque puedan existir más argumen-
tos que apoyen nuestra idea, creo que po-
demos decir con seguridad que la realidad "situación interaccional en la que se
de los talleres es compleja y contradictoria. emite un mensaje (...) implica la presencia
En ese terreno nos tenemos que desen- de un código de restricciones sociales in-
volver. terpersonales (reglas) que limita y hasta
cierto punto define, un repertorio de signi-
ficados posibles. El contexto da sentido a
la comunicación (...) el significado de toda
LA INTERVENCIÓN PSICOPEDAGOGICA, comunicación surge de la matriz contex-
UNA CONCEPCIÓN A DEBATE. LA tual en la que ella se produce y a la que al
FUNCIÓN DEL PSICÓLOGO/PEDAGOGO mismo tiempo define".
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social no le 'vale' a la persona concreta En función de esto:
para ejercer como tal, es decir el entorno
está plagado de 'minusvalías'; aunque dada ¿Cuál es la función del Psicólogo/
la escala de valores en la que nos move- Pedagogo en los talleres protegidos?
mos, resulta que la calificación de 'minus-
válido' (adjudicada por quienes 'saben' y Entendemos su papel como aquella
pueden hacerlo) la recibe la persona y no persona que se incluye en el taller, en esa
el entorno." realidad compleja y contradictoria y facilita
su funcionamiento y avance del sistema en
su conjunto, aportando sus conocimientos
y maneras de hacer "psicopedagógicas".
2. Sistemas Aunque esta propuesta amplia pueda pa-
recer que peca de omnipotencia, no pen-
Profundizando la ¡dea de contexto se samos que sea así. Su presencia es un ele-
nos aparece otro concepto: el de sistema. mento del sistema que puede facilitar un
Los centros de trabajos, los talleres prote- reajuste del mismo sistema, sin que ello
gidos... los entendemos como un conjunto implique que puede introducir grandes
de elementos en continua interacción; ese cambios. Sería como un mecánico que in-
contexto del que hablábamos en el apar- tenta echar un poco de aceite en algunas
tado anterior se configura como una tota- máquinas para que funcionen mejor.
lidad —no reductible a los miembros que lo
forman—, con una dinámica propia, con Para ello deberá contar con instru-
unas determinadas reglas de funciona- mentos de análisis e intervención, que se
miento, y teniendo como algo definitorio sintetizan en el Proyecto de Intervención y
que cualquier cambio en alguno de sus con una estrategia fundamental: la partici-
elementos afecta al conjunto del sistema. pación.
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un taller. Las prácticas de un taller se han 7. Monitores:
ido configurando a lo largo del tiempo
(proceso) y en función de un conjunto de Es una de las variables clave, algunos
variables, que pertenecen a la esencia mis- aspectos de su estudio son:
ma de ese taller. Aunque no podemos in-
tervenir sobre esa historia, su conocimiento — Concepciones y teorías implícitas o
es necesario para la comprensión de las explícitas (más las primeras que las
situaciones. segundas) que manejan.
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11. Clima, autoconciencia: zajes (Brown, 1989): Funcionalidad, prac-
ticidad, adecuación a la edad cronológica,
El conjunto de estos elementos en un tratamiento de adulto, mejora del esta-
taller concreto nos da una cultura de taller, tus....
que es peculiar a cada uno.
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que lo facilite, proponiendo "lugares" y "dificultades" que presentan los sujetos
"espacios" donde la gente pueda relacio- mediante procesos de interacción. En lógi-
narse. ca con esto los grupos se convierten en el
medio privilegiado de intervención en los
De los elementos generales que co- que ensayar nuevas formas de relación.
mentábamos a la hora de analizar el taller,
algunos serán los que especialmente ha- 3. Método Participativo:
bremos de considerar:
Para el logro de los objetivos se hace
Agrupamientos Las formas en que necesaria la implicación del colectivo con
vamos a organizar a los operarios, el que trabajamos. Algo que lo facilitará
grupos fijos o móviles, heterogé será el grado de participación que seamos
neos u homogéneos, con posibili capaces de generar
dades de autoorganización...
4. Método tensional:
Tipo de trabajo. Cada tipo de tra
bajo (en cadena o en puesto tiene Los aprendizajes que se producen en
sus ventajas e inconvenientes. Por este proceso implican tanto al educador
ejemplo, el trabajo en cadena nos como a los "educandos", es un proceso bi-
permite un trabajo de equipo aun direccional en el que ambos, juntos, van
que puede que sea más rutinario. aprendiendo.
Analizar en cada caso lo que el tipo
de tarea nos facilita y reajustarlo
será una función que habrá de rea
Y los educadores...
lizarse.
Órganos de participación y deci También es pertinente incluir cómo los
sión. Como comentaremos más educadores se van a organizar El trabajo en
adelante la participación que sea equipo y un método de trabajo basado en
mos capaces de promover facilitará el ya viejo paradigma de acción-reflexión-
un ambiente enriquecedor. La or acción (con su consecuencia en los siste-
ganización de canales de participa mas de evaluación y seguimiento) serán los
ción (asambleas, reuniones de gru pilares sobre los que se asienta el trabajo
po o sección) será la consecuencia del grupo de educadores.
lógica de lo anterior.
CONCLUSIÓN
¿Cómo aprende la gente?
La forma de llevar esto a cabo supone En nuestra opinión, el que los profe-
sionales que actualmente trabajan en los
adoptar una metodología que sea coheren-
talleres protegidos, definan desde la prác-
te con los objetivos y estructura propues-
tica la manera de conjugar los aspectos
tos. Desde nuestro punto de vista hay una
productivos con los aspectos de desarrollo
serie de principios que pueden orientar
y aprendizaje de los operarios que en ellos
nuestra acción. trabajan, facilitará el proceso de integra-
ción social de las personas con deficiencia
1. Partir de lo positivo de cada suje mental. El que esto se pueda llevar a cabo
to/grupo: dependerá, entre otros condicionantes, de
que se elaboren proyectos de intervención
Contar con las capacidades de adap- en el que se incluyan ambos aspectos. He-
tación de los sujetos/grupos es de capital mos intentado apuntar algunas pinceladas
importancia. Aunque conceptualmente se que puedan servir de base para ello.
suponen superados los abordajes clínicos
en educación, en la práctica se tiende a in- Natxo Martínez Rueda
tervenir desde lo que los sujetos no hacen,
en vez de apoyarnos en sus capacidades.
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empleo. (Ponencia presentada a las II Jorna- ORCASITAS, J. R. (1987): Un proyecto de "Servi-
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