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Astronomia de Posición (I) - D.H.L - Upv
Astronomia de Posición (I) - D.H.L - Upv
ASTRONOMÍA DE POSICIÓN I.
ÍNDICE.
ÍNDICE. 2
ASTRONOMÍA
APÉNDICE I.
SISTEMAS DE REFERENCIA ASTRONÓMICOS.
I.1. INTRODUCCIÓN. SISTEMAS DE REFERENCIA ABSOLUTOS
Y RELATIVOS.
I.2. SISTEMAS DE REFERENCIA INERCIALES.
APÉNDICE II.
EL CONCEPTO Y LA MEDIDA DEL TIEMPO.
II.1. INTRODUCCIÓN.
II.2. DEFINICIÓN DE UNA MÉTRICA DEL TIEMPO.
APÉNDICE III.
ESTADO ACTUAL DE LA MEDIDA DEL TIEMPO.
III.1. INTRODUCCIÓN.
III.2. ESCALAS DE TIEMPO ROTACIONAL.
III.2.1. INTRODUCCIÓN.
III.2.2. TIEMPO SIDÉREO VERDADERO Y MEDIO. PRECISIÓN Y NUTACIÓN.
ECUACIÓN DE LOS EQUINOCCIOS.
III.2.3. TIEMPO SOLAR VERDADERO.
III.2.4. TIEMPO SOLAR MEDIO.
III.2.5. TIEMPO UNIVERSAL.
III.3. ESCALA DE TIEMPO DE EFEMÉRIDES.
III.4. ESCALA DE TIEMPO ATÓMICO.
III.5. TIEMPO UNIVERSAL COORDINADO.
III.6. REVISIÓN DEL CONCEPTO DE AÑO TRÓPICO.
III.7. REVISIÓN DE LA RELACIÓN ENTRE EL TIEMPO MEDIO
Y EL TIEMPO SIDÉREO.
III.8. ACTUALIZACIONES A ESCALAS DE TIEMPO.
ÍNDICE. 3
ASTRONOMÍA
ÍNDICE. 4
ASTRONOMÍA
La astronomía estudia el Sol y las estrellas, los planetas y sus satélites, los
cometas y cuerpos meteóricos, las nebulosas, los sistemas estelares y la materia que
ocupa el espacio interestelar e interplanetario, cualquiera que sea el estado en que se
encuentre esta materia.
La tercera tarea es más complicada que las dos anteriores. Para la resolución de
sus cuestiones el material de observación acumulado es por ahora muy insuficiente.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 1
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 2
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 3
ASTRONOMÍA
Si bien el geoide es una superficie que permite definir muy bien el origen de la
tercera coordenada, altura ortométrica, no es útil, debido a sus condiciones de curvatura,
para definir otros dos parámetros que junto a la altitud den posición tridimensional en el
espacio a cualquier punto de la superficie terrestre. Esto obliga a recurrir a una
superficie matemática auxiliar, un elipsoide de revolución.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 4
ASTRONOMÍA
La Tierra tiene una forma casi esférica. Está animada de una rotación en torno a
un eje que pasa por el centro de masas. El eje de rotación corta la superficie terrestre en
dos puntos: en el polo geográfico norte (PN ) y en el polo geográfico sur (PS). El polo
geográfico norte es aquél desde el que si se observa la Tierra hacia su interior, esta rota
en el sentido contrario a las agujas del reloj.
Los círculos menores, cuyos planos son paralelos al plano del ecuador terrestre,
se denominan paralelos geográficos. El paralelo geográfico que está a una distancia de
23º26´ al norte del ecuador se llama trópico del hemisferio boreal o trópico de Cáncer;
el paralelo que se encuentra a una distancia de 23º26´ hacia el sur del ecuador, se llama
trópico del hemisferio austral o trópico de Capricornio. Los paralelos geográficos que
se encuentran a una distancia de 23º26´de los polos de la Tierra se denominan círculos
polares: ártico (hemisferio boreal) y antártico (hemisferio austral).
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 5
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 6
ASTRONOMÍA
Se llama latitud geográfica del punto O al ángulo que forma la vertical de O con
el plano del ecuador terrestre. La latitud geográfica varía de 0º a 90º en el hemisferio
boreal (latitud norte) y de 0º a –90º en el hemisferio austral (latitud sur),
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 7
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 8
ASTRONOMÍA
Al igual que se definen una serie de elementos geográficos para las coordenadas
geográficas, se definen para el elipsoide de revolución, o para las coordenadas
geodésicas.
Antes de definir los ejes X e Y hay que definir algunos elementos geométricos:
• Polos geodésicos.- Son los puntos de intersección del eje Z con el elipsoide
de revolución.
• Plano meridiano geodésico.- Cualquier plano que contenga al eje Z.
• Plano paralelo geodésico.- Cualquier plano normal al eje Z.
• Meridiano geodésico de un punto.- Aquella mitad de la intersección del plano
meridiano geodésico del punto con el elipsoide de revolución que contiene al
eje Z y al punto.
• Paralelo geodésico de un punto.- Intersección del plano paralelo geodésico
del punto con el elipsoide de revolución. Su ecuación es la de un círculo de
radio decreciente conforme nos apartemos del plano Z=0.
• Plano ecuatorial geodésico.- Plano Z=0.
• Ecuador geodésico.- Es el paralelo geodésico correspondiente al plano
ecuatorial geodésico.
• Vertical geodésica en un punto de la superficie del elipsoide de revolución.-
Coincide con la dirección del vector normal al elipsoide en dicho punto.
• Vertical geocéntrica.- Es la dirección del vector que une el punto con el
centro del elipsoide.
• Plano horizonte geodésico en un punto de la superficie del elipsoide.- Plano
perpendicular a la vertical geodésica que contiene al punto.
• Meridiano geodésico origen.- Una vez posicionado el elipsoide respecto del
geoide, mediante la definición del datum, se puede obtener el punto
correspondiente sobre el elipsoide de cualquier punto de la superficie terrestre
tal y como estudiamos anteriormente. Se adopta como meridiano geodésico
origen normalmente el meridiano geodésico del observatorio astronómico de
Greenwich.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 9
ASTRONOMÍA
Una vez definido el meridiano geodésico origen ya es posible definir el eje X del
sistema de coordenadas cartesianas tridimensionales, como el eje intersección del plano
ecuatorial geodésico (Z=0) y el plano meridiano origen. El eje Y estará contenido en el
plano Z=0 y será perpendicular al X y su sentido será tal que los tres ejes formen una
terna dextrógira.
También se suele definir una latitud geocéntrica como el ángulo que forma la
vertical geocéntrica con el plano ecuatorial geodésico.
Para definir las coordenadas astronómicas hay que mejorar la definición del eje
de rotación terrestre. Debido a que el eje de rotación terrestre no es fijo en el tiempo se
considera el eje medio, Origen Convencional Internacional (CIO), definido por Bureau
Internacional de l’Heure (B.I.H.) en 1903. La movilidad del eje de rotación terrestre da
lugar en astronomía a la consideración de coordenadas y observaciones instantáneas o
absolutas según se refieran al eje de rotación del instante de observación o al eje medio,
respectivamente. En el apéndice I se incluye información relativa al movimiento del
polo y a relación entre distintos sistemas de tiempo que serán estudiados en capítulos
posteriores.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 10
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 11
ASTRONOMÍA
Los puntos que tienen igual latitud astronómica instantánea están situados en un
mismo paralelo astronómico instantáneo. Los puntos que tienen igual longitud
astronómica instantánea están situado en un mismo meridiano astronómico instantáneo.
Ni las primeras líneas son circunferencias, ni las segundas elipses, sino que son curvas
irregulares en el espacio.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 12
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 13
ASTRONOMÍA
Un concepto muy importante que resta por abordar es el de acimut que une dos
puntos. En un principio se definirá el acimut geodésico, posponiendo el acimut
astronómico para un capítulo posterior.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 14
ASTRONOMÍA
En una noche despejada, en el cielo oscuro, son visibles las estrellas, la Luna,
los planetas, las nebulosas y, a veces, los cometas y otros cuerpos. La primera impresión
de la observación del firmamento es la infinidad de estrellas y el desorden de la
disposición de ellas en el cielo. En realidad la cantidad de estrellas que se ven a simple
vista no es muy grande, solamente unas 6 mil en todo el cielo, y en una mitad de éste,
que en el momento dado se ve desde cualquier punto de la superficie terrestre, no es
mayor de 3 mil.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 15
ASTRONOMÍA
relativa observada entre las estrellas no puede ser otro que las enormes distancias
presentes en el Universo dado que existe un movimiento relativo a gran velocidad,
téngase presente que la Tierra rota en torno al Sol a una velocidad de 30 km./s y éste,
junto a su sistema, se traslada rotando en torno al centro de la Vía Láctea a 220 km./s.
Sólo las 130 estrellas más brillantes tienen nombre propio. Estos nombres les
fueron otorgados por los griegos (Capela, etc.), romanos (Castor, Polux, Sirio, etc.) y
por los árabes (Betelgeuse, Vega, Algol, Aldebaran, etc.). La clasificación de las
estrellas se inició por comparación relativa del brillo aparente entre ellas. Desde
Hiparco de Nicea (siglo II a. J.C.) se vienen sucediendo catálogos de estrellas
dividiéndolas en magnitudes por su luminosidad, correspondiendo la primera magnitud
a las más brillantes.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 16
ASTRONOMÍA
Con el fin de orientarse en el cielo, hace mucho que las estrellas brillantes
fueron unificadas en grupos, denominados constelaciones. Los griegos dieron nombre a
48 constelaciones, principalmente las observables desde el Mediterráneo. Los nombres
eran de animales (Osa Mayor, León, Dragón, etc.), de héroes de la mitología griega
(Casiopea, Andrómeda, Perseo, etc.), o simplemente de objetos que recordaban las
figuras que formaban los grupos de estrellas más brillantes (Balanza, etc.). En el siglo
XVII se da nombre a estrellas sueltas y se agrupan en constelaciones. En el siglo XVIII
se dan nombre científicos a constelaciones del hemisferio sur: Telescopio, Escuadra,
Octante, Brújula y Retícula. En global, hemisferio norte y sur, hay 88 constelaciones.
En 1928 la Unión Astronómica Internacional (U.A.I.) fijó una delimitación rigurosa,
mediante arcos de meridianos y paralelos celestes, a las constelaciones. Las estrellas
más brillantes de las constelaciones sirven de buenos puntos de referencia para
encontrar en el cielo estrellas más débiles, u otros objetos celestes. Por esto es necesario
aprender a encontrar de manera rápida y directa en el cielo una u otra constelación. Para
ello es menester estudiar previamente la carta del cielo estelar y retener en la memoria
los contornos característicos que las estrellas más brillantes forman en las
constelaciones.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 17
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 18
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 19
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 20
ASTRONOMÍA
La posición aproximada del polo celeste norte en el cielo se puede localizar por
la posición de la estrella más brillante en la constelación de la Osa Menor. En las cartas
estelares esta estrella se designa con la letra α y, por su proximidad al polo celeste norte
se llama estrella Polar. En la actualidad la distancia entre la estrella Polar y el polo
celeste norte es menor de 1º.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 21
ASTRONOMÍA
El Sol y la Luna, al igual que las estrellas, salen en el lado oriental del horizonte,
ascienden y se ponen en el lado occidental. Pero, al observar la salida y la puesta de
estos astros, se puede notar que en los distintos días del año salen, a diferencia de las
estrellas, en diferentes puntos del lado oriental del horizonte y se ponen también en
diferentes puntos del lado occidental.
Las constelaciones por las que pasan las rutas del Sol y de la Luna se denominan
zodiacales (de la palabra griega zoon, es decir, animal). Sus nombres son: Piscis
(Peces), Aries (Carnero), Tauro (Toro), Geminis (Gemelos), Cáncer (Cangrejo), Leo
(León), Virgo (Virgen), Libra (Balanza), Escorpio (Escorpión), Sagitario, Capricornio y
Acuario. En el hemisferio boreal, las primeras tres constelaciones el Sol las pasa en los
meses primaverales, las tres siguientes las recorre en los meses de verano, transita tres
constelaciones más en los meses otoñales y, por último, atraviesa las tres constelaciones
restantes en los meses de invierno. Aquellas constelaciones en las que se encuentra el
Sol en el momento dado son inaccesibles a las observaciones y solamente se hacen
visibles transcurrido aproximadamente medio año.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 22
ASTRONOMÍA
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 23
ASTRONOMÍA
La recta ZOZ’, que pasa por el centro de la esfera celeste y que coincide con la
dirección de la vertical astronómica en el lugar de observación, se denomina línea
vertical. La línea vertical intersecta la superficie de la esfera celeste en dos puntos: en el
cenit Z, sobre la cabeza del observador, y en el punto diametralmente opuesto, en el
nadir Z’.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 25
ASTRONOMÍA
Dado un astro, el círculo menor de la esfera celeste que lo contiene, cuyo plano
es paralelo al plano del ecuador celeste, se denomina paralelo celeste o diurno del astro.
Los movimientos aparentes de los astros tienen lugar por los paralelos diurnos.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 26
ASTRONOMÍA
También, el círculo máximo de la esfera celeste que contiene al astro y al eje del mundo
se le denomina meridiano celeste, círculo horario o círculo de declinación del astro.
El meridiano celeste local se divide en dos partes a partir del eje del mundo: el
meridiano celeste local superior, que contiene al cenit, y el meridiano celeste local
inferior, que contiene al nadir.
El ecuador celeste corta con el horizonte matemático en una recta que intersecta
con la esfera celeste en dos puntos: en el punto del oriente E y en el punto del occidente
W.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 27
ASTRONOMÍA
Cuando el Sol se halla más próximo a la Tierra se dice que está en su perigeo y
la Tierra en su perihelio; cuando se encuentran más alejados, se dice que el Sol está en
su apogeo y la Tierra en su afelio. La línea que une el perihelio con el afelio se
denomina línea de los ápsides.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 28
ASTRONOMÍA
El plano de la eclíptica corta al plano del ecuador celeste según distintas rectas
en función de la posición de la Tierra en su órbita alrededor del Sol. Un caso particular
es de singular interés; cuando el Sol, en su movimiento aparente, corta el ecuador
celeste para pasar del hemisferio austral al hemisferio boreal, la intersección del plano
de la eclíptica con el plano del ecuador celeste da lugar a una recta denominada línea de
los equinoccios.
Los puntos de la eclíptica que distan 90º de los puntos del equinoccio se
denominan punto del solsticio de verano o vernal, punto de Cáncer, (en el hemisferio
boreal) y punto del solsticio de invierno o hiemal, punto de Capricornio, (en el
hemisferio austral). La línea definida por los puntos Cáncer y Capricornio se denomina
línea de los solsticios.
Se denominan máximos de longitud celeste a los círculos que pasan por los polos
Π Π' de la eclíptica, y por los centros de los astros. El primer máximo de longitud es el
que pasa por Aries.
CONCEPTO Y DEFINICIONES. 29
ASTRONOMÍA
- en forma paramétrica:
x = x( u, v )
y = y( u, v )
z = z( u , v )
- en forma vectorial:
x = x (u, v) = x(u, v) • e1 + y (u, v ) • e2 + z(u, v) • e3 = ( x1 (u, v), x2 (u, v), x3 (u, v ))
- en forma explícita:
z = f ( x, y)
- en forma implícita:
F ( x , y , z) = 0
Un punto de la superficie quedará definido por tres coordenadas. Los tres tipos
de coordenadas más utilizadas son:
Por este motivo, se define como eje fundamental (eje Z) de este sistema de
coordenadas la dirección de la vertical astronómica con sentido positivo hacia el zenit.
El plano fundamental, normal al eje fundamental por el centro del sistema de
coordenadas, será el plano horizonte astronómico.
- Coordenada altura, h.- ángulo que forma el vector del astro con el horizonte
matemático (plano Z=0), medido desde el horizonte astronómico en el
sentido directo. Equivalentemente, se define como el arco medido sobre el
vertical del astro, desde el horizonte matemático hasta el almicantarat del
astro, en el sentido directo.
Los dominios de las coordenadas horizontales son: 0º ≤ A < 360º, -90º ≤ h ≤ 90º,
0º ≤ z ≤ 180º
dextrógira con los ejes Y y Z. Sobre la esfera celeste, el eje Z se proyecta en el polo
celeste boreal, el eje Y se proyecta en el punto Q´ y el eje X se proyecta en el punto W.
- Coordenada declinación, δ.- ángulo que forma el vector del astro con el
ecuador celeste (plano Z=0), medido desde el ecuador celeste en el sentido
directo. Equivalentemente, se define como el arco medido sobre el meridiano
celeste del astro, medido desde el ecuador celeste hasta el paralelo celeste
del astro, en el sentido directo.
Los dominios de las coordenadas ecuatoriales horarias son: 0h≤ H <24h, -90º≤ δ
≤ 90º, 0º≤ ρ ≤180º.
Esta dependencia se expresa de la forma siguiente: “la altura hP del polo celeste
sobre el horizonte siempre es igual a la latitud astronómica ϕ del lugar de
observación”. El polo celeste a considerar en la afirmación anterior es el boreal si el
lugar de observación se encuentra en el hemisferio boreal, y el austral si se encuentra en
el austral.
La gran ventaja de las coordenadas horizontales es que pueden ser obtenidas con
un teodolito, o con un telescopio que disponga de un sistema de nivelación. Su
inconveniente radica en el hecho de la variación continua en el tiempo y en el espacio.
Dado un lugar de observación, las coordenadas horizontales de un astro varían
constantemente y, además, de forma no uniforme. Dado un astro y un instante de
observación, las coordenadas horizontales dependen del lugar de observación.
Tal y como han sido definidos los sistemas cartesianos tridimensionales las
coordenadas horizontales y de las coordenadas ecuatoriales horarias, tienen el eje X
común, la línea EW. Las direcciones de los ejes de un sistema cartesiano tridimensional
definen una base del espacio vectorial ℜ3. El problema que se plantea no es sino un
cambio de base en el que uno de los vectores de ambas bases coincide, el
correspondiente al eje X (1, 0, 0).
x1 = cos(h ) ⋅ sen ( A)
y1 = cos(h ) ⋅ cos( A)
z1 = sen (h )
x2 = cos(δ ) ⋅ sen (H )
y 2 = cos(δ ) ⋅ cos(H )
z 2 = sen (δ )
⎛ x2 ⎞ ⎛ 1 0 0 ⎞ ⎛ x1 ⎞
⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ y 2 ⎟ = ⎜ 0 cos(90º −ϕ ) sen (90º −ϕ )⎟ ⋅ ⎜ y1 ⎟ ⇒ X 1 = R(ϕ ) ⋅ X 2
⎜ z ⎟ ⎜ 0 − sen (90º −ϕ ) cos(90º −ϕ )⎟ ⎜ z ⎟
⎝ 2⎠ ⎝ ⎠ ⎝ 1⎠
⎛ x2 ⎞ ⎛ 1 0 0 ⎞ ⎛ x1 ⎞
⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ y 2 ⎟ = ⎜ 0 sen (ϕ ) cos(ϕ )⎟ ⋅ ⎜ y1 ⎟
⎜ z ⎟ ⎜ 0 − cos(ϕ ) sen (ϕ )⎟ ⎜ z ⎟
⎝ 2⎠ ⎝ ⎠ ⎝ 1⎠
x2 = x1
y2 = sen (ϕ ) ⋅ y1 + cos(ϕ ) ⋅ z1
z 2 = − cos(ϕ ) ⋅ y1 + sen (ϕ ) ⋅ z1
sen (M ) ⋅ tg ( A)
tg(H ) =
cos(ϕ − M )
X 1 = R (ϕ ) ⋅ X 2 ⇔ X 2 = R (ϕ ) ⋅ X 1 ⇔ X 2 = R (ϕ ) ⋅ X 1
−1 T
resultando,
⎛ x1 ⎞ ⎛ 1 0 0 ⎞ ⎛ x2 ⎞
⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ 1⎟ ⎜
y = 0 sen (ϕ ) − cos (ϕ )⎟ ⋅ ⎜ y 2 ⎟
⎜ z ⎟ ⎜ 0 cos(ϕ ) sen (ϕ ) ⎟ ⎜ z ⎟
⎝ 1⎠ ⎝ ⎠ ⎝ 2⎠
x1 = x 2
y1 = sen (ϕ ) ⋅ y 2 − cos(ϕ ) ⋅ z 2
z1 = cos(ϕ ) ⋅ y 2 + sen (ϕ ) ⋅ z 2
cos(M ) ⋅ tg (H )
tg( A) =
sen (ϕ − M )
Coordenada ascensión recta, α.- ángulo desde el meridiano celeste del punto
Aries (plano Y=0) hasta el meridiano celeste del astro, medido en el sentido directo.
Equivalentemente, se define como el arco sobre el ecuador celeste desde el punto γ
hasta el meridiano celeste del astro, medido en el sentido directo, en el sentido contrario
al de la rotación diaria de la esfera celeste. Se suele expresar en magnitud de tiempo.
Los dominios de las coordenadas ecuatoriales horarias son: 0h≤ α <24h, -90º≤ δ
≤90º, 0º≤ ρ ≤180º.
El ángulo horario tiene origen en el punto superior del ecuador que es fijo para
un lugar de observación. La ascensión recta tiene origen en el punto vernal que es fijo
en la esfera celeste y por tanto está afectado de la rotación diurna de la esfera celeste.
Por tanto, el punto vernal, al igual que cualquier estrella, completa una revolución
pasando por el meridiano celeste local. Esto lleva a considerar la variación del ángulo
horario del punto vernal. Cuando el punto vernal se encuentra en el meridiano celeste
local su ángulo horario se anula y comienza a aumentar a medida que la esfera celeste
rota. Se define la coordenada temporal hora sidérea, y se denota θ, cómo el ángulo
horario del punto vernal para un lugar y un instante de observación.
Si se considera una estrella cuya ascensión recta sea menor al ángulo horario del
punto vernal, es directo el comprobar que el ángulo horario del punto vernal es igual a
la suma de la ascensión recta de la estrella y del ángulo horario de la misma. El
enunciado anterior es cierto para cualquier estrella pero más sencillo de ver
gráficamente en el caso considerado. Esta consideración permite establecer una
ecuación que en muchos textos figura como la ecuación fundamental de la astronomía
de posición:
θ =α + H
- Coordenada latitud eclíptica o celeste, β.- ángulo que forma el vector del
astro con el plano de la eclíptica (plano Z=0), medido desde el plano de la
eclíptica en el sentido directo. Equivalentemente, se define como el arco
medido sobre el máximo de longitud celeste del astro, medido desde el plano
de la eclíptica hasta el paralelo de latitud celeste del astro, en el sentido
directo.
Los dominios de las coordenadas ecuatoriales horarias son: 0º≤ λ <360º, -90º≤ β ≤90º.
Tal y como han sido definidos los sistemas cartesianos tridimensionales las
coordenadas ecuatoriales absolutas y de las coordenadas eclípticas, tienen el eje X
común, la línea de los equinoccios. Las direcciones de los ejes de un sistema cartesiano
tridimensional definen una base del espacio vectorial ℜ3. El problema que se plantea no
es sino un cambio de base en el que uno de los vectores de ambas bases coincide, el
correspondiente al eje X (1, 0, 0).
x1 = cos(δ ) ⋅ cos(α )
y1 = cos(δ ) ⋅ sen (α )
z1 = sen (δ )
x 2 = cos(β ) ⋅ cos(λ )
y 2 = cos(β ) ⋅ sen (λ )
z 2 = sen (β )
⎛ x2 ⎞ ⎛ 1 0 0 ⎞ ⎛ x1 ⎞
⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ 2⎟ ⎜
y = 0 cos (ε ) sen (ε )⎟ ⋅ ⎜ y1 ⎟ ⇒ X 1 = R(ε ) ⋅ X 2
⎜ z ⎟ ⎜ 0 − sen (ε ) cos(ε )⎟ ⎜ z ⎟
⎝ 2⎠ ⎝ ⎠ ⎝ 1⎠
x 2 = x1
y 2 = cos(ε ) ⋅ y1 + sen (ε ) ⋅ z1
z 2 = − sen (ε ) ⋅ y1 + cos(ε ) ⋅ z1
M ⋅ sen ( N ) = sen (δ )
M ⋅ cos (N ) = cos(δ ) ⋅ sen (α )
tg(δ )
tg(N ) =
sen(α )
tg(α ) ⋅ cos( N − ε )
tg(λ ) =
cos( N )
X 1 = R (ε ) ⋅ X 2 ⇔ X 2 = R (ε ) ⋅ X 1 ⇔ X 2 = R (ε ) ⋅ X 1
−1 T
resultando,
⎛ x1 ⎞ ⎛ 1 0 0 ⎞ ⎛ x2 ⎞
⎜ ⎟ ⎜ ⎟ ⎜ ⎟
⎜ 1⎟ ⎜
y = 0 cos (ε ) − sen (ε )⎟ ⋅ ⎜ y 2 ⎟
⎜ z ⎟ ⎜ 0 sen (ε ) cos(ε ) ⎟ ⎜ z ⎟
⎝ 1⎠ ⎝ ⎠ ⎝ 2⎠
x1 = x 2
y1 = cos(ε ) ⋅ y 2 − sen (ε ) ⋅ z 2
z1 = sen (ε ) ⋅ y 2 + cos(ε ) ⋅ z 2
M ⋅ sen ( N ) = sen (β )
M ⋅ cos (N ) = cos(β ) ⋅ sen (λ )
tg(β )
tg(N ) =
sen(λ )
tg(λ ) ⋅ cos(N + ε )
tg(α ) =
cos( N )
Hay tres casos particulares de singular interés: orto y ocaso, primer vertical y
máximas disgresiones, que serán objeto de estudio detallado en este tema.
MOVIMIENTO DIURNO. 1
ASTRONOMÍA
La condición para que un astro tenga orto y ocaso se expresa como una relación
entre los valores absolutos de la declinación del astro y de la latitud astronómica del
lugar de observación:
δ < (90º − ϕ )
δ < (90º −ϕ )
MOVIMIENTO DIURNO. 2
ASTRONOMÍA
δ ≥ (90º − ϕ )
δ ≥ (90º −ϕ )
entonces su paralelo celeste no cortará el horizonte matemático, y este astro o bien será
inocciduo (el paralelo celeste se dispone íntegramente sobre el horizonte astronómico),
o bien será inortivo (el paralelo celeste está completamente debajo del horizonte). De
esta forma, los astros 3, 4 y 5 de la siguiente figura son ortivos y occiduos, los astros 1 y
2 son inocciduos (también llamados circumpolares norte) y los astros 6 y 7 son
inortivos (también denominados circumpolares sur).
MOVIMIENTO DIURNO. 3
ASTRONOMÍA
PZ = 90º −ϕ Zˆ = 180º − A
ZE = 90º Pˆ = H
PE = 90º −δ Eˆ = Eˆ
El pentágono de Neper resulta:
12 h − H
MOVIMIENTO DIURNO. 4
ASTRONOMÍA
90º −ϕ
90º −δ
A − 90º 90º − Ê
PZ = 90º −ϕ Zˆ = A − 180º
ZE = 90º Pˆ = 24h − H
PE = 90º −δ Eˆ = Eˆ
90º −ϕ 90º −δ
90º − A 90º − Ê
( )
cos H − 12 h = tg(ϕ ) ⋅ tg(δ ) → cos(H ) = − tg(ϕ ) ⋅ tg(δ )
MOVIMIENTO DIURNO. 5
ASTRONOMÍA
1º Culminación superior.
MOVIMIENTO DIURNO. 6
ASTRONOMÍA
1º Culminación superior.
2º Culminación inferior.
MOVIMIENTO DIURNO. 7
ASTRONOMÍA
En los límites del acimut astronómico se cumple que el paralelo celeste del astro
es tangente al vertical del astro. A estas posiciones se las conoce como máximas
disgresiones.
PZ = 90º −ϕ Zˆ = 180º − A
ZE = 90º −h Pˆ = H
PE = 90º −δ Eˆ = 90º
sen ( A) cos(δ )
→ sen ( A) =
sen(90º )
=
sen (90º −δ ) sen (90º −ϕ ) cos(ϕ )
sen (ϕ )
cos(90º −ϕ ) = cos(90º −h ) ⋅ cos(90º −δ ) + sen (90º −h ) ⋅ sen (90º −δ ) ⋅ cos(90º ) → sen (h ) =
sen (δ )
Aplicando las relaciones del pentágono de Neper a un triángulo esférico con un
ángulo recto:
MOVIMIENTO DIURNO. 8
ASTRONOMÍA
90º −ϕ
H 180º − A
δ h
tg (ϕ )
cos(H ) =
tg (δ )
Los elementos del triángulo de posición para la máxima digresión oriental son:
PZ = 90º −ϕ Zˆ = A − 180º
ZE = 90º − h Pˆ = 24h − H
PE = 90º −δ Eˆ = 90º
sen ( A) cos(δ )
→ sen ( A) =
sen(90º )
=
sen (90º −δ ) sen (90º −ϕ ) cos(ϕ )
sen (ϕ )
cos(90º −ϕ ) = cos(90º −h ) ⋅ cos(90º −δ ) + sen (90º −h ) ⋅ sen (90º −δ ) ⋅ cos(90º ) → sen (h ) =
sen (δ )
90º −ϕ
24 h − H A − 180º
δ h
MOVIMIENTO DIURNO. 9
ASTRONOMÍA
tg (ϕ ) tg (ϕ )
(
cos 24 h − H =) tg (δ )
→ cos(H ) =
tg (δ )
Por otro lado, cuando el astro se encuentra en, o muy cerca, de una máxima
digresión, su acimut astronómico varía muy lentamente lo que hace menos crítica la
medida del tiempo en el instante de observación. Esto es muy importante dada la
dificultad de realizar esta medida con alta precisión.
PZ = 90º −ϕ Zˆ = 90º
ZE = 90º −h Pˆ = H
PE = 90º −δ Eˆ
sen (δ )
cos(90º −δ ) = cos(90º − h ) ⋅ cos(90º −ϕ ) + sen (90º −h ) ⋅ sen (90º −ϕ ) ⋅ cos(90º ) → sen (h ) =
sen (ϕ )
MOVIMIENTO DIURNO. 10
ASTRONOMÍA
90º −δ
H E
ϕ h
tg (δ )
cos(H ) =
tg (ϕ )
PZ = 90º −ϕ Zˆ = 90º
ZE = 90º −h Pˆ = 24h − H
PE = 90º −δ Eˆ
sen (δ )
cos(90º −δ ) = cos(90º −h ) ⋅ cos(90º −ϕ ) + sen (90º − h ) ⋅ sen (90º −ϕ ) ⋅ cos(90º ) → sen (h ) =
sen (ϕ )
90º −δ
24 h - H E
ϕ h
El coseno de un elemento es el producto de las cotangentes de los elementos
adyacentes.
MOVIMIENTO DIURNO. 11
ASTRONOMÍA
tg (δ ) tg (δ )
( )
cos 24 h − H =
tg (ϕ )
→ cos(H ) =
tg (ϕ )
De tal modo, las coordenadas horizontales del astro varían continuamente como
resultado de la rotación diurna de la esfera celeste, y si el astro está invariablemente
vinculado con la esfera (es decir, su declinación y ascensión recta permanecen
constantes) las coordenadas horizontales adquieren sus valores anteriores cuando la
esfera celeste completa una revolución.
Puesto que los paralelos celestes de los astros en todas las latitudes astronómicas
(excepto en los polos) están inclinados con relación al horizonte, las coordenadas
horizontales varían irregularmente, incluso durante la rotación diurna uniforme de la
esfera celeste. La altura del astro y su distancia cenital varían más lentamente cerca del
meridiano, es decir, en el momento de las culminaciones. El acimut astronómico, por el
contrario, varía en estos momentos con mayor rapidez. El ángulo horario del astro varía
constantemente y regularmente ya que se miden sobre el ecuador celeste y durante la
rotación uniforme de la esfera celeste las variaciones de los ángulos horarios son
proporcionales a los intervalos de tiempo. La regularidad de la variación de los ángulos
horarios tiene muchísima importancia para la medición del tiempo.
MOVIMIENTO DIURNO. 12
ASTRONOMÍA
A su vez, los puntos de salida y puesta del Sol, de la Luna y de los planetas, así
como su altura en el meridiano en los distintos días del año, son diferentes. Por
consiguiente, las declinaciones de estos astros varían constantemente con el transcurso
del tiempo.
Estas variaciones de las coordenadas ecuatoriales del Sol en el curso del año
transcurren irregularmente. La declinación varía más rápidamente al moverse el Sol en
las inmediaciones de los puntos equinocciales y más lentamente cerca de los puntos
solsticiales. La ascensión recta, por el contrario, varía más lentamente cerca de los
puntos equinocciales y con mayor rapidez en las inmediaciones de los puntos
solsticiales. Con esto, la velocidad de la variación de la ascensión recta del Sol cerca del
punto del solsticio vernal es menor que cerca del punto del solsticio hiemal.
El movimiento de la Tierra alrededor del Sol tiene lugar en el mismo sentido que
la rotación de la Tierra alrededor de su eje, y es irregular. El motivo de tal irregularidad
es el cumplimiento de las leyes de Kepler. Con esto, el eje de rotación de la Tierra
siempre está inclinado respecto al plano de la órbita de la Tierra en un ángulo de 90º-ε.
Precisamente por esto a un observador le parece que el Sol se desplaza también
irregularmente por la bóveda celeste entre las estrellas, de occidente a oriente, pero por
MOVIMIENTO DIURNO. 13
ASTRONOMÍA
una circunferencia (la eclíptica) cuyo plano está inclinado respecto al plano del ecuador
celeste (y del terrestre) con el ángulo de la oblicuidad de la eclíptica.
MOVIMIENTO DIURNO. 14
ASTRONOMÍA
Por último, cuando el Sol se encuentra en el punto del solsticio hiemal sale en el
sudeste y se pone en el sudoeste. La mayor parte de su recorrido diurno el Sol se
encuentra por debajo del horizonte astronómico. En la latitud boreal dada la duración
del día es mínima y la de la noche es máxima (al contrario en las latitudes australes).
Esta fecha se denomina día del solsticio hiemal (aproximadamente el 22 de diciembre) y
se considera como el comienzo del invierno en el hemisferio boreal de la Tierra y como
el comienzo del verano en el hemisferio austral. La altura del Sol en el día del solsticio
hiemal en la latitud boreal dada alcanza un valor mínimo de hSol = 90º −ϕ − ε .
El resto de los días del año, para una latitud boreal dada, la altura del Sol está
comprendida entre las alturas máximas y mínimas anteriores.
MOVIMIENTO DIURNO. 15
ASTRONOMÍA
del solsticio hiemal el Sol descenderá sobre el horizonte en una altura igual a la
oblicuidad de la eclíptica. Después comenzará de nuevo a aproximarse al horizonte, su
altura aumentará y antes del equinoccio de primavera el Sol de nuevo aparecerá sobre el
horizonte. Si el observador se sitúa en el polo sur de la Tierra todo se invierte.
El Sol siempre es un astro ortivo y occiduo. Este, en el día del solsticio vernal,
alcanza a mediodía una altura máxima de 90º, es decir, pasa por el cenit. En los
restantes días del año el Sol culmina a mediodía al sur del cenit. En el día del solsticio
hiemal su altura mínima al mediodía es 43º8’. En el trópico de Capricornio el Sol
también sale y se pone siempre. Pero su altura máxima sobre el horizonte al mediodía la
alcanza el día del solsticio hiemal, y su altura mínima en el día del solsticio vernal. En
los restantes días del año el Sol culmina aquí a mediodía hacia el norte del cenit.
En esta posiciones el Sol sale y se pone cada día del año. La duración del día es
medio año mayor que la duración de la noche, y la noche dura medio año más que el
día. La altura del Sol a mediodía es siempre menor de 90º (excepto en los trópicos) y es
mayor que 0º (excepto en los círculos polares).
Todos los astros, incluido el Sol, son ortivos y occiduos. Con esto, dichos astros
se encuentran 12 horas sobre el horizonte y 12 debajo de éste. Por consiguiente, en el
ecuador la duración del día siempre es igual a la duración de la noche. Dos veces al año
el Sol se encuentra a mediodía en el cenit, los días de los equinoccios. Desde el
equinoccio de primavera hasta el de otoño el Sol en el ecuador culmina a mediodía
hacia el norte del cenit, y desde el equinoccio de otoño hasta el de primavera culmina
MOVIMIENTO DIURNO. 16
ASTRONOMÍA
hacia el sur del cenit. La altura mínima del Sol en la culminación a mediodía es de
66º34’, los días de los solsticios.
MOVIMIENTO DIURNO. 17
ASTRONOMÍA
4.1. INTRODUCCIÓN.
De acuerdo con la primera ley de Kepler el Sol se encuentra en uno de los focos
de la órbita elíptica del planeta. Recuérdese que el punto en que la Tierra se encuentra
más cerca del Sol es el perihelio y el punto donde se aleja más es el afelio. El eje mayor
de la órbita AΠ es la línea de los ápsides, y, considerando al Sol situado en f1, la línea
f1P que une el Sol y el planeta P en su órbita, se denomina radio vector del planeta.
Se toma como distancia media del planeta al Sol el semieje mayor de la órbita
q+Q .
a=
2
De acuerdo a la segunda ley de Kepler el área CP1P2, descrita por el radio vector
del planeta durante el tiempo ∆t cerca del perihelio, es igual al área CP3P4, descrita por
dicho radio vector durante el mismo tiempo cerca del afelio. Puesto que el arco P1P2 es
mayor que el arco P3P4 el planeta, cerca del perihelio, tiene una velocidad mayor que
cerca del afelio. En otras palabras, su movimiento alrededor del Sol es irregular.
Se define el día sidéreo como el intervalo de tiempo transcurrido entre dos pasos
sucesivos del punto Aries por el meridiano superior de un lugar. Su comienzo se
establece en el momento de la culminación superior, de forma que la hora sidérea de un
lugar es el tiempo transcurrido desde que pasó el punto Aries por el meridiano superior
de ese lugar.
El movimiento relativo entre el punto Aries y el Sol hace que no sea posible
utilizar en la vida ordinaria el tiempo sidéreo. Sirva como ejemplo, que si Aries y el Sol
coincidiesen en el primero un día, seis meses después estarían desfasados mediodía.
4.4.2. DÍA SOLAR VERDADERO. DÍA SOLAR FICTICIO. DÍA SOLAR MEDIO.
ECUACIÓN DEL TIEMPO.
Se define como día solar verdadero el intervalo de tiempo transcurrido entre dos
pasos sucesivos del Sol verdadero por el meridiano superior de un lugar. Dado que el
comienzo del día sería el paso por el meridiano, se define la hora solar verdadera como
el intervalo de tiempo transcurrido desde la culminación superior del Sol verdadero.
λv
ε Ŝv
90º-α v 90º-δ
El coseno de un elemento es igual al producto de las cotangentes de los
elementos adyacentes.
tg α v = tg λv ⋅ cos ε
dα v dλv
= ⋅ cos ε
cos α v cos 2 λv
2
dλv
dα v = ⋅ cos ε
cos 2 δ
Al igual que para definir un tiempo sidéreo uniforme era preciso definir un
equinoccio uniforme, ha de definirse un Sol que se mueva de forma uniforme sobre el
ecuador celeste.
Para esto es preciso definir en primer lugar el Sol ficticio como un Sol que se
mueve uniformemente por la eclíptica y está obligado a coincidir con el Sol verdadero
en el perigeo y en el apogeo. De acuerdo a la definición, el Sol ficticio irá delante del
Sol verdadero entre el apogeo y el perigeo, dado que la velocidad del Sol verdadero
disminuye en el apogeo, e irá atrasado respecto al Sol verdadero entre el perigeo y el
apogeo, dado que la velocidad del Sol verdadero aumenta en el perigeo.
Este motivo da lugar a que sea preciso definir el Sol medio como el astro ideal
que se mueve sobre el plano del Ecuador con movimiento constante y coincide con el
ficticio en los puntos Aries y Libra. De acuerdo a la definición, teniendo en cuenta que
el Sol ficticio se mueve de forma uniforme en la eclíptica y el medio también
uniformemente en el ecuador celeste y coinciden en los puntos Aries y Libra, la
ascensión recta del Sol medio es siempre igual a la longitud eclíptica del Sol ficticio.
Por el hecho de desplazarse en el ecuador celeste se tendrá que:
dα m = dλv ⋅ cos ε
y, es el adecuado para definir el día y hora. Se define el día medio como el intervalo de
tiempo transcurrido entre dos pasos sucesivos del Sol medio por el meridiano superior
del lugar. La hora media será el tiempo transcurrido desde el paso del Sol medio por el
meridiano superior del lugar.
La diferencia entre la hora media de dos lugares será igual a la diferencia entre
sus longitudes astronómicas.
presenta una realidad física. Es importante que la diferencia sea pequeña a lo largo de
todo el año de forma que el desfase entre tiempo reloj y tiempo luz quede justificada, la
diferencia tiene una cota superior de unos 16 minutos.
Con el dato de la ecuación del tiempo se puede saber lo que el Sol medio
adelanta o atrasa respecto al Sol verdadero y, por tanto, se puede fijar exactamente el
instante de paso por el meridiano de este Sol medio imaginario.
ET = α v − α m = α v − α m + λv − λv
con α m = λ f
ET = (λv − λ f ) − (λv − α v )
La expresión anterior se suele estudiar a partir de cada uno de los paréntesis que
reciben un nombre propio de acuerdo a su significado.
Q = (λv − λ f )
R = (λv − α v )
ET = Q − R
x2 y2
+ =1
a2 b2
a2 − b2
e2 =
a 2
⇒ e 2
⋅ a 2
= a 2
− b 2
⇒ b 2
= a 2
⋅ 1 − e(2
⇒
b2
a 2
)= 1− e2
( )(
y 2 = 1− e2 ⋅ a2 − x2 )
Por otro lado, el módulo del radio vector que une el punto de la elipse V con el
foco T será,
r= (x − a ⋅ e )2 + (1 − e 2 )⋅ (a 2 − x 2 ) ⇒ r = a − e ⋅ x
La abcisa de V, igual a la de V’, se obtiene a partir de la anomalía excéntrica
según,
x = a ⋅ cos(u )
y, sustituyendo en r,
r = a − e ⋅ a ⋅ cos(u ) → r = a ⋅ (1 − e ⋅ cos(u ))
x − a ⋅ e = r ⋅ cos(v )
multiplicando por e,
e ⋅ x − a ⋅ e 2 = e ⋅ r ⋅ cos(v ) ⇒ e ⋅ x = a ⋅ e 2 + e ⋅ r ⋅ cos(v )
( )
r = a − e ⋅ x = a − a ⋅ e 2 − e ⋅ r ⋅ cos(v ) = a ⋅ 1 − e 2 − e ⋅ r ⋅ cos(v )
(
r ⋅ (1 + e ⋅ cos(v )) = a ⋅ 1 − e 2 )
y, se obtiene,
r=
(
a ⋅ 1− e2 )
1 + e ⋅ cos(v )
Se han obtenido, por tanto, dos expresiones para el valor de r; una en función de
la anomalía excéntrica y otra en función de la anomalía verdadera. Igualando,
a ⋅ (1 − e ⋅ cos(u )) =
(
a ⋅ 1− e2 )
1 + e ⋅ cos(v )
cos(u ) − e
cos(v ) =
1 − e ⋅ cos(u )
1 − cos(v ) =
(1 + e ) ⋅ (1 − cos(u ))
1 − e ⋅ cos(u )
1 + cos(v ) =
(1 − e ) ⋅ (1 + cos(u ))
1 − e ⋅ cos(u )
⎛v⎞ 1+ e ⎛ u ⎞
tg⎜ ⎟ = ⋅ tg⎜ ⎟
⎝2⎠ 1− e ⎝ 2 ⎠
dr = e ⋅ a ⋅ sen (u ) ⋅ du
dr =
( )
a ⋅ 1 − e 2 ⋅ (− 1) ⋅ (− e ⋅ sen (v ) ⋅ dv )
=
e⋅r2
⋅ sen (v ) ⋅ dv
(1 + e ⋅ cos(v ))2 (
a ⋅ 1 − e2 )
Igualando,
e⋅r2
e ⋅ a ⋅ sen (u ) ⋅ du = ⋅ sen (v ) ⋅ dv
(
a ⋅ 1− e2 )
r2
sen (u ) ⋅ du = ⋅ sen (v )dv
b2
y = r ⋅ sen (v ) = b ⋅ sen (u )
Se obtiene,
r r2
du = ⋅ dv ⇒ r ⋅ du = ⋅ dv
b b
dA 1 2 dv
= ⋅r ⋅
dt 2 dt
1 2 dv
⋅ r ⋅ = C ⇒ r 2 ⋅ dv = K ⋅ dt
2 dt
K
r ⋅ du = ⋅ dt
b
(1 − e ⋅ cos(u )) ⋅ du = n ⋅ dt
Integrando,
u t
∫ (1 − e ⋅ cos(u ))⋅ du = ∫ n ⋅ dt
0 t0
u − e ⋅ sen (u ) = n ⋅ (t − t 0 ) = M
⎛v⎞ 1+ e ⎛ u ⎞
tg⎜ ⎟ = ⋅ tg⎜ ⎟
⎝2⎠ 1− e ⎝ 2 ⎠
u − e ⋅ sen (u ) = n ⋅ t
Resultaría muy sencillo estudiar las anulaciones, los máximos y mínimos de esta
función y ver cuando se producen.
tg α v = tg λv ⋅ cos ε
⎛1 ⎞ ⎛1 ⎞
R = tg 2 ⎜ ⋅ ε ⎟ ⋅ sen (2 ⋅ λv ) − ⋅ tg 4 ⎜ ⋅ ε ⎟ ⋅ sen (4 ⋅ λv ) + ...
1
⎝2 ⎠ 2 ⎝2 ⎠
La ecuación del tiempo se puede calcular para cualquier momento. Sin embargo,
lo habitual es obtenerla a partir de algún anuario astronómico como es el de Madrid al
que anteriormente se hizo referencia. En este anuario figura para cada día del mes la
ecuación del tiempo a las 0h de tiempo universal, tiempo que será definido
posteriormente.
Se define la hora civil como el tiempo que hace que el Sol medio cruzó el
meridiano inferior. El cambio de día se produce por tanto a medianoche. Se cumplirá
que Hora civil = Hora media ±12h.
Sin embargo, todavía queda por resolver un problema, la hora civil es local de
cada meridiano.
La actividad social del hombre está regida por el ritmo natural de la sucesión de
los días y las noches, debido al movimiento diurno del Sol. Se hace necesario encontrar
una escala de tiempo que, respetando en lo posible el día y la noche naturales, regule el
buen funcionamiento de actividades humanas con carácter universal. El buen
funcionamiento de las estructuras económicas y sociales modernas exige que las
actividades laborales estén ordenadas dentro de un horario exacto. Por otra parte, ese
horario debe ser el mismo para todos, al menos dentro de una misma región o nación, es
decir, debe ser universal. El carácter local del tiempo civil implica una falta de
universalidad. Para obviar todos estos inconvenientes fue necesario elegir
arbitrariamente el tiempo civil de un meridiano particular, adoptándolo como tiempo
único dentro de una región o país. Así, por ejemplo, en España se adoptó el tiempo civil
del meridiano de Madrid y en Francia el del meridiano de París. Quedaba así
solucionado el problema de un tiempo uniforme y único dentro de las fronteras del país,
pero la dificultad permanecería sin resolver al pasar de un país al otro. Se imponía, por
tanto, uniformar el tiempo a escala mundial, especialmente en los tiempos modernos en
los que la facilidad de comunicaciones y la rapidez de las mismas, prácticamente
instantáneas, exigen una coordinación universal.
geográficos en los mares y océanos, así como en los lugares no poblados de la tierra
firme. En su extensión restante dichas líneas pasan por las fronteras estatales,
administrativas o geográficas, apartándose del meridiano correspondiente hacia uno u
otro lado.
La hora legal de todos los lugares incluidos en un huso horario es igual a la hora
civil del meridiano básico correspondiente a ese huso horario. La diferencia entre la
hora civil y la legal de un lugar situado en un determinado huso horario es igual a la
diferencia de longitud hasta el meridiano básico de ese huso horario (Hc=Hl+(λ-λ0))
Puesto que los límites de los husos horarios están alejados de los meridianos básicos
aproximadamente en 7º.5, la diferencia entre la hora civil y la legal es, como máximo,
del orden de ±30m.
También está absolutamente claro que la diferencia entre los tiempos de los
husos horarios de dos puntos es una cantidad entera de horas, igual a la diferencia entre
los números ordinales de sus husos horarios.
Con el fin de distribuir más racionalmente la energía eléctrica y emplear más
ampliamente la luz del día, algunos países alteran en una hora, o dos durante una parte
del año, la hora legal. Esta hora adelantada recibe el nombre de hora oficial. En España
hay una hora de adelanto respecto al tiempo universal en otoño e invierno y dos en
Tal y como ha sido definido el tiempo legal surge una dificultad respecto a la
fecha del día en el cual se cuentan las horas así definidas.
Hacia el oeste de esta línea la fecha del día es siempre en una unidad mayor que
al este de dicha línea. Por esto, al cruzar la línea de fecha desde el occidente hacia el
oriente, es necesario disminuir la fecha, y al cruzarla desde el oriente hacia el occidente
aumentar ésta en una unidad. Por ejemplo, si un barco cruza la línea demarcadora el 8
de noviembre, navegando desde el oeste hacia el este, a la medianoche después de
cruzar dicha línea, no se cambia la fecha en el barco, es decir, dos días seguidos se
datan como 8 de noviembre. Y, por el contrario, si el barco cruza el 8 de noviembre la
línea de fecha navegando desde el oriente hacia el occidente, a la medianoche, después
de cruzar esta línea, se cambia la fecha de una sola vez al 10 de noviembre, no
existiendo en el barco el día como 9 de noviembre.
Previa a la definición de los distintos tipos de años se van a definir los períodos
de rotaciones sinódicas y sidéreas de los planetas.
La definición que se suele dar en los textos al año sidéreo es el tiempo que el Sol
emplea en estar alineado dos veces con una misma estrella, o en recorrer exactamente
360º. Es evidente que es equivalente a la enunciada anteriormente.
El día del equinoccio de primavera el Sol verdadero está alineado con el punto
Aries. Sea el meridiano superior de un lugar alineado también ese día con el punto
Aries. Este día sería el principio del año trópico. Recuérdese que el Sol medio está
obligado a coincidir con el verdadero este día.
De esta forma falta un cierto ∆t para que acabe el día medio. Esto da lugar a afirmar que
el día sidéreo expresado en tiempo medio es más corto que el día medio. Se puede decir
que 1día medio = 1 día sidéreo + ∆t. Al segundo día el Sol medio se habrá desplazado
aproximadamente 2·∆t, de forma que 2 días medios = 2 días sidéreos + 2·∆t, ya que la
diferencia entre el día medio y sidéreo se está considerando constante (lo que es lícito
por el hecho del desplazamiento uniforme del Sol medio por el ecuador). Procediendo
de forma similar, cuando transcurra un año trópico, cuando el Sol medio (y el
verdadero) vuelva a coincidir con la dirección del punto Aries, acabado el día sidéreo,
el meridiano superior todavía tendría que completar una revolución más hasta encontrar
al Sol medio. De esta forma se establece la relación:
I = I m ⋅ um = I s ⋅ us
o sea:
I m us
=
I s um
365.2422
Im = ⋅ Is
366.2422
366.2422
Is = ⋅ Im
365.2422
de donde,
Al existir un día sidéreo más en un año trópico, su duración ha de ser más corta
expresada en tiempo medio. De igual forma, al existir un día medio menos, su duración
ha de ser mayor en tiempo sidéreo.
366.2422
El coeficiente k ms = = 1.00273791 sirve para convertir los intervalos de
365.2422
tiempo solar medio en intervalos de tiempo sidéreo.
365.2422
El coeficiente k sm = = 0.997269571 sirve para convertir los intervalos
366.2422
de tiempo sidéreo a intervalos de tiempo solar medio.
4.6. EL CALENDARIO.
La historia del calendario es tan antigua como la civilización misma. Todas las
comunidades han tenido un calendario para regular las actividades agrícolas,
religiosas,...
relación aparente con ningún fenómeno astronómico. El ciclo semanal de siete días se
propagó primero a oriente y luego a occidente, encontrándose hoy prácticamente
incorporado en todos los calendarios como ciclo regulador de las actividades laborales.
3000 años a. C. los egipcios establecieron un calendario solar. La vida social del
antiguo Egipto se regulaba por las inundaciones periódicas del Nilo. Ellos habían
observado que el comienzo de las inundaciones coincidía aproximadamente con la
primera aparición en el horizonte de la estrella Sirio poco antes de la salida del Sol. El
intervalo de tiempo entre dos sucesos similares era de unos 365 días solares,
aproximadamente una año trópico, y fue adoptado como duración fija del año de su
calendario. Los 365 días del año se dividían en 12 meses de 30 días, seguidos de cinco
días adicionales. Cada día tenía 24 horas, 12 diurnas y 12 nocturnas. Este año solar no
se ajustaba mediante ninguna corrección al año solar trópico, aproximadamente un
cuarto de día más largo, lo que originaba un adelanto progresivo del comienzo del año
del calendario respecto al trópico. Los egipcios se percataron de ello a causa del
desplazamiento de las estaciones naturales a lo largo de los meses del año. Ellos
dividían el año en tres estaciones de cuatro meses, la de las inundaciones, la estación de
la siembra y la estación de la cosecha, correspondientes al ciclo anual de crecida y
descenso de las aguas del Nilo. Si el principio del año, relacionado con la estrella Sirio,
se hacia corresponder con la estación de las inundaciones, los egipcios se percataron
que para que volviera a producirse esa coincidencia debían transcurrir unos 1460 años.
En el año 238 a. C. se intentó una reforma consistente en añadir un día cada cuatro años,
con objeto de hacer coincidir el año del calendario con las estaciones naturales, pero la
oposición de las clases sacerdotales impidió su puesta en práctica. El calendario solar
egipcio, con su año fijo de 365 días, presentaba notables ventajas para los cálculos
astronómicos y fue adoptado durante muchos siglos por los astrónomos occidentales
(Copérnico todavía lo usaba en sus tablas de los planetas y la Luna).
a. C., en el que entró en vigor el calendario juliano y que fue bisiesto, se habían
intercalado varios años bisiestos de más. En el año 8 a. C. el emperador César Augusto
rectificó esta intercalación errónea de los bisiestos, y puesto que los trece bisiestos de
más corresponden a cincuenta dos años, el emperador suspendió la intercalación de
bisiestos hasta el año 8 d. C., a partir del cual se aplicó correctamente la intercalación de
bisiestos cada cuatro años hasta la reforma gregoriana de 1582. El mes Quintilis había
pasado a llamarse Julius en honor de Julio César, y en el año 24 a. C. el mes Sextilis
pasó a llamarse Augustus, en honor del emperador Augusto. Para que el mes dedicado a
Augusto no tuviese menos días que el dedicado a Julio César, que tenía 31 días, se
añadió un día a Augustus, que se resto a Februarius. El mes de febrero quedó con 28
días los años comunes y 29 los bisiestos, y los meses de septiembre y noviembre
pasaron a tener 30 días, para evitar tres meses seguidos de 31 días. De esta forma, la
duración de los meses quedó alterada en la forma que se ha conservado hasta la
actualidad.
De este modo, la duración del año en el calendario juliano es, en término medio,
igual a 365.25 días solares medios, es decir, es más largo que el año trópico solamente
en 0.0078 días. La cuenta del tiempo con años julianos durante los 128 años dará una
discrepancia con la cuenta de años trópicos aproximadamente de un día, y durante 400
años la discrepancia será de unos tres días (por ejemplo, el día del equinoccio de
primavera, transcurridos 400 años por el calendario juliano, comenzará tres días antes).
Esta discrepancia no tiene importancia práctica y, por esto, todos los países europeos
usaron el calendario juliano cerca de 16 siglos.
Este retraso acumulado del calendario juliano respecto al año trópico se traduce
en un adelanto de la fecha juliana en que cae el equinoccio de primavera. Es decir, los
comienzos de las estaciones se van adelantando en el calendario juliano de forma que en
20200 años las estaciones se habrán adelantado medio año, y el invierno vendrá a caer
en la época correspondiente al verano y viceversa.
Con el segundo punto se establecía que la duración del año civil en el término
medio de 400 años sería igual a 365.2425 días solares medios. De este modo, el año
medio civil se convirtió en un año más largo que el año trópico solamente en 0.0003
días, y la cuenta del tiempo por el calendario gregoriano y por los años trópicos dará
una discrepancia de un día tan sólo al cabo de 3300 años.
Es importante tener en cuenta que los años del calendario gregoriano se cuentan
en la era cristiana a la manera de una escala sin cero. Es decir, la era cristiana comienza
con el año 1 d. C., designándose el año precedente como el año 1 a. C. Por consiguiente,
cualquier suceso ocurrido durante el primer año de la era cristiana, aunque sólo sea un
día o un mes después de Cristo, se cuenta como ocurrido en el año 1 d. C. Sin embargo,
el intervalo de tiempo transcurrido desde el nacimiento de Cristo hasta un instante
cualquiera del año 1 d. C. no llega a valer evidentemente un año, sino solamente una
fracción decimal del mismo. En general, cuando se mide el tiempo de forma continua a
También se han propuesto muchos planes para reformar la estructura externa del
calendario gregoriano, pero al único que se ha prestado cierta atención internacional ha
sido al llamado calendario mundial, propuesto por la organización “Asociación del
calendario mundial”, que se adapta esencialmente al esquema propuesto en 1834 por el
sacerdote italiano M. Mastrofini. Este esquema consiste en lo siguiente. Todos los
Tal y como se ha visto el comienzo del día solar medio se produce al mediodía
civil, lo que presenta la ventaja astronómica de que las observaciones nocturnas caen en
el mismo día. De igual forma, los días del periodo juliano, se cuentan de mediodía en
mediodía. El origen de la escala del periodo juliano es exactamente el mediodía medio
en Greenwich del 1 de enero del año 4713 a. C. del calendario juliano, fecha que se
designa –4712 enero 1 a 12h de TU según el cómputo astronómico.
Para cualquier otro día del año X, el día juliano se determina sin más que añadir
el número de días transcurridos desde su comienzo, teniendo en cuenta, lógicamente, si
se trata o no de un año bisiesto. Finalmente, la fecha juliana, DJ, de un instante
cualquiera del año se obtiene sumando la fracción de día correspondiente.
Es evidente que la transformación entre hora sidérea y legal u oficial tendría que
recurrir al paso que ha acaba de ser explicado.
En primer lugar hay que tener presente que el día civil comienza cuando el Sol
medio cruza el antimeridiano del lugar, mientras que el día verdadero comienza cuando
el Sol verdadero cruza el meridiano del lugar. De acuerdo a esto, si ambas
culminaciones se produjesen en el mismo instante la diferencia entre ambas horas sería
de 12h.
En tercer lugar, la ecuación del tiempo viene dada día a día, a las 0h de T.U., es
decir, en tiempo medio y para el origen del día. Si es preciso obtenerlo en otro instante
habría que recurrir a una interpolación entre los valores de los dos días
correspondientes. Al venir dada a las 0h de T.U. se conoce para el meridiano de
Greenwich, esto aconseja realizar el cambio en Greenwich.
En todos los cambios de hora estudiados hay que tener en cuenta que la fecha la
define el tiempo legal.
La parte del día después de la puesta del Sol se denomina crepúsculo vespertino,
y la parte antes de la salida de éste se denomina crepúsculo matutino (alba o aurora).
Por convenio se han definido tres tipos de crepúsculos, en base a la altura h, por
debajo del horizonte, a que el Sol se encuentra en el inicio o fin del crepúsculo. Cuando
tal altura es h=-6º se habla de crepúsculo civil; en tal instante son visibles algunos
planeta y estrellas de primera magnitud y es cuando teóricamente se debe encender la
iluminación artificial de las ciudades. Cuando h=-12º se habla de crepúsculo naútico; en
este instante son visibles las estrellas más brillantes de las principales constelaciones.
Cuando h=-18º se habla de crepúsculo astronómico; en este momento es noche cerrada
y, si el cielo está despejado, son visibles estrellas de sexta magnitud (límite de magnitud
de las estrellas visibles a simple vista).
noche comienza antes que el Sol llegue al punto del equinoccio de primavera y más
tarde que el día teórico del equinoccio de otoño.
δ S ≥ 90º −ϕ − 6º → δ S ≥ 84º º −ϕ
Los crepúsculos astronómicos con más razón pueden durar toda la noche. Para
esto es necesario que la declinación del Sol sea
Se deduce de todo lo anterior que cada estación tiene una duración diferente y
además no es constante a lo largo del paso de los años. En la actualidad la estación más
larga es el verano, seguida de primavera, otoño e invierno en orden decreciente de
duración.
Para determinar la duración de cada estación hay que tener en cuenta que el
comienzo de las mismas se relaciona con el paso del Sol verdadero por los puntos Aries,
Cáncer, Libra y Capricornio. Sin embargo, el Sol verdadero no se mueve con velocidad
constante. La solución al problema pasaría por determinar el ángulo que el Sol ficticio
forma con el perigeo para cada una de las posiciones anteriores del Sol verdadero y,
dado que el Sol ficticio se desplaza a velocidad constante en la eclíptica invirtiendo
365.2422 días medios en la revolución completa, a partir de estos ángulos se calculará
de un modo sencillo la duración.
de donde,
APÉNDICE I.
SISTEMAS DE REFERENCIA ASTRONÓMICOS.
Para estudiar el movimiento de las sillas del ejemplo del aula habría que definir
un sistema de referencia temporal. Imagínese que no se dispone de ningún reloj pero
que una tubería presenta una filtración de forma que con una cadencia que se aprecia
uniforme una gota de agua impacta en el suelo. Se podría definir un sistema de
referencia temporal eligiendo un el impacto de una gota como origen y como unidad el
intervalo entre impactos. En este sistema, un instante quedaría registrado mediante la
cuenta del número de impactos de gotas de agua transcurridos desde el elegido como
origen.
No existe una única teoría dinámica celeste válida. Serán válidas todas aquellas,
apoyadas en diferentes axiomáticas, que describan correctamente, dentro de los errores
de observación, el movimiento observado de los astros. En la actualidad hay dos teorías
igualmente válidas restringidas a ciertos movimientos observados: la dinámica clásica
de Newton y la relativista de Einstein. La primera falla cuando las velocidades
consideradas son muy altas, mientras que la segunda es válida en cualquier caso. Los
movimientos de los cuerpos más accesibles a la observación ordinaria del hombre
pueden describirse con cualquiera de ellas. La dinámica de Newton posee un alto grado
de exactitud, es fácilmente comprensible, y es la utilizada actualmente en casi todos los
estudios teóricos y aplicaciones prácticas actuales, fundamentalmente debido a la
precisión de las observaciones ordinarias. En la práctica, la teoría relativista se hace
intervenir en forma de pequeñas correcciones de resultados obtenidos previamente con
la dinámica clásica.
SISTEMAS DE REFERENCIA 3
ASTRONÓMICOS.
ASTRONOMÍA
Se puede probar que las leyes de la dinámica newtoniana son válidas respecto a
todos los sistemas de referencia que se encuentren en movimiento rectilíneo uniforme
(velocidad constante) unos respecto a otros (principio de invarianza de Galileo). Los
infinitos sistemas de referencia posibles en movimiento rectilíneo uniforme son
dinámicamente equivalentes. En todos ellos son válidas las leyes dinámicas, y siendo en
particular válido el principio de inercia se suelen designar tradicionalmente como
sistemas de referencia inerciales. Se demuestra además que las leyes dinámicas
únicamente son válidas en tales sistemas inerciales. Se concluye que si el movimiento,
por ejemplo, del Sol referido a un sistema de referencia obedece estrictamente las leyes
de la dinámica clásica, se deduce que el sistema de referencia es inercial. No es posible
averiguar si un sistema de referencia material está en reposo respecto al espacio
absoluto, lo que da pie a enunciar que la dinámica clásica newtoniana no define
implícitamente sistemas absolutos, sino únicamente sistemas de referencia inerciales.
La dinámica clásica ofrece hoy día una base teórica para establecer sistemas de
referencia inerciales, siendo necesario abandonar la ficción de un sistema de referencia
absoluto en el sentido de Newton. La descripción del movimiento de los astros respecto
a tales sistemas inerciales da resultados muy buenos. El sistema de referencia
tradicional en astronomía, con ejes fijos respecto a las estrellas, coincide hasta un grado
muy alto de precisión con un sistema inercial, y puede utilizarse prácticamente en la
SISTEMAS DE REFERENCIA 4
ASTRONÓMICOS.
ASTRONOMÍA
mayor parte de los problemas de astronomía de posición, dentro de los errores de las
observaciones. Así pues, hoy por hoy, las posiciones de los astros se describen
prácticamente respecto a sistemas de referencia inerciales, basados en la dinámica
clásica definida en un espacio euclídeo.
SISTEMAS DE REFERENCIA 5
ASTRONÓMICOS.
ASTRONOMÍA
APÉNDICE II.
EL CONCEPTO Y LA MEDIDA DEL TIEMPO.
II.1. INTRODUCCIÓN.
Si t1, t2, ..., tn son valores arbitrarios de t que definen estructuras espaciales
E1(x1,y1,z1), E2(x2,y2,z2), ..., En(xn,yn,zn), se obtienen un conjunto de pares ordenados de
estructuras E y valores de t:{(E1,t1), (E2,t2), ..., (En,tn)}. Este conjunto de pares
ordenados define una función que hace corresponder a cada valor de t un estado o
estructura E: E=E(x,y,z,t). Esto corresponde a una descripción cinemática del Universo,
si se estudia desde el punto de vista de la dinámica hay que hacer intervenir las
propiedades físicas en las que se fundamenta la causística implícita en sus leyes:
E=E(F,m,x,y,z,t). De hecho, las ecuaciones diferenciales de la dinámica son relaciones
del tipo anterior. La integración de esas ecuaciones conduce a un conjunto de relaciones
simbólicas entre posición, velocidad y tiempo, que constituyen las leyes físicas
concretas que describen el comportamiento dinámico de los sistemas físicos de nuestro
Universo. El establecimiento y comprobación de tales leyes físicas, mediante la
observación y experimentación, permite asociar valores numéricos a los diversos
símbolos y variables que intervienen en ellas, previa definición adecuada de las
unidades correspondientes.
Los diferentes estados del sistema solar quedan ordenados a la variable t, que
aparece en las ecuaciones de la dinámica, mediante esas mismas ecuaciones que
definen, además, la estructura métrica de t. Por hipótesis se supone que el tiempo t de la
dinámica así definido es uniforme.
APÉNDICE III.
ESTADO ACTUAL DE LA MEDIDA DEL TIEMPO.
III.1. INTRODUCCIÓN.
X = a0 + a1 ⋅ t + a2 ⋅ t 2 + a3 ⋅ t 3 + ...
III.2.1. INTRODUCCIÓN.
Existen varias causas que dan lugar a que cualquier tiempo obtenido a partir de
culminaciones sucesivas de un astro por el meridiano de un lugar no constituya un
tiempo uniforme.
Entre los puntos de referencia bien definidos sobre la esfera celeste, el más
conveniente para medir con exactitud la rotación de la Tierra es el punto equinoccial
Aries o punto γ. Medir el movimiento angular del meridiano local respecto al punto
Aries pasa por observar la culminación de estrellas de ascensión recta conocida. La
ESTADO ACTUAL DE LA MEDIDA DEL TIEMPO. 4
ASTRONOMÍA
Hay que tener en cuenta que el equinoccio γ es un punto móvil sobre la esfera
celeste, debido a la precisión y a la nutación.
1. Precesión.
Supóngase en primer lugar que la eclíptica está fija en la esfera celeste, supuesta
centrada en la Tierra, T.
E1 y E2 son las eclípticas correspondientes a las dos épocas, γ1 y γ2 son los dos
equinoccios vernales. Supóngase que el eje en torno del cual oscila la eclíptica va de los
puntos O a O’. En rigor, los ecuadores y eclípticas aquí considerados no son
exactamente los que proporcionaría la observación en esas dos épocas, ya que se
prescinde de la variación de los mismos debida a la nutación, que será considerada
posteriormente. Para tener en cuenta esta diferencia, se denominará ecuador verdadero y
eclíptica verdadera a los afectados por la precesión y por la nutación, siendo estos los
que la observación permite determinar; mientras que ecuador medio y eclíptica media
son un ecuador y una eclíptica ficticios, afectados únicamente por la precesión y que
difieren de los verdaderos en la nutación. Por tanto, los elementos considerados:
eclípticas, ecuadores, equinoccios vernales, son medios.
2. Nutación.
El polo verdadero, Pv, es el punto de la esfera ocupado realmente por el polo del
ecuador en un instante dado, como resultado de los movimientos de precesión y
nutación conjuntamente. El polo verdadero es el que se determina mediante
observaciones. Se considera en cambio, como polo medio, Pm, la posición que ocuparía
el polo celeste si sólo hubiera precesión, sin tener en cuenta la nutación. La elipse de la
nutación es el lugar geométrico de Pv respecto de Pm. Los semiejes de la elipse son de
9’’.21 (semieje mayor o constante de nutación) y de 6’’.86 (semieje menor).
Además del movimiento del punto Aries, hay que tener en cuenta que el plano
del meridiano local no está fijo respecto de la Tierra debido al movimiento de los polos,
según la polodia que será estudiada cuando se aborde la falta de uniformidad de la
rotación terrestre, y debido a las oscilaciones de la vertical.
EE = (ψ + dψ ) ⋅ cos ε
misma tabla en la que figura la ecuación del tiempo y la hora sidérea verdadera a las 0h
de TU. El tiempo sidéreo verdadero, el tiempo sidéreo medio y la ecuación de los
equinoccios, aparecen también tabulados, para cada día del año en las “Efemérides
Astronómicas de San Fernando” (EASF), así como en “Apparent Places of Fundamental
Stars” (FS).
TS m = T0 + T1 ⋅ t + T2 ⋅ t 2
donde, por ser TSm un ángulo, T0 representará el valor de TSm en el instante que se
considere inicial (t=0), expresándose en las mismas unidades angulares que TSm; T1
será la velocidad angular inicial, expresada en las unidades angulares de TSm divididas
por la unidad en se mida t; T2 será la mitad de la aceleración angular y se medirá en las
mismas unidades que la velocidad T1 divididas por la unidad de t. Es conveniente elegir
el origen de la escala y la unidad de t para anular T0 y hacer T1 igual a la unidad. Como
origen en la escala se toma las 0h sidéreas del día 0 de enero 1900, a partir del cual se
comienzan a contar los días sidéreos transcurridos y el meridiano origen es el de
Greenwich. La unidad de tiempo t se fija de modo que la velocidad angular T1=1; es
decir, será el tiempo necesario para que γm recorra la unidad angular de TSm con una
velocidad constante, la que tiene en el instante inicial. Así, si la unidad de TSm es el día
sidéreo medio (360º), la unidad de tiempo t será la duración del día sidéreo a 0h sidéreas
en Greenwich de enero 0 de 1900. La expresión de TSm será ahora,
TS m = t + T2 ⋅ t 2
El tiempo solar verdadero local es, por definición, el ángulo horario Hv del
centro del Sol en un lugar dado. Teniendo en cuenta la ecuación fundamental de la
astronomía de posición,
TS v = α v + H v → H v = TS v − α v
en donde TSv es el tiempo sidéreo verdadero y αv es la ascensión recta del centro del
Sol verdadero.
α v = A0 + A1 ⋅ t + iα
TS v = a 0 + a1 ⋅ t + iτ
El tiempo solar medio local, Hm, es, por definición, el tiempo solar verdadero
corregido de todas sus irregularidades.
H m = H v + E → E = H m − H v = iα − iτ
H v = TS v − α v
TS v − H v = α v
H v = H m − (iα − iτ )
TS v − H m = α v − iα + iτ
que resulta ser igual a la ascensión recta del Sol verdadero corregido de sus propias
irregularidades iα, pero aumentada con las irregularidades iτ del tiempo sidéreo
verdadero. Las irregularidades del tiempo sidéreo verdadero provienen de muy diversas
causas, si bien la principal es la ecuación de los equinoccios Eq, debida a la nutación,
que puede determinarse con gran precisión y se encuentra tabulada. Si en la expresión
anterior se corrige de la ecuación de los equinoccios se habrán eliminado la principal
irregularidad TSv y solamente quedarán las pequeñas irregularidades debidas a las
variaciones en la velocidad de rotación de la Tierra, a las ligerísimas oscilaciones del
meridiano y a la pequeña variación secular de la precesión en ascensión recta. Efectuada
esta corrección se obtiene,
TS m − H m = α v − iα + iτ'
iτ' = iτ − E q
Tm − H m = α m
La posición del Sol medio se define de hecho mediante una fórmula que fija el
valor de su ascensión recta αm. De acuerdo a los principios de la mecánica celeste,
Newcomb (1895) obtuvo la expresión que permite calcular la longitud eclíptica
geocéntrica del Sol medio,
H m = TS m − α m
La definición rigurosa del tiempo universal se realiza a partir del tiempo sidéreo
medio de Greenwich y de la ascensión recta del Sol medio:
TU = TS m (Gr ) − α m + 12 h
TS m (Gr ) = TU + α m − 12 h
( )
TS m 0 h , Gr = 6 h 38 m 45 s .836 + 8640184 s .542 ⋅ T + 0 s .0929 ⋅ T 2
1s
TU 1 − TU 0 = (x ⋅ sen λ − y ⋅ cos λ ) ⋅ tg ϕ
15' '
donde t se cuenta en años de Bessel a contar desde 1900. Esta expresión se debe
a Markowitz (1958).
Los movimientos orbitales de los astros del Sistema Solar, estudiados por la
Mecánica Celeste, alcanzaron tal nivel de precisión que fue necesario abandonar el
tradicional método de ligar la medida del tiempo al movimiento de rotación terrestre
para tratar de referirlo a la dinámica de los mismos. Conocidas con una precisión mayor
a la observable, las leyes que rigen la dinámica de ciertos astros del Sistema Solar, se
En 1895 Simón Newcomb confeccionó las tablas del Sol en la que se define con
gran precisión la órbita aparente del Sol debida al movimiento de traslación de la Tierra
alrededor del mismo. En un principio la escala de tiempo utilizada en estas tablas fue la
de tiempo universal, por lo que se consideró que las Efemérides del Sol proporcionaban
la posición del Sol en función de TU. Newcomb, que desconocía las irregularidades de
la rotación de la Tierra, consideraba T medido en tiempo universal. Para Newcomb, el
TU definido por la rotación terrestre era un tiempo uniforme igualmente válido para la
teoría y para las observaciones. Ahora bien, las observaciones posteriores mostraron
que la teoría, expresada por la ecuación vista, no proporcionaba las posiciones Lm
observadas del Sol, cuando el tiempo de las observaciones se medía en tiempo solar
medio de la escala de TU.
Según Spencer Jones, para obtener los valores observados, cuando las
observaciones se hacen en TU, es necesario aplicar una corrección que incluso formula
en función del TU. Estas correcciones implican que las posiciones observadas del Sol se
van adelantando respecto a las posiciones calculadas teóricamente con las efemérides.
Puesto que los relojes utilizados para medir el tiempo de la escala TU, utilizado en las
observaciones astronómicas, reproducen el movimiento de rotación terrestre, las
desviaciones de las observaciones respecto de la teoría prueban que la velocidad de
rotación de la Tierra va decreciendo. Dicho de otra forma, el TU basado en la rotación
terrestre no es uniforme respecto al tiempo T, que aparece como variable independiente
en las efemérides. En realidad se trata de dos escalas de tiempo diferentes: la escala de
tiempo TE definido implícitamente por las efemérides, que se utiliza para la teoría
dinámica, y la escala de tiempo universal TU, que se emplea en las observaciones
astronómicas. El empleo de dos escalas de tiempo distintas, una para la teoría y otra
para las observaciones, es la causa fundamental de la discrepancia entre las posiciones
teóricas y observadas del Sol.
La expresión anterior para la longitud eclíptica del Sol medio define las
unidades del tiempo de efemérides a través del coeficiente de T. Despreciando las
pequeñas variaciones seculares, este coeficiente da el incremento en la longitud del Sol
medio en un período de 36525 días de efemérides. Una variación de L en 360º equivale
a un año trópico, el valor de T necesario será el valor del año trópico en tiempo de
efemérides.
y diferenciando,
y, teniendo en cuenta, la definición del año trópico, “tiempo requerido para que la
longitud media L del Sol aumente en 2π, a la velocidad instantánea de variación de L”,
si se considera el incremento correspondiente y despejamos, se obtiene,
en primera aproximación,
1296000' '
∆T = = 31556925 s .97474
0.041068639
y en segunda aproximación,
año de efemérides
1s ET =
31556925.9747
en la que Tu viene expresada en siglos julianos de 36525 días solares medios, a partir de
1900 enero 0 a 12h UT.
Esta última expresión, adoptada por la UAI, permite pasar del tiempo universal
al tiempo de efemérides, si bien es una aproximación. El valor correcto del tiempo de
efemérides se debe obtener a posteriori, cuando se conozca a partir de observaciones.
dada por la expresión vista, y que expresa el número de días de las efemérides
transcurridos desde –4712 enero 0 a 12h de TE.
La duración del segundo atómico coincidía, por definición, con la del segundo de
efemérides.
Por tanto, desde 1958 se dispone de la escala TAI, de gran precisión, que se
puede enlazar con el tiempo de efemérides (ambas utilizan la misma escala) por la
diferencia indicada. Puede utilizarse el TAI para fijar el instante de una observación o
para el cálculo de posiciones desde junio de 1955, pero para observaciones o cálculos
anteriores a 1955, en que el tiempo atómico no existía, es necesario recurrir a tiempo de
efemérides.
Este TAI se debe utilizar tanto para el cálculo de efemérides geocéntrica como
heliocéntricas. Más adelante, debido a efectos relativistas, se definirían nuevos sistemas
de tiempo atómico: uno geocéntrico, el Tiempo Dinámico Terrestre (TDT) y uno
heliocéntrico, el Tiempo Dinámico Baricéntrico (TDB).
El UTC aparece desde enero de 1958. UTC se hizo coincidir con UT1 a
principios de 1958. Un reloj atómico dirigía cada emisora de señales horarias. Para
ajustar a UT, a principios de año se realizaba una modificación en la frecuencia para
adaptarse al segundo UT2. Dado que UT2 tampoco es uniforme, cuando la diferencia
UTC-UT2>0s.1 se introducía una corrección de esa magnitud a principios de mes. Estas
dos alteraciones, modificación de frecuencia a principios de año, y saltos a principios de
algunos meses, generaba dificultades técnicas importantes, lo que dio lugar a una
modificación. A partir del 1 de enero de 1972, de acuerdo con lo decidido en la XIV
Conferencia General de Pesas y Medidas (celebrada en octubre de 1971), la escala
vuelve a ser el segundo atómico y se imponen las condiciones:
siendo n(t) un número entero que varía con el tiempo. Para conseguir esto se recurría a
añadir, o a suprimir, un segundo intercalar siempre que fuera necesario, pero en fechas
preestablecidas (31 de diciembre, final de junio,...) Para conocimiento de quienes
pudieran necesitar esta información, las propias emisiones incluyen un código que
indica el valor de la diferencia UTC-UT1 para cada señal emitida. Cuando se llevó a
cabo esta revisión de UTC, la diferencia UTC-UT1=-10s, y continuó aumentando de
forma que a principios de 1982 ya era de 20 segundos.
Se procede a calcular la duración del año trópico, at, en la escala del tiempo de
efemérides TE. Para ello se parte de la fórmula de Newcomb para Lm. Hay que tener
presente que la esta fórmula es válida únicamente para unos cuantos miles de años,
debido a las limitaciones de la teoría de Newcomb, y su precisión disminuye
progresivamente al distanciarnos hacia de 1900, hacia el pasado o futuro. La duración
del año trópico expresada en siglos julianos de las efemérides, viene dada por la
relación:
Lm (T + at ) − Lm = 1296000' '
donde T se mide en siglos julianos de 36525 días de las efemérides, contados a partir de
1900 enero 0 a 12h de TE. Como se ve, los años trópicos sucesivos no son iguales sino
que decrecen lentamente con el tiempo, en unos 0s.0053 por año.
El tiempo solar medio local, Hm, en cada instante se determina a partir del
tiempo sidéreo local, Tm, observado en ese instante, según la expresión,
H m = Tm − α m
Hay que tener en cuenta que en realidad el tiempo sidéreo observado directamente es el
verdadero TSv, que se transforma en tiempo sidéreo medio a través de la ecuación de los
equinoccios. Así pues, la expresión anterior, que es la definición exacta del tiempo solar
medio, relaciona en cualquier meridiano la escala de tiempo medio con la escala de
tiempo sidéreo medio, a través del valor adoptado para la ascensión recta de un punto
del ecuador celeste designado con el nombre de Sol medio. La relación numérica entre
las dos escalas, que es lo que se pretende determinar en este apartado, se obtiene
calculando la equivalencia entre las unidades de una y otra escala, o sea, del día solar
medio y del día sidéreo medio, a partir de un instante en el cual se conozcan
simultáneamente los valores de Hm y de TSm referidos a un mismo meridiano arbitrario.
( )
TS m 0 h , Gr = 6 h 38 m 45 s .836 + 8640184 s .542 ⋅ T + 0 s .0929 ⋅ T 2
donde T es el número de siglos julianos de 36525 días medios transcurridos, a 0h de
TU0, desde la época 1900 enero 0 a 12h de TU0. Al girar la Tierra en torno al eje de
rotación que pasa por el punto P1 de la figura, el ángulo horario TSm(0h,Gr) varía:
d
dT
( )
TS m 0 h , Gr = 8640184 s .542 + 0 s .1858 ⋅ T
por unidad de T, o sea, por siglo juliano de 36525 días solares medios. Tomando como
unidad de T el día solar medio se tendrá,
( )
∆TS m 0 h , Gr = 24 h +
1
⋅
d
36525 dT
( )
TS m 0 h , Gr = 86636 s .5553605 + 0 s .000005087 ⋅ T
I m = 0.997269566414 ⋅ I s
I s = 1.002737909265 ⋅ I m
I m = 0.997269571 ⋅ I s
I s = 1.00273791 ⋅ I m
Una escala de tiempo no es sino un sistema definido para fijar el instante en que
tiene lugar un fenómeno. Queda definida por un instante origen y una unidad de
medida. Para poder utilizar una escala de tiempo será necesario que las sucesivas
unidades tengan la misma duración y que esta duración coincida con la de la unidad
adoptada. Será también necesario poder conocer, con la mayor precisión y la máxima
facilidad posibles, el valor asignado en esa escala a un instante determinado. Estas
condiciones definen la estabilidad, la exactitud y la accesibilidad de una escala.
Para definir las escalas de tiempo se variarán los orígenes, se utilizarán dos
nuevas fechas iniciales:
FJ − 2415020.31352
B1900.0 +
365.242198781
FJ − 2451545.0
J 2000 +
36525
⎛ g ⋅ (h'− h ) ⎞
t = t 0 ⋅ ⎜1 + ⎟
⎝ c2 ⎠
⎛ v2 ⎞
⎜
t = t 0 ⋅ ⎜1 − ⎟
2 ⎟
⎝ 2 ⋅ c ⎠
del potencial de la gravedad y las diferencias de velocidad, así como por la rotación de
la Tierra”.
Tal y como se ha visto, dada la precisión lograda por los relojes atómicos, es
necesario tener en cuenta los efectos previstos en la teoría de la relatividad debidos a
posibles diferencias en el potencial gravitacional y al movimiento de los relojes. Esto
llevaría a referir el TA a un punto determinado de la superficie terrestre. Con ello se
eliminaría el efecto debido a las variaciones del potencial, pero no el efecto debido al
movimiento de rotación de la Tierra. Pero estas diferencias, al reducir a geocéntrico el
tiempo atómico determinado por un reloj en cualquier punto de la superficie terrestre,
son despreciables dentro de la precisión necesaria en astronomía, lo que permitió la
introducción de la definición del TAI, en 1980, en un sistema de referencia geocéntrico.
El problema seguirá existiendo en mecánica celeste, en que se utiliza un sistema de
referencia heliocéntrico (baricéntrico).
( )
TS 0 h , Gr = 6 h 38 m 45 s .836 + 8640184 s .542 ⋅ T + 0 s .0929 ⋅ T 2
y − 1950
E = 0 s.035 + 0 s.085 ⋅
100
( )
TS 0 h , Gr = 6 h 41m 50 s .54841 + 8640184 s .812866 ⋅ Tu + 0 s .093104 ⋅ Tu2 − 6 s .2 ⋅ 10 −6 ⋅ Tu3
La escala UTC es la que se difunde como señales horarias y, por lo tanto, resulta
fácilmente disponible para la mayor parte de usos civiles, de navegación y
astronómicos. Si se requiere algo más de precisión, es posible decodificar
electrónicamente una predicción de la diferencia UT1-UTC que, redondeada a la
décima de segundo, es transmitida en algunas señales horarias y se denomina DUT1. Si
se necesita disponer del TT o del TAI con mucha precisión (como ocurre en ciertas
observaciones astronómicas o geodésicas), se puede recurrir a las señales emitidas por
la flota de satélites que constituyen el Sistema de Posicionamiento Global (GPS), con
los que se obtiene una precisión instantánea mejor que el microsegundo.
El GPS trabaja con una escala propia de tiempo, el GPS Time. El origen de la
escala del tiempo GPS se ha fijado como coincidente con el UTC a las 0h del 6 de enero
de 1980 y la unidad es el segundo del TAI. Como en ese momento el TAI difería del
UTC en 19 segundos, el GPS Time es equivalente al TAI menos 19 segundos. La
diferencia entre el GPS Time y el UTC va aumentando debido a los segundos
intercalares (leap seconds) que se van añadiendo al UTC para conservar su proximidad
al UT1. En la siguiente ilustración se aprecia la relación entre estas escalas de tiempo.
En las tablas siguientes se indican las diferencias TDT-UT1 para el primer día
del año y las fechas en que se ha producido un salto de 1s en la diferencia TAI-UTC,
desde1983 hasta 1998.
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