Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
DIVINAS
e ros c a p í t ulos
rim
P
3
M U E S T R A
a
tr
s
Ejem ue
plar de m
ÉRIC CÉLÉRIER
Fundador de TopChrétien
Conexiones
Divinas
Éric Célérier
¿Has sido alguna vez “animado” de esta manera por algunos cristianos?
¡A la vez que José soñaba en color sobre un futuro excepcional, sus
hermanos seguían con la televisión en blanco y negro! 2 No siempre
es fácil ser un visionario, ver por adelantado lo que va a ocurrir, es
raramente algo bien recibido por los demás. Este hermano cristiano
me había frenado en mi impulso. En vez de pensar en lo que Dios me
había dicho de una manera tan milagrosa, no paraba de repetir en mi
interior esas palabras negativas: “¿Tú? ¡Seguro que no!” “¿Tú? ¡Seguro
no!”. Empezaba incluso a amplificarlas: “No valgo para nada, estoy lleno
de defectos, tengo mal carácter, estoy lejos de andar por un camino de
santificación, tengo adicción al tabaco, miro imágenes impuras, no sé
gran cosa de la Biblia, no consigo ayunar, tengo miedo de compartir mi
fe, ...”. Cuando llegué a casa, el llamado que había recibido esa misma
noche parecía muy lejano. Afortunadamente, Dios me habló de nuevo
a través de un versículo que me animó: “Porque irrevocables son los
dones y el llamamiento de Dios” 3 . Después de todo, ¡Él sabe lo que hace!
Puesto que Él me había llamado, Él cumpliría su promesa. Esa noche,
me dormí, confirmado en su promesa.
1
La Biblia, Hechos 1.8
2
La Biblia, Génesis 37
3
La Biblia, Romanos 11.29
4 CONEXIONES DIVINAS
alguna vez destruir el sueño que Dios puso en tu corazón? ¿Alguien te
ha dicho alguna vez: “¿Tú? ¡Seguro que no!”? Déjame hoy decirte: “¿Tú?
¡Seguro que sí!”
¡ T ú , se g u r o q ue sí ! 5
CAPÍTULO 2
La cena era sabrosa, y los invitados muy simpáticos. Aun así, la velada
era bastante trivial. En el transcurso de la cena, los organizadores cedie-
ron la palabra a un pastor del que había escuchado hablar vagamente,
el doctor Henry Blackaby. Me di cuenta a continuación de que era en
realidad un hombre de Dios excepcional. Es el autor de una treintena de
libros, entre ellos Experiencing God 2 (Experimentando a Dios). Se puso
a predicar con un tono de voz monótono, al punto de que de empecé a
dar cabezadas. Hablaba sobre la pesca milagrosa, explicando que Dios
utiliza a personas normales para hacer cosas extraordinarias. Estaba
a punto de dormirme, cuando el doctor Blackaby empezó a decir con
gran convicción estas tres palabras de manera enfática: “Cast the net!,
Cast the net!” (¡Echa las redes! ¡Echa las redes!).
“Cast the net!”. El net… ¡la red, también llamada Internet! 3 ¡Echar la
red, era lo que Dios me había llamado a hacer a través de la web! Henry
continuó: “Si obedeces a Jesús, si echas tus redes, tendrás la pesca más
abundante y más extraordinaria de toda tu vida”. De manera evidente,
este mensaje iba dirigido a mí, al punto de que los que estaban conmigo
en la mesa se giraron hacia mí, estupefactos. “Eric, ¡esta palabra para ti!”.
Esa noche sentí que Dios me hablaba. Mi corazón latía a toda velocidad.
Dios estaba poniendo esta convicción en mi corazón: Él hace cosas
extraordinarias con personas normales y corrientes. Entendí que esta
palabra era para mí.
1
La Biblia, Mateo 5.41
2
Experiencing God: Knowing and Doing the Will of God, Lifeway Christian Resources,
1990.
3
Nota del traductor: En francés, se usa comúnmente la palabra “net” para referirse a
Internet.
8 CONEXIONES DIVINAS
CAPÍTULO 3
Lo imposible no es divino
Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de
vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de mal,
para daros el fin que esperáis. Entonces me invocaréis, y
vendréis y oraréis a mí, y yo os oiré; y me buscaréis y me
hallaréis, porque me buscaréis de todo vuestro corazón.
En 1998, era un joven pastor de unos treinta años de edad. Había creado
ya dos páginas web en Internet. Mi primera página, lanzada en 1997,
sirvió para dar a conocer la iglesia de Givors, en la región de Lyon,
Francia, en la que mi esposa estábamos trabajando. En aquella época,
¡es muy probable que ningún habitante de esa ciudad tuviese conexión a
Internet! Pero un joven se puso en contacto con nosotros a través de la
página. Se trataba de un joven brasileño llamado Gilberto. “He buscado
por Internet una iglesia en Francia, y la suya es la única que he encontra-
do. Me gustaría hacerles una visita”.
L o i m posi b le no es divino 9
proyectos maravillosos que Dios estaba llevando a cabo en Brasil. Fue
muy inspirador. Gilberto pasaba mucho tiempo ayunando y orando.
Fue una profunda inspiración para nosotros.
1 0 CONEXIONES DIVINAS
solo responsable me animó. Ni uno solo me exhortó diciendo: “Dios
puede ayudarte”. Ni uno solo me citó un versículo de la Biblia para que
fuese adelante con el proyecto.
1
La Biblia, Jeremías 29:11
L o i m posi b le no es divino 11
Deja que
Dios Transforme tu
vida
día a día