Está en la página 1de 2

Taller: Texto del dilemma

Alejandro Rivillas García


CC. 1017220045

En el caso que se pone a consideración en el texto, se contraponen directamente el derecho al


medio ambiente con el derecho al trabajo, desde la visión del curso de Políticas Públicas y
Legislación en Educación, se hace importante también analizar la situación considerando la
educación como parte de los aspectos de influencia. Para exponer una posición respecto al dilema,
se recurre a la constitución política de Colombia, en la cual se puede tener una visión clara acerca
de lo que representan e implican los derechos que se encuentran confrontados.

El derecho al trabajo es quizá uno de los asuntos menos debatidos en el país, sin embargo, la
constitución establece el hecho de que este derecho es además una obligación social que debe
contar con la protección del estado, en el caso planteado se hace evidente que la enorme mayoría
de la actividad laboral del pueblo se deriva de la producción de los muebles especiales que se
elaboran con la madera de los bosques, dado esto, una primera apreciación sería que se debe
velar por que se siga dando la producción de estos, pues son la base del sustento de muchas
personas en el pueblo, el alcalde desde su posición como gobernante debe proteger el derecho de
los habitantes a trabajar, por lo tanto no es una opción viable la detención total e inmediata de la
tala de árboles, tal como lo requiere la autoridad ambiental.

Por otro lado, el derecho de todas las personas a gozar de un ambiente sano es explícitamente
enunciado en la constitución, se hace claro que la protección de la diversidad ambiental y de la
estabilidad ecológica son parte de las labores del estado, así mismo se establece que toda
actividad privada que pueda afectarlo, debe ser evaluada para poner en la balanza las posibles
consecuencias que pueda tener sobre este, pues al ser un derecho de todos primaría el bienestar
público sobre el privado, también se menciona que el estado está en el deber de garantizar la
participación de la comunidad en las decisiones que afecten el medio ambiente. En cuanto a este
derecho particularmente, se hace específico el asunto de la educación: el estado está en el deber
de educar a la ciudadanía en cuanto a la conservación del medio ambiente como elemento de vital
importancia para el bienestar común.

Tras analizar ambos derechos y la posición en que se encuentra el alcalde, la ruta más efectiva
para generar una solución útil a todos los implicados en el dilema podría ser la siguiente:

1. Conformar un comité con representantes de diversos gremios que se vean afectados por
la medida, los cuales pueden ser: gremio ambiental, gremio de extracción de materia
prima, gremio de productores, gremio de vendedores, gremio de turismo e incluso sería
valiosa la participación estatal. Este comité debe discutir los asuntos que se desglosan de
las posibles medidas a tomar, buscando un balance entre la conservación ambiental y la
estabilidad económica de la comunidad, para entregar una serie de propuestas de nuevas
medidas que se puedan comunicar a los habitantes del pueblo y ser sometidas a su
consideración.
2. Realizar una encuesta popular en la que se pongan a discusión las posibilidades
propuestas por el comité, así se garantiza la participación de la comunidad en la decisión
tomada frente al tema ambiental, pues no sólo este, sino también el derecho al trabajo es
de interés público, no sólo privado.
3. Generar programas educativos que se lleven a cabo en las instituciones educativas en
diferentes niveles en el pueblo, con el fin de que haya una comunidad educada en cuanto
a la importancia del ambiente, el uso racional de los recursos, las medidas necesarias para
la conservación (como la resiembra después de la tala), el equilibrio del mercado en
cuanto a oferta y demanda, la estabilidad de la economía y demás temas trascendentes en
la situación. Esta acción quizá sea la más importante, pues es una forma de asegurar la
estabilidad entre lo ambiental y lo económico en el tiempo.

La educación juega un papel fundamental en cualquier proceso social e incluso político, no tiene
ningún sentido tomar medidas arbitrarias que pueden generar malestares y complejidades
socioeconómicas en la comunidad o que pueden dar rienda suelta a la destrucción del medio
ambiente a beneficio del comercio, si no se realiza un proceso educativo que permita conocer
ampliamente por parte de la comunidad completa, en especial la niñez y la juventud, las
consecuencias de las decisiones que se toman, las posibles situaciones que se puedan presentar y
cómo desarrollarse alrededor de éstas.

También podría gustarte