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La trompeta

27/03/2012ETIQUETADO CON:VIENTO METAL


Por César Asensi Gamón y Óscar Grande Pombo

César Asensi Gamón es trompeta


solista de la Orquesta de la Comunidad de Madrid y miembro del Quinteto
Quoniam Brass.

Óscar Grande Pombo es trompeta de la Orquesta de la Comunidad de Madrid y


miembro del Grupo Español de Metales.

Historia
La trompeta se puede considerar como uno de los instrumentos más antiguos que
se conocen, ya que en la antigüedad los hombres utilizaban instrumentos
fabricados con medios naturales como cañas o cuernos de animales para
comunicarse, a los que podemos atribuir los orígenes del instrumento.

Posteriormente el descubrimiento de los metales jugó un papel muy importante ya


que proporcionó los materiales apropiados para la construcción de la trompeta, a
la vez que lo dotaba de mejor sonoridad y se modelaba hacia la forma en que hoy
lo conocemos, aunque por el momento seguía conservando la forma de cuerno.

Durante la Edad Media, la trompeta fue un instrumento que se utilizó para fines
militares, e iba ligada a todo lo que representara poder.

A partir del siglo XI la trompeta, hasta entonces con forma de cuerno, se alarga y
adelgaza la tubería al tiempo que se ensancha el pabellón; alrededor del año 1400
descubrieron una técnica para curvar los tubos.

En el Renacimiento, fue la época donde tuvo lugar un florecimiento de todas las


artes; se empiezan a formar grupos musicales para el entretenimiento en las
cortes donde la trompeta desempeñaba sus funciones además de en los torneos y
en la iglesia.

Uno de los acontecimientos más importantes fue sin duda la aceptación del
instrumento en la orquesta, donde tomó una importancia enorme durante el
periodo Barroco, confiándole los grandes compositores como Bach, Haendel,
Telemman, etc., un papel solístico lleno de virtuosismo.

Después de la gran importancia que tuvo en el periodo


anterior, la trompeta se sumergió en un momento de decadencia durante el
Clasicismo al cambiar el gusto musical y encontrar a la trompeta pasada de moda
por su carácter heroico y triunfal.

Después de todo, hubo un intento por convertirla en un instrumento cromático,


para dotarla de una facilidad melódica que la igualara con el resto de
instrumentos. Este intento fue protagonizado por un trompetista de la época
llamado A. Widinger y para quien se compusieron los dos únicos conciertos del
clasicismo por J. Haydn y J. W. Hummel, aunque el invento no se consolidó por
estar muy lejos de la perfección.

Fue alrededor de 1815 cuando los músicos Blümel de Silesia y H. Stölzel de


Berlín, inventaron un sistema con el cual la trompeta pudo obtener un juego
cromático y así poder tocar melódicamente en todos sus registros. Así, creado el
invento, se fue mejorando por los constructores hasta llegar a los trompistas de los
que disponemos hoy en día.

El invento fue observado por los compositores quienes, progresivamente fueron


introduciendo a la trompeta en la orquesta como un instrumento melódico, dándole
la misma importancia que a cualquier otro instrumento de viento.

No podemos terminar este breve viaje por la historia de la trompeta sin resaltar la
gran influencia que ha tenido el jazz no solo en el instrumento, aportando nuevos
recursos técnicos y sonoros, sino también en los compositores más
contemporáneos pasando por Ravel o Stravinski quienes, directa o
indirectamente, han estado influenciados en los nuevos ritmos y melodías que
surgieron con el nacimiento del jazz.

Su evolución
Se puede considerar la evolución de la trompeta como un proceso complicado y
duradero en el afán de convertirla en un instrumento melódico.

Los materiales de construcción son fundamentalmente latón y alguna vez plata o


cobre.

La primera trompeta a la que se puede


hacer referencia musicalmente, es la llamada “Trompeta Natural”, utilizada durante
el periodo Barroco y Clásico y que tenía la forma parecida a las llamadas cornetas
militares que todo el mundo conoce, pero con mayor longitud de la tubería.

Esta trompeta tenía unos tubos adicionales llamados “Tornillos de recambio”, para
poder adaptarse a la tonalidad de la obra que tuvieran que tocar, ya que sólo
producía una serie armónica partiendo de la nota fundamental del tubo. Esto
llevaba a que, para producir una melodía, tenían que tocar en el registro agudo del
instrumento donde las notas o armónicos están más juntos por la física del tubo.

El primer intento importante por hacer de la trompeta un instrumento cromático, lo


llevó a cabo, como ya se ha mencionado, el trompetista A. Widingen durante el
periodo clásico. Él dotó a la trompeta de unas llaves y agujeros con un sistema
parecido al de una flauta o fagot, el cual no tuvo el éxito esperado por no tener una
igualdad tímbrica entre todas las notas.

La invención necesaria fue realizada alrededor de 1815 por los músicos Blümel y
Stözel, quienes inventaron un sistema de válvulas que conectaban
automáticamente el tubo principal con unos tubos secundarios, y se conseguía
volver al instrumento cromático.

A partir de esta invención han sido muchos los cambios y perfeccionamientos que
se han hecho hasta llegar a la trompeta tal y como hoy la conocemos.

Hoy en día hay una amplia gama de trompetas y accesorios que sirven para
adaptarse tanto al gusto del instrumentista como para el estilo de música concreto.

¿Cómo es? ¿Por qué suena como suena?


La trompeta es el instrumento más pequeño y agudo de la familia de los metales.
Consta de un tubo parcialmente cilíndrico de sección pequeña que se ensancha
progresivamente hasta llegar al pabellón o campana. A su vez tiene 3 pistones o
válvulas, que al accionarlos conectan las bombas adicionales al tubo principal
alargando su longitud. Otra parte no menos importante es la boquilla o
embocadura, donde se produce el sonido (vibración de los labios por medio del
aire) que después es amplificado por el instrumento.

Al igual que toda la familia de instrumentos de metal, la trompeta es un tubo


abierto que responde a las leyes físicas de éstos.

El sonido se produce en la boquilla, los labios se introducen en ella, y al soplar, el


aire hace que éstos vibren y produzcan una especie de zumbido que es
amplificado por el instrumento para producir su sonido característico.

¿Qué lugar ocupa en la distribución espacial de los instrumentos de


la orquesta?
Mirando la orquesta desde el público o desde el podio del director, las trompetas
suelen estar colocadas en la parte derecha, debajo de los trombones. Aunque
dependiendo de la plantilla o de la orquestación pueden variar su ubicación.

La primera estaría en el centro y la segunda, tercera, cuarta hacia la derecha.


Como por ejemplo en “Las Travesuras de Till Eulenspiegel” de Strauss que lleva
seis trompetas. Algunos compositores las han empleado incluso fuera del
escenario; Mahler las utilizó en su “Sinfonía nº1, nº3”, etc., Beethoven en sus
oberturas “Leonora II” y “III”.

¿En que estilos musicales podemos encontrarla fuera de la


orquesta?
Solo hace falta fijarse un poco para ver cómo la trompeta es un instrumento que
forma parte no solo de la orquesta sinfónica sino de gran número de formaciones
de cualquier estilo musical. La mayoría de la gente que no está ligada
directamente a la música clásica, seguro que la reconoce antes en cualquier tipo
de música popular. Así, podemos encontrarla en las bandas de música
profesionales de las ciudades o ejércitos de todo el mundo o, sin ir más lejos, en la
cantidad de bandas de músicos aficionados y que a la vez sirven de cantera para
futuros profesionales que tanta tradición tienen en este país.

Otros tipos de música popular donde la trompeta es indiscutible, son sin duda los
famosos mariachis mejicanos, o la incansable salsa caribeña, con sus ritmos
danzones, y en nuestros famosos pasodobles. También en la música pop, se
pueden encontrar las trompetas en muchas ocasiones.

Sin duda la encontraremos infinidad de veces en ese monumental estilo tan


imaginativo y caricaturesco que es el jazz, que tantos favores ha hecho en el
progreso de la trompeta.
Obras del repertorio orquestal donde aparecen sus más famosas intervenciones

o J. S. Bach: “Oratorio Navidad”, “Misa Si Menor”, “Concierto de


Bradenburgo nº2”, “Magnificat”
o Bartok: “Concierto para Orquesta”
o Bizet: “Carmen”
o Mahler: “Sinfonías nº1,2,3,5”
o Mussorgski: “Cuadros de una exposición”
o Ravel: “Concierto para piano en Sol Mayor”
o Richard Strauss: “Don Juan”, “Sinfonía Alpina”, “Salomé”…
o Strawinsky: “El Pájaro de fuego”, “Petruschka”, “Pulcinella”
o Verdi: “Rigoletto”, “Aida”
o Wagner: “Tannhäuser”, “Maestros Cantores”, “La Valquiria”
o Rimsky Korsakov: “Scherezade”
o ¿Por qué la elección de este instrumento? ¿Lo volvería a elegir?

Al igual que la mayoría de los músicos valencianos, mi


inquietud por la música empezó en la banda del pueblo (Albalat dels Tarongers).
Un día mi padre me llevó al ensayo de la banda y quedé prendado del sonido
brillante de la trompeta que tocaba el que fue mi primer maestro, ” el tío Ximo
Serra”. Aquel mismo día me la dejó y conseguí dar un par de notas, corrí a casa y
le dije a mis padres que quería ser trompetista, a pesar de que mi abuelo insistía
en que tocara el requinto como él.

Por supuesto que volvería a elegirlo; siempre he disfrutado mucho con la trompeta
y espero seguir haciéndolo.

Nunca ha sido un esfuerzo para mí, aunque es un instrumento que plantea una
exigencia máxima tanto técnica como física y mucha dedicación.

Considero que hoy en día es un privilegio poder trabajar en lo que me gusta y en


lo que he empleado la mayor parte de mi vida.

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