—_— ——— Rodofo Sandino Arguetio La formacién del abogado en los finales del siglo XX ‘This articles takes a critical look at the quality of professional legal training offered by the Central American University’s Law School duringits thirty-four years of existence. The author discusses the need tostrengthen the ethical education of future lawyerswho,asdefenders of the nation’s legal system and the state of law, have the obligation to comply with the law’a basic precepts, thus ensuring the confidence of the citizens who seck their services. Quiero referirme ala formacién 1. Asesor del legislador, consejero que se ha dado durante los treinti- _—_oportuno de la técnica legislativa cuatro afios de existencia dela Fa- _en procura de una mejor legisla- cultad de Derecho o Ciencias Juridi- cin. cas de nuestra Universidad. ‘Se fund6 con un especial signifi- 2. Defensor de la organizacién jurf- cado: dica y desde luego del Estado de Derecho como jueces, magistra- sformar abogados en el senti- dos 0 funcionarios administrati- do tntegro de la palabra, cuya vos. rectitud, dignidad y sentido del deber y dela responsabili- 3. Colaborando en a actividad jurf- dad les facultara para ser co- dica de los particulares como abo- laboradores sincerosen la rea- gados, notarios 0 asesores gene- lizaci6n de la justicia> rales de empresa. Setratabadeformarjuristasidé- __ Con esos propésitos iniciales de neos para las tareas de los distintos hace ya més de tres décadas, se han campos: armado también tantos planes de 6Bneuentro42 estudios fijo, variables, transitorios, como unos treinta de ellos ala fecha, para formar el abogado que desea- ‘mos insertar en la realidad nicara- gilense y centroamericana. Enel primer plan de estudios apa- recen las materias de Filosofia de la Religién, Dogma, Etica, Deon-tologia Juridica y los ya sabidos Derechos Ci- vil, Penal, Mereantil, Laboral, ete. Enel siguiente quinqueniose tra- jodeepigrafe ena presentacién dela carrera un pérrafo de la leccién inau- gural de esta Universidad y que dic- tara el recién fallecido poeta José Coronel Urtecho: «Al sentido romano del Dere- cho hay que comunicarle la gracia helénica de la inteli- genciay lavirtud cristiana del amor. Ya para entonces aparece la ma- teria Etica Social que con la Deontologia Juridica son las tinicas que adornan el plan de estudios. Y digo adornan, porque desde los ini- cios de la Facultad, los alumnos les han venido lamando «materias de adorno». Posteriormente figuran -Antropo- logia», “Teologiar y la «Deontologia», Tuego se habla de «Antropologia Filos6- fica», «Btica Social» y «Teologias. Llegamos a los siguientes aiios donde desaperecen todos estos «Ador- % nos» y aparecen otros nuevos: Educa- Gin Fisica, ylos manuales histéricos que desaparecieron a su vez poco tiempo después ante una disputa periodistica y académica. Con este breve recorrido de la formacién del abogado quiero sefia- lar las fallas que presenta ya nece- sidad de que estos afios venideros, la formacién sea mas moral y ética, porque las criticas al abogado que nos dicen generalizéndolas, son tre- mendas: «Corrupto como judicial, como litigante, como asesor y como abogado en st» Hablemos claro, no son escasas Jas infracciones que se cometen yen ligera ojeada a los Boletines Judicia- les podemos leer las sanciones a que les somete la excelentisima Corte ‘Suprema de Justicia. Todolocual no es suficiente, En la formacién de nuestros abo- gados ha faltado a profundidad, la ética profesional para el ejercicio de Ja funcidn judicial, la abogacia y el notariado. Y esta ética no es «Ador- no». Es un asunto tan serio en cuanto estudia la moralidad del obrar hu- mano. Considera los actos humanos del Profesional del Derecho en cuan- to son buenos 0 malos. Y ello debe Hegarle desde su formacién basicahasta la culminaci6n de la carrera y atin en el ejercicio de la profesiGn. 1. Como asesor del legislador debe saber aconsejar en la selva de leyes que comprende nuestra legislacién, aquella que sea sabia, prudente y ‘que aborde la realidad nicaragiiense en forma justa, equidistante de las pasiones, del ardor con el cual el nicaragiiense se desborda, Que la Ley sea dada con justicia. Que al formarse en nuestras aulas para ser unconsejerodeestanaturaleza, bus- que cémo nuestra legislacién sea ejemplo y no copia de otras realida- des. Para ello es necesario la ética. 2. Si formamos defensores de la or- ganizacién juridica y el Estado de Derecho, debemos hacerlo ensefidn- doles a cumplir eon los cénones basi- cos de lo jurfdico, a ser un hombre de derecho que despierte la confianza social, porque si la sociedad le pierde la confianza, se cae en el caos y la anarquia, si se pierde la fe en las instituciones, el pueblo fuente del poder se vuelca a destruir la organi- zacién misma de la sociedad, la que nosotros mismos debemos defender acapa y espada, como lo dijo el poeta Coronel: «Los hombres de Derecho en Nicaragua han sido los arquitec- tos del Estado». No podemos permi- tir que Jueces, Magistrados 0 Fun- cionarios Administrativos, formados —— Rodolfo Sandino Argullo ‘en nuestras aulas, los medios de co- municacién les sefialen como indi- cios fuertes de la decadencia intelec- tual y moral de los abogados. Para combatir estos males es necesario la Etica y es necesario ol estudio per- manente del Derecho. Atin formado xy autorizado para ejercer el abogado como Juez, Magistrado o Funciona- rioAdministrativo, siempre debe con- tinuar los habitos del estudio que obtuvo en nuestras aulas diligente- mente, Un atento y especial estudio de los asuntos sometidos a su conoci- miento y por lo consiguiente el cono- cimiento actualizado del Derecho. Recientemente nos dio pena encon- trar por casualidad a un profesor de nuestra Escuela de Derecho presen- ciando a solitario desde la Mezanine lasesién de la Asamblea Nacional en donde se discutfan reformas sustan- ciales al Cédigo Civil ya la Corstitu- Gién. Y digo me dio pena, porque el conocimiento actualizado del Dere- choen parte esel debate dela Ley, su formacién y si bien hay alumnos que trabajan en la Asamblea, muy pocos presencian la formacién de la ley. ay otros grandes ausentes profeso- res y alumnos de nuestra Escuela. Para un conocimiento actualizadodel Derecho, en mi Catedra de Derecho del Trabajo he obligado a los alum- nos allevar una coleccién de recortes, periodisticos (SCRAP BOOKi refe- rentesalas discusiones del Codigo de aEncuentro 42 ‘Trabajo. En esos trabajos se actuali- zanen lo que se piensa y dice sobre el nuevo Cédigo de Trabajo. Asi tam- ign veo con pena que pocos tienen la coleccidnde»GacetaParlamentaria», muchos ni sabran que existe. En nuestro Centro de Documentacién nolahe visto coleccionada. Lleva ya 28 nimeros en donde hay una rela- cion de la actividad parlamentaria, para actualizar y poner al dia no s6lo los estudiants, sino a los propios abogados, que como funcionarios jue- ces, 0 magistrados debemos estar actualizados en la ciencia del Dere- cho, en la génesis y formacién de la Ley. Para la defensa de la organiza- ign juridica el juez por ejemplo, de- % biera gozar de inamovilidad y carre- ra judicial, sin embargo, no existien- do ellos, se debe ejercer la defensa Institucional dandole dignidad al cargo. El principio de inmediacién que propugnamos en nuestra clase de Laboral es indispensable. Debe- mos dejar de ser "firmones" de lo que los Secretarios nos presentan. El Juez debe recibir las declaraciones de las partes y presidir todos los actos en que se desarrolla el juicio. Es defender la Institucién a que se pertenece con conviecién de actuar bien, con profundo respeto al Dere~ cho, con certeza no sélo personal, sino certeza procesal, al tener juris- diccién a su cargo, sea judicial 0 ad- ministrativa.La conciencia verdadera y cierta de lo que nos Hega a las manos, es base ética para resolver los proble- ‘mas que nos corresponde resolver. Debemos tener una certeza moral Estos defensores de la organiza- cién juridica no pueden licitamente con sus actos, obligar a nadie a reali- zar algo intrinsecamente inmoral, aunque esté mandado o permitido por la Ley. La raz6n es que no es licito nunca hacer el mal, bajo nin- ‘fin concepto. 3. La colaboracién en la actividad Juridica delos particularesseda como abogados, notarios 0 asesores de Empresa. Debemos percatarnos que el Titulo de Licenciado en Derecho que otorgamos a su vez y conforme a Ley, sirve al graduado para obtener ante la Corte Suprema de Justicia dos titulos: el de Abogado y el de Notario Pablico. En el tiltimo claustro de Profeso- res dela Facultad de Ciencias Juridi- cas hice circular amimeégrafo trans- cripciones de una obrita de Piero Calamandrei Demasiados Abogados (EJEA Bs. Aires, 1960). En esa obri- ta se lee: (pag. 135). «...atin habiendo muchos abo- gados y procuradores honra- dos y concienzudos, hay tam- bién muchos que para vivir se ven obligados a no tener ni Rodolfo Sandino Arguello una ni otra de esas cualida- des...» Sostiene el autor que hay muchos abogados y poca justicia. La falta notoria en muchos abogados de la conciencia, de la gran importancia moral y social de su profesién; dela snobleza ideal» (KAMPF UMS RECHT) que decia HIERING, era la lucha porlarealizacién précticadela Justicia que debiera ser la abogacia. Muy conocidos son los «Manda- mientos del Abogado» del gran juris- ta Antel Ossoric y Gallardo. Nos preguntamos, {se cumplen? Con respeto al titulo de Notario, profesional del Derecho y Funciona- Tio Publico es donde més delicado resulta el ejercicio. ‘No sélo son errores sino horrores losquese cometen. Como profesor de la materia hace algunos afios, reco- mendé a los alumnos el librito del autor mexicano Bernardo Pérez Fernandez del Castillo, Etica Nota- rial (Editorial Porréa, México 1990). Siento el decir que al preguntar enla librerfa la aceptacién que habia teni- do, se me dijo que sélo tres ejempla- res habfan vendido: el de mi asisten- te de entonces en la Catedra y Titu- lar de ahora, Dra. Pérez, el del Dr. Solis Barker, Director del Bufete y el mio. En esa obra se nos habla del actuar con eficacia, del secreto profe- sional, el cobro adecuado, la compe- Ey