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Loreto Carmona
Instituto de Salud Musculoesquelética
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All content following this page was uploaded by Loreto Carmona on 26 March 2019.
La artritis reumatoide (AR) es una enfermedad cró- encuestas nacionales de salud, que basan la preva-
nica de distribución universal, salvo puntuales ex- lencia de la AR en diagnósticos declarados directa-
cepciones. No obstante, y a pesar de haberse estu- mente por los sujetos participantes. Se ha compro-
diado exhaustivamente, no se ha podido demostrar bado que la prevalencia de AR por referencia
que los factores que determinan su aparición sean propia de los individuos encuestados llega hasta el
los mismos en todos los grupos estudiados y exis- 1,6%, mientras que sólo el 25% de los que mani-
te, además, evidencia de que la expresión clínica fiestan tener la enfermedad realmente la tienen, lo
de la enfermedad difiere entre poblaciones. que implica aproximadamente un 0,5% de preva-
Los problemas del estudio epidemiológico de la AR lencia real3.
son básicamente tres: la definición de caso de AR, el Otro aspecto controvertido en los estudios de pre-
método utilizado para la identificación de casos y la valencia de la AR es el método de investigación de
inferencia de los resultados. casos, que puede influir en la tasa de respuesta y,
La definición de caso de AR implica la presencia de por ende, en el resultado y la generalización de
una serie de criterios clínicos1. Estos criterios pue- conclusiones del estudio. Generalmente, los estu-
den no estar presentes en un paciente diagnostica- dios de prevalencia de AR se realizan en 2 fases.
do de AR que se encuentre en remisión o con baja En la primera se lleva a cabo una encuesta, bien
actividad de su enfermedad. Esto es, sensu estricto, por correo, por teléfono o personal, con la que cri-
un paciente con AR inactiva podría no ser incluido bar casos de enfermedad probable. A continuación,
como caso en un estudio de prevalencia puntual y casi siempre tras un lapso de tiempo, los sujetos
de la enfermedad. Un estudio apropiado de preva- seleccionados en esta fase son examinados por un
lencia de la AR debe incluir también a pacientes médico, que clasifica a los sujetos sospechosos de
con enfermedad inactiva y que, sin embargo, cau- enfermedad en casos de AR o no casos. El método
sen un gasto sociosanitario al precisar subsidios, re- elegido para la encuesta, la extensión del entrena-
visiones o tratamientos crónicos. Por ello, la preva- miento de los encuestadores o el tiempo transcurri-
lencia acumulada es el tipo de prevalencia más do hasta la exploración pueden ser fuente de pér-
adecuado para evaluar la distribución real de la dida de casos.
AR2. Los estudios iniciales de AR se basaban en cri- Por último, muchos estudios de prevalencia de la
terios distintos de los actuales, algunos de los cua- AR son locales, pero se generalizan a un país ente-
les incluían casos de artritis no definidas y de artri- ro, o incluso a la población mundial, sin ningún
tis con deformación pero sin actividad. Es muy tipo de limitación. En general, tampoco se efectúa
posible que ésta sea la causa, o al menos parte, de una estimación de la prevalencia, esto es, calcular
la reducida frecuencia de la AR que se está comu- un intervalo de confianza, sino que se asume que
nicando en estudios más modernos, que siguen es- la frecuencia relativa de casos en su muestra es la
trictamente los criterios del American College of real. Es más, en muchos estudios utilizan muestre-
Rheumatology (ACR), frente a los clásicos. Una os que dejan fuera a población de riesgo y, aún
complicación adicional es la del diagnóstico auto- así, no tienen en cuenta dicho sesgo para la esti-
rreferido. Existen estudios, sobre todo las amplias mación.
1,8
0,9 0,5
0,7
0,6
0,3
1,0 0,4
0,4 0,8
0,3
2,7
Figura 1. Prevalencia mundial de la artritis reumatoide. Los números expresan casos por 100 habitantes y han sido obtenidos a partir de la me-
dia de estudios comunicados en las regiones geográficas sobre las que aparecen.
Symmons et al, 199421 Norfolk, Reino Unido 0,36 0,14 < 0,5 Sector predominantemente rural (> 400.000)
Uhlig et al, 199822 Oslo, Noruega 0,37 0,14 0,25 Media de casos nuevos entre 1988 y 1993
Dugowson et al, 199123 Seattle, EE.UU. 0,28 – – Sociedad médica (HMO)
Drosos et al, 199714 Ioannina, Grecia – – 0,2-0,4 Media entre 1987-1995
Guillemin et al, 199424 Francia – – 0,09
de AR de 1987 del ACR, adaptados a encuestas epi- se identificaban por autorreferencia13. Por el contra-
demiológicas por MacGregor2. Esta adaptación per- rio, en los estudios mediterráneos el método em-
mite identificar casos activos e inactivos de la en- pleado tiende a subestimar la prevalencia. En un
fermedad y, por tanto, ofrece una prevalencia vital estudio griego de 1991, por ejemplo, la prevalencia
acumulada. La estimación de la prevalencia y de de la AR (0,2% en varones y 0,5% en mujeres) se
sus intervalos de confianza se realizaron con el estimó a partir de las historias clínicas de los regis-
programa CSAMPLE (Epi Info 6.04b. Centers for Di- tros de salud en Ioannina, extrapolando los datos
sease Control & Prevention [CDC)] EE.UU., 1997), al censo nacional14; por otra parte, en un estudio
que corrige la variancia teniendo en cuenta las pro- nacional francés, la prevalencia estimada en 1998
babilidades en el muestreo. Todas las comparacio- (0,3%) se obtuvo a partir de una encuesta entre
nes entre grupos fueron, así mismo, corregidas por grupos de apoyo a pacientes y clínicas de reumato-
diseño y mediante la utilización de los tests apro- logía15. Es posible, como se demuestra en EPISER,
piados al tipo de variables comparadas. El tamaño que existan casos de AR sin diagnosticar en la co-
muestral estaba calculado para obtener una preva- munidad, por lo que el único enfoque fiable es
lencia del 0,5-1%, con un intervalo de confianza uno que abarque a toda la población.
del 95% y un error de ± 5%, contando con una tasa Existe la posibilidad, aún no confirmada, de que la
de respuesta del 70%. AR pueda ser más frecuente en ámbitos urbanos
De una población elegible de 972.545 sujetos, se que en rurales. Estudios con metodología superpo-
extrajo una muestra de 2.998. Completaron la en- nible a la del EPISER pero locales y en el ámbito
trevista 2.192 sujetos (tasa de respuesta del 73%), rural, tanto en España como en otros países9,10,16-18,
sin que se encontraran diferencias importantes demuestran de forma consistente una prevalencia
frente a los que no accedieron a ser entrevistados. menor, en torno al 0,3%, y en el estudio EPISER se
Un análisis de la representatividad frente a datos encontraron diferencias entre ambos medios
del Instituto Nacional de Estadística demostró el (0,61% en las ciudades y 0,16% en las zonas rura-
buen comportamiento del muestreo aleatorio. En les; p > 0,05). Entre las hipótesis que se barajan
total, 186 personas (8,5%) tenían un cribado de AR para explicar esta diferencia se encuentra una ma-
positivo, de los cuales 9 mujeres y 2 varones fue- yor mortalidad de casos por infección en el ámbito
ron clasificados como casos. La prevalencia estima- rural, algún efecto protector –en África se apunta a
da en la población mayor de 20 años fue de 0,5% infecciones parasitarias– o el traslado de domicilio
(IC del 95%; 0,2-0,8). Por sexos, la prevalencia esti- de los casos de AR a ciudades, donde pueden ser
mada fue del 0,8% (IC del 95%, 0,4-1,1) en mujeres vigiladas de manera más estrecha. Curiosamente,
y de 0,2% (< 0,5) en varones. Extrapolando los da- los estudios que comparan la prevalencia de AR
tos a la población del año 2000, existirían unos en un mismo grupo cultural en distinto ambiente
150.000-200.000 mil casos de AR en nuestro país. (en su país de origen y en un país de acogida) re-
Es importante resaltar que tres de los casos de AR velan cifras más elevadas en los países de acogida,
identificados en el EPISER no habían sido previa- donde los emigrantes trabajan sobre todo en ciu-
mente diagnosticados, dos de los cuales obtuvie- dades19. Las hipótesis establecidas para explicar la
ron, no obstante, las puntuaciones más altas de la diferencia están relacionadas con la distinta hete-
muestra en el Health Assessment Questionnaire. rogeneidad genética y el clima, aunque para el
El resultado del EPISER es inferior al 1% estimado resto de enfermedades reumáticas la prevalencia
en los EE.UU., pero más alto que el comunicado es muy similar. Por otro lado, también se han lle-
para otros países del área mediterránea. En ambos vado a cabo estudios de distintas culturas en el
casos es posible que la diferencia se deba a la dis- mismo ambiente, como un estudio de la prevalen-
tinta aproximación metodológica. En el caso norte- cia de AR entre negros caribeños y blancos en el
americano, la prevalencia se obtuvo hallando la área de Manchester20. Dicho estudio reveló una
media ponderada entre varios estudios, que incluía prevalencia 0,36 veces mayor entre blancos (0,8)
uno de gran tamaño muestral en el que los casos que entre negros (0,29).