Este trabajo tiene como objetivo mostrar al lector, las condiciones de la salud mental en el

Ecuador, y realizar un análisis crítico del accionar de las autoridades, frente a una notoria
realidad y la precaria atención al área de la salud mental, pese a que existe la ley constitucional
que declara como fundamental la atención primaria de la salud. Existe el presupuesto para la
antes mencionada área, pero está encaminada a la acción ambulatoria y no a la prevención y
promoción de una salud mental, la política por otro lado no incentiva un accionar frente a la
problemática existente como lo es el aumento de enfermedades y desequilibrios mentales en
la población ecuatoriana. La poca promoción que se realiza, es llevada a cabo por instituciones
académicas de tercer nivel ya sean públicas o privadas, y que estas estén involucradas
directamente con carreras correspondientes a la salud en general. Los profesionales de la
salud en el Ecuador carecen de una formación y capacitación encaminada y relacionada con la
salud mental, la formación profesional es insuficiente en muchas de las áreas académicas,
siendo estas comparadas con países primermundistas, muchos más notorio es el descuido del
área de la salud rente a la problemática del estado mental de los ecuatorianos, En Latino-
América se presentaron programas que han tenido resultados positivos pero que sin embargo
no se los realizan en Ecuador ya sea por el no direccionamiento de recursos a esta área o el
desconocimiento de la aplicación del mismo, la prevención realizada en temas de la salud
mental es prácticamente insuficiente.