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Meditaciones para el año de la caridad 2021 73

Octubre
Jesucristo:
Misionero de la Caridad
“Llego Jesús, se puso en medio y les dijo: ¡la paz
este con ustedes! Como el Padre me envió a mí,
así los envió yo a ustedes. Soplo sobre ellos y les
dijo: reciban el Espíritu Santo”
Juan 20,19.21-22

Objetivo
• Reconocer que Jesús es el Enviado del Padre y cada
uno de nosotros enviados por El, anunciadores del
Amor, para alcanzar el Reino de Dios.

Desarrollo del Tema


• Texto bíblico iluminador: Juan 20,19-23

Preguntas para refl exionar


• ¿Qué día se les apareció Jesús?
• Resalte las palabras dichas por Jesús
• ¿Qué resalto para mi vida?
74 Diócesis de Neiva

Estamos dichosos de seguir evangelizando, respondiendo al llamado


de Jesús que nos indica “vayan al mundo entero y proclamen el Evangelio”
(Mt 28,19ss). Esta tarea misionera nos compete a todos como bautizados
y enviados.

Jesús es el enviado del Padre, el Misionero del Amor, y nosotros


enviados por Él para ir al mundo entero y romper fronteras, fronteras
de egoísmos, divisiones, envidias, rencores, guerras, pesimismo,
facilismos y demás. El Evangelio siempre será una novedad y nos
trae esperanza, esperanza que se convierte en amor, amor que es
la característica fundamental del cristiano y más aún del misionero
que refleja con su testimonio de vida a Dios que es Amor. Algunas
características que debemos tener en cuenta como misioneros, todas
presentes en Jesús, el misionero del Amor:

Lleno de amor: Jesús nos amó hasta el extremo, dio su vida por cada
uno de nosotros, para salvarnos, de ahí que cada misionero debe estar
configurado con Jesús, estar lleno de amor para comunicarlo a quienes
lo rodean. Amor que lleve a la entrega, que lleve a abrazar la cruz para
alcanzar la resurrección.

De mucha oración: Jesús para tomar cualquier decisión oraba, la


oración es para Jesús el centro de su vida, la total comunicación con
Dios Padre, así, cada misionero debe estar en constante comunicación
con Dios en la oración para que cada obra que se realice no sea en
nombre propio de cada misionero, sino en nombre de Dios. Jesús nos
dice que debemos orar siempre y sin desfallecer.

De testimonio: Jesús por sus obras refleja al Padre tanto que llega a
decir: “Yo y el Padre somos uno”, el misionero por tanto debe reflejar
a Jesús en cada una de sus obras. Qué bueno que por nuestras obras
podamos atraer a más personas para que sean discípulos misioneros.
Meditaciones para el año de la caridad 2021 75

Acogedor: Jesús nunca rechazo a nadie, siempre estaba en actitud de


acoger a los más necesitados, a los menos favorecidos de la sociedad,
siempre estuvo solicito a buscar la oveja perdida, ayudar a los enfermos,
acoger a los pecadores, en fin, siempre a favor de aquellos a quienes
el Padre le encomendó. Los misioneros a ejemplo de Jesús debemos
salir a los caminos, acoger a los necesitados sin discriminar a nadie,
acogiendo a todos ya que somos hermanos e hijos de Dios.

Servicial: Jesús tuvo muy en cuenta que su misión era, además de


anunciar el Reino de Dios, también amar y servir. El se abajó a sus
discípulos y les lavo los pies, les dijo que así como él lo hacia lo
hicieran con los demás. El misionero debe abajarse a la realidad de
cada persona y servir sin mirar a quien como decimos popularmente.
Ver en el hermano al mismo Jesús que siempre nos necesita.

En conclusión, Jesús vino a nuestro mundo como misionero del


Padre, enviado por Él, con el encargo de traernos un mensaje, una
buena noticia, la buena noticia del amor que Dios siente por cada uno
de nosotros; con la misión de conseguir para nosotros la salvación.
Como buen misionero, Jesús se insertó en nuestro mundo y en
nuestra historia; se hizo hombre como nosotros, de nuestra carne y
sangre, y vivió nuestra misma vida: Nació como uno de nosotros,
creció como nosotros, maduró como nosotros, padeció nuestras
angustias y dolores, sufrió nuestras dificultades, compartió nuestros
fracasos, gozó con nuestras alegrías, participó de nuestros triunfos, y
experimentó nuestras esperanzas.

Nos comunicó con su vida y su palabra el mensaje que Dios nos quería
dar, nos dijo de mil formas: que Dios nos ama y que quiere lo mejor
para nosotros, que se compadece de nuestra miseria, que perdona
nuestras culpas y pecados, y que desea vivamente que un día, al final
de nuestra vida en la tierra, compartamos su felicidad.
76 Diócesis de Neiva

Jesús cumplió su tarea misionera desde el primer instante de su vida


en el mundo, hasta su último suspiro; no se dejó llevar por el miedo,
ni se derrumbó ante los fracasos, no se dejó vencer por las dudas, no
vaciló en los momentos definitivos; miró siempre hacia adelante, a la
meta propuesta por el Padre, a la culminación de su tarea misionera.

Y llevó su misión “hasta el extremo”.

Hizo todo lo que ella le exigía y en el momento en que se lo exigía.

Se entregó a ella plenamente… y no temió dar su vida en su


cumplimiento. Jesús, misionero del Padre, confirmó sus obras y sus
palabras, con el acto de amor más grande que un hombre puede
realizar: vaciarse totalmente de sí mismo, renunciar a todo, olvidar
sus propios intereses, sus deseos más legítimos, y entregarse, darse
en sacrificio por los otros. Jesús, misionero del Padre, entregó su vida,
sus esperanzas, su sangre, por nosotros: para mostrarnos su amor,
para conseguirnos el perdón, para salvarnos de la muerte definitiva,
para hacer posible para nosotros la resurrección y la vida eterna.

Jesús, misionero del Padre, nos invita hoy, a ser también nosotros sus
misioneros en el mundo, en las circunstancias que vivimos, en nuestra
historia, y llevar a todos el mensaje de su amor y de su salvación.

Testimonio

En el tiempo de las cruzadas, San Francisco sufrió mucho al ver el


egoísmo y las costumbres disolutas de los soldados de la cruz. Deseando
la salvación de los sarracenos, decidió pasar al campo del enemigo, por
más que los cruzados le dijeron que la cabeza de los cristianos estaba
puesta a precio. Habiendo conseguido la autorización del delegado
pontificio, Francisco y el hermano Iluminado se aproximaron al
campo enemigo, gritando:
Meditaciones para el año de la caridad 2021 77

• ¡Sultán, Sultán!
Cuando los condujeron a la presencia de Malek-al-Kamil, Francisco
declaró osadamente:

• No son los hombres quienes me han enviado, sino Dios


todopoderoso. Vengo a mostrarles, a ti y a tu pueblo, el camino de
la salvación; vengo a anunciarles las verdades del Evangelio.
El Sultán quedó impresionado y rogó a Francisco que permaneciese
con él. El santo replicó:

• Si tú y tu pueblo están dispuestos a oír la palabra de Dios, con


gusto me quedaré con ustedes. Y si todavía vacilan entre Cristo y
Mahoma, manda encender una hoguera; yo entraré en ella con sus
sacerdotes y así verán cuál es la verdadera fe.
El Sultán contestó que probablemente ninguno de los sacerdotes
querría meterse en la hoguera y que no podía someterlos a esa prueba
para no soliviantar al pueblo. Y llegó a decir:

• Si todos los cristianos fueran como él, entonces valdría la pena ser
cristiano.

Liturgia

Vamos a organizar un lugar especial con velas del color de


los cinco continentes (verde, roja, blanca, azul y amarillo)
donde vamos a orar por las misiones y los misioneros del
mundo entero.
78 Diócesis de Neiva

Misión

Reconociendo nuestra tarea de bautizados y enviados


vamos a visitar cinco familias para compartirles lo
aprendido durante estos días sobre la misión, resaltando
el compromiso de ser misioneros enviados por Jesús, el
Misionero del Amor.

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