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Las IES deben ser constituidas como entidades sin ánimo de lucro (Esal) ,
tributariamente pertenecen al régimen ordinario del impuesto de renta, por lo que
gravan sus ingresos y/o utilidades a la tarifa del 34%, sin embargo pueden optar
por ser contribuyentes del impuesto sobre la renta bajo el Régimen Tributario
Especial (RTE), gravando sus ingresos y/o utilidades a la tarifa de 20%, siempre
que cumplan los siguientes requisitos: estar constituidas legalmente, desarrollar
una actividad meritoria y que sus aportes no sean reembolsados o sus excedentes
distribuidos bajo ninguna modalidad.
Las entidades del RTE tendrán el beneficio de no tributar sobre los excedentes
que se reinviertan en el desarrollo de la actividad meritoria, que, para el caso de
las IES, es la educación superior.
Las donaciones antes eran tomadas como deducción para el donante, ahora son
tratadas como descuento tributario. Se mantuvo el beneficio de deducción en las
donaciones que fomenten el uso y la apropiación de la Ciencia, Tecnología e
Innovación, así como las donaciones que beneficien a estudiantes de los estratos
1, 2 y 3 a través de becas. En los casos indicados se aplica el doble beneficio, es
decir descuento y deducción, lo que incrementa el estímulo para el donante.
Otro tema relevante, es la retención en la fuente por concepto de pagos de las IES
al exterior, por cuanto se pasó de un régimen con dos tarifas de retención (10%
consultorías y 33% regalías), a un régimen con tarifa unificada de retención de
15%.
Las IES deben prepararse para un nuevo desafío, que implica el conocimiento y la
aplicación de la norma, situación que exige un compromiso institucional y personal
de cada uno de los miembros, de manera que se puedan cumplir con los
requisitos establecidos para permanecer dentro del Régimen Tributario Especial.