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FE MADURA I
(Hoja exclusiva para líder)
PREGUNTAS PARA COMPARTIR EN EL EQUIPO
Recibís a Jesucristo y sos salvo por fe, te vas al cielo por fe, creés que la Biblia es
la Palabra de Dios por fe, fuiste justificado por fe, Dios te perdonó los pecados por
fe, creés en tu victoria por fe, crees que Jesús resucitó por fe, creés que el Señor
viene a buscar a su iglesia por fe, creés que viviremos eternamente con Él por fe.
Todo es por fe. El apóstol Pablo dice que lo que no es de fe, es pecado.
1. ¿Qué es la fe?
• Fe no es experiencia.
• Fe no es deseo.
• No tener sueños.
• Egoísmo.
• Incredulidad.
3. El don de fe
Los dones son capacidades sobrenaturales que Dios da para liberar el potencial y
alcanzar el éxito. Son las herramientas y recursos que de manera sobrenatural
vienen a nuestra vida a través de Espíritu Santo, para que las usemos y
alcancemos bendición.
El apóstol Pablo dice que el espíritu de fe es el siguiente: “creí, por lo cual hablé”.
• Debo hacer lo que Dios quiere que haga, no lo que la gente quiere que haga
La fe no nos sirve para tener cosas. Dice la Biblia que sin fe es imposible agradar a
Dios. Yo uso mi fe para agradar a Dios y Él me da todo que necesito.
Lo mismo que Dios usa para darme fe, lo usa el diablo para
deprimirme.
Lo mismo que te motiva, te preocupa y deprime; lo que te atrae es lo que te aleja.
Eso ocurre en las parejas, lo mismo que les atrajo al principio con el tiempo es
causa de división. Dios puso un sueño para motivarte y hoy te dice que Él está en
control de tu vida y que lo lograrás.
Por eso cuando tomás tu momento de fe, cuando lográs algo glorioso, tenés que
tener cuidado a quien oís el día después, ante quien reaccionás.
• ¿Cómo mantengo mi fe pura, fresca y fuerte a través de los años sin volverme
legalista?
Jesús le dijo a Pedro y a sus amigos: “Síganme”. Los discípulos dejaron todo y al
instante le siguieron.
Cuando un obstáculo no nos permite alcanzar una meta nos sentimos frustrados.
Frente a ellos, podemos experimentar dos emociones diferentes: enojo o tristeza.
Mientras sigas llorando por lo que te hicieron, por lo que te dijeron, por como te tra-
taron nunca tendrás fe indestructible. Mientras sigan lastimando tu corazón, ofen-
diendo, humillando, tocando la fibra íntima de tu ser no nacerá la fe
inquebrantable.
Cuando nadie te lastime, podrás juntarte con tus compañeros de ruta y entre
ambos sumarán la fe que hará que hasta un paralítico se levante.
Cuando nos unimos y potenciamos en fe, ya no hay techo ni multitud que frene el
poder de Jesucristo.
Somos maravillosos porque Dios es grande y juntos podemos cargar con el que no
puede caminar para que sea uno de nosotros.
• Disfrutar la vida: “El justo por la fe disfrutará la vida”. Para disfrutar de todo
necesitás fe.
• Vivir felizmente: “Por la fe el justo vivirá feliz”. Una persona que no tiene fe es
desdichada.
• Florecer: “El justo por la fe florece”. La gente que está marchita no tiene fe.
• Estar animado: “El justo por la fe estará animado”. Vivir con miedo, con duda,
con incredulidad, desmotivado se debe a la falta de fe.
• Recuperar la salud: De diecinueve milagros registrados en los evangelios del
ministerio de Jesús, catorce fueron por fe. “El justo por la fe recupera su salud”. 87
• Vivir ininterrumpidamente: Para tener una vida larga, necesitás fe.
El enojo de fe
Jesús estaba enfurecido con la enfermedad, por eso sanaba a los enfermos.
Todo aquello que detestás, que te enoja es el llamado que Dios te hace para
destruir, sanar, bendecir y edificar.
• ¿Te enoja el legalismo? Liberá a las personas que están presas de él.
• ¿Te enoja la enfermedad? Orá por los enfermos, ungilos con aceite, batallá en su
contra, activá el don de sanidades que está en vos.
• ¿Te enoja la droga? Coordiná grupos de auto-ayuda para liberar a los adictos.
• ¿Te enoja que las iglesias se dividan? Caminá en la unidad más sobrenatural
que has vivido hasta ahora.
Usá tu enojo para cambiar las circunstancias. El Reino de Dios lo arrebatan los va-
lientes, es decir, los enojados. Enojate contra todo lo que Satanás hizo en tu casa.
• La fe habla victoria
Dios nos pondrá en primer lugar. Serás el primero en tu profesión, vas a ser el
mejor en todo lo que hagas.
Vas a llegar primero, no importa cuántos caballos tengan los demás porque la
Palabra te mete en el futuro y te hace vivir el futuro antes que él venga.
• La fe me hace sembrar
¿Tenés poco dinero? Sembrale a alguien. Todo lo que signifique escasez, será la
semilla más valiosa que tendrás para dar y así demostrarle a Dios que las cosas
no son tu fuente, tu Creador es tu única fuente.
8. Fe aplastante
La oración más poderosa que podemos hacer por alguien es que no le falte la fe.
Jesús no dijo: “he orado por ti para que no te falte dinero, que no te falte salud, que
no te falten sueños”. Dijo: “he orado por ti para que no te falte la fe”, porque si
tenés fe vas a recuperar todo lo que perdiste.
En este mismo instante orá sobre tu vida, sobre la de tus hermanos para que la fe
no te falte nunca y lo que perdiste vuelva otra vez a tus manos.
Nosotros nos reunimos para recibir una fe aplastante; para recuperar todo lo que el
enemigo nos ha quitado.
Semilla de mostaza era una expresión hebrea que quería decir algo pequeño, algo
insignificante. 89
Aquí Jesús está diciendo: “aunque tengas poca fe la montaña se va a mover igual”;
frente al dolor siempre uno tiene poca fe. Cuando frente a uno hay una montaña
grande, por ejemplo: un diagnóstico negativo, nuestra fe no será “mucha en una
primera instancia” sino poca, pero el Señor te dice: “no importa que tengas poca fe,
no te sientas mal porque aunque tu fe sea escasa Yo voy a obrar a tu favor”.
Dios va a completar esa poca fe que tenés para que puedas ver tu milagro.
El primer zarandeo que vamos a tener: los leones. Ataques esperados, eso
simbolizan los leones. ¿Querés prosperar? Te van a atacar leones. ¿Querés
formar una familia bendecida? Te van a atacar leones. Cuando aparece un león
significa que serás atacado; esos son ataques esperados. Si tenés sueños
grandes tenés que esperar leones. Pero dice Deuteronomio 28: “te bendeciré en el
campo, te bendeciré en el hogar, te bendeciré en el camino, te bendeciré en el
trabajo, te bendeciré acá y te bendeciré allá”, no importa el lugar donde estés y no
importa dónde aparezcan los leones, El Señor te bendecirá siempre. Habrá leones
a nuestro alrededor pero también estará la bendición con nosotros en todo lugar.
Lo tercero son los ataques exagerados. Todos sufrimos alguno de estos tres
ataques: el ataque esperado, el ataque inesperado o el ataque exagerado.
Dice la Biblia que también vamos a aplastar a las fieras o dragones. Muchas
veces los ataques están en nuestra mente: el 48% de los miedos que tenemos no
van a ocurrir nunca; 30% de los miedos que nos asaltan tienen que ver con el
pasado; 12% de nuestros miedos tienen que ver con otros; y sólo el 10% son
miedos reales en nuestro interior… ¡ese diez por ciento lo vamos a aplastar en el
nombre del Señor!
Nunca olvides de dónde te sacó Dios, de dónde volviste: del dolor, de la deuda, de
la enfermedad, de la locura, del legalismo. El pasado quedará atrás, pero Dios no
te va a hacer olvidar el zarandeo vivido para que te mantengas humilde, en victoria
y puedas decir: “Gracias Señor porque si me trajiste hasta acá es para fortalecer
mi vida y todo mi alrededor”.