Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Así pues, quizá sí sea incorrecto culpar a un solo hombre de los problemas de un “país”,
pero también es incorrecto ignorar el hecho de que el señalado culpable fue aquel que
estaba al frente de dicho “país” para el que debió haber trabajado con el propósito de
ayudarlo. Por ello, aunque no haya nada que asegure al cien por ciento que Santa Anna fue
un traidor por pactar con el contrincante en una guerra, o por ayudar en el traslado de un
invasor extranjero a un territorio recién independizado, etc., su gobierno es cuestionable
porque él fue un hombre tirano, arrogante, que desfalcó recursos a placer y vendió parte de
la tierra (La mesilla) cuyo pago jamás fue visto para beneficio del pueblo.