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Dialnet FantasiasYPensamientosSexuales 4895944
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RESUMEN
Las fantasías sexuales generalmente han sido descritas como pensamientos de contenido sexual que se experimentan
de modo agradable. Sin embargo, el término “pensamiento sexual”, resulta más amplio que el de fantasía ya que
permite conocer el modo o afecto con el que se experimentan, al distinguir entre pensamientos sexuales positivos y
negativos. En este artículo, se revisan las líneas de investigación centradas en las fantasías y los pensamientos sexuales
–aunque sobre este constructo la investigación ha sido más escasa-. En concreto: 1) la evaluación de su frecuencia y
contenido; 2) factores asociados a su producción; 3) las similitudes y diferencias entre hombres y mujeres; 4) el papel
que juegan sobre el funcionamiento sexual, al relacionarse con aspectos como el deseo, la excitación o la satisfacción
sexual; 5) las fantasías y los pensamientos sexuales en quienes perpetran conductas sexuales agresivas; y 6) en quienes
han sufrido experiencias de abuso. Finalmente, los autores describirán las limitaciones de la investigación previa, para
establecer así las necesidades que deben considerarse para futuras líneas de investigación.
ABSTRACT
Sexual fantasies have been generally described as sexual thoughts with erotic content which are experienced as
pleasant. However, the term “sexual cognitions” is a broader term than sexual fantasies, which distinguishes between
positive and negative sexual cognitions. In this work, we review the different lines derived from research about both
sexual fantasies and sexual cognitions –although research about the latter is scarce-. We address the following aspects:
1) the assessment of their frequency and content, 2) the factors that are associated with their production, 3) the
similarities and differences between men and women, 4) the role they play on sexual functioning, through their
relationship with desire, excitation and sexual satisfaction, 5) their presence in individuals who have perpetrated sexual
aggression and 6) in individuals who have been victims of sexual abuse. Finally, we will describe the limitations of
previous research and we will propose some aspects that should be of interest for further research.
1. Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento (CIMCYC) de la Universidad de Granada, España. E-mail: nmoyano@ugr.es
2. Centro de Investigación Mente, Cerebro y Comportamiento (CIMCYC) de la Universidad de Granada, España. E-mail: jcsierra@ugr.es
* Dirección: Campus Universitario de Cartuja, s/n. 18011. Granada, España.
| REVISTA PUERTORRIQUEÑA DE PSICOLOGÍA | V. 25 | No. 2 | PP. 376 – 393 | JULIO - DICIEMBRE | 2014 | ISSN 1946 – 2016 |
Fantasías y pensamientos sexuales: Revisión conceptual y relación con la salud sexual
La mayoría de personas admite que incluye ser escasos los trabajos que relacionan las
fantasías en su actividad sexual, durante la fantasías sexuales con la agresión sexual y
masturbación o cuando sueñan despiertos las experiencias de abuso. Una nueva
(Zamboni & Crawford, 2002; Zimmer, búsqueda en Scopus introduciendo los
Borchardt, & Fischle, 1983). Es por ello que términos “sex* fantas*” and “sexual abuse”
la Organización Panamericana de la Salud y proporcionó 61 documentos. En cuanto a
la Organización Mundial de la Salud (OPS- estudios que relacionan fantasías sexuales y
OMS, 2002) reconocen que las fantasías son conducta sexual agresiva, introduciendo los
una de las diversas manifestaciones de la términos “sex* fantas*” and “aggression” se
sexualidad humana. De este modo, las obtuvieron 34; empleando los términos “sex*
fantasías sexuales resultan de especial fantas*” and “offender” se obtienen 76
importancia para la promoción de la salud documentos. Para ampliar la búsqueda con
sexual, en el sentido propuesto por Lottes términos en castellano se hizo uso de la
(2000) quien define la salud sexual, como la base Redalyc, en la que se introdujeron
capacidad de una persona para disfrutar y como términos más generales las palabras
expresar su sexualidad. Esta capacidad “fantasía sexual” ó “pensamiento sexual”
incide en aspectos como el sexo seguro, siendo 156 los documentos encontrados.
sexo agradable e informado, sexo basado en
la autoestima, perspectiva positiva de la Por tanto, dada la escasez de estudios
sexualidad humana y respeto mutuo en las que examinen el papel de las fantasías
relaciones sexuales (Lottes, 2000). sexuales sobre la salud sexual, no es
Asimismo, su consideración para el extraño que existan muchos aspectos sin
diagnóstico de disfuncionalidad en el DSM-5, clarificar aún. En concreto, y de manera
como se describirá a continuación, reciente, Brotto (2010) plantea ciertas dudas
convierten a las fantasías en un indicador de sobre el papel que juegan en la sexualidad
salud. Llama la atención que, pese a la de hombres y mujeres, al sugerir que “los
importancia de las fantasías sexuales en la pensamientos sexuales pueden ser más
salud sexual, sea tan escasa la relevantes para el deseo sexual del hombre
investigación sobre las mismas, que de la mujer” (p. 227). Pese a todo, “la
especialmente en la relación que éstas presencia de pensamientos
mantienen con aspectos del funcionamiento sexuales/eróticos o fantasías”, tal como
sexual, tal como se observa de la búsqueda aparece en el Diagnostic Statistical Manual 5
bibliográfica realizada en Scopus, base de (DSM-5) (American Psychiatric Association,
datos que incluye una amplia cobertura de APA, 2013), sigue considerándose un
revistas (Granda-Orive, Alonso-Arroyo, indicador de salud sexual, de tal modo que la
García-Rio, Reina, Jiménez-Ruiz, & “ausencia/disminución de pensamientos
Aleixandre-Benavent, 2013). Si bien, para la sexuales/eróticos o fantasías” es uno de los
búsqueda se complementó con el uso de criterios diagnósticos del deseo sexual
Redalyc. En concreto, al utilizar Scopus, la hipoactivo en el hombre y del trastorno del
búsqueda se limitó al título, resumen y interés/excitación sexual en la mujer.
palabras clave, sin ninguna restricción sobre
el período de publicación. Al introducir como Otra de las dificultades que caracterizan
términos “sex* fantas*” and “sex* funct*” se el estudio de las fantasías sexuales es la
obtienen 50 documentos. Al especificar en la ausencia de una definición consensuada,
búsqueda, el término “sex* fantas*” con cada siendo diferentes las que se ofrecen en cada
una de las dimensiones de la respuesta estudio. Este aspecto dificulta por tanto la
sexual (“desire”, “arousal”, “orgasm” o comparación de resultados entre diferentes
“satisfaction”) se obtienen 98, 97, 45 y 59 investigaciones. De modo general, la idea
documentos, respectivamente. En este que subyace a la mayoría de definiciones es
ámbito de la salud sexual, también parecen que constituyen algo placentero y voluntario.
Son escasos los estudios que han Las personas que han sufrido algún tipo de
examinado la relación entre los subtipos abuso sexual informan, por lo general, de
específicos de las fantasías sexuales según una alta frecuencia de pensamientos
su contenido y el funcionamiento sexual. Los sexuales no deseados e intrusivos (Maltz,
escasos datos que existen indican que 2012). Diversos estudios realizados en
fantasear con la pareja, en comparación a mujeres han revelado que aquellas que han
fantasear con otra persona diferente, se sido víctimas de abusos sexuales informan
asocia con mayores niveles de excitación de fantasías sexuales acerca de ser forzadas
sexual subjetiva (Carvalho, Quinta-Gomes, & o ser sumisas sexualmente. Asimismo,
Nobre, 2013). De forma más concreta, las experimentan con mayor frecuencia
fantasías sexuales íntimas fueron asociadas fantasías violentas y aberrantes, y otros
positivamente con el deseo sexual diádico, pensamientos sexuales no deseados, tales
pero no con el deseo solitario, las como recuerdos asociados con el trauma o
exploratorias con el deseo sexual solitario y reminiscencia de su abuso (Briére,
diádico, y las fantasías impersonales con el Smiljanich, & Henschel, 1994; Gold, Balzano,
deseo solitario (Santos-Iglesias, Calvillo, & & Stamey, 1991; Knight & Sims-Knight,
Sierra, 2013). Por su parte, Zubeidat et al. 2005; Shulman & Home, 2006). En varones,
(2004) informaron que las fantasías apenas existen estudios sobre la relación
sadomasoquistas se relacionaban con un entre las experiencias de victimización
menor deseo sexual en los varones, pero no sexual y las fantasías sexuales. Los estudios
en las mujeres. Por último, Trudel (2002) realizados indican un amplio repertorio de
encontró que los pensamientos extradiádicos fantasías en quienes fueron abusados,
estaban relacionados con menor satisfacción destacando las relacionadas con temática
sexual. En general, estos estudios sugieren homosexual (Bramblett & Darling, 1997).
que, para entender la asociación entre
eróticos que tienen una connotación sexuales, ya que aunque estudios previos de
agradable o positiva. Por otro lado, el Sexual fantasías coinciden en señalar que los
Cognitions Checklist (Renaud & Byers, 1999, contenidos más comunes en varones y
2011) es un instrumento que permite evaluar mujeres son diferentes y parecen coincidir
la frecuencia de los pensamientos sexuales con los roles tradicionales de género (e.g.,
positivos y negativos. Sus autores sólo mayor iniciativa y dominio sexual en el varón
informan de los valores alfa de Cronbach y roles pasivos en mujeres), se desconocía
globales para la escala de pensamientos que éstos son vividos de modo negativo para
sexuales positivos y para la de pensamientos cada sexo al realizar comparaciones por
sexuales negativos. En tercer lugar se da sexo. Por otro lado, la vertiente que en
cuenta de una serie de estudios que mayor medida pone en relación las fantasías
muestran cómo algunos factores tales como sexuales con la salud sexual, considerando
los rasgos de personalidad o variables de sus implicaciones, es la que muestra que las
tipo sociodemográfico tienen relación con las fantasías sexuales parecen asociarse con un
fantasías sexuales. Si bien, es necesario mejor funcionamiento sexual. En cuanto a
indicar que en cuanto a los pensamientos los pensamientos sexuales positivos y
sexuales, y concretamente en los que se negativos, Renaud y Byers (2001)
experimentan de modo desagradable y relacionaron su frecuencia global con
negativo, se desconocen los factores que algunos aspectos de la respuesta y el
influyen en su presencia. Otra extensa línea funcionamiento sexual como el caso de la
de investigación refleja que existen satisfacción sexual. En concreto,
diferencias en la frecuencia y contenido de experimentar de modo general más
las fantasías sexuales entre hombres y pensamientos sexuales positivos, al controlar
mujeres. En este sentido, se destaca de el efecto de los negativos, está asociado con
manera consistente una mayor frecuencia de mayor satisfacción sexual, en tanto que los
contenidos de dominación sexual en pensamientos sexuales negativos, al
varones, en comparación con las mujeres, controlar el efecto de los positivos, no están
quienes suelen informar de mayor frecuencia asociados con la satisfacción. En esta misma
de fantasías de sumisión sexual. Si bien en vertiente de salud sexual, se observan de
ambos sexos los pensamientos más modo especial las manifestaciones sexuales
comunes en distintos países son los de tipo en muestras como agresores o delincuentes
íntimo, tal como se ha demostrado en sexuales. En líneas generales, los agresores
Estados Unidos (Hicks y Leitenberg, 2001) sexuales, tienden a presentar una mayor
España (Diéguez, et al., 2002) o en países frecuencia de fantasías desviadas en
latinoamericanos (León y Puga, 1997; Moral comparación con los no agresores. Estas
de la Rubia, 2010). A través del estudio de suelen actuar como elemento facilitador de la
los pensamientos sexuales se puede conducta sexual agresiva, -aspecto
conocer el afecto que acompaña a estos especialmente analizado en varones-. A sus
pensamientos. Así, se demostró por ejemplo fantasías sexuales probablemente subyace
que estudiantes varones canadienses tenían su deseo de poder. El estudio de los
una mayor frecuencia de pensamientos de pensamientos sexuales señala que los
dominación sexual vividos de forma negativa varones que agreden sexualmente informan
y pensamientos de sumisión sexual de modo de mayor frecuencia de pensamientos de
positivo, en tanto que las mujeres dominación, vividos estos de modo
experimentaban sus pensamientos de agradable y placentero. En este sentido, al
dominación sexual de modo positivo y sus no experimentar los agresores sexuales una
pensamientos de sumisión sexual de modo mayor frecuencia de pensamientos
negativo (Renaud & Byers, 2005, 2006). En negativos, se puede considerar de modo
este sentido resulta necesario distinguir el más claro que los pensamientos agradables
afecto específico de los pensamientos podrían ser importantes en que un
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