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EL AGUA EN EL SUELO:

El agua es arrastrada a través de las porosidades del suelo, lo que humedece las capas
inferiores, siendo la capa edáfica la que retiene la mayor cantidad de agua. Se conoce la
expresión capacidad de retención de agua cuando el suelo está saturado de agua y ya no se da
el drenaje por gravedad hacia los niveles inferiores. Pero para la mayoría de suelos el drenaje
no dura más allá de dos o tres días, además la capacidad de retención se puede medir en
unidades de volumen que normalmente son centímetros o pulgadas, otro dato es que la
capacidad de retención de un suelo depende en su textura, por ejemplo un suelo arenoso que
tiene menor capacidad de retención que un suelo arcilloso.

EL CICLO DEL AGUA DE INFILTRACION:

En la primavera el grado de evaporación es bajo debido a las bajas temperaturas que se


presentan, por dos meses la cantidad de agua infiltrada permite que poros estén
prácticamente saturados de agua, por eso en esta época del año se encuentra la tierra blanda
y fangosa. Pero en mayo se da un incremento de temperatura, lo que significa una mayor
evaporación y el agua del suelo disminuye por debajo de su capacidad de retención.

A mediados de verano existe un déficit de agua en el balance y a pesar de todos los fenómenos
que ocurran estos no podrán compensar la pérdida de agua por la evapotranspiración, sin
embarga por noviembre la cantidad de agua comienza a aumentar y el ciclo de da de nuevo.

BALANCE HIDRICO DEL SUELO:

Las ganancias, las pérdidas y la retención de agua de suelo están contabilizadas dentro de
balance hídrico del suelo, existe una ecuación para hallar el balance hídrico la cual es la
siguiente:

P=E+G+R

P= precipitación
E= evaporación
G= cambios de reserva de agua
R= excedente hídrico

Existen dos tipos de evapotranspiración las cuales son la evapotranspiración real (Er) la cual
proporciona real agua devuelta a la atmosfera a partir del suelo y la cobertura vegetal. La
segunda es la evapotranspiración potencial (Ep) que es el flujo de vapor de agua que se
establece bajo unas condiciones iniciales ideales.

BALANCE HIDRICO DEL SUELO COMO UN SISTEMA ABIERTO DE FLUJO DE MATERIA:

El balance hídrico del suelo puede concebirse como un sistema abierto de flujo de materia. La
lluvia y la nieve que caen son interpretados por la cobertura foliar y los tallos, pero estas
pueden perderse o fluir hacia la superficie terrestre, parte del agua puede abandonar el
sistema por evaporación o por escorrentía. El transporte de agua mediante las raíces de las
plantas es otra forma mediante la cual se reduce el agua almacenada.

SENCILLO PRESUPUESTO DE AGUA EN EL SUELO:

Este se basa en un cálculo del presupuesto del agua, por ejemplo a principios de año existe un
gran excedente de agua dispuesto como escorrentía y en mayo las condiciones varían pasando
a un déficit hídrico, es durante este mes cuando las plantan comienzan a retirar el agua
almacenada en el suelo. En la medida en que continúa la extracción de agua, las plantas
reducen la cantidad de líquido utilizado hasta un nivel situado por debajo de sus necesidades
óptimas, la sustracción de agua continua a lo largo del verano finalizando a mediados de
septiembre.
Durante el mes de octubre, la precipitación excede de nuevo, el suelo tiene que absorber una
cantidad igual a la perdida por descarga antes, y de este modo se logra un periodo de recarga
de agua.
En diciembre el suelo alcanza su máxima capacidad de modo que conseguimos de nuevo un
excedente hídrico que se prolongara a lo largo del invierno.

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