Executive Brief

Enabling the Full Potential of Windows 10

Sponsored by: Intel
Andrew Buss Maciej Gornicki
October 2015

OPINIÓN DE IDC

Las exigencias de las empresas para lograr una mayor productividad e innovación siguen teniendo
que enfrentarse a las limitaciones de los servicios de TI en lo que respecta a la incapacidad de ofrecer
equipos informáticos portátiles y flexibles en un entorno seguro. Esto se demuestra en la
implementación de los factores de forma más modernos, como las tablets y los dispositivos 2 en 1. En
este sentido, las organizaciones han luchado por equilibrar la gestión, el acceso y la seguridad con las
cambiantes necesidades de los usuarios, especialmente con la migración hacia nuevas aplicaciones
móviles y hacia nuevos entornos de los servicios basados en la web.

Microsoft ha buscado la manera de hacer frente a estos desafíos desarrollando y lanzando al mercado
su nuevo sistema operativo (SO): Windows 10. Este sistema muestra un entorno unificado de factores
de forma de PC, tablet y móvil, y nos ofrece una experiencia perfecta en las aplicaciones sin tener que
sacrificar la seguridad al acceder a ellas, una de sus características principales. De esta manera,
Microsoft pretende hacer frente a las exigencias de las estrategias comerciales modernas, que le
conceden una mayor importancia a los móviles y a la nube, pero una simple actualización del SO solo
podrá ser un elemento más en esta compleja historia.

Como la actualización a Windows 10 es gratuita para los usuarios de los entornos de SO de Windows
más recientes (7, 8.x), los datos de la encuesta de IDC indican que muchas empresas van a
actualizar una parte de sus equipos a este nuevo sistema operativo en el próximo año. Sin embargo,
si no se tiene acceso al hardware moderno para el que Windows 10 fue diseñado, muchas de las
características principales del SO no podrán aprovecharse al máximo.

Las nuevas capacidades de Windows 10, como la autenticación biométrica, la implantación de

aplicaciones universales y una experiencia perfecta con aplicaciones, exigen la capacidad de una
nueva generación de hardware para poderse activar y usar. Por su propia naturaleza, necesitará
emplearse en varios PC de sobremesa, PC portátiles y tablets, así como tener compatibilidad en el
futuro con los smartphones, a medida que estos se vayan haciendo indispensables en los procesos
comerciales. Con la actualización a Windows 10, las organizaciones tienen una oportunidad para
replantearse y actualizar la base de hardware informático del cliente, para así poder tener
compatibilidad con las ventajas que se consiguen realizando la actualización a un nuevo entorno de
SO.

EN ESTE RESUMEN EJECUTIVO

Este Resumen Ejecutivo de IDC utiliza investigaciones y reflexiones de IDC recientes para esbozar
algunos de los desafíos que deben afrontar los sistemas informáticos del cliente y los equipos de
seguridad y cumplimiento. En particular, describe cómo muchos de estos problemas se pueden
solucionar realizando la actualización a Windows 10. A continuación, examina cómo el hardware
actual se aprovecha de estas funciones y características principales y saca como conclusión que,
para muchas organizaciones, su estrategia actual para el hardware puede no estar a la altura de las
expectativas depositadas en él.

October 2015, IDC n.º IDCEB08X

DESCRIPCIÓN DE LA SITUACIÓN

Las organizaciones se han esforzado en los últimos años en encontrar un equilibrio entre actuar con
eficiencia en todo el sector y obtener mejoras en la productividad y la producción. También se han
esforzado en encontrar un equilibrio entre la mejora del acceso a dispositivos, aplicaciones y
servicios, al mismo tiempo que mantiene entornos seguros que controlan tanto a los usuarios como a
los datos de la empresa. Son estas tensiones las que definen la situación de muchos de estos
problemas a los que se enfrentan actualmente los responsables de tomar decisiones en TI.

Equilibrio en el desafío de la seguridad

La seguridad siempre seguirá siendo fundamental para el amplio despliegue de servicios de TI pero,
en los últimos años, la presión del consumo, de lemas como la forma de aproximación, BYOD (del
inglés "bring-your-own-device", o "trae tu propio dispositivo"), y las estrategias replicadas por TI han
desafiado el equilibrio entre la seguridad y la comodidad. Por este motivo, los usuarios a menudo han
eludido las políticas de seguridad de hardware, ya sea mediante la migración a un dispositivo que
hayan elegido ellos mismos, o mediante la instalación de sus propias aplicaciones u opciones de red,
como por ejemplo, una Wi-Fi no segura.

Algunas organizaciones han cedido a la presión de los usuarios para permitir el acceso a los
dispositivos y los servicios web, mientras que otras han duplicado su protección en seguridad y
control. En ambos casos, los departamentos de TI se siguen esforzando por mantener el ritmo de la
movilización, la evolución de dispositivos y la innovación de los servicios, mientras las personas (y
cada vez más los departamentos) continúan buscando modos de mejorar su productividad mediante
las carteras de dispositivos y aplicaciones más adecuados.

Encontrar un equilibrio entre el bloqueo de dispositivos y el acceso a nuevas tecnologías sigue siendo
un desafío que las organizaciones necesitan abordar. En un estudio reciente de IDC en Europa, más
de la mitad de los encuestados declaró que las cuestiones de seguridad y los riesgos de acceso eran
el mayor desafío al que se enfrentaba su empresa en lo que respecta a la implantación de tablets. De
hecho, cuando se les trajo este asunto a colación, el 40 % dijeron que estaban estudiando las
capacidades de biometría y cifrado para hacer frente a estas cuestiones de seguridad. En realidad, la
seguridad mejorada con hardware, donde el propio dispositivo realiza la autenticación y el control de
acceso, es uno de los desafíos más importantes que las organizaciones deben superar.

Requisitos en la capacidad de gestión

Los problemas de seguridad se incrementan en muchas organizaciones, que se ven obligadas a
gestionar diversos dispositivos y aplicaciones de forma independiente. Estas estrategias de "silos" a
la implementación de dispositivos y seguridad no solo aumentan la dificultad de las tareas de gestión
a las que se enfrentan las organizaciones, sino que también influyen negativamente sobre las
ventajas de productividad que intentan lograr. Si se utilizan diferentes aplicaciones en entornos de
escritorio y otros entornos de tablets y smartphones, no solo se crea confusión en el usuario sino que
también se crean problemas de integración, seguridad y gestión por toda la empresa.

Quizás lo más significativo es el desafío de garantizar que todos los usuarios y dispositivos
individuales han de contar con software y seguridad actualizados y han de funcionar constantemente
en diversos dispositivos, sistemas operativos y versiones. Además, todo esto debe administrarse
durante todo el ciclo de vida del dispositivo, al mismo tiempo que se gestionan las actualizaciones
continuas de forma estable. La necesidad de una configuración remota, de una supervisión remota de
seguridad y de la capacidad de administrar dispositivos aunque estén apagados siempre estará
presente.

Muchos empleados están buscando nuevos dispositivos inteligentes y aplicaciones para

consumidores por su cuenta, ya que tienen la percepción de que los dispositivos que ofrece la
empresa no alcanzan el nivel deseado. Exigen capacidad de almacenamiento y autoservicio de

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aplicaciones para las aplicaciones de la empresa, pero lograrlo con toda la compleja y diversa gama
de dispositivos y sistemas operativos existente es una tarea demasiado grande para que los
departamentos de TI la puedan abarcar.

La implementación de dispositivos no provoca de forma directa mejoras

en la productividad
Mientras que algunas organizaciones han restringido el acceso a los dispositivos y a las aplicaciones,
la administración de otras ha tomado el criterio opuesto, al considerar que, por sí solo, el acceso a los
nuevos dispositivos y aplicaciones mejorará de forma directa la productividad. Como resultado, las
organizaciones están implementando ordenadores portátiles y de sobremesa, tabletas y dispositivos
smartphone (a menudo todo al mismo tiempo) y esperando que se produzcan mejoras en el
rendimiento. En Europa, los estudios de IDC concluyeron que dos tercios de las organizaciones están
planeando implantar tablets y dispositivos 2 en 1 en los próximos 24 meses, por lo que la integración
pasará del 6 % de 2014 hasta el 15 % en 2018.

Aunque cierto número de organizaciones se han dado prisa en implantar las tablets como dispositivos
adicionales, la realidad es que la integración de este tipo de dispositivos debe adecuarse a los
requisitos de productividad. Las personas (y claro, las organizaciones) necesitan dispositivos y
aplicaciones que cumplan funciones determinadas, de forma que las tareas tienen mejores resultados
en dispositivos que cuentan con los métodos de entrada, tamaños de pantalla y periféricos del sector
adecuados.

Como resultado, las organizaciones necesitan prepararse para el futuro ofreciendo un entorno
informático que mantenga su compatibilidad entre aplicaciones de ordenadores de sobremesa o
portátiles, así como con las aplicaciones de móviles o tablets. Windows 10 y el hardware diseñado
para compatibilizarlo pueden ayudar a unificar los dos entornos.

Implantación de tablets 2 en 1: oportunidades y problemas

Una solución al desafío de abordar directamente la productividad es implementar tablets 2 en 1. Estos
dispositivos ofrecen a los usuarios dispositivos que funcionan con un teclado pero que, cuando este
se quita, siguen funcionando como una pantalla táctil con formato tablet. Estos dispositivos pueden
funcionar en un entorno de "escritorio", conectándolo a periféricos de entrada, como un teclado y un
ratón, y a periféricos estándar de PC, como por ejemplo monitores de pantalla plana. Esto los
convierte en un PC íntegro que puede ejecutar todas las aplicaciones de un escritorio de Windows sin
problema. Cuando se separa del teclado, el dispositivo 2 en 1 se convierte en una interfaz táctil que
permite que se utilice una gama de aplicaciones completamente diferente. Con el lanzamiento de
aplicaciones de productividad esenciales que son compatibles con este modo, como las aplicaciones
portátiles de Office, esta capacidad es cada vez más útil y atractiva.

IDC ha pronosticado que este mercado mundial llegará a las 14,7 millones de unidades vendidas en
2015, lo que supone un crecimiento anual del 86,5 %. A continuación, se prevé un crecimiento de
40,3 millones de unidades en el año 2019, un desarrollo del mercado significativo impulsado por un
aumento de la demanda de los usuarios y por la existencia de las ventajas comerciales de los
dispositivos 2 en 1, mucho más convincentes que las de una tablet tradicional. Con 40 proveedores
de dispositivos extraíbles en la actualidad, el 41 % de los compradores estadounidenses y el 43 % de
los europeos planeaban adquirir dispositivos 2 en 1 en el próximo año, con la mayoría de estos
encuestados previendo que los dispositivos 2 en 1 sustituirían tanto a los portátiles como a las tablets
a medida que vaya creciendo la adopción de estos dispositivos por parte de la base de usuarios. En
las regiones de Asia y Pacífico, el 31 % de los encuestados indicaron que ya habían adquirido
dispositivos 2 en 1 o que tenían la intención de adquirirlos durante el próximo año.

El ágil desarrollo de los dispositivos de este mercado está fijando las expectativas de unos empleados
que quieren realizar en un entorno móvil tareas similares a las que realizan en un ordenador de
sobremesa. Más concretamente, se busca realizar estas tareas de la forma más adecuada según el

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factor de forma (tacto, voz o lápiz) y de manera compatible en todos los dispositivos. Este desafío es
mayor por la migración a estrategias que le conceden más importancia a la nube, ya que las
organizaciones en estos casos migran más sistemas y aplicaciones a entornos de servicios basados
en la web. Por lo tanto, aumentar las formas de acceder a los datos corporativos destaca la
importancia de mantener la coherencia en la experiencia del usuario, siempre desde una gestión
completa, segura y fiable.

El rendimiento del dispositivo, más importante que nunca

Las exigencias de rendimiento y capacidad del dispositivo también son cada vez más complejas. El
equilibrio entre el rendimiento y la vida útil de la batería, por ejemplo, es un factor determinante a la
hora de considerar qué dispositivo es el mejor para realizar una tarea concreta. Del mismo modo, las
organizaciones han experimentado con la biometría como una forma de garantizar tanto el acceso al
dispositivo como las aplicaciones, servicios y la autenticación de red. Sin embargo, con demasiada
frecuencia los dispositivos no consiguen resolver la complejidad de la implantación y gestión de todos
estos enfoques.

Queda claro que lo que funciona en estos momentos es probable que también se habrá sustituido en
un plazo de 12 a 24 meses. Los responsables de tomar decisiones en el departamento de TI
necesitan considerar el futuro, al mismo tiempo que hacen frente a los problemas del presente. La
mejor manera de lograr esto es establecer una base de capacidades integrada en el método de
trabajo que la organización desea tener, con la posibilidad de seguir evolucionando y actualizando
con facilidad y adaptándose a la magnitud pertinente.

¿Windows 10 puede hacer frente a estos desafíos?

Windows 10 tiene el potencial de resolver muchos de los problemas antes mencionados, gracias a
sus continuas actualizaciones para usuarios, al mismo tiempo que también mejora el rendimiento y la
capacidad de gestión, tanto de los departamentos de TI como de los empleados. A medida que los
usuarios migren hacia este nuevo entorno de SO y que Microsoft vaya retirando el soporte para
Windows 7 y 8.1 durante los próximos años y que vaya sacándolos del mercado, IDC pronostica que
Windows 10 representará el 42 % del total instalado en el año 2018. Un estudio reciente en Europa
muestra que existe mucha disposición en las organizaciones por actualizarse a Windows 10, con un
40 % que planea hacerlo en sus equipos en los próximos 12 meses.

Si bien se espera que los envíos de PC bajen en un 6,2 % en el año 2015, IDC cree que esto se debe
en parte a que estos reducirán su inventario de cara al lanzamiento de Windows 10, así como debido
al creciente interés en los dispositivos 2 en 1 e híbridos.

Solo aprovechará todas las ventajas de Windows 10 con un hardware

moderno
Aunque Windows 10 sí se podrá ejecutar en hardware existente que ya funcione en Windows 7.x o
8.x, los PC y ordenadores portátiles antiguos carecerán de las funciones modernas necesarias para
poder aprovechar al máximo las características de este nuevo entorno de SO. La falta de cámaras,
micrófonos, y funciones de pantalla táctil adecuadas en las anteriores generaciones de ordenadores
limitarán las funciones incluidas en los ordenadores portátiles y de sobremesa. Desde el punto de
vista de la gestión, la implantación de tablets con sistemas distintos a Windows supondrá la existencia
de un dispositivo y un sistema de aplicaciones independiente, por lo que se aumentará la
complejidad. Por otra parte, las funciones de seguridad y la capacidad mejorada que ofrece
potencialmente el hardware moderno y Windows 10 y que permite que los departamentos de TI
gestionen y protejan los PC, las estaciones de trabajo y los servidores de nivel de entrada, puede
perderse.

Aunque hay muchas organizaciones que quieren esperar un tiempo antes de migrar a Windows 10
debido a que han completado recientemente la migración a Windows 7 desde Windows XP, los que

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desean realizar estrategias para tablets, dispositivos 2-en-1 y más migraciones tendrán que trabajar
con una gama de dispositivos, entornos de SO y gestiones de aplicaciones cada vez más variada y
compleja. Este desafío también se complicará, entre otros factores, por la creciente necesidad de
unificar el uso de aplicaciones para ordenadores de sobremesa, tablets y móviles. En los EE. UU., por
ejemplo, se estima que la adopción de Office 365 en las PYME llegará este año al 30 %, lo que
demuestra un importante giro del mercado hacia estrategias que priorizan la nube.

En respuesta, las organizaciones necesitan considerar los beneficios adicionales que los diseños de
hardware moderno, creados específicamente para aprovechar las nuevas capacidades de Windows
10, pueden conseguir afrontar desafíos clave para el negocio y maximizar las ventajas reales de la
migración a Windows 10.

Los dispositivos mejorarán la productividad, pero solo los dispositivos

adecuados
Windows 8 ofreció a los usuarios un SO para ordenadores y tablets y otro para teléfonos, con un
código base diferente y con aplicaciones que se ejecutan de forma independiente. Windows 10
consigue una integración de estos dos entornos aun más completa, y ofrece un entorno impecable en
el uso de aplicaciones de diferentes dispositivos. En este caso, se les proporciona a los usuarios una
experiencia similar en el dispositivo pertinente, ya sea un ordenador de sobremesa o portátil, una
tablet o un smartphone.

Tal vez el mayor aumento de la productividad proviene de la capacidad de adaptación durante el uso
que ofrece esta estrategia. Si se utiliza Microsoft Continuum, las tablets 2 en 1 pueden alternarse de
modo entre el modo de escritorio con ratón y teclado si está conectada a un teclado y el modo tablet
táctil cuando no está conectada. Esta migración no solo se realiza sin problemas, sino que también
modifica el método de entrada del dispositivo, cambiándose a aplicaciones optimizadas si están
disponibles, pero permitiendo el pleno acceso a las aplicaciones de escritorio existentes. Como
resultado, Continuum ajusta la experiencia de usuario a la actividad, dispositivo o pantalla,
reconfigurando las estructuras de los menús y de las barras de tareas, así como adaptándose a los
diferentes métodos de entrada para navegar con facilidad.

La nueva generación de PC, tablets y smartphones con Windows 10 ejecutará de forma

predeterminada Continuum, lo que les permitirá conectarse a pantallas próximas mediante la
tecnología WiDi. Permitirá visualizar aplicaciones basadas en tablets o smartphones en monitores y
proyectores y ampliar con facilidad cualquier ordenador de sobremesa o portátil en la pantalla o
proyección de una presentación. Continuum no solo garantiza que la aplicación cambia de proporción
para adaptarse al tamaño de la pantalla y a la resolución, sino que también permite ejecutar una
versión amplificada de la aplicación, en la que actuará como ratón y método de entrada en la pantalla
táctil.

Del mismo modo, las funciones adicionales de tecnología inalámbrica en pantallas y conexión
inalámbrica, utilizando Intel Pro Wireless Display y Intel Wireless Docking, transforma las capacidades
del hardware moderno y, al mismo tiempo, maximiza el potencial de Windows 10, como herramienta
de mejora de la productividad. Los portátiles, las tablets y los dispositivos smartphone son incluso
más flexibles fuera de la oficina y, lo que es más importante, en entornos de oficina. Este nivel de
integración potencia todos los dispositivos de Windows 10 en diversos escenarios y situaciones de los
usuarios, lo que permite que estén mucho más interconectados y mantengan su importancia para las
plantillas modernas.

A pesar de las claras ventajas que posee, la observación más importante en este caso es que, con un
hardware desactualizado, gran parte de las capacidades y la productividad que ofrece Windows 10 se
perderán. Esta situación destaca especialmente en el caso de la implantación de los dispositivos 2 en
1, que poseen un potencial enorme para mejorar la productividad de los usuarios.

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Gestión de aplicaciones y resultados más importantes que nunca
El entorno de la aplicación en Windows 10 también permite la creación de tiendas de aplicaciones
corporativas y de listas de aplicaciones aprobadas, de nuevo dejando que la productividad de los
usuarios quede en mano de los usuarios que más lo exigían. Esto también puede relacionarse con la
Plataforma de aplicaciones universales de Microsoft, ampliando el alcance de las aplicaciones a todos
los dispositivos de Windows, independientemente de su factor de forma o de su procesador
subyacente.

Gestionar esta estrategia en toda una gama de entornos de SO, dispositivos y factores de forma es a
menudo demasiado complicado para muchas organizaciones. Una estrategia cada vez mejor
gestionada e integrada para la implantación de aplicaciones, sin embargo, supone ventajas muy
importantes para la seguridad de la empresa.

En el mercado intermedio, Windows 10 también es un paso lógico para que las PYME puedan
obtener algo más que un simple entorno de SO para ejecutar aplicaciones. Con el tiempo, se permitirá
que los directores de TI de las PYME obtengan e implanten aplicaciones de ofimática desde una
misma ubicación a diferentes dispositivos. También tiene el potencial de acelerar la transformación de
TI en las PYME desde el modelo físico con servidores y ordenadores a otro más flexible e innovador
dirigido desde una infraestructura virtual, con aplicaciones compatibles con varias plataformas y
dispositivos móviles. Las ventajas de este modelo, sin embargo, solo podrán destacar de verdad en
un entorno con el hardware adecuado, como la Tecnología de administración activa Intel. En este
sentido, las tecnologías integradas en la plataforma se pueden integrar con aplicaciones de seguridad
y administración de terceros.

Las ventajas de seguridad requieren un replanteamiento de la estrategia

de hardware
Windows 10 ofrece a las organizaciones una solución simple pero convincente que utiliza información
biométrica para iniciar sesión mediante Windows Hello. Esta tecnología permite que los usuarios
autentiquen los dispositivos mediante el reconocimiento facial, el escaneado de iris y la lectura de
huellas digitales, aprovechando al máximo todo el dispositivo y el cifrado basado en hardware.

Una vez autenticado, Windows Hello se vincula con Microsoft Passport para activar el dispositivo (PC,
tablet o smartphone) y para seguir autenticando al usuario para las diferentes aplicaciones, servicios
web y para el contenido de la empresa. De esta forma se garantiza que las contraseñas nunca se
almacenan en el dispositivo ni en el servidor y que esta información nunca se llega a transferir entre
redes diferentes. De esta forma se obtiene un nivel alto de seguridad, con la comodidad y la facilidad
de uso de la biometría simple. Como resultado, los usuarios también pueden aprovechar las ventajas
de Azure AD, el servicio multiusuario de Microsoft de gestión de identidades y directorios basado en
la nube. De esta forma, se permite el inicio de sesión con biometría para continuar realizando la
autenticación con solo un inicio de sesión para miles de aplicaciones basadas en la nube.

Para sacar el máximo partido a Windows Hello se requiere el uso de hardware especializado como las
cámaras infrarrojas de Intel Real Sense, la tecnología de la cámara en 3D o los sensores de
infrarrojos de iluminación y los escáneres de huellas digitales, por ejemplo. Una vez más, estos
avances en la tecnología de acceso requieren que las organizaciones se replanteen sus estrategias
de hardware o den más libertad a sus políticas BYOD como parte de una estrategia más amplia de
servicios de TI en la organización.

De igual modo, los aspectos en la gestión de dispositivos de Windows 10 son mucho más potentes
cuando se combinan con hardware moderno. Las mejoras en la tecnología Intel vPro, por ejemplo,
permiten que los departamentos de TI detecten, reparen y protejan una amplia gama de dispositivos
que se estén ejecutando en sus redes. Este sistema no solo permite la gestión remota, la solución de
problemas y la recuperación de los dispositivos, sino también la configuración remota y la
comprobación de los dispositivos en ejecución, residan donde residan. Si bien estas características

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tienen mucha importancia en los dispositivos propiedad de la empresa o gestionados por ella, también
son de vital importancia en los dispositivos que se han introducido en la organización desde el
exterior, o en los dispositivos de empleados que se utilizan para trabajo corporativo. Asegurar que así
serán capaces de aprovechar al máximo las características de seguridad de Windows 10 es de vital
importancia para conseguir el éxito de las estrategias BYOD.

Más ventajas
Para beneficiarse de más ventajas del SO de Windows 10, las organizaciones deberán replantarse
sus estrategias de hardware, ya sea para conseguir mejoras en micrófonos o altavoces (para
aprovechar Cortana, el asistente personal integrado) o para utilizar mejores periféricos de teclado y
ratón que puedan ampliar las capacidades de tablets, dispositivos 2 en 1 y smartphones. Si tenemos
en cuenta el futuro, el hardware de gafas de realidad virtual de Microsoft, HoloLens, y la tecnología de
pantalla colaborativa Surface Hub también son de crucial importancia para realizar la migración a
Windows 10. Ambos tienen la capacidad de lograr que la colaboración avance hacia una nueva era y
de aprovechar el potencial de la plantilla de formas que nunca antes se habían imaginado.

CONCLUSIÓN

El desarrollo de Windows 10 se ha centrado en los desafíos que abordan muchas organizaciones de

todas partes del mundo. Es obvio que se centra en lograr mejoras de la productividad, la seguridad, la
gestión de aplicaciones, la conectividad de la pantalla y la innovación, pero muchas de las
características y gran parte de la funcionalidad y de sus posibilidades se han diseñado para
ejecutarse en el hardware más reciente, que también está diseñado para funcionar en una empresa
moderna.

La estrategia de Microsoft de ofrecer Windows 10 a los usuarios del SO actual hace que sea tentador
actualizarlo pero manteniendo el mismo hardware. Lo que también es obvio, sin embargo, es que
implementar un entorno de SO tan potente en un dispositivo antiguo no aprovechará al máximo las
soluciones a los problemas descritos en este documento. En resumen, este enfoque está arriesgando
la potencial ventaja competitiva que Windows 10 podría aportar a una organización.

En consecuencia, es competencia del equipo de prestación de servicios de TI explorar estrategias de

dispositivos más amplias, ya sean 2 en 1 desarmables, tablets y ordenadores portátiles más amplios
o mediante una actualización del smartphone. Al crear un entorno de hardware y software universal,
las organizaciones serán capaces de conseguir la desconexión mínima entre los dispositivos y, a su
vez, apoyar un entorno de trabajo integrado, así como una experiencia común a todos los usuarios de
la plantilla. Esto no solo fomentará la innovación dentro de las organizaciones, sino que también
alentará la adaptación de las innovaciones de bajo coste.

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