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El movimiento magisterial mexicano estalló en abril de 1958 cuando maestros de primaria demandaron mejores salarios y condiciones. Los maestros habían visto deteriorarse su situación económica y social durante décadas. Tomaron el edificio de la secretaría de educación pública y mantuvieron una prolongada huelga de casi un mes con manifestaciones diarias. A pesar de la represión del gobierno, otras protestas se unieron a la lucha magisterial. Finalmente, el presidente Ruiz Cortines cedió y anunció mejoras
El movimiento magisterial mexicano estalló en abril de 1958 cuando maestros de primaria demandaron mejores salarios y condiciones. Los maestros habían visto deteriorarse su situación económica y social durante décadas. Tomaron el edificio de la secretaría de educación pública y mantuvieron una prolongada huelga de casi un mes con manifestaciones diarias. A pesar de la represión del gobierno, otras protestas se unieron a la lucha magisterial. Finalmente, el presidente Ruiz Cortines cedió y anunció mejoras
El movimiento magisterial mexicano estalló en abril de 1958 cuando maestros de primaria demandaron mejores salarios y condiciones. Los maestros habían visto deteriorarse su situación económica y social durante décadas. Tomaron el edificio de la secretaría de educación pública y mantuvieron una prolongada huelga de casi un mes con manifestaciones diarias. A pesar de la represión del gobierno, otras protestas se unieron a la lucha magisterial. Finalmente, el presidente Ruiz Cortines cedió y anunció mejoras
El movimiento magisterial mexicano fue una corriente huelguista que estallo en la
ciudad de México en abril de 1958 integrada por maestros de primaria que demandaban reivindicaciones salariales. (Reivindicación es el proceso y el resultado de reivindicar. Este verbo hace referencia a resguardar o requerir una cosa a la que se cree contar con derecho o a expresarse de manera positiva sobre algo o sobre una persona.) La situación económica y social de los maestros mexicanos y otros sectores de la vida nacional venia deteriorándose desde hacía décadas. Además, el llamado ideario cardenista (educación socialista) había influenciado la conciencia del magisterio mexicano. El país entero estaba envuelto en una corriente de insurrección popular debido a la situación económica, social y política. Otros sectores mexicanos como los ferrocarrileros, los telegrafistas y los médicos, también estaban agitados. El movimiento Revolucionario del Magisterio no solo tenía motivaciones reivindicativas sino políticas, y considero oportuno el momento. Así que, al calor de la campaña electoral para las elecciones presidenciales de 1958, el 12 de abril de ese año llama a la movilización. Los exaltados maestros tomaron el edificio sede de la secretaria de Educación Publica con Othón Salazar a la cabeza. Iniciaron una prolongada huelga que duro casi un mes, durante el cual unos 15 000 maestros a las afueras manifestaban diariamente. El gobierno trato de sofocar estas protestas con más represión militar y policial. Pero esto en lugar de apagar las protestas, aumento las tensiones. La lucha magisterial adquirió más fuerza y otros sectores mexicanos se le unieron. Varios dirigentes sindicales, entre ellos Othón Salazar, fueron detenidos y confinados en la prisión de Lecumberri. No obstante, las acciones gubernamentales fueron repudiadas por todo el país. La opinión publica reivindico la huelga y las protestas de los maestros. Ante esta situación, el presidente Ruiz Cortines no le quedó otra alternativa que ceder y conciliar. El 15 de mayo de 1958, durante la celebración del día del Maestro, anuncio las mejoras salariales demandadas.