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Caso clínico Apolo

Hola. Me llamo Apolo, soy un bebé de aproximadamente 1 mes y medio de edad. Me acabo de
integrar a mi nueva familia hace poco, soy muy juguetón y me gusta morder todo. Mi familia se
preocupa mucho por mí y trata de vigilarme siempre.

Me llevaron al médico veterinario debido a que en uno de mis tantos juegos mordí un pedazo de
alfombra y me lo tragué, mi propietaria me llevo casi de inmediato al hospital y el médico que me
atendió, me revisó y no encontró ninguna alteración en el examen físico general, yo me encontraba
como si nada hubiera pasado, pero ya que el objeto que me había tragado tenía menos de una hora
decidieron que me administrarían un medicamento para que pudiera vomitar. Si vomité un pedacito
de alfombra y parte de mi comida decidieron mandarme a casa con un par de medicamentos para
cuidarme el estómago y con la indicación de vigilar en el momento que defecara.

Dos días después regresé de nuevo al hospital debido a que nuevamente ingerí algo indebido, mi
propietaria le comentó al médico que en casa faltaba un objeto de consistencia suave (goma) de
aproximadamente 5 cm y que probablemente me lo había tragado. El médico que me atendió,
sugirió realizar un estudio radiográfico para verificar si la sospecha era cierta.

Me realizaron un estudio radiográfico en donde se evidenciaba una estructura plana en mi


estómago, así llegaron a mí diagnóstico, obstrucción por cuerpo extraño. Me tuve que quedar
hospitalizado con medicación intravenosa y también para poder realizarme otros estudios
radiográficos control para ver si el objeto que se observaba había avanzado.

El día siguiente estaba ya programada mi cirugía para poder retirar el cuerpo extraño, me
prepararon, me sedaron y me anestesiaron. Al entrar a cirugía y observar y palpar mi estómago era
evidente que tenía un objeto extraño aparte del que se observaba en mi radiografía. El cirujano
incidió y encontró un pedazo de alfombra y también un separador de dedos de goma, se extrajeron
y terminó la cirugía.

Me quedé hospitalizado un par de días solo para evaluar mi herida quirúrgica, todo estaba
excelente, aunque seguí intentando tragarme todo. Me fui a casa con indicaciones estrictas de tener
collar isabelino todo el tiempo además de vigilarme constantemente que no me tragara otra cosa. d

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