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Funciones: El sistema esquelético tiene varias funciones, entre ellas las más
destacadas son:
1. Sostén mecánico del cuerpo y de sus partes blandas: funcionando como
armazón que mantiene la morfología corporal;
2. Mantenimiento postural: permite posturas como la bipedestación;
3. Soporte dinámico: pues colabora para la marcha, locomoción y movimientos
corporales: funcionando como palancas y puntos de anclaje para los músculos;
4. Contención y protección de las vísceras, ante cualquier presión o golpe del
exterior, como, por ejemplo, las costillas al albergar los pulmones, órganos
delicados que precisan de un espacio para ensancharse,
5. Almacén metabólico: funcionando como moderador (tampón o amortiguador) de
la concentración e intercambio de sales de calcio y fosfatos.
6. Transmisión de vibraciones.
Numero de huesos
El número de huesos en personas adultas va desde los 206 hasta los 208
aproximadamente, pero debemos recordar que esta cifra no se cumple en los
niños pequeños y menos aún en los recién nacidos. Esto se debe a que los recién
nacidos nacen con algunos huesos separados para facilitar su salida desde el
canal de parto, por ejemplo tenemos los huesos del cráneo, si palpamos la cabeza
de un recién nacido encontramos partes blandas llamadas fontanelas: en ellas los
huesos están unidos por tejido cartilaginoso que luego se osificará para formar el
cráneo de un adulto.
También el maxilar se encuentra dividido en dos, el maxilar superior y el inferior,
cuando se suture el maxilar inferior dará lugar a un tipo de sutura llamada sínfisis.
Así que el número de huesos depende de la edad de la persona a la cual se
refiera, pero como promedio para un adulto es alrededor de 206 huesos.
La idea de un día internacional de la mujer surgió al final del siglo XIX, en plena revolución
industrial y durante el auge del movimiento obrero. La celebración recoge una lucha ya
emprendida en la antigua Grecia y reflejada por Aristófanes en su obra Lisístrata, que
cuenta como Lisístrata empezó una huelga sexual contra los hombres para poner fin a la
guerra, y que se vio reflejada en la Revolución francesa: las mujeres parisinas, que
pedían libertad, igualdad y fraternidad, marcharon hacia Versalles para exigir el sufragio
femenino, pero no fue sino hasta los primeros años del siglo XX cuando se comenzó a
proclamar, desde diferentes organizaciones internacionales de izquierda, la celebración
de una jornada de lucha específica para la mujer y sus derechos
Cronología
Año 1911
En el año 1917, como reacción ante los 2 millones de soldados rusos muertos en la
Primera Guerra Mundial, las mujeres rusas escogieron de nuevo el último domingo de
febrero para declararse en huelga en demanda de "pan y paz". Los dirigentes políticos
criticaron la oportunidad de la huelga, pero las mujeres la hicieron de todos modos. El
resto es historia: cuatro días después el Zar se vio obligado a abdicar, y el gobierno
provisional concedió a las mujeres el derecho de voto. Ese histórico domingo fue el 23 de
febrero, según el calendario juliano utilizado entonces en Rusia, o el 8 de marzo, según el
calendario gregoriano utilizado en otros países.
Desde esos primeros años, el Día Internacional de la Mujer ha adquirido una nueva
dimensión mundial para las mujeres de los países desarrollados y en desarrollo. El
creciente movimiento internacional de la mujer, reforzado por las Naciones Unidas
mediante cuatro conferencias mundiales sobre la mujer, ha contribuido a que la
conmemoración sea un punto de convergencia de las actividades coordinadas en favor de
los derechos de la mujer y su participación en la vida política y económica. El Día
Internacional de la Mujer es cada vez más una ocasión para reflexionar sobre los avances
conseguidos, exigir cambios y celebrar los actos de valor y decisión de mujeres comunes
que han desempeñado una función extraordinaria en la historia de México.
Aún con los hechos redactados en la anterior cronología, la historia más extendida sobre
la conmemoración del 8 de marzo hace referencia a los hechos que sucedieron en esa
fecha del año 1908, cuando murieron calcinadas 146 mujeres trabajadoras de la fábrica
textil Cotton de Nueva York en un incendio provocado por las bombas incendiarías que
les lanzaron ante la negativa de abandonar el encierro en el que protestaban por los bajos
salarios y las infames condiciones de trabajo que padecían.
En el estudio realizado por Isabel Álvarez González y publicado bajo el título Los orígenes
y la celebración del Día Internacional de la Mujer, 1910-1945 (KRK-Ediciones, Oviedo,
1999), el incendio que se vincula con la celebración de esta fecha no fue el 8 de marzo
sino el 25 de marzo de 1911, pocos días antes de la celebración del primer Día
Internacional de la Mujer, en la empresa Triangle Shirtwaist.
Aun así, tal y como reconoce la historiadora Mari Jo Buhle en su obra Women and
American Socialism 1870-1920 (Las mujeres y el socialismo norteamericano 1870-1920),
el incendio de la Triangle Shirtwaist Company fue de una gran transcendencia en la
historia social de los Estados Unidos y del movimiento obrero y feminista, al dar muerte a
las obreras que en 1910, el año anterior al mismo, habían protagonizado la primera
huelga llevada a cabo exclusivamente por mujeres en demanda de mejoras en su
situación laboral.
José María Vargas fue un eminente sabio del siglo XIX, venezolano de talla universal, que
junto con otra pléyade de compatriotas, como el Libertador Simón Bolívar, Francisco de
Miranda o Antonio José de Sucre, se entregó en cuerpo y alma a trabajar por el bien y la
grandeza de su país, así lo reseñó la Agencia Bolivariana de Noticias (ABN).
Esta fecha fue instaurada en 1955, durante una reunión celebrada en la sede de la Federación
Médica Venezolana, en la que se aprobó por unanimidad la propuesta del doctor Ángel
Bajares Lanza, de adoptar el 10 de marzo como Día del Médico Venezolano.
Una vez graduado viaja a Cumaná, estado Sucre, a ejercer su profesión, posteriormente
regresa a su pueblo natal, donde tiene la oportunidad de poner en práctica sus conocimientos
al salvar la vida a decenas de heridos sorprendidos por un violento terremoto de 1812.
Superada esta difícil pero invalorable etapa, se marcha a Europa en busca de mayores
conocimientos médicos y tras obtener el título de Maestro del Real Colegio de los Cirujanos de
Londres, Inglaterra, retorna al país para dedicarse a dar clases en la UCV, centro de estudios
superiores que por sus aportes y méritos lo designa su primer rector