Luis Carlos Sanchez Ramos

Curso 6 y 7°
Las montañas son yacimientos de fuentes hídricas, principalmente de todos los
grandes ríos del mundo y de algunos más pequeños. Es de precisar que entre más
alta sea la montaña su agua tiene un mayor grado de pureza y su ecosistema se
considera más óptimo. Igualmente, los estudios han demostrado que en las
regiones áridas y semiáridas, más del noventa por ciento de los caudales fluviales
provienen de las montañas.
Como ejemplo de lo anterior, contamos con los Paramos, los cuales son
considerados como “las fabricas del agua” ya que estos son fuente de agua dulce;
gracias su clima frío y condiciones de su suelo, el cual es orgánico, son ideales
para acumular, filtrar y habituar el agua que llega por diferentes circunstancias
como lluvias, neblinas y deshielos, luego de este proceso, el  páramo libera agua
pura de manera constante.

Adicionalmente, los páramos tienen características que los hacen vitales para
múltiples especies de fauna y flora que no se hallan en ningún otro ecosistema,
no obstante, este lugar privilegiado se ha visto fuertemente amenazado por
factores tales como la minería y agricultura excesiva así como el cambio
climático. Por lo anterior, es necesario que el ser humano tome conciencia frente
al impacto que tiene este tipo de actividades sobre ecosistemas como estos que
son fundamentales para la vita e importancia de tomar acciones que mitiguen el
daño ya causado.