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INFORME FUENTES FORMALES DEL DERECHO

TATIANA JULIETH RIGAUD SUAREZ. ID: 775976

YAJAIRA PRATO GARAVITO ID. 777052

ELSA SUSANA GOMEZ CARRASCAL. ID.726496.

CORPORACIÓN UNIVERSITARIA MINUTO DE DIOS

CONTADURÍA PÚBLICA A DISTANCIA

FUNDAMENTOS DE DERECHO

CÚCUTA

FEBRERO 2021
INTRODUCCION

El siguiente trabajo se realiza con el propósito de comprender el rango de las normas


constitucionales y su jerarquía en el ordenamiento jurídico, tomando como base los
recursos establecidos por el docente.

También se presenta un informe con alternativas de solución a las dificultades de


prelación entre la constitución, la ley, los reglamentos y las demás clases de normas con
base en el conflicto propuesto.
JUAN vende a PEDRO su casa y MARIA le compra a PEDRO, pero PEDRO no le
paga a JUAN, ¿JUAN puede recuperar su casa? Argumente su respuesta a partir del
Código Civil y la Jurisprudencia.

Nuestro análisis es el siguiente, suponiendo que hay una promesa de contrato de


compraventa.

Consideramos que Juan si puede recuperar su posesión, pero debe iniciar la acción de
resolución del contrato contra Pedro, pues todo contrato bilateral lleva implícito la
condición resolutoria del mismo por incumplimiento de una de las partes, según lo dispone
el artículo 1546 del código civil, además del art. 1930 “ si el comprador estuviere
constituido en mora de pagar el precio en el Lugar y tiempo dichos, el vendedor tendrá
derecho para exigir el precio o la resolución de la venta, con resarcimiento de perjuicios”.
Y el art. 1932, “La resolución de la venta por no haberse pagado el precio dará derecho al
vendedor para retener las arras, o exigirlas dobladas, además para que se le restituyan los
frutos, ya en su totalidad si ninguna parte del precio se le hubiere pagado, ya en la
proporción que corresponda a la parte del precio que no hubiere sido pagada.

Es recomendable a su vez, que Juan en las pretensiones deba incluir una acción
reivindicatoria contra María para que ella se vincule dentro del proceso, con el fin de que
Pedro indemnice a María por los perjuicios de no efectuar la compraventa. Esta acción
reivindicatoria de dominio permite que el dueño de una propiedad la recupere cuando está
ocupada por otra persona en calidad de poseedor y tal acción la encontramos en los
artículos 946 y siguientes del Código Civil, siendo el titular de esta acción el que tiene la
propiedad plena, es decir, Juan.

Para la Resolución del contrato existen 2 vías, la primera que se cumpla el contrato y la
segunda, que se restituya las cosas al estado original y es la mejor opción en este caso.

En cuanto a la Jurisprudencia, encontramos la siguiente sentencia que nos da claridad:

Se entiende que las partes incumplen cuando llegado el momento o la fecha acordada
para satisfacer la obligación adquirida, no se cumple, pero ¿qué sucede si se cumple
luego de esa fecha, es decir, tardíamente?
El simple hecho de incumplir habilita a la otra parte para que pueda exigir la resolución
del contrato con indemnización si esta procediere, pero si la otra parte cumpliere
tardíamente, la posibilidad de resolver el contrato depende de si la contraparte aceptó o
toleró el cumplimiento tardío.
Así lo recuerda la sala civil de la Corte suprema de justicia en sentencia 4844 del 21 de
septiembre de 1998:
«En consecuencia, (…) lo cierto es que imperativos de justicia y de repulsión al abuso
del derecho, llevarían de cualquier modo a considerar que cuando el plazo pactado es
esencial al negocio, o cuando su infracción acarrea la decadencia del fin práctico
perseguido por las partes, o, en general, cuando surja para el afectado un razonable interés
en la resolución del mismo, el cumplimiento retardado no puede enervar la acción
resolutoria, a menos claro está, que éste lo hubiese consentido o tolerado.»
Es claro que, si el afectado tolera o acepta el retardo, no puede luego solicitar la
resolución del contrato.
Luego, la corte en sentencia SC1209 del 20 de abril de 2018 con ponencia del
magistrado Aroldo Wilson Quiroz Monsalve dijo:
«La razón que, de ser de dicha mutación, esto es, poseer potestad resolutoria con base en
el incumplimiento de su contraparte a estar desprovisto de ella, deriva del consentimiento
que expresaron para que fuera acatada la promesa de permuta de forma atrasada, al punto
que actuaron activamente para alcanzar este resultado.
Por ende, la resolución deprecada en la primera pretensión del libelo genitor del litigio
era inviable, puesto que la infracción en que incurrieron los demandados fue subsanada con
posterioridad y con el consentimiento de los reclamantes, mas no porque hubiera existido
incumplimiento mutuo como desacertadamente lo consideró el juez ad-quem.

Ante este tipo de conflicto podemos recalcar así mismo que, como sabemos, la
constitución es norma de norma y por este tamiz constitucional tienen que pasar todas las
normas, entonces para poder llegar a conclusiones de ciertos fallos o acciones, se debe tener
en cuenta siempre, que el comportamiento que se quiere atacar o implementar debe estar en
una ley en este caso es el código civil. Este código civil, en todos sus artículos, debe ser
coherente con la constitución; por lo que entendemos, que toda norma que haya dentro del
ordenamiento jurídico, debe estar tamizado por la constitución nacional.
A su vez, el art. 230 de la constitución nacional, habla de que los jueces en sus
decisiones deben estar amparados como fuente única de la ley, así que la ley es la principal
para tomar una decisión y la jurisprudencia, la doctrina, la costumbre y las demás fuentes
ayudan a interpretar y aplicarla a los casos concretos, siempre teniendo como base la ley.
Igualmente, los acuerdos, las ordenanzas, los reglamentos y las demás resoluciones deben
estar acordes a las leyes por tanto a la constitución.
CONCLUSIONES

Con la realización del anterior trabajo se puede concluir, que la sociedad está regida por
una cantidad de normas complejas y que ante un conflicto de normas se debe analizar en
primer lugar, la jerarquía de dichas normas.

Que según la Sentencia C-037 de 2000 Corte Constitucional: “Además de ser evidente
que las normas constitucionales ocupan, sin discusión, el primer lugar dentro de la jerarquía
del ordenamiento jurídico, dentro de la propia Carta, no todas las normas son igualmente
prevalentes. Pero más allá de la supremacía constitucional, de la propia Carta también se
desprende que las leyes expedidas por el Congreso dentro de la órbita de competencias que
le asigna la Constitución, ocupan, en principio, una posición prevalente en la escala
normativa frente al resto del ordenamiento jurídico. Los actos administrativos de contenido
normativo, deben tener por objeto el obedecimiento y cumplimiento de la ley, de donde se
deduce su sujeción a aquella. De manera general, la normatividad jurídica emanada de
autoridades administrativas o de entes autónomos, debe acatar las disposiciones de la ley,
tanto en su sentido material como formal. Aunque existe una jerarquía normativa que se
desprende de la Constitución, ella no abarca, de manera completa, la posición de todas y
cada una de las disposiciones que conforman el orden jurídico; es decir el orden de
prevalencia normativa no ha sido señalado en su totalidad por el constituyente.

También se concluye, que en la práctica lo más usual es que los derechos que protegen
las normas jurídicas entren en conflicto unos con otros. Cuando esto sucede, el juez debe
considerar el grado de afectación de cada uno de los derechos que entran en conflicto en el
caso que está juzgando. Una vez hecho esto el juez deberá aplicar los principios y reglas del
derecho, para así proteger los derechos que se vean afectados y que en tal caso requiera
protección.

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