Planear estratégicamente

El proceso de planeación estratégica tiene como base la respuesta a tres preguntas

centrales:
1. ¿Qué somos y dónde estamos? (Misión)
2. ¿Dónde deberemos estar en el futuro para garantizar nuestra permanencia?
(Visión)
3. ¿Qué planes debemos establecer para dirigirnos hacia allá?

Sin embargo, no es suficiente responder a estas preguntas pues la responsabilidad que

implica la planeación estratégica obliga a definir los límites morales y éticos en los que se
desarrollarán las estrategias y las operaciones planeadas.
La Misión es la más elevada aspiración hacia la cual se dirigen todos los esfuerzos. En
ese sentido, si una empresa o institución no ha declarado su Misión, la planeación estará
carente del eje sobre el cual se irán construyendo las estrategias.
Por ello mismo, la Misión es el punto de partida de un sistema de planeación.
Un sistema es el conjunto de procesos o elementos interrelacionados con un medio
para formar una totalidad encausada hacia un objetivo común. Así un sistema de
planeación debe tener las siguientes características:
Sencillo.
Adaptable a todas las áreas.
Estandarizado.
Comprensible.
Adaptable para el corto, mediano y largo plazo.
Cuantificado.
Adaptable para las dimensiones estratégicas y operativas.
Los resultados que se obtengan no
dependen del todo de la planeación, pues
el desarrollo de las estrategias puede sufrir
ciertas afectaciones. En este sentido, Hitt
(2007) ha identificado lo que él denomina
grupos de interés, los cuales los define
como las partes o las personas que
influyen en los resultados estratégicos que
se obtienen, que sean afectados por esos
resultados y que tienen derechos aplicables
sobre el desempeño de la organización.
Los grupos de interés aplican sus derechos
en el desempeño de la empresa porque
tienen la capacidad de reservarse su
participación, la cual es esencial para la
supervivencia la competitividad y la
rentabilidad de la organización. Estos
grupos siguen apoyando a la organización
cuando el desempeño de ésta cumple o
supera sus expectativas.
Los grupos de interés identificados por Hitt son los siguientes:
I. Grupo de interés del mercado capital
a) Accionistas
b) Principales proveedores
II. Grupo de interés del mercado de bienes y servicios
a) Principales clientes
b) Proveedores
c) Comunidades sede
III. Grupo de interés de la organización
a) Empleados
b) Gerentes
c) Personal no gerencial

Cada grupo de interés espera que las personas que toman

las decisiones estratégicas de la empresa muestren el
liderazgo necesario para poder lograr los objetivos que
tienen valor para ella. Los objetivos de los distintos grupos
de interés muchas veces difieren entre sí y, en ocasiones,
colocan a las personas involucradas en el proceso de
administración estratégica en situaciones en las cuales
tienen que hacer alguna negociación.